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Crisis energética argentina repercute en Uruguay
Presidente de UTE, Ricardo Scaglia: Uruguay contrató en firme, sin prever cortes, y Argentina redujo sensiblemente el suministro pero lo mantuvo a los grandes consumidores de su país, cuyos contratos sí permitían cortar. Cada megavatio comprado a Argentina cuesta U$S 10, y producido en las centrales térmicas uruguayas va de U$S 50 a 90. La solución a corto plazo es comprar en Brasil y Paraguay, a través de las interconexiones argentinas.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 24.03.04, 07.38.
EMILIANO COTELO:
Brasil puso a disposición de Uruguay no solamente la energía que pueda pasar a través de la estación conversora de Rivera-Livramento, sino también la procedente de Garaví, en el estado de Paraná. Esta noticia da mayor tranquilidad y aleja la posibilidad de que el corte del abastecimiento eléctrico desde Argentina pueda generar problemas, según informó al diario El País el director de Energía, Alvaro Bermúdez.
Bermúdez junto al ministro de Industria y Energía y al presidente de UTE, Ricardo Scaglia, han estado en las últimas horas desarrollando gestiones en la región, primero en Brasil y ahora en Buenos Aires, para solucionar estos inconvenientes.
Estamos en comunicación con el escribano Scaglia, desde Buenos Aires. Ubíquenos en el origen de este problema, que se originó en Argentina.
RICARDO SCAGLIA:
Exactamente; al mediodía del miércoles de la semana pasada se nos anunció que a partir de la hora cero de esa noche Argentina iba a suspender 188 de los 338 megavatios hora que Uruguay tenía contratados al firme, por lo tanto mantendría la venta de unos 150 megavatios.
EC – Fue una sorpresa.
RS – Sí; dentro de nuestros planes –lo habíamos adelantado en UTE— pensábamos que Argentina podía tener problemas a partir del invierno, si se daba una estación con pocas lluvias. Pero la duda incluso era si los podría tener este año o el próximo, y se adelantó: los tuvo al fin del verano.
EC – No tiene sentido perder demasiado tiempo con eso, pero ¿cuáles son las causas de ese déficit de energía en Argentina?
RS – Por lo que se puede ir palpando, se da en primer lugar por las causas de ajuste tarifario en el gas. El gas se sigue pagando en pesos argentinos, el precio no ha sido ajustado desde hace dos o tres años, y eso llevó a que los gaseros digan “No hemos podido hacer inversiones, no hemos hecho nuevas excavaciones, y por lo tanto tenemos faltante de gas”.
Como consecuencia del precio muy bajo que tiene el gas natural aquí, el 70 por ciento del parque automotor se pasó a gas, porque la nafta y el gasoil ajustan de acuerdo a los precios internacionales del petróleo, que han subido y bastante, y en cambio el gas quedó en pesos. Entonces es más barato utilizar vehículos a gas que utilizar el transporte colectivo.
Y la demanda está aumentando también por el crecimiento que está teniendo Argentina.
EC – El tema genera una preocupación seria en Argentina, según lo conversábamos más temprano con nuestro corresponsal en Buenos Aires.
RS – La tapa de La Nación informa hoy que podrían racionar desde el lunes la energía eléctrica; usted ya la habrá visto.
EC – Exacto. Pero ¿Argentina puede cortarnos ese suministro de un día para el otro, existía esa posibilidad en los contratos suscritos con Argentina?
RS – Desde de vista de nuestros contratos creemos que no; había la posibilidad de una interrupción si tenían una saturación en las líneas de transmisión. De modo que en unos minutos vamos a reunirnos con el ministro de Energía de Argentina, acompañando al ministro de Industrias uruguayo, José Villar. Independientemente de la opinión política que desde el punto de vista uruguayo manifieste el señor ministro, como representantes de UTE vamos a comunicarle la posición empresarial que le daremos a conocer a él directamente y después la haremos pública, por supuesto.
EC – Pero ¿estamos ante el incumplimiento de un contrato, que puede dar lugar a algún tipo de acciones legales por ejemplo?
RS – Nosotros creemos que no estamos ante un trato igualitario, porque si a los grandes consumidores argentinos, que tenían contratada energía pasible de interrupción, les redujeron creo que en un 20%, para Uruguay la reducción fue muchísimo mayor pese a que tenía un contrato firme, que venimos pagando desde hace cuatro años potencia, o sea la máquina a disposición con energía asociada.
Se dan distintas situaciones: tres de las máquinas que comprenden esos 188 megavatios dejaron de recibir gas natural y no pueden funcionar a gasoil pero creo que pueden sustituidas por otras. Y además de eso, tenemos la mala suerte de que se rompió el viernes otra máquina que la generadora Güemes, en el noreste, tenía destinada a UTE. Por ese motivo tuvimos que encender la central La Tablada. Pero esa misma empresa tiene otras centrales más pequeñas, dos de 60 megavatios, que podría volcar al consumo uruguayo, pero en cambio fueron volcados al mercado argentino.
EC – De sus palabras deduzco que habrá un reclamo de UTE a su proveedor en Argentina, que puede tener dos canales: o que de alguna manera se sustituya ese suministro interrumpido para cumplir con el contrato, o establecer algún tipo de sanción, de compensación por el incumplimiento.
RS – O permitir a Uruguay importar energía desde Brasil y algún poquito de Paraguay, porque ya habíamos cerrado un acuerdo de 40 megavatios.
EC - ¿Por qué se necesita una autorización de Argentina?
RS – Porque en las líneas de alta tensión por las cuales se transporta esa energía la interconexión la tiene Argentina, ya sea con Paraguay o con Brasil.
EC – Lo que se está solicitando es que se autorice ese pasaje de energía por las instalaciones argentinas sin costo para Uruguay.
RS – Sin el costo de peaje. Estamos dispuestos a pagar el peaje respectivo por esas líneas, que en muchos casos son privadas, pero necesitamos el respaldo de energía que teníamos. Uruguay tiene energía hidráulica por unos 1.500 megavatios hora entre Salto Grande cuando está a pleno para Uruguay (945) y unos 550 megavatios de las tres centrales de UTE. A eso se suman 430 megavatios de respaldo entre las centrales Batlle y La Tablada: Batlle está encendida a pleno y La Tablada con una máquina por ahora, con los costos que ustedes conocen: estamos en el orden de los U$S 500 mil diarios de combustible. Estamos quemando 1.200 mil litros por día de fueloil y 800 mil litros de gasoil: ahora, mientras estamos hablando, por cada segundo hemos quemado una damajuana de 10 litros de cada uno de esos combustibles.
EC – Como consecuencia de ese déficit del suministro argentino.
RS – Claro, porque antes teníamos respaldada la energía térmica con 340 megavatios de contratos en Argentina, que es con los ahora estamos teniendo inconvenientes.
Anteayer estuvimos en Brasilia con el secretario de Energía, con Eletrobras, con quienes nos había contactado el embajador brasileño en Uruguay, señor Eduardo Santos, quien ha estado permanentemente preocupado por la situación. Y anoche el secretario de Energía me llamó para comunicarme que habían estado reunidas las autoridades de Mercado, las de Eletrobras y las del Ministerio de Energía de Brasil, y decidieron devolvernos la energía que Uruguay le había prestado hace tres años a Brasil cuando ellos tenían una crisis y nosotros estábamos bien de energía.
EC – Teníamos un crédito a favor.
RS – Teníamos un crédito a favor que ahora, cuando más lo necesitamos... Habíamos hecho gestiones para poderlo cobrar, hubo cambio de gobierno, cambios en Eletrobras, empezó a funcionar Mercado que después era el que nos tenía que pagar, y ahora nos pagan en energía que es lo que les planteamos y lo que más necesitamos. Por eso quiero agradecer a las autoridades brasileñas, porque se comportaron realmente muy, pero muy bien, y a partir de la cero hora de mañana estaremos recibiendo esos 70 megavatios a través de la única interconexión que tenemos con Brasil, por Santa Ana do Livramento, que así quedará inaugurada.
EC – Pero ese suministro brasileño es de 70 megavatios, o sea que no compensa los 338 que perdemos por el lado argentino.
RS – Por supuesto que no. Tenemos 70 de Brasil, esa posibilidad de Paraguay si Argentina lo autoriza y también dejamos abierta en Brasil la posibilidad de que nos respalde con el resto de energía que Argentina no envíe.
EC – Para eso, decía, se precisa una autorización argentina.
RS – Sin autorización argentina es imposible. Lo que puede hacer también es respaldarse en Brasil y enviarnos ellos a nosotros. No sé, de acuerdo a la normativa argentina, lo que puedan resolver al respecto. Pero UTE tenía contratos que paga religiosamente, esa potencia que pagamos es del orden de los U$S 6 millones anuales, y los pagamos para tener la seguridad del abastecimiento.
Esperamos ser tratados por lo menos como el resto de los grandes consumidores argentinos, a quienes sólo se aplicó restricciones en caso de contratos que preveían interrupciones, no contratos en firme como los de UTE. Además, esos grandes consumidores, como recibían la energía muy barata por el precio del gas, pueden pagar penalizaciones y se han conectado todos. Entonces, si usted lee la prensa argentina, dice que lo único que les han bajado son 100 megavatios mientras a nosotros nos cortan más de 300.
EC – En definitiva, todavía no está claro cómo vamos a sustituir ese suministro perdido.
RS – Todavía no está claro, y necesitamos ese respaldo además del costo que estamos pagando; realmente se está quemando dinero.
EC – Porque este respaldo de las centrales Batlle y La Tablada es más caro que el que venía de Argentina.
RS – Estábamos comprando en el orden de los U$S 10 el megavatio de Argentina (también sabemos que esa es la energía más barata del mundo), y generar un megavatio en la central Batlle nos cuesta U$S 55 a 60, y en La Tablada U$S 90.
EC – Hay un problema, entonces. Todo esto tiene que definirse en los próximos días. Usted ha dicho que no habrá un impacto ni en el abastecimiento a los clientes ni en las tarifas, pero todo eso es un “por ahora”.
RS – Es un “por ahora”, esperamos que quede así y no pase absolutamente nada respecto al servicio que presta UTE.
EC – Todo depende de las reuniones que tendrán hoy en Buenos Aires.
RS – Depende de las reuniones y de que se cumplan las pronósticos meteorológicos (de los servicios uruguayo y norteamericano), según los cuales tendremos un otoño medio en materia de lluvias.
EC – Por ahora está faltando el agua y eso está afectando a las represas, en especial a Salto Grande.
RS – Claro; esa es la situación. En UTE habíamos tenido la precaución de conservar agua en previsión de que se diera una situación de esta envergadura. Pero Salto Grande trabaja a espejo de agua, no tiene embalse, y eso hace que hoy nos esté pasando el 10% de la energía que normalmente nos vende. Esa es la situación.
Pero quiero decir que estos contratos con Argentina antes no se pagaban así. Hasta el año 1999 no había contratos, y lo que pagábamos entonces era lo que llamábamos el valor de sustitución: veíamos cuánto nos costaba en Uruguay generar el megavatio más caro, pongamos U$S 90 en La Tablada; en Argentina costaba U$S 10, eso se dividía por dos y estaríamos pagando a U$S 50 el megavatio. En 1999, después de un año de negociaciones muy fuertes que llevamos a cabo, pudimos ingresar al mercado argentino después de firmar unas cartas reversales y hacer este tipo de contratos que nos servían de respaldo y que también eran sensiblemente más baratos que nuestras centrales térmicas.
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Transcripción y edición: Jorge García Ramón
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