El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) se quedó solo en la defensa de la denominada Ley Sinde, por la ministra de Cultura española, Angeles González-Sinde, que estaba incluida en la Ley de Economía Sostenible, que busca sentar las bases de la renovación del sistema productivo español.

La imposibilidad de llegar a un acuerdo a favor de la disposición que busca luchar contra la piratería en internet, llevó a los diputados de la Comisión a votarla aparte para no impedir la aprobación del resto de la Ley de Economía Sostenible, que sigue su trámite parlamentario.

De esta manera, la "Ley Sinde" sólo contó con los 18 votos a favor de los diputados socialistas de la Comisión y 20 en contra del resto de diputados, desde el principal partido de la oposición, el conservador Partido Popular (PP) hasta los ecolo-comunistas de ICV.

La "Ley Sinde" preveía la creación de una Comisión de Propiedad Intelectual, dependiente del ministerio de Cultura, que sería la encargada de recibir las denuncias de entidades de gestión o particulares que consideren que se están vulnerando sus derechos de autor por una determinada página.

La comisión podía advertir al propietario de la página para que retirase los contenidos y, en caso contrario, acudir a los tribunales, donde un juez tenía cuatro días para pronunciarse y ordenar el bloqueo o no de la página.

Este texto contaba con el apoyo artistas y empresas distribuidoras y creadoras de contenidos audiovisuales y digitales, mientras que era rechazado por las asociaciones de internautas, que consideran que habilitaba al gobierno para cerrar webs arbitrariamente.

El lunes, una veintena de las principales páginas de descargas y de visionado de contenidos en línea dejaron sus sitios en negro con la leyenda: "Si se aprueba la ley Sinde, esta página desaparecerá. Internet será una tele más al servicio del poder. Por la libertad de expresión en la red, no a la censura. No a la ley Sinde. No al cierre de webs".

Este martes, algunas distribuidoras cinematográficas respondieron dejando en negro sus páginas webs con este único texto: "Esta distribuidora desaparecerá y 235 (número variable según la empresa) personas se irán a la calle en breve si no se aprueba con urgencia una ley que nos proteja contra las descargas ilegales y la piratería".

Simultáneamente, las redes sociales fueron un hervidero donde se enfrentaron defensores y detractores de la Ley.

El cantante español Alejandro Sanz afirmó en su twitter: "Qué cobardes e hipócritas los políticos españoles que no van a votar la ley Sinde de protección a la propiedad intelectual", mientras que el presidente de la Academia de Cine española, Alex de la Iglesia, dijo que "¡No estoy en contra de internet! ¡Es mi vida! ¡Solo hablo de gente que se forra con el trabajo de lo demás".

La Coalición de Creadores e Industrias de Contenido, que agrupa a distintas asociaciones, empresas y entidades de gestión de derechos de autor, afirmó el lunes que si no se aprobaba esta ley, buscaría el apoyo de Europa para lograr una legislación más dura que también fuera contra el usuario.

El Observatorio de piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales, impulsado por la Coalición de Creadores, destacó que en el primer semestre de 2010, los contenidos pirateados supusieron un 77% de los discos, películas, libros y videojuegos consumidos en España en internet.


Fuente: AFP