El papa visita Valencia en medio de diferencias con el gobierno español
El papa Benedicto XVI llegó a la ciudad de Valencia, España, para clausurar una conferencia mundial sobre valores cristianos y familia y para reafirmar la posición del Vaticano frente a temas controvertidos de política social del gobierno español. La visita se produce en momentos de enfriamiento de las relaciones entre la autoridad católica y el gobierno español.
El pontífice fue recibido por los reyes de España, Juan Carlos y Sofía, y por el presidente de gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Su primera parada fue en la estación de metro de Jesús, donde este lunes murieron 42 personas, en lo que fue el peor accidente de metro en la historia del país.
En una de sus primeras declaraciones, Benedicto XVI llamó a los obispos españoles a oponerse a lo que él describió como la rápida secularización del país. Una de las principales diferencias es la decisión de permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo.
El papa piensa insistir en su mensaje central de esta tarde en que "el matrimonio heterosexual es el único futuro para la humanidad".
Otros temas que han enfriado las relaciones entre los dos estados tienen que ver el recorte de los fondos públicos para la Iglesia Católica; la legislación que facilita el aborto; y la reducción de la enseñanza religiosa en las escuelas. Todo esto es visto por el Vaticano como nocivo para un país que históricamente tuvo un fuerte componente católico.
El mensaje central del sacerdote será alrededor del tema de valores cristianos y familia.
Esta tarde, antes de su encuentro con Rodríguez Zapatero el papa hará una visita de cortesía a los monarcas españoles, Juan Carlos y Sofía, en el Palacio de la Generalitat de Valencia. Benedicto XVI concluirá su visita este domingo, cuando se cree que más de un millón de personas asistirá a la misa de despedida al aire libre.