Evolución de la pobreza en
América Latina en la década del 90
Análisis económico
EN PERSPECTIVA
Jueves 04.10.01 - Hora 08:30
EMILIANO COTELO (EC):
Hoy, en este espacio de análisis económico, les proponemos
abandonar por un momento la atención sobre los temas vinculados
a la coyuntura económica nacional e internacional, para dedicarnos
a analizar la evolución de la pobreza en América Latina.
Este tema fue abordado por la Cepal, la Comisión Económica
para América Latina y el Caribe, en su informe Panorama Social
de América Latina, divulgado la semana pasada. El diálogo
será con el economista Pablo Rosselli, de Tea
Deloitte & Touche.
Pablo, una de
las principales conclusiones del trabajo que recogió la prensa
es que en la década del 90 hubo un descenso de la pobreza
en América Latina...
PABLO ROSSELLI
(PR):
Es así, Emiliano. Según las estimaciones de la Cepal,
el 48% de la población latinoamericana se encontraba en situación
de pobreza en el año 90 y ese porcentaje cayó a 44%
en el 99. Estos porcentajes refieren a personas pobres. En cambio,
si consideramos hogares, en 1990 había 41% de hogares en
situación de pobreza y a fines de 1999 ese porcentaje había
caído a 35%.
EC: - Quiere
decir que las cifras de pobreza medida a nivel de hogares son algo
más bajas que medidas a nivel de personas...
PR: - Sí,
Emiliano. Y eso ha dado lugar a algunos debates en los últimos
tiempos. El tema de fondo es que en los hogares pobres vive más
gente que en el resto. Los hogares pobres son, y todos lo sabemos,
más numerosos.
Una segunda
perspectiva que podemos adoptar es considerar las cifras en términos
absolutos.
EC: - ¿Y
qué indican las cifras absolutas, Pablo?
PR: - Que hubo
un aumento en el número de individuos pobres. Al principio
de la década el número de personas en situación
de pobreza era de 200 millones y en 1999 ese número aumentó
a algo más de 211 millones.
En términos
de hogares, mientras tanto, en 1999 había algo más
de 41 millones de hogares pobres en toda América Latina,
mientras que en 1990 había 39 millones, es decir que al final
de la década tenemos 2 millones más de hogares en
situación de pobreza.
De todos modos,
si bien es cierto que en términos absolutos tanto el número
de personas en situación de pobreza como el número
de hogares pobres aumentaron, se hace una evaluación favorable,
porque se redujo el porcentaje de personas y hogares en situación
de pobreza. Esto se debe a que la población aumentó
a un ritmo promedio anual de 1,7%, mientras que la población
pobre aumentó a un ritmo anual menor, de 0,6%.
EC: - ¿Qué
miden exactamente esos indicadores? ¿Qué criterio
se utiliza para decir que un individuo es pobre?
PR: - Tu pregunta
es muy pertinente. Se realiza una medición en base a las
cifras de ingreso de los hogares. Primero se estima para cada país
cuál sería el nivel de ingreso promedio por persona
necesario para cubrir sus necesidades básicas, tanto alimenticias
como no alimenticias. Para hacer la medición por hogar, en
función del número de miembros existente en cada hogar
se estima el nivel de ingreso del hogar que delimitaría una
situación de pobreza. Luego, si la suma de los ingresos que
perciben los miembros del hogar no alcanza ese umbral, ese hogar
y en consecuencia las personas que lo integran se califican como
pobres o que se encuentran por debajo de la línea de pobreza.
EC: - En la
prensa también se comentaba un indicador de la población
en situación de indigencia. ¿Cuál es la diferencia
con la medición de pobreza que recién mencionaste?
PR: - La diferencia
es que sólo se toma en cuenta las necesidades de alimentación.
Se dice que un hogar se encuentra en situación de indigencia
cuando aún dedicando todo el ingreso que entra al hogar a
la compra de alimentos no se puede satisfacer las necesidades nutricionales
básicas de sus miembros.
Este indicador
nos da una aproximación adicional. Nos marca cuán
pobres pueden ser los que se consideran pobres. Si de ese 44% de
individuos pobres un alto porcentaje no llega ni siquiera a cubrir
las necesidades alimenticias, la situación obviamente es
mucho más grave.
EC: - ¿Y
cuáles son las estimaciones de población indigente
en América Latina?
PR: - Si bien
la población latinoamericana en estado de indigencia disminuyó
a lo largo de la década en casi 4 millones de personas, este
problema sigue afectando a mucha gente. De los 211 millones de personas
en situación de pobreza en 1999, casi 90 millones recibieron
un ingreso por debajo del necesario para cubrir sus necesidades
alimentarias.
EC: - En síntesis,
Pablo, ¿cuál es el balance que deberíamos hacer
sobre la evolución de la pobreza en la década del
90 en América Latina?
PR: - La realización
de balances siempre es delicada. Habrá quienes argumenten
que los números debieron ser mejores y otros que ponderarán
más los avances alcanzados.
En definitiva,
está claro que hubo un descenso de la pobreza en los años
90. Interpretemos bien lo que eso quiere decir. Descendió
el porcentaje de personas que vive en situación de pobreza.
Pero no se redujo el número de personas pobres; tenemos más
personas pobres en América Latina en 1999 que en 1990, aunque
sí bajó el número de indigentes.
Dicho eso, Emiliano,
hay dos observaciones adicionales para hacer...
EC: - ¿Qué
observaciones, Pablo?
PR: - La primera
es que la mayor reducción de la pobreza se observó
en los primeros años de la década. La Cepal saca esta
información aproximadamente cada tres años, por lo
cual tenemos datos de 1990, 1994, 1997 y 1999. Si observamos lo
que pasó en esos años, nos encontramos con que la
reducción de la pobreza se frenó en la segunda mitad
de la década y prácticamente no varió en el
último trienio. Este comportamiento estaría acorde
con el comportamiento de las economías latinoamericanas en
materia de crecimiento. Desde el estallido de la crisis asiática
a fines de 1997 y por sucesivos hechos que ocurrieron en los últimos
años, las economías de América Latina han visto
reducido su ritmo de crecimiento.
Y la segunda
observación que hay que realizar es que los logros en materia
de reducción de la pobreza durante la década del 90
no fueron suficientes para contrarrestar el deterioro que hubo en
la década anterior. En 1980 el porcentaje de personas en
situación de pobreza era de 40%, frente a 44% en 1999. En
definitiva, los avances en la década de los 90, en la primera
mitad, básicamente, no fueron suficientes para compensar
el retroceso de la década de los 80, que se observó
a partir de la crisis de la Deuda Externa.
--------------------
Transcripción: Tea Deloitte & Touche
Edición: Julieta Sokolowicz
|