Bella Unión continúa la búsqueda de soluciones
Presidente
de Calnu, Enrique Yemini: Tenemos cuatro cosas grandes por hacer:
cambiar el proceso parte industrial, aumentar la capacidad de fábrica
entre 18 y un 20%, mejorar la utilidad del bagazo como combustible,
y bajar costos administrativos. Pero resta solucionar el crédito
puente y el reperfilamiento de las deudas, que harán posible
la reconversión.
Presidente
del Banco República, Daniel Cairo: "Se está conversando
algún crédito puente, pero ni el Banco ni el Poder
Ejecutivo están dispuestos a hacer una nueva erogación
-de las tantas que se han hecho- sin tener muy claros los resultados.
No podemos seguir invirtiendo sin cierta seguridad de que ese proceso
realmente va a beneficiar el costo, en definitiva a Calnu y a la
población de Bella Unión".
EN PERSPECTIVA
Viernes 04.01.02, 09.04.
JULIO VILLEGAS:
De soluciones para Bella Unión se ha estado hablando en las
últimas horas, en particular entre las autoridades, con el
presidente de la República. Hubo negociaciones de alto nivel
que aparentemente han dado un resultado satisfactorio para las partes
interesadas. Fueron 48 horas de negociaciones de alto nivel que
incluyeron la presencia de directivos de Bella Unión en Casa
de Gobierno, con el propio presidente Batlle y directivos del Ministerio
de Ganadería, Agricultura y Pesca, que se complementaron
en la jornada pasada con la presencia del presidente del Banco de
la República (BROU), contador Daniel Cairo, por el reperfilamiento
de las deudas de las empresas productoras del noroeste del departamento
de Artigas. 48 horas fundamentalmente en lo que tiene que ver con
el cierre de las negociaciones.
Estamos en comunicación
con el presidente del BROU, contador Gemini. ¿Cuál
fue el resultado? ¿Se fue conforme con los contactos mantenidos
en Montevideo?
ENRIQUE YEMINI:
Sí. Hemos tenido avances importantes en estos dos días
en los cuales el presidente nos recibió y nos brindó
apoyo. Esos avances fueron muy importantes, pero de todas maneras
queda mucho trabajo por delante porque, en el tema del reperfilamiento
de deudas, todavía tenemos que hacer algo más para
lograr nuestro objetivo. De todos modos, logramos algo que era muy
importante para Bella Unión, que es el crédito para
el mantenimiento del cultivo de la caña de azúcar,
para que los productores puedan cuidarlos. Eso es una luz, porque
de otro modo no tendríamos ese crédito. A pesar de
no ser una cifra muy importante por todo lo que mueve Bella Unión
-U$S 1 millón de créditos cuando normalmente era U$S
1.500.000, U$S 1.600.000- estamos conformes con la misma.
JV - La fórmula
lograda está vinculada con el plan de reconversión.
EY - Está
directamente relacionada con el plan de reestructura de Calnu. El
plan de reconversión es otro objetivo que nos hemos planteado
y que todo el Consejo de Administración y Bella Unión
creen absolutamente imprescindible. Nosotros teníamos una
protección que giraba alrededor de los U$S 550 en el año
2000, hoy está muy por debajo de eso. Es evidente que si
no hacemos una reestructura muy profunda no vamos a poder cubrir
más los costos. En eso estamos trabajando.
JV - ¿Cuándo
se iniciaría la reestructura?
EY - Tenemos
cuatro cosas grandes por hacer, aparte de tomar todos los días
medidas de las chicas. Una es el cambio del proceso en la parte
industrial, con la que se podría ahorrar sustancialmente.
Otra es un aumento de capacidad de fábrica, estamos pensando
que con algunos equipos más Calnu podría aumentar
su capacidad de fábrica entre un 18% y un 20%. Estamos pensando
hacer uso de la materia prima, del bagazo que usan las calderas,
lo que nos podría reportar entre U$S 10 y U$S 12 por tonelada
de ingreso mayor; cuando usamos el bagazo para las calderas lo usamos
muy húmedo, con alrededor de 45% de humedad, pero comprando
una máquina que lo seque podríamos tener bagazo tanto
para la época de zafra como para el refinado, lo que bajaría
sustancialmente los costos. En la parte administrativa estamos por
incorporar un software que también nos va a permitir bajar
los costos.
JV - ¿Ese
es el plan de reestructura que recibió el aval del gobierno
en las reuniones que mantuvieron en estos días con el presidente
de la República?
EY - Sí.
Es un trabajo hecho principalmente con el subsecretario, ingeniero
Martín Aguirrezabala, a quien le presentamos el proyecto,
quien lo estudió con sus técnicos y consideró
que era absolutamente racional y con sustento técnico. De
ahí en más empezaron las negociaciones con el presidente,
ya con el estudio hecho por parte del Ministerio de Ganadería,
Agricultura y Pesca.
JV - Ese es
un aspecto muy importante de la negociación; el otro tenía
que ver con el reperfilamiento de la deuda. ¿Qué sensación
recogieron en ese sentido?
EY - Hemos recogido
la sensación de que hay espíritu para lograr ese reperfilamiento.
El Banco República está un poco inquieto porque si
no existe la reestructura no podríamos hacer frente a esos
compromisos, una cosa está enrabada con la otra. Para hacer
la reestructura nosotros precisamos una inyección financiera
porque tenemos que hacer algunas inversiones previstas por el propio
Imesi. Precisaríamos un crédito puente, porque el
Imesi nos va a generar esa inversión que precisamos antes
de junio del año que viene y que llevará cuatro meses,
lo que significa que tendríamos que empezar a hacer la reestructura
en febrero como tiempo tope porque de otro modo no llegamos a la
zafra. Si no llegamos a la zafra con esta reestructura perdemos
un año y se nos complicaría enormemente.
JV - El crédito
puente quedó por solucionarse.
EY - Sí,
quedaron por solucionarse el crédito puente -aunque el Banco
República está dispuesto- y el reperfilamiento de
las deudas. Para nosotros lo más importante es que hay una
parte de las deudas que está a nombre de Calnu y otra que
está a nombre de los productores. Los productores mandaron
la caña de azúcar al ingenio y Calnu no les pagó
la materia prima, por lo tanto no pudieron hacer frente al Banco
República. Queremos novar el crédito a los productores
-cosa que se hacía normalmente-, entonces Calnu se responsabiliza
de todos los compromisos y libera a los productores, la mayoría
de los cuales hace otros cultivos. Mientras los productores no tengan
el crédito pagado no van a tener crédito para otros
cultivos, ése es el nerviosismo que tenemos todos.
***
JV - Como veíamos,
el Banco República es un factor fundamental para la posible
continuidad de las actividades productivas en Bella Unión.
Estamos ahora en comunicación con el contador Daniel Cairo,
presidente del Banco República. El presidente de Calnu nos
decía que, si bien llevaban la sensación de que el
Banco República está dispuesto a dar los resultados
que ellos esperaban en las negociaciones cumplidas, todavía
esperaban algunas definiciones. ¿Es así?
DANIEL CAIRO:
Es un tema bastante complejo, que dividiría en tres partes.
La primera, que es la inmediata e imprescindible, es un nuevo apoyo
financiero a los productores de caña de azúcar, fundamentalmente
para riego, mantenimiento y cosecha posterior, cosa que el Directorio
de hecho va a aprobar en estos días, hay voluntad positiva
de hacerlo, de forma que puedan salvar la cosecha. Un segundo aspecto,
también imprescindible desde el punto de vista del banco,
es lograr que el proceso industrial de Calnu se transforme y tenga
costos menores a los actuales. Si el Estado puede colaborar vía
Banco República -el presidente tenía otra idea al
respecto- colaboraremos en la realización de ese proceso
para que los costos sean razonables, de acuerdo al valor del mercado.
JV - Es un plan
de reestructura que ellos plantearon.
DC - Exactamente,
es una reestructura de la parte ingenieriel, fabril.
JV - El señor
Gemini decía que para poner en marcha ese plan de reestructuras
que podría hacerse a partir del mes de febrero estaban precisando
un crédito puente.
DC - Sí,
por eso le digo que esta parte del fondo que se retiene, el Imesi,
hay parte que podría refinanciar el Banco, se está
conversando algún crédito puente, pero ni el Banco
ni el Poder Ejecutivo están dispuestos a hacer una nueva
erogación -de las tantas que se han hecho- sin tener muy
claro los resultados a lograr. No podemos seguir invirtiendo en
un proceso sin tener cierta seguridad en cuanto a que ese proceso
realmente va a beneficiar el costo, en definitiva a Calnu y a la
población de Bella Unión.
JV - ¿El
plan de reestructura quedó a estudio?
DC - El plan
de reestructura está estudiado: el Ministerio de Ganadería
lo ha analizado a fondo y está en la parte operativa de qué
elementos comprar, dónde comprarlos y cómo colocarlos
rápidamente para hacer efectiva la operación. Es una
parte más operacional que financiera.
JV - ¿Hay
posibilidades?
DC - Creo que
hay una conciencia muy grande por parte de los jugadores de este
partido, el camino es bastante claro: en Bella Unión se ha
invertido en muchas cosas que no han sido rentables que la población
de Uruguay ha ido pagando. Todos tenemos conciencia de que ese proceso
no se puede repetir y de que tampoco podemos estar todos los años
buscando una solución paliativa que dura un año. La
idea del Poder Ejecutivo, del presidente de la República
en especial, es lograr un abatimiento de costos que a la larga realmente
permita a Calnu salir. En eso se está trabajando muy firmemente.
JV - A ello
también se refiere el tema del reperfilamiento de las deudas.
DC - Por supuesto,
ésa es la tercera pata que dejamos para el final porque es
plata que ya se invirtió y que, bien o mal, está metida
ahí, hoy no tenemos solución. Tampoco va a haber solución
si Calnu no logra de alguna forma mejorar sus rendimientos y su
producción para que estén acordes a los precios del
mercado.
JV - Parece
un círculo vicioso.
DC - Claro.
La idea es limpiar a los productores, que es el tema más
complicado, para el cual las solución están. Hacer
la reconversión muy rápidamente invirtiendo la menor
cantidad de dinero posible y si todo esto funciona recién
entonces hablar seriamente de una refinanciación, porque
no tiene sentido hablar hoy de esas cosas si no hay de dónde
sacar, si la empresa no deja utilidades es imposible refinanciar
nada.
JV - Esto con
respecto a Calnu; ¿con respecto a Calvinor y Greenfrozen?
DC - Greenfrozen
está dentro del mismo paquete, Calnu es parte. De acuerdo
a los directivos de la sociedad, ha extraído demasiado capital
de su giro para abrir el juego a otras cosas, a todas esas producciones
colaterales que se ha ido teniendo. Es obvio que Calnu no estaba
en condiciones de hacerlo, y hoy se está sintiendo el dolor
por ese lado. No domino el tema de Calvinor, el banco no tiene una
participación importante, es la Corporación Nacional
para el Desarrollo la que está jugada en ese tema. La idea
aparentemente sería tratar de transferirla al sector privado,
pero no quiero dar opiniones definitivas porque no conozco el tema
a fondo.
***
JV - Imposible
hablar con el presidente del Banco República sin pedirle
opinión sobre el tema argentino: ¿qué va a
hacer el banco con tantos recursos que le han llegado últimamente
de depositantes del país vecino?
DC - La colocación
de fondos nunca es un problema, el problema es siempre conseguirlos.
Esa es una de las ventajas que tiene el banco, que no debe perder.
La seriedad, la seguridad, la certeza que da a los depositantes.
Lo que nos preocupa son las repercusiones y las soluciones de Argentina
porque sabemos de sobra que siempre van a tener efectos sobre nosotros.
JV - Se menciona
hoy depósitos diarios de U$S 2 millones de no residentes
argentinos en Colonia, en la sucursal del Banco República.
DC - En diciembre
fue muy fuerte; no tenemos números de enero. La situación
es absolutamente cambiante en forma diaria, por lo tanto hoy no
tengo elementos de juicio para saber en qué estamos. La gente
está a la expectativa de cuáles van a ser las medidas
argentinas. Esperemos que se concreten rápidamente por el
bien de todos.
JV - Se habla
de un escenario de una cotización del dólar de entre
1,35 a 1,40 en relación al peso argentino, es decir un dólar
oficial para operaciones oficiales y financieras y un dólar
que flotaría en función de la oferta y la demanda.
No sería como aquí, ni se optaría -por lo menos
en esta primera instancia-por esa canasta de monedas de la que se
habló. ¿Ustedes han recibido algún tipo de
información?
DC - La información
es más o menos la misma. Si la solución viniera por
ese lado, bienvenida; creo que lo peor es la incertidumbre que hoy
tenemos todos, que es lo que más complicaciones nos trae,
más que la medida en sí que se tome. Cualquiera de
las medidas va a ser dolorosa. La salida de la convertibilidad va
a tener sus costos, pero de forma alguna va a implicar un cambio
sustancial en nuestra economía; podrá alterar algunos
elementos que la parte de economía del gobierno definirá.
JV - Sí,
sería por el lado del ritmo de la pauta devaluatoria.
DC
- Parecería uno de los sistemas más lógicos,
pero preferiría que se lo preguntara al ministro de Economía,
a Davrieux o al contador César Rodríguez Batlle, que
saben más que yo de ese tema específico.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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