En espera de que el equipo económico concrete las medidas para abatir el déficit

- Senador Alejandro Atchugarry (Lista 15, Partido Colorado): Este gobierno ha logrado una rebaja histórica de los costos. Las tarifas públicas no aumentarán más de un dígito. Con el Partido Nacional hay un acuerdo básico; con legisladores del EP-FA hay acuerdo en el "mano a mano", pero después la izquierda se opone a lo que se legisla y dificulta los cambios.

- Diputado Doreen Javier Ibarra (EP-FA): "Somos una fuerza de oposición que presenta alternativas al conjunto de la opinión pública, al sistema político y al presidente de la República. Llamamos a un gran diálogo entre los sectores políticos, sociales, productivos, cooperativas, trabajadores, para encontrar una salida a esta situación, pero el gobierno que no quiere escuchar a nadie.

EN PERSPECTIVA
Viernes 18.01.02, 07.35.

JULIO VILLEGAS:
Había mucha expectativa en torno a las medidas que el equipo económico anunciaría ayer ante la Comisión Permanente del Poder Legislativo, respecto a la disminución del gasto público y los planes para el presente año. Sin embargo, el ministro dijo que los detalles están siendo afinados, que se pretende abatir el déficit en U$S 400 millones; se estima un leve crecimiento de la economía para este año, se espera que la inflación se sitúe en menos de un 10%, y también que la reactivación económica llegue fundamentalmente de mano de las exportaciones cárnicas.

Pero, pese a lo anunciado, no quedaron definidas las medidas concretas, los impuestos que están siendo analizados (como el Impuesto a las Retribuciones Personales a los sueldos más altos del sector público, a las llamadas internacionales, algún otro con el que se ha especulado), el aumento de las tarifas públicas, y otros aspectos que se aguardaba, y que, salvo que el senador Alejandro Atchugarry esté en condiciones de adelantarnos algunos detalles de estos planes, habrá que esperar quizá una o dos semanas para conocer.

ALEJANDRO ATCHUGARRY:
Se las va a conocer cuando estén con un principio de acuerdo. La posición del gobierno ha sido claramente: primero tratemos de contener los gastos, incluso para tener la mirada clara si hay que encarar a la gente para pedirle un esfuerzo. El primer esfuerzo hay que pedírselo a la burocracia, tratando de que gaste menos. Y en eso se viene trabajando con fuerza, con decisión, para empezar por el presidente de la República y para seguir con todos nosotros, sin afectar los programas que impactan favorablemente en la población, tratando de ver cómo se hace para bajar los otros tipos de gastos.

Le diría que entre recorte de gastos y mejoras de administración (porque por una mejor administración de las reservas del Banco Central, los ingresos por la re-licitación del free shop de Carrasco, por hacer lo de las bandas de telefonía, tres aspectos que no refieren a recortes de gastos sino a mejoras de administración hay U$S 80 millones) en conjunto ya vamos en U$S 220 millones de recortes de gastos de funcionamiento básicamente, porque no estamos hablando de salarios ni de intereses de deuda pública: se refiere a lo que en el Presupuesto llamamos Gastos de Funcionamiento.

Es un esfuerzo muy grande. Yo he visto varios procedimientos de esta naturaleza, y la digo que es destacable el esfuerzo del gobierno para empezar a ordenar la casa antes de recurrir a otros organismos. Seguramente, habrá que recurrir a algún otro mecanismo, porque lo que se desea es alejarse -desde todo punto de vista-de la situación de Argentina y Brasil. En consecuencia, Uruguay quiere tomar este año 2002 en el cual estamos persuadidos de que, pese a las enormes dificultades de la vecina orilla, vamos a crecer al impulso de su exportación y al impulso de cosas e inversiones que se viene haciendo, que todavía se notan poco pero van a ir dando su resultado concreto: más trabajo a la gente... Y también tener la casa ordenada en materia fiscal, justamente para seguir atrayendo inversiones en un momento en que uno lee en los periódicos que empresas francesas, españolas, no sé si se radicarían pero tienen graves problemas en la región. Dar una nota distinta para atraer parte de esas inversiones que, si uno no se muestra distinto, difícilmente vengan: difícilmente alguien venga a invertir en telefonía, en combustibles, en fábricas, en vinos, si no cree en el país. Para que crean en el país hay que dar la imagen de que uno está ordenado y que no está en la misma que los vecinos.

JV - En cuanto a la reactivación, se apuesta a la exportación ¿en base a qué aspectos? Porque en los sectores industriales y exportadores se ha expresado que las medidas cambiarias no alcanzan para asegurar la competitividad de las empresas.

AA - Desde que está este gobierno, hemos tenido el cuidado de mejorar la competitividad del país, pero al mismo tiempo somos conscientes de que hay que cuidad a los jubilados, a los asalariados, a los deudores en dólares. A mi juicio, el gobierno ha ido acelerando suavemente el ritmo cambiario, con sumo equilibrio manteniendo una inflación muy baja para no perjudicar ni a jubilados, ni a asalariados, ni a deudores. En consecuencia, desde que este gobierno se inauguró hemos mejorado la competitividad, o sea devaluación menos inflación, que es lo que realmente cuenta, porque los países que hacen una gran devaluación y tienen una gran inflación perjudican a la gente y tampoco mejoran la situación de los exportadores. Desde que está este gobierno se ha mejorado 15% la competitividad.

Pero además el año pasado, a través del Cofis y otras medidas hemos colocado a la industria, al agro al transporte de carga y a otros sectores en el nivel más bajo de impuestos que recuerda la historia del país. Hemos pasado a cero los gravámenes sobre la mano de obra de todos estos sectores, justamente para ayudar a que se dé empleo y ayudar a la competitividad. Si usted suma los dos efectos, hemos recuperado más de un 20% en todos estos sectores exportadores. Si se considera que a partir de las medidas de enero hay un nuevo aceleramiento del ritmo devaluatorio, pero manteniendo la misma meta muy baja de inflación de un dígito para cuidar a estos grupos de ciudadanos, el resultado es que seguramente hoy hemos recuperado la competitividad que habíamos perdido respecto a Brasil: estamos al mismo nivel que a mediados del 2000. Eso que sentíamos a mediados del 2001, que Brasil nos estaba matando: hemos recuperado el nivel de paridad de precios. ¿Quiere decir que eso alcanza? Probablemente no, pero hemos hecho una gran recuperación.

Respecto a Estados Unidos, hemos mejorado competitividad, y respecto a Europa la estamos alcanzando (porque Europa devaluó bastante el año pasado) y pienso que a mitad de año la relación costo país respecto a todos ellos nos permitirá sin duda recuperar estos mercados que Uruguay fue perdiendo en los últimos 10 años, atraído porque acá, en Brasil y Argentina, uno vendía a buen precio lo que uno quisiera. Ahora no se vende nada, y Uruguay (los uruguayos, los textiles, los frigoríficos, en fin) ha hecho un gran esfuerzo para volver a conquistar los mercados que dejamos 10 años atrás.

JV - Los exportadores están preocupados por la competencia argentina, que tiene una producción similar a la nuestra.

AA - La preocupación es compartida, pero lo cierto es que Argentina tiene, lamentablemente, un "parate" económico y un desorden que, de aquí a que se ordene... Vamos a ver cómo se ordena y cuándo. Por ahora, creo que no puede hacer mucha competencia, y lo lamento porque no sólo son nuestros vecinos toda la vida sino que al Uruguay le interesa (hasta por interés propio) que a Argentina le vaya bien para vender los servicios, el turismo, tanta cosa.

Pero diría que como país estamos apuntando al mundo. Y en el mundo, con o sin Argentina, Uruguay está en condiciones de aumentar su exportación. El año pasado (dejando de lado el tema cárnico por la aftosa), Uruguay creció en exportaciones. Creció, en las condiciones tan adversas del año pasado. No tenga dudas: este año vamos a volver a crecer en las exportaciones, y confiemos en que otras medidas permitirán crecer al resto de la economía también. Es la prioridad número uno: crecer y dar empleo. No hay tema más importante que ese para todos nosotros. Estamos trabajando, como usted ve: no hay verano para ninguno de nosotros, para el gobierno todo. Si no lo hacemos mejor será porque no sabemos, pero la verdad es que estamos remangados tratando de superar tanta adversidad que nos ha tocado a los uruguayos en estos últimos años. Era difícil imaginar en lo previo que tantas cosas adversas se iban a dar juntas...

JV - Los "garrones" que mencionó el presidente Batlle.

AA - Los famosos "garrones". Pero al mal tiempo buena cara, porque con lamentarse no se va a ganar nada, así que estamos remangados tratando de resolver los temas.

JV - ¿Cómo se encara el tema de las tarifas públicas, habida cuenta de su incidencia en cantidad de actividades del país, en particular las productivas?

AA - Justamente para mantener la inflación de un dígito, la idea es que las tarifas públicas, pese a que todas estas modificaciones inciden (por supuesto el dólar incide en la mayoría de las tarifas) se mantengan en un dígito durante todo el año para colaborar a ese objetivo del gobierno y para dar señales claras al comerciante, al productor, en cuanto a qué precio debe fijarse, el gobierno va a mantener las tarifas públicas alineadas con lo que uno quiere de inflación no mayor a un dígito, con lo cual estos organismos deberán hacer también un esfuerzo de ahorro porque por supuesto la variación de sus consumos externos (cuando UTE compra energía o invierte, cuando Ancap compra petróleo, cuando Antel invierte, paga en función de una devaluación de dos dígitos). Tendrán que hacer un esfuerzo muy grande al cual todos vamos a ayudar, pero la idea es que las tarifas aumenten un dígito, igual que la inflación.

JV - El 8,5% que se mencionó como ya resuelto para OSE ¿es el eje que se prevé para las otras empresas públicas?

AA - Cada empresa tiene su propia canasta de variaciones. Lo que le puedo garantizar es que ninguna va a llegar al 10%: todas van a estar en un dígito.

JV - ¿Cómo se está manejando todo este tema en el plano político? Aparentemente avanzan las negociaciones con el Partido Nacional, pero ¿cómo se lo está manejando con la oposición, con el Encuentro Progresista?

AA - La base de la estabilidad económica es la estabilidad política: si usted puede tomar decisiones porque cuenta con respaldo, puede hacer funcionar la economía y ser creíble. Creo que es lo que nos está salvando de no ser confundidos con las dificultades regionales. Con el Frente Amplio diría francamente que, en el mano a mano, uno encuentra comprensión en muchos legisladores; absoluta comprensión de las circunstancias. Pero también debo señalarle que en un momento en que el país desesperadamente requiere que se le traiga inversión para dar trabajo, cuando se toma decisiones corporativas (digo corporativas y lo señalo)... Hicimos una ley para Ancap, que fue lo último que hicimos en diciembre. La tuvimos seis meses, se dio toda la información que se quiso; vastos sectores del Frente Amplio (por lo menos en la votación que tienen en la población real) intervinieron, la compartieron, y ni bien se termina de sancionar la ley, a impulsos del doctor Tabaré Vázquez y a impulsos de los intereses sindicales de un conjunto de trabajadores que están mucho mejor pagados que los de la Administración Central (tiene 14 sueldos, una serie de beneficios), y que igual se oponen a que se cambie algo pese a que se les ha dado todas las garantías, por más que el país tiene una enorme necesidad de bajar el gasoil y la nafta que está pagando más cara, y que es lo que ilustra todo este procedimiento (el objetivo número uno de este proyecto es bajar el gasoil y la nafta a través de una asociación). A pesar de todo eso, se da la seña de que se quiere ir a un plebiscito, con lo cual el resultado inmediato es (póngase del lado del Estado uruguayo) que el Estado se pregunte "¿Cómo hago para conseguir un socio, si hay un procedimiento por el cual durante un año la ley va a estar en cuestión?". Desde ya le digo que no creo que ese plebiscito prospere; no creo que la gente considere bueno no rebajar la nafta y el gasoil. Pero, por más que dentro de un año se gane el plebiscito por 14 a 1, ¿cómo hace durante un año para conseguir un socio? Por formación y espíritu, yo estoy con todas las libertades y tienen toda la libertad de hacerlo. Pero libertad también es responsabilidad, y yo reclamo un poco de responsabilidad. No se puede hacer estas cosas en un momento en que Uruguay requiere desesperadamente dar trabajo, bajar sus costos, ¿cómo no terminó de sancionarse la ley y ya se está anunciando que se la va a trancar durante un año con este procedimiento?

Por eso, usted me preguntaba y le digo: en el mano a mano, en el mejor de los mundos. En esta ley para Ancap, la mitad de los legisladores del Frente Amplio no sólo estaban de acuerdo sino que son corredactores. Sin embargo, después pasa este tipo de cosas y uno queda despistado preguntándose ¿pero entonces? Uno no quiere ni siquiera que se comparta, pero por lo menos que haya entendimiento de las dificultades del país para no poner obstáculos artificiales como en este caso.

***

JV - Estamos ahora en comunicación con el diputado Doreen Javier Ibarra, del Encuentro Progresista - Frente Amplio.

El ministro descartó de plano las propuestas del EP - FA para enfrentar la crisis económica. Dijo incluso que, de aplicárselas, se provocaría "el mismo incendio que en Argentina". ¿Cómo ve esa apreciación?

DOREEN JAVIER IBARRA:
La verdad es que con mucha molestia, porque a veces podemos esperar ataques a nuestra fuerza política por parte de actores político - partidarios, porque está dentro del juego del sistema político la defensa de las ideas de cada uno. Pero que, en este momento de dificultades económicas que vive el país, el ministro de Economía, el hombre que está conduciendo al país en el plano económico y social haga ese tipo de planteos, realmente desconcierta, nos frustra y creo que frustra a toda la ciudadanía, y demuestra una intolerancia exagerada por parte del ministro. Y además una especie de omnipotencia, porque lo que dice el ministro en definitiva es "Lo que digo yo y lo que hago yo es lo que sirve, y a lo demás lo desecho y lo tiro a la basura". Esa es una actitud que no corresponde en momentos en que hay miles y miles de uruguayos que están esperando un cambio en la política económica, cuando la producción está postrada, prácticamente destruida por esta política que han llevado a cabo por este y los últimos gobiernos, cuando hay mucha gente está angustiada porque tiene dificultades para sobrevivir, está desempleada o con empleo precario, cuando se nos van al exterior nuestros hijos, nuestros nietos, nuestros hermanos, porque acá no hay posibilidades de encontrar trabajo. Creo que es absolutamente negativo que el señor ministro se ponga en esa actitud de omnipotencia.

Y además, intentar comparar las propuestas del Encuentro Progresista - Frente Amplio con lo que hicieron Menem o De la Rúa es un absurdo que ningún uruguayo, con la característica capacidad cívica e inteligencia política que tiene, puede creer. Además está claro que si hay coincidencias con las políticas económicas argentinas las mismas pasan justamente por las desarrolladas por los últimos gobiernos, sobre todo éste de Jorge Batlle, que sigue pregonando la apertura indiscriminada de nuestro mercado al exterior de manera irrestricta, que ha llevado a la fundición de centenares y centenares de empresas, ya sea agropecuarias, comerciales, industriales, creando el desempleo que tenemos en este momento. Son los que en definitiva coincidieron con Argentina a través del atraso cambiario en Uruguay y la convertibilidad en el país hermano; el proceso de desregulación de las actividades productivas y mercados débiles, lo que en definitiva originó la concentración de la riqueza. Cuando el señor ministro de Economía y Finanzas plantea que remitirá un proyecto de ley sobre flexibilización del mercado laboral está coincidiendo una vez más con Argentina, que con aquella ley llena de corrupción que llevó a la renuncia del vicepresidente, "Chacho" Alvarez. Cuando vemos a Argentina no le queda absolutamente nada con referencia a su patrimonio, a su capital, a sus empresas públicas, lo que significa que no tiene respaldo desde el punto de vista económico porque no tiene capital, no tiene patrimonio, porque además hubo corrupción, porque además vaciaron el país... Aquí, si no existiera un pueblo, si no existiera una oposición constructiva, responsable, seria, como nuestro Encuentro Progresista-Frente Amplio y un movimiento social que sabe lo que quiere, hubiera pasado absolutamente lo mismo, no tendríamos nada. Las coincidencias con el modelo argentino son fundamentalmente del gobierno uruguayo y otros.

JV - Los anuncios del ministro en materia de ahorro del gasto público en general se comparten.

DJI - Nosotros estamos de acuerdo con el ahorro del gasto público, con la disminución de los gastos del Estado. Es necesario, en la última rendición de cuentas del año pasado hice un listado que llegó a U$S 50 millones en minutos de gastos que se pueden trasladar para otros ejercicios o simplemente eliminar. Esperamos que una vez no se disminuyan los gastos en las áreas sociales, se lo dije al ministro; que nuestros conciudadanos que tienen dificultades de todo tipo -porque hay mucha gente por debajo de la línea de pobreza, desempleada- no se vean afectados por la disminución del gasto social, por ejemplo a nivel del INAME, de los centros CAIF, del INDA, de la JUNAE, de la salud, de la educación, de la construcción de viviendas, de la realización de obras públicas para crear fuentes de trabajo. No pasa por ahí sino por todo lo que signifique cosas suntuarias como vehículos, construcción de viviendas para los ministerios, refacciones, compra de elementos de oficina. Pero también, por favor, que venga una disposición del presidente de la República para prácticamente hacer desaparecer en nuestro país los contratos de obra, porque son una afrenta para los uruguayos. Se están gastando casi U$S 50 millones anuales, en muy poco tiempo se han gastado U$S 180 o U$S 200 millones; por ahí también pasa la disminución de los gastos del Estado. Más allá de que nuestras propuestas están directamente dirigidas a solucionar los problemas de la producción y de la gente en este momento.

JV - En el tema exportaciones, ¿ustedes comparten que por ese lado pueda haber alguna posibilidad de reactivación del país, habida cuenta de que por ejemplo en el caso de la carne han aumentado notoriamente las faenas, se están abriendo algunos mercados y las perspectivas parecen mejorar bastante?

DJI - Sí, sin duda va a ser una ayuda, no lo podemos dejar de lado. Habrá que buscar rápidamente mercados y más mercados para colocar toda la producción de nuestros frigoríficos. Sin duda va a ayudar, pero no va a ser suficiente, nosotros entendemos que va a haber que tomar otras medidas, como por ejemplo lo que decimos en nuestro plan de emergencia, colaborar rápidamente con los sectores productivos.

Hace 48 horas hubo una reunión en la sala 17 de la Cámara de Diputados con 18 gremiales empresariales, entre las que estaban desde la Asociación Rural hasta los cultivadores de arroz y los farmacéuticos. Ahí plantearon desesperadamente un acuerdo productivo que le permita al país salir de esta situación. Por casualidad -o no-, lo cierto es que las propuestas de esas gremiales empresariales tienen gran coincidencia con las del Encuentro Progresista-Frente Amplio. Entonces no pasa únicamente por el tema de las exportaciones, que hay que incentivar, sino por un cambio de mentalidad, por un rápido cambio de rumbo en nuestro país a fin de posibilitar una reactivación seria, real, que pasa también por la inversión, por la rebaja de los intereses de la banca privada y la banca oficial, por atender rápidamente a esos sectores para evitar que dentro de muy poco tiempo nuestro campo sea un páramo.

JV - No parece la intención del gobierno, a estar a las declaraciones del ministro de Economía y otros directivos de la coalición gubernamental, hacer un cambio en el rumbo económico, como lo plantean algunos sectores industriales y empresariales coincidentes con posturas planteadas en la plataforma del FA. ¿Qué se avecina entonces: una situación de confrontación a nivel político? ¿Seguirán las negociaciones en el Parlamento? ¿En qué clima?

DJI - Ha quedado claro en el día de ayer y en infinidad de oportunidades que estamos ante una fuerza política de oposición que presenta un modelo alternativo, que estudia con seriedad, que presenta sus propuestas al conjunto de la opinión pública, al sistema político y al presidente de la República. Está claro que el lunes pasado en la Mesa Política llamamos a un gran diálogo entre los sectores políticos, sociales, productivos, cooperativas, trabajadores, para ver cómo encontramos una salida a esta situación. Pero en el día ayer... puede ser que uno esté directamente influido por los golpes que se reciben en política, que no se escuche lo que decimos, no yo Doreen Ibarra, que no importa, sino nuestra fuerza política que es el 40% de los uruguayos... Vemos que la realidad es que tenemos un gobierno, o al menos un ministro de Economía que se puso grandes tapones en los oídos y no quiere escuchar a nadie, no escucha a la oposición, no escucha a los sectores productivos, no escucha a los industriales, no escucha a los trabajadores... Eso es muy peligroso, realmente nos preocupa.

Si se continúa en esta actitud -yo no soy un hombre pesimista con mi fuerza política ni con mi país, siempre confío y tengo esperanza en la gente, en lo que hacemos- los meses, los días y el año 2002 van a ser muy dolorosos para nuestro país porque podemos terminar en una situación que ninguno de nosotros desea, porque lo primero es la estabilidad, la estabilidad de la sociedad, la estabilidad económica y el mantenimiento de las libertades, de la Constitución de la República y las instituciones. Cuando se va por estos caminos obtusos, donde no se aceptan opiniones de nadie se vuelve realmente peligroso.

Pero nosotros confiamos no únicamente en el cambio de actitud por parte del Poder Ejecutivo sino, sobre todo, en las decenas de propuestas que se están haciendo desde todos los ámbitos de la sociedad para aportar ideas para cambiar. Hay que cambiar rápidamente, le guste o no le guste al ministro de Economía y Finanzas, que en este momento se está convirtiendo en una especie de obstáculo para buscar caminos certeros en la política económica y social del país.

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón