Las normas sanitarias de EE.UU. le impiden comprar carnes uruguayas
Presidente
de la Cámara de la Industria Frigorífica, Daniel Bellerati:
Quizá el presidente Batlle logre incidir políticamente,
pero el país todavía no tiene el status de libre de
aftosa con vacunación. Respecto a otros mercados, si la devaluación
será paulatina, que el aumento de tarifas no contrarreste
sus efectos sobre la competitividad.
EN PERSPECTIVA
Lunes 21.01.02, 08.42.
JULIO VILLEGAS:
Se espera que entre hoy y mañana el gobierno anuncie el complemento
de las medidas que perfiló en estos días. Entre otras
cosas, el ajuste anual de salarios para el sector público,
que se ubicaría entre 1% y 1,5%; las tarifas públicas
(ya se conoció el ajuste para OSE, que será de 8,5%;
se espera definiciones en cuanto a UTE y Antel, y en el caso de
los derivados de petróleo, se analiza distintas variables
por cuanto el crudo ha descendido notoriamente en los mercados internacionales,
ubicándose en U$S 18 a 19, pero como contrapartida está
la aceleración del ritmo devaluatorio que afecta las importaciones).
Además están los anuncios formulados días atrás
por el ministro de Economía Alberto Bensión, cuando
concurrió al Parlamento a informar sobre estos temas y puso
el acento en la confianza del gobierno en una reactivación
de la mano del aumento de las exportaciones este año. Destacó
en ese sentido la importancia de la industria frigorífica.
Estamos en contacto
con el señor Daniel Bellerati, presidente de la Cámara
de la Industria Frigorífica.
¿Cómo
ven ustedes este optimismo del gobierno en cuanto a que el sector
exportador pueda ser la palanca para la reactivación que
todos estamos esperando?
DANIEL BELLERATI:
Pensamos que estamos muy bien enfocado desde el punto de vista de
que de la única forma en que nuestro país puede crecer
lo que necesita es aumentando las exportaciones. Por otro lado,
evidentemente, el corrimiento de la banda y el aumento de la pauta
es una ayuda que nos va a permitir competir de mejor manera con
sus vecinos que nos han tenido a mal traer desde enero de 1999,
cuando la devaluación del real. Ahora estamos avizorando
que Argentina va a tener una actitud exportadora realmente agresiva,
en primer lugar porque necesita las divisas y en segundo porque
ya sabemos lo que es conseguir un dólar en ese país.
Quiere decir
que el enunciado del gobierno está muy bien y está
muy bien cifrar las esperanzas en que la exportación pueda
ser el motorcito de crecimiento de Uruguay.
Por otro lado,
hay anuncios y medidas contradictoria con respecto a un Uruguay
competitivo. Si el dólar se ha devaluado apenas un poquito
y ya estamos aumentando las tarifas públicas entre 8% y 10%,
no estamos abaratando el costo país; no lo estamos poniendo
en condiciones de competitividad.
Hay que reconocer
que en el año 2001 las exportaciones de carne de Uruguay
cayeron U$S 200 millones con relación al año anterior,
como consecuencia de que estuvimos siete meses parados. Por lo tanto,
el año 2002 no va a ser tan malo como lo fue el 2001 desde
el punto de vista de las divisas para la carne, pero tampoco podemos
tirar las campanas al vuelo pensando que vamos a llegar a los récords
del año 2000, cuando se exportó U$S 470 millones,
ni el de 1999 cuando se exportó por alrededor de U$S 510
millones.
JV - El gobierno
se dispone a efectuar el aumento en las tarifas públicas
en un porcentaje de un dígito (de 6% a 10%), pero la devaluación
no es inmediata: se irá dando en el transcurso de todo el
año. En ese sentido el porcentaje de la devaluación,
que está más o menos preanunciado, sobrepasa notoriamente
el caso de las tarifas públicas.
DB - Usted tiene
razón: la devaluación será paso por paso y
mes por mes, mientras que las tarifas públicas ya estarían
aumentando en enero en ese entorno, y no hay garantía alguna
de que no haya un nuevo aumento. Pensamos que en un país
que ha estado al ajuste desde el punto de vista de costos, en que
los privados hemos hecho todo tipo de sacrificios -reestructuras
y una cantidad de cosas- para que nuestras empresas puedan seguir
funcionando y mantener una actividad exportadora, tenemos que pedirle
al gobierno que mantenga ese mismo criterio en este momento. Hay
que ajustarse el cinturón y ver cómo van deviniendo
las cosas. El petróleo West Texas cerró a U$S 17,97
el viernes, cuando hace un año y medio estaba a U$S 38.
Da para esperar,
para no tomar medidas cuando el país tiene que salir a competir
con Argentina que dio un salto de 40% en el dólar oficial
en cinco minutos. Le pedimos a gobierno que se ponga de nuestro
lado para hacer al país más barato en términos
de dólares, y más competitivo. Es lo único
que podemos pedirle.
JV - Las faenas
han llegado a las 40.000 reses semanales, ya hubo reactivación
en la industria frigorífica. ¿Esto se debe a la apertura
de nuevos mercados externos, al consumo interno?
DB - Ambos elementos
nos han llevado a promediar hoy una faena en el entorno de 39.000
a 40.000 reses en las últimas dos semanas.
JV - El turismo
no está ayudando.
DB - No, pero
el uruguayo sí ayuda; salimos los fines de semana y lo primero
que hacemos es tirar un asadito arriba de una parrilla, sobre todo
teniendo en cuenta que el asado y la carne, a valores reales, tienen
el precio histórico más bajo de los últimos
años. En algunas carnicerías usted puede comprar el
asado a $ 14, o sea más barato que en 1995. Ese producto
ha llevado a incentivar el consumo interno porque es el más
barato de todos los componentes de la canasta familiar.
JV - De todas
maneras, no cayó muy bien la decisión de los frigoríficos
de aumentar rápidamente el precio entre 10% y 15% para las
carnicerías, al día siguiente de la adopción
de las medidas cambiarias.
DB - Le agradezco
la pregunta. Yo escuché sus comentarios cuando le hizo la
nota al vicepresidente de la Unión de Vendedores de Carne,
señor Grela, y me pareció que faltaba que nosotros
le hiciéramos ver cuál es la realidad desde el punto
de vista de la compra de ganado.
JV - ...que
se compra en dólares.
DB - El 90%
del ganado se compra en dólares y se paga a 45 días.
En el mercado local los plazos de pago oscilan entre ocho y 60 días:
hay grupos de carniceros que pagan a ocho días y grupos de
supermercados que pagan a entre 45 y 60 días.
Póngase
en el lugar de los frigoríficos cuando les dicen que el ancho
de la banda va a ser de 12%, lo que quiere decir que en 30 días,
en cualquier momento, el dólar se puede mover un 12%. Yo
compro el ganado hoy, extiendo un cheque en dólares a pagar
dentro de 45 días, y tengo que presumir que puedo tener que
pagar 12% más. Es así: lamentablemente nadie me puede
garantizar que no va a ocurrir, que el dólar va a seguir
moviéndose en el piso de la banda, porque cualquier cosa
que suceda en Argentina, cualquier estornudo en el país vecino
va a repercutir y eventualmente, cuando tengamos que ir a cubrir
el cheque a los productores, no nos van a alcanzar los pesos.
La industria
se vio obligada a acompasar los precios al ajuste del ancho de la
banda. Posteriormente se vio que la situación no cambiaría
por algún tiempo, que no hay pesos en la plaza como para
aumentar la cotización del dólar y dio como para bajar
un peso en los precios. Habrá que ver cómo evolucionan
las cosas en los próximos 30, 40 días. Esa es la realidad:
es una incertidumbre arraigada que los frigoríficos no pueden
soportar sobre sus espaldas.
JV - ¿Cómo
ven ustedes el optimismo de los sectores de gobierno en cuanto a
la apertura de nuevos mercados? ¿Es válido?
DB - Las cosas
están bastante claras: Uruguay no ha alcanzado el status
de país libre de aftosa con vacunación, que es el
primer estadio antes del de libre de aftosa sin vacunación.
Por lo tanto, en las condiciones actuales no podemos acceder a los
mercados como hasta abril del año 2001, cuando podíamos
vender carne con hueso, menudencias, absolutamente todos los productos.
En este momento todos los mercados (salvo el argentino, que nos
permite entrar asado), son para carne sin hueso y no menudencias,
lo que implica perder la colocación de 30% del animal. De
todas maneras, Uruguay está colocando con alguna fluidez
en la Comunidad Europea, en Israel, hemos rescatado el mercado de
Argelia, se ha podido hacer negocios con Egipto, y estamos esperando
que Chile deponga su actitud tan injusta para con nuestras carnes
y nos habilite el mercado rápidamente.
JV - ¿Y
en cuanto a la gestión ante Estados Unidos, que anunció
el presidente Batlle en contacto directo para febrero?
DB - Ojalá
tenga suerte y pueda incidir políticamente en el tema. Desde
el punto de vista sanitario las normas son bastante claras: mientras
Uruguay no sea país libre de aftosa con vacunación,
no va ser posible que entre en la lista de países de riesgo
mínimo que tiene Estados Unidos. Pero si el presidente puede
lograr políticamente cualquier flexibilización o adelantamiento
de la fecha, esto será muy bien recibido porque es lo que
el agro uruguayo, los productores uruguayos y los frigoríficos
uruguayos estamos necesitando.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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