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Comenzó la exhumación de tumbas NN en Colonia
José Claudio Williman (Comisión para la Paz):
Es un trabajo hecho con mucho respeto y profesionalismo por personas
de muy alto nivel técnico. Las autoridades de Colonia actuaron
con mucha dignidad: en 1976, la jueza recibió "sugerencias"
de no tomarse las cosas demasiado en serio, pero actuó con
absoluta precisión e independencia.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 23.01.02, 08.00.
JULIO VILLEGAS:
Un equipo de antropólogos argentinos está trabajando
en el cementerio de Colonia intentando identificar los restos que
se encuentran en ocho tumbas no identificadas. El lunes habían
exhumado tres cuerpos, y ayer lo hicieron con los cinco restantes.
A partir de ahora comienza la fase de estudio antropológico
de los restos.
El doctor José Claudio Williman, integrante de la Comisión
para la Paz, ha sido testigo de los trabajos realizados. Supongo
que ha vivido una impresión muy fuerte durante la labor que
están cumpliendo los investigadores argentinos.
JOSÉ CLAUDIO WILLIMAN:
Exactamente. La impresión comenzó desde que llegamos
a la localización de las sepulturas. Por resolución
unánime de la Junta Departamental de Colonia se les dio un
área muy especial, muy cuidada, con un verde muy cuidado,
con una placa en el frente. Es una zona de unos 10 por 30 metros,
muy prolija y solemne, al lado de un cementerio que, como todos
los del interior, es relativamente modesto. Me contaba algún
periodista local que, cuando la gente va a poner flores a los suyos,
siempre deja algunas flores en esa zona. De modo que eso ya le daba
decoro a esa situación tan triste.
A partir de ahí comenzó el trabajo de esta gente,
que es de un altísimo nivel técnico, muy cuidadosa.
Yo tenía noción de en qué consiste el trabajo
a partir de una conferencia que ellos dieron en Montevideo, pero
no había visto directamente la prolijidad, el respeto con
que hacen la tarea.
JV - Ellos vienen trabajando desde hace años en ese tipo
de tareas.
JCW - Sí. Es un grupo de 11 personas. Han trabajado en Centro
América, algunos de ellos en Africa contratados por las Naciones
Unidas. La mayoría de ellos se formó en Estados Unidos;
tienen un altísimo nivel y gran capacidad de trabajo: con
el sol que hubo estos dos días trabajaron desde las ocho
de la mañana hasta las cuatro de la tarde, sin parar. Por
cierto, contaron con la colaboración de los empleados del
cementerio, con la participación del ingeniero encargado
de estas áreas. La Intendencia puso una parte física,
desde el principio fue una gran colaboradora.
JV - Pese a que por televisión veíamos la limpieza
de los restos en una forma, digamos, artesanal, se ha dicho que
el grupo de antropólogos ha incorporado elementos tecnológicos
modernos para el desarrollo de sus investigaciones.
JCW - No vi esa etapa del trabajo. Allí se trata de llegar
hasta el nivel donde se encuentran los huesos para comenzar un trabajo
muy minucioso, con pincel, distintos utensilios, todo notablemente
bien realizado. A medida que los huesos iban quedando totalmente
descubiertos y limpios los iban poniendo en bolsitas de papel numeradas
de acuerdo a la localización, bolsas que a su vez iban poniendo
en cajas de plástico, una para cada cuerpo, que después
fueron depositadas en la morgue del cementerio con custodia policial
durante la noche.
JV - Me han dicho que durante el trabajo de los antropólogos
estuvo presente quien fue capataz del cementerio en 1976, cuando
aparecieron los cadáveres, y presenció los entierros.
¿Tuvo oportunidad de conversar con él?
JCW - Ese día él tenía licencia. Es un funcionario
del cementerio, un hombre modesto, que recuerda los hechos. El proceso
importante lo hizo la jueza que intervino, que realizó actas
muy cuidadosas, incluso con alguna... ella dice que no con presión,
pero con alguna "sugerencia" de que no le diera tanta
importancia; pero ella dijo que de ninguna manera y trabajó
con mucho cuidado.
La Junta Departamental tiene una Comisión de Derechos Humanos
que con gran preocupación hizo un excelente expediente, del
que envió una fotocopia a la Comisión para la Paz.
Es un expediente bastante alto, que tiene todos los antecedentes
y el trabajo muy meritorio de la jueza en esa circunstancia. Por
otra parte, ella sigue siendo jueza en una localidad de Colonia,
no en la capital. Se conoce el acta y tenemos el expediente.
JV - Mucha gente ha tenido una actitud muy digna en todo ese proceso.
JCW - Sí, por supuesto. Hubo una gran preocupación;
digo lo mismo de la Comisión de Derechos Humanos de la Junta
Departamental y en general de toda la Junta. Estuve con ellos (estuvieron
en el cementerio), conversé con los ediles, quienes esta
tarde lógicamente van a estar en la conferencia de prensa.
JV - Ahora empieza el estudio antropológico de los restos
en la propia morgue del cementerio.
JCW - Exactamente: hoy empiezan a trabajar dentro de la morgue,
que está bastante bien habilitada, con una mesa de metal
bastante grande. Es probable que ciertos elementos tecnológicos
que ellos aportan aparezcan en este momento, no en el de extracción
que es una etapa de cuidado. Hay una técnica para las extracciones,
pero ellos contaban que en algunos lugares de Centro América
las hicieron con máquinas excavadoras, lo que hizo muy difícil
la identificación precisa. Aquí fue exactamente a
la inversa.
JV - Su presencia en estas actividades y la del doctor Carlos Ramela,
también integrante de la Comisión para la Paz, anunciada
para hoy, ¿indican que la Comisión tiene algún
indicio respecto a que algunos de los cuerpos exhumados pueda ser
de algún compatriota nuestro?
JCW - No, en absoluto. Hay una versión muy débil,
aunque posible. Nosotros estamos trabajando desde que supimos que
allí había cuerpos de NN, en un acto de colaboración.
Se trata presuntamente de ciudadanos argentinos.
JV - La presencia de uruguayos es posible pero no probable.
JCW - Exactamente. No es imposible: como se sabe uno de esos cuerpos
tenía el carné de identidad de una mujer que ahora
está en México. Los ediles y los antropólogos,
que han tenido algún contacto con esa señora, me decían
que ella no se explica por qué un carné de identidad
de ella estaba en manos de una persona que no sabe quién
es. De modo que por esta vía no hay posibilidad de identificación
fácil de las personas.
JV - Hace un tiempo había rumores en cuanto a que al cuerpo
que apareció en la escollera del puerto de Colonia en 1976
le faltaba alguna parte. ¿Eso ha podido ser comprobado en
el transcurso de las exhumaciones?
JCW - No conversé sobre ese tema. En una de las actas de
la jueza hay alguna referencia en ese sentido, pero no constaté
ese hecho. Yo iba y venía, les llevaba sandwiches... no querían
dejar de trabajar, hicieron todo allí mismo. Se logró
poner una tela que los defendió del sol, porque era una situación
totalmente inhóspita.
JV - ¿Cómo sigue este procedimiento?
JCW - Hoy se va a dar información. Estando ellos, es probable
que indiquen cuál es su tarea en la parte antropológica.
Después vienen las tareas de nuestro Instituto Técnico
Forense, del Ministerio del Interior, que llega esta mañana
(y que también tiene un muy alto nivel), que va a hacer la
tarea relativa al análisis de ADN.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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