29.01.2002

 



Saqueos: advertencia sin datos concretos

Los directivos de Cambadu se reunieron con el ministro del Interior, Guillermo Stirling, preocupados por la posible imitación de los fenómenos argentinos. El vicepresidente de la Cámara, Daniel Fernández, aclaró que la reacción podría llegar de parte de pequeños comerciantes que se ven agredidos por las grandes superficies y su nueva fórmula de crecimiento: negocios chicos que no necesitan una habilitación especial.

EN PERSPECTIVA
Martes 29.01.02, Hora 7.38.

EMILIANO COTELO:
Vamos a ocuparnos de una noticia que ayer llamó la atención desde los diarios de Montevideo, particularmente desde la edición del El Observador, sobre la cual no pudimos entrevistar ayer mismo a las autoridades de Cambadu, que prefirieron postergar sus comentarios públicos hasta después de la reunión que iban a mantener con el ministro del Interior.

Hoy tenemos algunos datos concretos. El Ministerio del Interior reforzará la seguridad en los barrios periféricos para prevenir saqueos o atentados contra comercios, según anunció el titular de la cartera, Guillermo Stirling. Directivos del Centro de Almaceneros, Minoristas, Baristas y Afines del Uruguay (Cambadu) se entrevistaron ayer con el secretario de Estado para manifestarle el temor de esa gremial ante la posible aparición de fenómenos de violencia similares a los de Argentina. La entrevista tuvo lugar después de que la semana pasada el integrante de la Asociación de Comerciantes Independientes, Luis Insarrualde, dijera a El Observador que un grupo de pequeños comerciantes de la zona periférica amenazó con tomar represalias si se construye un nuevo local de gran superficie en esa zona. Dijo que eso significaba, por ejemplo, romper vidrios.

En línea telefónica está el señor Daniel Fernández, vicepresidente de Cambadu.

Fernández, usted participó de la reunión con el ministro Stirling.

DANIEL FERNÁNDEZ:
Sí, estuvimos el señor presidente y el secretario.

EC - Concretamente, ¿qué fue lo que ustedes plantearon?

DF - Planteamos varios puntos, como el crecimiento del contrabando que se puede avecinar con la notoria baja de la moneda argentina, la ley 17.188 que nos prometieron tratar en forma urgente antes del receso, las grandes superficies y la nueva modalidad de poner varias pequeñas que van creciendo hasta hacer grandes superficies con pequeñas escalas...

EC - ¿Puede explicar esto último un poco mejor?

DF - Estamos viendo cómo están poblando la ciudad con pequeñas casas de las grandes cadenas, o sea que siguen sumando metros con pequeñas tiendas de descuentos, los grandes supermercados ponen en zonas barriales comercios de menos de 200 metros. Planteamos también la inquietud de que pueda suceder un "levantamiento" contra las grandes superficies ante la pasividad de las autoridades para tomar medidas que apunten a paliar la situación, las grandes cadenas siguen abriendo pequeños puntos y ahogando al comercio minorista.

EC - Vamos por parte: el temor de Cambadu no viene por la posibilidad de que la gente común y corriente, como ha ocurrido en Argentina -desocupados, jubilados- pueda llegar a saquear un comercio sino por la posibilidad de que pequeños comerciantes tomen acciones directas contra locales de las grandes cadenas de supermercados.

DF - Nuestra preocupación es que comerciantes de zonas periféricas -aclaremos: la mayoría de ellos no son socios de Cambadu- al sentirse tan presionados constituyan un caldo de cultivo que podría terminar desencadenando una situación un poco delicada para todos. Nadie quiere que en nuestro país, donde siempre hemos vivido en paz, acontezca esto y se pueda desmadrar el buen sistema social que llevamos. Esa es la razón. No podemos dar nombres porque no sabemos de nadie que diga que va a agarrar piedras, pero es una situación latente y como lamentablemente copiamos lo malo de lo que todos los días nos atormenta desde la televisión a través de escenas de países vecinos.

EC - Repito: entonces la inquietud no parte de actitudes de vecinos que porque no tienen ingresos, no tienen trabajo puedan llegar a hacerse por sí mismos de alimentos de algún supermercado o almacén.

Almaceneros y baristas con Stirling

DF - La inquietud es que pueda haber unos empujados por otros y se llegue a eso. Insarrualde lo dice: comerciantes saturados de que los sigan rodeando con cadenas internacionales. Eso, aunado a la situación socioeconómica de esas zonas puede desencadenar problemas. Nosotros no podemos dar nombres y decir "son comerciantes de tal zona", periféricos o no periféricos; son zonas calientes, como las calificó el ministro.

EC - ¿Qué medidas le propusieron al ministro?

DF - No fuimos a proponerle nada, el ministro sabe lo que tiene que hacer, las autoridades trabajan en eso y lo hacen bien, nosotros somos solamente una gremial de comerciantes. Lo que hicimos fue exponerle al ministro nuestra inquietud, la preocupación de que puedan acontecer cosas ante la avalancha de noticias negativas que recibimos, que alguien se le pueda calentar la cabeza y bueno... basta prender un fósforo para generar un incendio. Las autoridades saben lo que tienen que hacer y cómo actuar, lo dijo claramente el ministro.

EC - El ministro dijo también que no recibió datos concretos de la Dirección Nacional de Inteligencia sobre eventuales episodios de este tipo.

DF - Sí, también nos lo dijo a nosotros.

EC - Por otra parte El Espectador entrevistó ayer a Hugo Avegno, subdirector de Supermercados Disco, quien dijo que esa firma concretamente no está tomando medidas adicionales de seguridad y que la inquietud de ustedes no es algo prioritario para esa empresa. No hay temor a eventuales ataques a sus locales por considerar que la situación uruguaya está lejos de la argentina. ¿Qué dice usted?

DF - Quiere decir que estamos en el mismo camino: ellos están seguros de que no va a acontecer nada y nosotros, previendo que sí pueda acontecer, vamos a la cabeza, vamos al señor ministro a participarle nuestra inquietud, nada más.

EC - ¿En definitiva ése fue el tenor de la reunión?

DF - Sí. Eso, el temor al crecimiento del contrabando y la ley 17.188, que está parada, a la que le mataron incluso el espíritu que tenía cuando nació. Esos fueron los grandes puntos de la reunión, que fue muy coloquial.

EC - No sé si la gente, al escuchar el número de la ley, entiende de qué está hablando usted.

DF - La ley 17.188 fue creada hace tres años para limitar el crecimiento de las grandes superficies. En ella se establecía que todos tenían que pasar por una comisión integrada por representantes del Poder Ejecutivo, del municipio, de las amas de casa. Esa ley fue siendo diezmada desde el momento en que han seguido creciendo las grandes superficies, solamente se negó autorización al Jopito de la fábrica de vidrios, aunque ellos siguen insistiendo y pidiendo que la comisión los apruebe. Se pide que se tome en cuenta también el crecimiento de la cantidad de metros, porque ahora se da la modalidad de crecimiento en cantidad de comercios chicos que pertenecen a un poder oligopólico.

EC - Cambadu entiende que las grandes cadenas de supermercados están recurriendo a abrir locales pequeños para sortear los frenos que imponía esa ley y que el efecto sobre los comercios pequeños termina siendo el mismo.

DF - Es el mismo o más demoledor, porque un pequeño local puede ser instalado en la esquina de su casa, no precisa grandes extensiones, con estacionamiento.

EC - Algunos pequeños comerciantes han llegado a pensar en la posibilidad de tomar represalias contra esas cadenas; ésa no es la posición de Cambadu, pero sí tiene la preocupación de que el sistema político se ocupe del asunto. ¿Por qué le plantearon al ministro del Interior el tema de la ley?

DF - Aprovechando la reunión con el señor ministro aprovechamos para presentarle todas las inquietudes. Lo de la ley viene a colación porque si dejamos que todo siga creciendo puede desmadrar en cualquier cosa. Le pasamos el comunicado al señor ministro diciéndole cuáles son nuestras inquietudes. El señor ministro no deja de ser parte del poder político. Hemos tenido reuniones con legisladores y demás; era el momento de aprovechar, ya que tuvimos la fortuna de ser recibidos por el ministro, para plantearle todas las inquietudes que tenemos en el momento.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe






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