"De 15 a 20" rapiñas a taxímetros cada mediodía

El secretario general del sindicato, Juan Carlos Berrutti, afirma que la Policía está superada por los hechos, reclama eliminar el dinero de los taxis mediante el pago con tarjetas magnéticas de venta pública, y responsabiliza a la política económica por el aumento de la delincuencia.

EN PERSPECTIVA
Lunes 11.03.02, 07.35.

EMILIANO COTELO:
La Policía viene efectuando distintos procedimientos para dar con los asesinos del taximetrista Mauricio Silvera Ferreira, de 27 años, abatido de dos disparos cuando se resistió a un asalto en la madrugada de ayer en la zona de La Teja. Como consecuencia del homicidio, los trabajadores de taxis y ómnibus llevaron a cabo un paro. Los ómnibus levantaron la medida con el ingreso de los primeros turnos nocturnos aunque tienen previsto suspender las tareas nuevamente para acompañar el sepelio, y los taximetristas la mantienen hasta después del sepelio del trabajador, cuando efectuarán una marcha que recorrerá distintos puntos de Montevideo y finalizará frente a la sede de la Presidencia de la República.

Estamos en comunicación con el secretario general del Suatt (Sindicato Único de Trabajadores del Taxímetro y Telefonistas de Radio), Juan Carlos Berrutti. ¿Qué está ocurriendo en este momento con la medida adoptada por la gremial?

JUAN CARLOS BERRUTTI:
Seguimos con el paro hasta después del entierro del compañero Silvera, cuando comenzaremos una marcha hacia el Edificio Libertad, para hacer una denuncia pública conjuntamente con los compañeros de los ómnibus.

EC - ¿Hasta que hora se extenderá la paralización de los taxis?

JCB - Puede ser al mediodía o después. Después de la marcha se evaluará si se continúa el paro.

EC - ¿A qué hora es el sepelio?

JCB - A las 9.30.

EC - Y en ese momento habría también una detención de tareas de los trabajadores de ómnibus.

JCB - Correcto: el transporte colectivo para a la hora nueve.

EC - La marcha se dirige al Edificio Libertad, reclamando ¿qué?

JCB - La gremial del taxímetro, conjuntamente con la Unott, hemos hecho siete pedidos de entrevista al presidente Batlle...

EC - Pero ¿por qué al presidente? ¿No han tenido un buen diálogo con el Ministerio del Interior en torno a estos temas de seguridad?

JCB - Sin duda, pero entendemos que el Ministerio del Interior está sobrepasado. Hacemos responsable de nuestra situación al presidente de la República, porque esto es consecuencia de una mala política económica; es consecuencia de la falta de trabajo, de los bajos salarios, de la mala educación, de niños cada vez más pobres y librados a la calle... Por eso entendemos que el reclamo tiene que ser a la Casa de Gobierno, buscando un cambio de política. Mientras el presidente de la República salva bancos, salva financieras, se sigue cerrando fuentes de trabajo, siguen bajando los salarios, a las consecuencias las pagan los trabajadores; el resultado es la muerte de trabajadores.

EC - Usted alude a que la delincuencia, la violencia, serían consecuencia de la política económica.

JCB - Sin ninguna duda: todo tiene un vértice, la cabeza es el gobierno. En cualquier país el que marca las pautas es el gobierno. Un gobierno que apuntara a lo popular abriría fuentes de trabajo, mejores salarios, mejor estudio, más escuelas, pero cuando hay un gobierno de corte netamente capitalista, neoliberal, que apunta a salvar bancos y financieras, ataca directamente a la clase trabajadora.

EC - Ayer hubo un taximetrista muerto como consecuencia de un asalto. ¿Desde cuándo no había muertes en el gremio?

JCB - El último fue el año pasado, cuando un compañero fue atacado desde el lado de afuera del auto y perdió la vida. Ayer me preguntaban si la mampara había sido efectiva, y una vez más decimos que sí pero hoy la delincuencia ataca por afuera y agrede por afuera.

EC - Más allá de estos casos de muertes, ¿cuántos asaltos a taxis se dan habitualmente?

JCB - Día a día las rapiñas están sin ninguna duda entre 15 a 20.

EC - ¿15 a 20 diarias?

JCB - Sí, señor; sí, señor.

EC - Porque según otras fuentes, las cifras mensuales son de 40.

JCB - Son 15 a 20 rapiñas diarias al mediodía. Hoy están ocurriendo rapiñas entre las 12 y las 13 horas, cosa que no sucedía. Es algo que ha descontrolado todo. Usted preguntaba que por qué no recurrimos al Ministerio del Interior, pero al Ministerio se le han escapado las cosas de las manos: no hay seguridad en las calles. Si a la hora 13 rapiñan taxímetros en cualquier zona de Montevideo (no le estoy hablando de una sola: en cualquier zona de Montevideo) es porque no hay seguridad en las calles. Uno escucha que hay más patrulleros en las calles, y quisiera saber dónde están. Siguen los gastos pero no se ve la eficacia. Por eso entendemos que el reclamo no es al Ministerio del Interior sino al presidente de la República, que es quien realmente tiene la solución a la crisis.

EC - Volvamos a esas cifras, porque un colega suyo, Gustavo López, dice al diario El País de hoy que hay 40 rapiñas mensuales denunciadas.

JCB - No, no. Tal vez se haya malinterpretado lo de Gustavo, porque se ha superado ampliamente las 40. Lo que hay es que muchas veces el taximetrista no hace la denuncia porque es perder tiempo, y desgraciadamente la prensa recoge la información cuando ocurre lo que le sucedió al compañero Silvera, que perdió la vida.

EC - ¿Cuál es la solución, entonces? Por un lado, ustedes exigen una reunión con el presidente de la República para discutir el conjunto de la política económica, pero suponiendo que hubiera disposición a atender ese planteo sería un proceso largo. En el plano estricto de la seguridad, ¿cómo prevenir una cantidad tan grande de rapiñas como la que está mencionando?

JCB - Por un lado, sacar el dinero de los taxímetros: tratar el tema de las tarjetas de cobro, pero tratarlo en serio. Una tarjeta a la que tenga acceso toda la población, y no alguna tarjeta en particular, como se está hablando.

EC - Hay empresas de taxímetros que están aceptando tarjetas.

JCB - Sí, pero no toda la población accede a alguna tarjeta en particular.

EC - Usted se refiere a tarjetas magnéticas, como las de los teléfonos, por ejemplo.

JCB - Correcto, que se use generalizadamente y esté al alcance de toda la población. Pero a su vez eso también atacaría un punto muy importante que ha sido de constante lucha para nuestro gremio: la libreta diferencial en el chofer de taxímetros, lo que conllevaría que los patrones tuvieran registrados a todos los choferes. Porque ocurre hoy que muchos están "en negro", y están a la buena de Dios: trabajan por nada, no perciben jubilación...

EC - Cuando hablan de tarjetas para el pago de los viajes, no sólo proponen eliminar el uso de dinero durante la noche sino todo el día. Porque si hay rapiñas en pleno mediodía.

JCB - Sí, sí: eliminar el dinero durante toda la jornada.

EC - ¿Qué pasa con esa idea?

JCB - Se está trabajando, pero hay intereses... La patronal busca acordar con una tarjeta de crédito, y nosotros queremos una tarjeta que abarque a toda la población: que se pueda ir a un comercio y comprarla por $50, $100, lo que usted pretenda usar.

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón