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"HABÍA UN MOVIMIENTO ANTI GRUPO DE LA UNIFICACIÓN COMO BANQUERO"
El Grupo Moon rompe el silencio: "No se puede asumir el riesgo infinito"
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Vicepresidente del ex Banco de Crédito, Elizeu Christiano Netto: Contratamos a ING para contrarrestar un movimiento en los servicios del Banco Central, que siempre tuvieron al Crédito como un banco fuera de normas. Se buscó una solución con una empresa internacional que ya trabajó para el Estado analizando al Banco Comercial, y la contestación de ING fue exactamente qué debíamos hacer y qué grado de riesgo corremos. Ese grado de riesgo pasó a ser tan grande que en determinado momento se definió como infinito. El BCU cambió de criterio entre los 80 y la actualidad: preponderó lo político.
EN PERSPECTIVA
Lunes 10.03.03, 08.30.
EMILIANO COTELO:
El gobierno decidió liquidar el Banco de Crédito (BDC) el viernes 28 de febrero, justo antes de la semana de Carnaval. Desde entonces el Grupo Moon, accionista minoritario de la institución, se mantuvo en silencio. Después de varios meses de una comunicación fluida con los medios, en estos días el Grupo de la Unificación limitó su contacto con la opinión pública a trascendidos publicados por el diario Ultimas Noticias, de su propiedad.
Oficialmente sólo se sabía de la existencia de un compromiso genérico del grupo inversor en cuanto a "colaborar" con la salida que viene diseñando el equipo económico. Pero, en cuanto a los detalles en concreto, nada. El viernes al mediodía, en Índice 810, volvió a escucharse la voz del representante del grupo en el directorio del BDC, Elizeu Christiano Netto.
Hoy lo hemos invitado para ampliar aquellas declaraciones. Por ejemplo, cuál es el alcance de este compromiso, de esta "disposición a colaborar".
Usted está cumpliendo cuatro años en Uruguay en estos días.
ELIZEU CHRISTIANO NETTO:
Cuatro años, en los últimos días de enero.
EC - Ingresó al directorio del BDC en febrero de 1999.
ECN - El 3 de febrero.
EC - Comencemos con algunas preguntas sobre lo que pasó en esta semana. ¿Por qué desapareció de los medios de comunicación? No hacía declaraciones. ¿Por qué no había manera de localizarlo?
ECN - La primera medida del grupo fue un contacto a nivel ministerial y de colaborar en este período de negociaciones entre el ministerio y los ahorristas. Quizás nuestra salida a la prensa podía crear alguna turbulencia en esas negociaciones. Ese fue el motivo de que no habláramos hasta el jueves.
EC - ¿Y por qué reaparece ahora, sobre el fin de semana?
ECN - Exactamente porque ya se tornó público, a través del propio ministro cuando declara en una comisión del Senado lo que se estaba tratando con nosotros. Básicamente se trataba de un pedido del señor ministro de renunciar a los depósitos que había en el banco, lo que ya hicimos.
EC - El pedido básico del ministro fue la renuncia a los depósitos.
ECN - Exactamente.
EC - Ese fue el punto principal.
ECN - Sí; ese fue el punto principal.
EC - Si mi memoria no está mal, son depósitos por unos 30 millones de dólares.
ECN - Un poquito menos, 27.
EC - Y ustedes atendieron ese planteo.
ECN - Sí, atendimos.
EC - ¿Qué significa eso?
ECN - Primero, un acuerdo con el señor ministro para poder negociar con los ahorristas una forma de pago. Sería el primer punto: el grupo renuncia a los depósitos que tiene.
EC - ¿Esto significa que ustedes no van a cobrar nunca ese dinero, o que dejan para el final del proceso de liquidación la eventual recuperación de ese dinero?
ECN - No lo vamos a cobrar.
EC - Pero tengo entendido que hay otros puntos sobre la mesa.
ECN - El segundo punto sería el pago de la deuda del grupo más los vales, el pago de unos 64 millones más vales por 15, más una diferencia de la empresa Micropool, que es un activo del banco donde se encuentran diversas empresas que no tuvieron capacidad de pago; el banco garantizó esto con bonos del tesoro estadounidense.
EC - Usted acaba de desglosar los créditos del BDC con empresas del Grupo Moon en diferentes tipos. Hasta ahora esos créditos habían sido presentados en un único paquete; se decía que los créditos del banco a empresas del grupo totalizaban unos 90 millones de dólares.
ECN - Más o menos.
EC - Pero usted hacía alguna distinción. ¿Cómo es eso?
ECN - 64 millones de dólares -era 62, pero hay intereses que considerar, creo que hoy estamos hablando de 64- en valores relativos de empresas del propio grupo, que tiene sus créditos históricos en el banco, cosas que vienen de la década de los 80. En segundo lugar hay una empresa, Créditos SA, que pasa a ser propiedad del BDC desde 1996 o 1997 (yo no estaba; conozco la cosa por documentos, pero como no estaba no sé precisar exactamente el año) por una situación de iliquidez total.
EC - Era una empresa del grupo Soler.
ECN - Creo que en esa época lo era; no conozco los detalles porque no estaba aquí. Hoy esa empresa responde por el nombre Riloman.
EC - ¿Cuál es el caso concreto de ese crédito?
ECN - Son 15 millones de dólares y el Grupo de la Unificación entra en carácter de avalista. En el 1996, 1997, las garantías que el grupo tenía sobre sus deudas eran muy superiores a los valores de las mismas; en ese momento esa empresa, que prácticamente tuvo problemas en el BDC, quedó grado 5, sin garantías. Y como forma de evitar esa previsión el Grupo de la Unificación entra en carácter de avalista.
EC - ¿Para evitar la previsión? No sé si el oyente no familiarizado con los temas bancarios entiende a qué se refiere. ¿Por qué tuvieron que dar ese paso?
ECN - Normalmente, cuando un crédito pasa a ser grado 5 no tiene garantías, tiene que ser lanzado a pérdida. Entonces, para evitar ese lanzamiento a pérdidas, el grupo avala ese crédito, busca una solución a más largo plazo, hasta que la empresa se recupere.
EC - Fue parte del paquete por el cual el grupo terminó tomando el control de Crédito SA.
ECN - El grupo nunca fue dueño de Créditos SA.
EC - ¿A quién pertenece actualmente?
ECN - Al BDC.
EC - Usted entendía necesario hacer esa precisión, decía que en el caso de Riloman SA son avales. ¿Ocurre lo mismo con algún otro crédito?
ECN - Hay otra parte, que se llama Micropool, que es una suma de empresas más chicas, algunas de ellas del mismo grupo anterior.
EC - Del grupo Soler.
ECN - De ese grupo; Centro Eléctrico y otras.
EC - Supongo que usted hace estas declaraciones para achicar el monto de los créditos del BDC a empresas del grupo Moon estrictamente hablando. Este es uno de los temas que han estado en debate: la excesiva exposición que tenía el banco con el grupo Moon. Está en discusión, incluso, si eso era legal o no. Su declaración apunta a bajar de 90 a 65 millones de dólares el crédito con empresas del propio grupo.
ECN - No, no: el grupo reconoce los 90 como avalista, pero no como su deuda. En la opinión pública eso fue muy mal expuesto, que el grupo Moon utilizó los créditos, lo que no es exactamente verdad; son créditos históricos, de los años 80, vinculados incluso a la propia entrada del Grupo de la Unificación al BDC.
EC - Eso en cuanto a los 65.
ECN - Sí.
EC - Los otros 25 son avales; ¿cuál es la diferencia? ¿Por qué no son lo mismo una cosa y otra? ¿No estamos aquí haciendo una disquisición técnica que no tiene demasiado valor?
ECN - No. En la primera parte, las deudas del grupo son cosas hechas por empresas del grupo, básicamente la construcción del hotel, más alguna cosa muy chica de otras empresas. El 95 por ciento es la construcción del hotel, las demás son empresas que trabajaban dentro del BDC. Este, por un motivo que no tengo muy claro, fue autorizado por el propio Banco Central (BCU) a establecer límites mucho más grandes que los que el patrimonio podría dar; es el caso de la empresa Riloman.
EC - En definitiva usted está diciendo que esos 25 millones de dólares, en los que el banco está como avalista de créditos de empresas como Riloman, ¿fueron operaciones impulsadas desde el gobierno?
ECN - No sé si impulsadas, pero aceptadas por el BCU, completamente fuera de las normas; incluso salteando el número máximo que se puede dar de préstamos a un solo grupo.
***
EC - Sigamos hablando de lo que el grupo asume como compromiso en relación a esos 90 millones de dólares que se dividen en esas dos partes que usted explicaba recién. Concretamente, ¿el grupo Moon va a pagar todo ese dinero?
ECN - Todo. Hay un compromiso con el ministro de que eso será pagado.
EC - Así que, en primer lugar, no va a haber quitas en esa cifra.
ECN - No.
EC - Paga el 100 por ciento de los 90 millones de dólares.
ECN - Exacto.
EC - ¿Entonces lo que se está negociando es cómo se va a pagar esa deuda?
ECN - Exactamente.
EC - Se está discutiendo plazos...
ECN - Plazos, intereses, todo eso.
EC - ¿Qué se puede adelantar en ese sentido?
ECN - Prácticamente nada. Sinceramente, no estoy atendiendo ese tipo de negociación. Sé que el grupo está hablando con el ministro, pero escuché que está en muy buen camino.
EC - Por ejemplo, se ha hablado de que ustedes podrían terminar pagando en seis años.
ECN - Es lo que yo escuché, también. O menos. Se ha hablado de seis, de cuatro, de tres... Escuché más de una teoría. Con intereses diferentes; escuché algo sobre eso, también.
EC - Dentro de esos esquemas que se están manejando hay dos capítulos especiales: uno, lo que tiene que ver con Riloman SA, a los efectos de que la empresa pueda, eventualmente, continuar operando.
ECN - Normalmente, cuando uno paga una cuenta en carácter de avalista, luego liquida el derecho de ejecutar eso contra el deudor. O sea, el Grupo de la Unificación, como avalista, paga la deuda y después iría a accionar a Riloman para que pague exactamente lo que el grupo pagó. El grupo renunció a eso porque esa empresa tiene hoy 307 funcionarios; renunciando a ese derecho el Grupo de la Unificación crea las condiciones necesarias para que esa empresa pueda continuar, garantizando, por lo tanto, 307 puestos de trabajo.
EC - Así que eso lo asume el grupo Moon directamente; ¿en qué términos? ¿El pago de esa parte de la deuda forma parte de ese mismo esquema que se está negociando?
ECN - Igualito.
EC - ¿O se produciría en otro momento, con características especiales?
ECN - No, no; yo separé en tres grupos, pero la forma de pago es igual, está junto; la forma de pago es para los 90 millones.
EC - Por otro lado, también ha trascendido que el grupo podría adelantar un tramo de esas deudas, una parte de los 90 millones de dólares, en un pago en efectivo a un plazo relativamente corto, de modo de que, a su vez, se les pueda devolver el dinero a los ahorristas de montos más pequeños, por ejemplo para que se pueda hacer un pago de 5.000 dólares a todos los ahorristas, cuando una enorme mayoría de ellos anda por esos montos. ¿Eso es posible, es viable?
ECN - Anteriormente dije que yo no estoy exactamente en esas negociaciones; también escuché eso y escuché también internamente, en el grupo, que hay una buena disposición para negociar eso.
EC - ¿En qué tipo de plazos se traduce esa buena disposición en este caso concreto?
ECN - No sé exactamente, estoy completamente fuera de esa parte, no estoy participando de esa negociación. Pero estoy seguro de que las cosas están caminando bastante bien.
EC - Usted dice "yo estoy completamente afuera".. Permítame una pregunta personal: usted era vicepresidente del BDC; ¿qué es hoy: un desempleado?
ECN - Soy.
EC - ¿Qué relación tiene con el grupo? ¿Va a participar dirigiendo o codirigiendo alguna otra de las empresas? ¿Qué tipo de responsabilidades tendrá, en Uruguay, de ahora en adelante?
ECN - Estoy tratando exactamente ese tema en estos días.
EC - ¿En principio se queda en Uruguay?
ECN - Como persona, sí. Como Elizeu Christiano, me quedo en Uruguay.
EC - Ya lo ha resuelto.
ECN - Es un problema familiar: me quedo.
EC - Si va a tener o no vinculación con el grupo, se sabrá en estos días.
ECN - En los próximos días lo vamos a saber.
***
EC - Recapitulando, usted decía que, efectivamente, han asumido un compromiso ante el gobierno de pagar el 100 por ciento de esos 90 millones de dólares, que son créditos o avales que el grupo Moon tenía en el propio BDC. No aclaró en qué plazos se va a producir ese pago; dijo que eso está siendo negociado, y dijo también que el grupo renuncia a un depósito que tiene en el BDC por 27 millones de dólares.
Una pregunta que quizás sea obvia, pero que me gustaría hacerle es: ¿por qué asume estos compromisos?
ECN - Nosotros tenemos un 49 por ciento, el Estado tiene 51. El Estado aportó una cantidad bastante importante durante el período del primer semestre, cuando hubo una corrida importante en el sistema. Aportó U$S 60 millones, más o menos; después aportó U$S 82:5 cuando el banco ya estaba cerrado, para pagar las cajas de ahorro y los depósitos a la vista en forma general y ya había aportado U$S 25 millones en la fusión. Eso está sumando 170 millones de dólares como aporte total del Estado. Nosotros queremos equilibrarlo, el grupo ya había colocado por aproximadamente 148, 150 millones de dólares en carácter de capitalizaciones; si sumamos estos 27 andamos en los 180, números más o menos equiparados con lo que el Estado colocó en toda la historia de este banco.
EC - Ese es un fundamento para renunciar al depósito.
ECN - Ese sería el fundamento básico. Queremos participar de forma propiamente igualitaria, 51 y 49.
EC - Usted dice que en la historia del banco el grupo termina poniendo en el orden de los 180 millones de dólares, de esta manera. También asume el compromiso de pagar los créditos. ¿Por qué paga el 100 por ciento? Podría pagar menos; en una liquidación estas cosas ocurren.
ECN - Es un acuerdo con el gobierno nacional a través del Ministerio de Economía. Esa es la idea.
EC - El BDC llegó a esta situación con un patrimonio negativo de 200 millones de dólares, cifras provisorias al mes de enero. Un agujero que nadie estuvo dispuesto a llenar y que, por lo tanto, determinó la resolución del gobierno de ir a la liquidación. ¿Hay que entender, de lo que veníamos conversando antes, que el grupo también asume su cuota de responsabilidad? Usted lo decía recién: "Estamos poniéndonos a la par del Estado en la responsabilidad". Eso en cuanto a lo que ocurrió hasta el feriado bancario, por decir algo; hasta el momento en que el banco se volvió inviable; pero ¿cómo analizan el período desde el feriado bancario en adelante, estos siete meses intentando resucitar al BDC?
ECN - Es toda una historia. Creo que en estos siete meses vivimos el equivalente a siete años normales. Cuando volvemos a hablar de lo que pasó el día... qué sé yo, 29 de julio, parece que hace años que pasó eso. Me gustaría hablar de un poquito antes del día 29 de julio, quizás de un mes antes, cuando hacía poco había cambiado la Superintendencia de Bancos y la Superintendencia nueva hizo un análisis del BDC. El BDC, desde su fusión, tiene problemas patrimoniales complicados.
EC - ¿O sea desde cuándo?
ECN - Desde su fusión con el Banco Pan de Azúcar. A raíz de eso el banco vivía sobre un plan de acción, había un activo nominal que debía ser pagado en un período de ocho años...
EC - No entendí; ¿podría explicarlo un poco mejor?
ECN - El banco tenía un déficit patrimonial, que era consecuencia de la fusión. Dentro de ese criterio fue creado un plan de acción, un plan de recuperación patrimonial. En ese plan de acción teníamos un período de ocho años, aprobado cuando era presidente del BCU don César Rodríguez Batlle. Aparentemente la nueva Superintendencia no acepta ese plan.
EC - Cuando usted habla de la nueva Superintendencia, ¿se refiere a la que asumió el año pasado?
ECN - A quien reemplaza a Fernández Becchino, a Barrán. Aparentemente esta Superintendencia analiza el plan de acción y pide que el banco sea capitalizado; la solicitud fue hecha a los accionistas, es decir a la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND) y al Grupo de la Unificación. Por un acuerdo firmado en la fusión el grupo mayoritario, la CND, nos llama comunicando que iba a capitalizar y que si nosotros acompañábamos en el paso tendríamos los mismos porcentajes.
EC - ¿Cuándo fue esto?
ECN - Fue en los primeros días de julio.
EC - Antes del feriado bancario.
ECN - Por lo menos cuatro semanas antes. La idea del grupo era acompañar, quizás no 51-49, quizás 60-40... En esa época ese era, más o menos, el número que estábamos estudiando.
EC - En esa proporción 60-40, 60 sigue siendo del Estado.
ECN - Sí.
EC - O sea que el esquema que se manejó, dice usted, en el mes de julio, era que el banco continuara siendo de mayoría estatal...
ECN - Exacto; de mayoría estatal, pero que continuara la participación del grupo, con el propio grupo capitalizando. En ese período se le solicitó al grupo que de alguna forma depositase algo, por la gran corrida que estaba habiendo. El grupo depositó (son esos 27 millones que mencionábamos) para ayudar en el sentido de la falta de liquidez por la corrida. Antes de llegar a un acuerdo sobre esa capitalización, llega el feriado bancario; hay cambios, incluso la negociación en el sentido de capitalizar, que era una cosa con el entonces presidente de la CND, que después pasa a ser presidente del BCU...
EC - El economista Julio de Brun.
ECN - Él mismo nos comunica, si no me equivoco, entre el 3 y el 4 de agosto, ese fin de semana, un viernes, que la CND ya no podría capitalizar, que se estaba firmando una carta de intención...
EC - El criterio pasaba a ser distinto: el Estado no ponía un peso más en un banco.
ECN - El Estado no pondría ni un peso más en ningún banco, estaba prohibido por esa carta de intención. Por ese mismo contrato nosotros éramos los primeros optantes para la capitalización: "Para tener ese derecho, analicen si quieren continuar o no". Ahí pensamos continuar.
Teníamos una conciencia bastante clara de que los plazos eran muy importantes. Un banco cerrado... ya era de la conversación con los negociadores del grupo, incluso utilizábamos el término "la heladera está desenchufada"...
EC - ¿Es correcto que el costo de mantener suspendido al BDC fue de dos millones de dólares por mes?
ECN - Sí.
EC - Es un dato que publicó ayer el diario El País y que quería corroborar con usted. O sea que durante estos siete meses el BDC costó 14 millones de dólares.
ECN - Casi 15.
EC - Usted decía que tenían claro que había una cuestión clave que eran los plazos.
ECN - Los plazos; teníamos que hacer eso rápido. Dentro del país no tenemos autoridad para una definición tan grande como esta. Nuestra gente se trasladó a Washington, con negociadores y se llega a la conclusión, por un problema de imagen, de reabrir el banco y colaborar con el Estado uruguayo.
EC - ¿Cuál era ese problema de imagen?
ECN - Que el Grupo de la Unificación tenía su nombre y por ser el primer optante, quería hacer valer esa opción, por todos los trabajadores que había. Fue un tema en esa época muy bien colocado, queríamos reabrir con todos los empleados, y como estábamos ante una plaza insegura, un mercado bastante difícil, abriríamos como estábamos, porque habíamos cerrado hacía pocos días, pero con la condición de establecer ratios a los seis meses, un año y dos años, y, si fuera necesario, recortaríamos personal. O sea, hacer una cosa dinámica. Lo propusimos en los primeros días de agosto.
EC - La idea era que ustedes capitalizaran en sociedad con los ahorristas, que el grupo Moon quedara como accionista mayoritario...
ECN - Pero en esa época continuaba la CND: era una sociedad de tres.
EC - Usted dice que en un primer momento todavía quedaba la CND. El Estado no ponía, pero igual quedaba.
ECN - La parte de los ahorristas era la más chica; en esa época hablábamos de 55 por ciento, 25 y 20 por ciento; el mayor era el Grupo de la Unificación, segundo la CND y tercero los ahorristas. Esa fue la primera toma de posición.
EC - En general, en el sistema financiero, nadie veía ese camino como viable. Sin embargo ustedes fueron presentando al BCU diversos planes de negocio, que éste rechazaba porque no cumplían con los requisitos mínimos imprescindibles para asegurar la sustentabilidad del proyecto.
Este es uno de los puntos que la gente se pregunta: ¿por qué ustedes insistían con la idea del salvataje del BDC, pero no terminaban nunca satisfaciendo las exigencias técnicas del BCU? ¿Por qué siempre faltaba; por qué no completaban una fórmula que reuniera los requisitos?
ECN - Es una pregunta muy difícil de contestar. En todo momento nosotros creímos que eso era factible; llegamos a tener acuerdos a nivel de accionistas, o sea que el Grupo de la Unificación por una parte y la CND por otro, representada por el ministerio, prácticamente festejamos la apertura del banco tres veces.
EC - ¿De qué fechas estamos hablando?
ECN - La primera en setiembre, la segunda en octubre y la tercera en diciembre.
EC - ¿Usted dice que llegaron a "festejar" con la CND, que estaban dadas las condiciones para reabrir?
ECN - Sí, sí. Pero llegaba el BCU y siempre había un problema.
EC - Según el BCU, según la Superintendencia de Instituciones de Intermediación Financiera, si cada vez que se llegaba a esa oficina había un problema, era porque no se cumplía con los mismos requisitos que fueron exactamente iguales durante todo el proceso.
ECN - Los requisitos exactamente iguales... No estoy de acuerdo: creo que hubo cambios, incluso de normas en la administración de carteras en ese período. La caída de carteras tenía una velocidad bastante grande y fue mayor por algunos cambios que hubo, algunos específicos para el propio BDC. La cartera va a tener que ir trabajando, en una situación de crisis como ésta, cobrando interés, renovando vales, cambiando cheques... Esas operaciones en el mes de diciembre fueron prohibidas para el BDC, y consecuentemente las carteras cayeron con una velocidad increíble.
EC - Usted dice que ese fue un ejemplo de disposiciones que tomó el BCU que alteraron el proceso.
ECN - Que alteraron la cartera, el número que había que poner por la insuficiencia patrimonial crecía mes a mes. Es más o menos normal. Y también el plan de negocios... Hay una cosa clara: para abrir un banco se necesita una determinada cantidad de liquidez y una cantidad normal de patrimonio; ahí se proyecta, en función del mercado, lo que puede pasar. Ahí pasa al carácter optimista o el pesimista, ya no es un carácter objetivo, ¿qué va a pasar con esa plaza; cuánto vamos a recuperar los depósitos; cuándo vamos a recuperar la cartera? ¿Vamos a cobrar o no? Todo eso a través del mercado. A la hora de analizar estos temas había posiciones diversas; las posiciones del BCU fueron más pesimistas.
EC - Eran más pesimistas que las de ustedes.
ECN - Más pesimistas.
EC - ¿No es lógico que las previsiones del BCU fueran muy estrictas, muy conservadoras? Para el sistema financiero uruguayo iba a ser un gran problema que el BDC reabriera y al poco tiempo tuviera que cerrar. Un escenario como ese iba a tener un impacto negativo en la confianza, en la imagen del sistema financiero uruguayo. El BCU tenía que evitarlo.
ECN - Es un poco difícil contestar una cosa como ésa. Tenemos una plaza que está mucho más cerca de cerrar bancos que de abrir, hoy específicamente.
EC - ¿A qué se refiere?
ECN - A que el mercado se achicó, quedó mucho más chico. Entonces las dificultades eran realmente mayores, pero nosotros, cuando pensamos en reabrir el banco, queríamos poner ratios de limitación del propio tamaño del banco en función del tiempo. Pero abrir, para que el gran enemigo de todo este proceso, que era el tiempo, no se alargase. Pasó exactamente al revés, se alargó el tiempo hasta que el banco quedó inviable.
***
EC - En la decisión final del grupo Moon de no pasar a ser accionista mayoritario, esa decisión que ustedes comunicaron al gobierno a fines del mes de febrero, ¿cuánto hay de consideraciones técnicas, por ejemplo a partir del informe de la consultora ING que ustedes contrataron y que les dio números más grandes que los que habían previsto en un principio en cuanto a lo que había que poner, y cuánto de consideraciones políticas, por ejemplo a partir, no sé, de haberse sentido perseguidos u obstaculizados por el BCU?
ECN - Voy a alargar un poco esa contestación. Creo que el BDC, por una serie de medidas, desde la participación del Grupo de la Unificación en 1982, hasta hoy, pasó por criterios en que los servicios técnicos del BCU nunca estuvieron muy de acuerdo. Desde el acuerdo en que el Grupo de la Unificación se quedara con el banco ya hubo acuerdos políticos contra normas.
EC - ¿Cómo fue ese momento en que el grupo se queda con el BDC? ¿A qué se refiere?
ECN - El grupo nunca fue banquero en la historia, pero tiene un origen asiático. En Asia, en esa época, la cosa más normal que había -hasta hoy hay- era que los accionistas de los bancos podían utilizar plata de su propio banco para sus negocios. El grupo trae una plata para hacer un hotel cinco estrellas, depositó en un banco y la solución para conseguir esa plata y construir ese hotel terminó siendo una financiación del propio banco para poder hacerlo. Esa plata, que fue depositada para hacer el hotel, se tornó capital del banco. Entonces quedó en una situación bastante difícil: hay una autorización del BCU en el sentido de que el grupo use esa plata; y la otra parte, de origen asiático, a ellos les pareció muy normal. Cosa que realmente, en occidente, no era muy normal en esos años.
EC - ¿Usted dice que el grupo se queda con el BDC a instancias de las autoridades?
ECN - Fue una negociación, una negociación en que el grupo entró con 60 millones para hacer un hotel cinco estrellas en forma de depósito y salió dueño del banco con derecho a agarrar créditos hasta por 75 millones de dólares.
EC - Como parte de un salvataje del banco.
ECN - Creo que sí, ¿no? No sé, yo no estaba en esa época, no puedo analizar exactamente qué pasó, pero eso pasó por diversas administraciones bancocentralistas, por diversos gobiernos, y prácticamente pasa a ser contrastada políticamente hoy. Antes era contrastada sólo técnicamente. Sería todo un tema: el BCU siempre vio al BDC de una forma quizás no prolija, exactamente por eso; y más tarde hay una intervención, años 1991, 1992, yo tampoco estaba aquí, pero a través de preguntas, hubo otros problemas, hay más de una capitalización, hubo capitalizaciones diversas, hubo una fusión, el BDC entró en un patrimonio positivo y el Banco Pan de Azúcar con patrimonio negativo... Es un banco que siempre estuvo, por problemas políticos, en una situación antitécnica. Eso es histórico.
EC - Si entiendo bien, ¿desde el Estado se pidió al grupo Moon que "diera una mano" en distintos momentos por la vía del BDC y, como compensación de ello, se toleraba al BDC violaciones a la norma bancocentralista, por ejemplo? ¿En resumen es eso lo que ocurrió durante todos estos años?
ECN - No sé si fue exactamente de esa forma, quizás tú estés hablando con normas actuales y las técnicas tienen un valor mucho más fuerte que los políticos. Anteriormente los políticos tenían una fuerza mucho más grande que los técnicos. Hay dos grandes cambios en el BCU: uno sería más o menos de mayo o junio, cuandoentra una Superintendencia de Bancos altamente técnica; el segundo es después del feriado bancario, cuando ya hay que cumplir con normas incluso fondomonetaristas, que no había antes; entonces se vuelve más técnico todavía. Es muy difícil para mí analizar lo que pasó en los años 82, 91, 98 con el carácter técnico de hoy.
EC - Mi pregunta era: ¿por qué ustedes terminan tomando la decisión de no capitalizar y no asumir como accionista mayoritario? ¿Hay un análisis político también?
ECN - En mi opinión, hay. Voy a explicar más o menos a qué nivel: cuando nosotros contratamos ING era para contrarrestar ese movimiento anti Grupo de la Unificación como banquero.
EC - ¿De dónde venía ese movimiento anti Grupo de la Unificación?
ECN - Dentro del propio BCU. Los servicios del BCU siempre tuvieron al BDC como un banco que siempre estaba fuera de normas. Evidentemente, eso creó una imagen de que el Grupo de la Unificación no era un banquero, como realmente no lo es. El único caso de que el grupo tenga un banco es aquí en Uruguay. Consecuentemente, a raíz de todo este tema, se busca una solución internacional, una empresa que trabajó para el propio Estado uruguayo analizando al Banco Comercial. Nada mejor que ese grupo para estudiar una salida para nosotros y la participación de ellos con nosotros. ING no fue contratada para hablar de lo que se podía hacer, sino de lo que teníamos que hacer para reabrir el banco. Y la contestación de ING es exactamente lo que tenemos que hacer y qué grado de riesgo corremos. Ese grado de riesgo pasó a ser una cosa tan grande que en determinado momento se definió como riesgo infinito. Y, técnicamente, riesgo infinito no se puede asumir. Había una determinada frase del contrato, a nivel de borrador, que decía la postura del grupo ante cualquier situación de capitalización o de liquidez, que era imposible cumplir.
EC - Cualquier necesidad, durante un período de cuatro años, por cualquier déficit patrimonial o de liquidez que surgiese, debía tener una garantía de parte del grupo.
ECN - Exacto.
EC - Eso es lo que usted llama una cláusula de riesgo infinito.
ECN - Hablo de riesgo infinito porque, normalmente, una posición de un banquero cuando abre un banco, lo hace con determinado riesgo y asume esos compromisos. Pero eso no se puede firmar porque, por ejemplo, quiebra todo el sistema bancario; y el BDC sería el único que no quebraría porque sería el único que tendría esa cláusula, los demás no la tienen. Ante eso y toda la situación de que la propia ING, viendo esa cláusula y diciendo que era una condición sine qua non por parte del BCU, sería una cosa imposible. Nosotros anexamos ese trabajo y en una carta le dijimos al ministro que en esas condiciones era imposible. Nos pidió que reanalizáramos el asunto. El señor Shin se va a Boston, se reúne con nuestra gente y vuelve con la contestación, que ahí ya me parece menos técnica y más política, porque va contra el informe de ING: dice "Nos sentimos débiles para abrir el banco, pero en la condición de no ser el principal accionista, continuaremos". Esa fue la conclusión final. Creo que esto es un cambio, no sé si político, pero va contra la mejor técnica, que fue la propuesta por ING: estamos dispuestos hasta eso. La disposición es tan clara, que fue entregada el día 26 y el 28 vino la liquidación y los contactos con el propio ministro en el sentido de hacer la mejor liquidación posible para los ahorristas, los empleados, etcétera.
EC - En esa decisión que finalmente toma el grupo, ¿hay una respuesta a una actitud que ustedes consideran excesiva del BCU? ¿Hay algo de eso en ese análisis político?
ECN - Excesiva en el sentido de no aceptar al grupo Moon como banquero.
EC - ¿De qué manera influyó, si es que influyó, toda la polémica que se dio a fines de enero sobre las nuevas salas de slots que el gobierno aparentemente iba a otorgarle al grupo Moon? Recordemos que Hípica Rioplatense, concesionaria del Hipódromo, suspendió las obras y sólo las reanudó cuando el gobierno le confirmó que a corto plazo no se producirían adjudicaciones y que cuando ocurrieran sería por la vía de la licitación.
ECN - Eso es muy anterior a cualquier crisis del sistema bancario...
EC - Pero ¿el grupo Moon incluía esas salas de slots como parte de una ecuación...
ECN - No, no.
EC - ... que justificaba ir a la capitalización del BDC, ...
ECN - No, no.
EC - ... y al tener ese tipo de información de parte del gobierno entendió que el escenario había cambiado?
ECN - No, no. Son dos cosas separadas, no tiene nada que ver una con la otra. Una se da en febrero de 2002, hay negociaciones del Grupo de la Unificación con el gobierno en el sentido de ampliar, a través de anexos, el casino del Victoria Plaza. Fue muy anterior a la crisis bancaria; quizás por un atraso en esas negociaciones quedó cerca de toda la negociación bancaria. En momento ninguno eso fue realizado, creo que son cosas que en seis meses ya no se tocan más.
EC - Entonces esta polémica no incidió en el desenlace del tema BDC.
ECN - No, no, no. El paro de las obras no tiene nada que ver con decisión del grupo de slots o no. Es un problema interno de Hípica Rioplatense, no tiene nada que ver con nosotros.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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