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EL INSTITUTO CLEMENTE ESTABLE INVESTIGA JUNTO A DEPENDENCIAS UNIVERSITARIAS
Científicos uruguayos detectan nuevas propiedades terapéuticas de la marcela
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Doctor Federico Dajas (Departamento de Neuroquímica del Clemente Estable): Se confirmó la utilidad de la marcela para mitigar los daños del infarto cerebral. Las propiedades antioxidantes de una de sus moléculas orientaron la investigación hacia otras áreas de aplicación: la prevención del envejecimiento natural de la piel y el cuidado frente a los efectos dañinos de la radiación ultravioleta. Un laboratorio - que financió parte de la investigación - venderá próximamente una crema en base a este yuyo.
EN PERSPECTIVA
Martes 01.04.03, 09.11.
EMILIANO COTELO:
Siempre es estimulante conocer los resultados del trabajo de los científicos uruguayos, y más estimulante aún es cuando esas investigaciones descubren el potencial escondido en productos típicos de esta zona del mundo, de nuestro país.
A mediados de 2001 les informamos sobre el descubrimiento de propiedades terapéuticas novedosas derivadas de un yuyo muy característico de nuestros campos: la marcela. El Instituto Clemente Estable había avanzado en la utilidad de la marcela en la reducción de los daños ocasionados por los infartos cerebrales.
En estos dos años las investigaciones continuaron, al punto de que han ido surgiendo nuevas áreas de acción terapéutica para este yuyo, en especial en el cuidado de la piel.
***
Para conocer los resultados de estas investigaciones vamos a conversar con el doctor Federico Dajas, jefe del Departamento de Neuroquímica del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable.
Para comenzar, recordemos cuáles fueron los resultados de aquella primera etapa de investigación, que llevó al grupo que usted encabeza a patentar aquel hallazgo a nivel internacional.
FEDERICO DAJAS:
En aquel momento habíamos hablado del proceso de isquemia en el cerebro y cómo una de las moléculas de marcela podía ayudar. Estas cosas ayudan a ver lo lento que es llegar a conocimientos firmes.
EC - ¿Exactamente cómo era la ayuda?, ¿de qué manera incidía esa molécula tomada de la marcela reduciendo los daños de un infarto cerebral?
FD - Suponemos algunos mecanismos, pero todavía no los tenemos en claro. Lo más importante para nosotros era confirmar el efecto, que fuera realmente así. Nos llevó bastante tiempo, incluso llegamos a contar las neuronas para asegurarnos de que realmente sobrevivían; y lo vimos.
Eso avanzó, ahora está en prensa para ser publicado en el extranjero. Además eso generó expectativas esperables en personas que tienen un familiar enfermo. El objetivo era contar que eso sigue, que se ha confirmado a nivel experimental y que estamos camino de la clínica, pero ese es un camino todavía largo.
EC - Recordemos que no se trataba de reducir los efectos ya producidos por un infarto cerebral; aparentemente ustedes estaban estudiando la posibilidad de que ante un infarto cerebral la administración de algún producto derivado de la marcela a tiempo, en un determinado lapso posterior al comienzo del infarto, redujera los que iban a terminar siendo los efectos de ese infarto cerebral.
FD - Claro, hemos aprendido ese “a tiempo”, cuanto más temprano mejor, pero siempre hay un “a tiempo”, porque si una arteria se tapa hay toda una zona de muerte: es como una cicatriz aguda, como si le dieran un golpe, peor que si le dieran un golpe. Alrededor hay un área de reacción; entonces siempre hay posibilidades de actuar sobre esa área de reacción. Sobre el foco es muy difícil porque, sin oxígeno, sin sangre, sin glucosa, las neuronas mueren. Pero alrededor de ese foco siempre podemos hacer algo. Cuanto más temprano, mejor.
EC - Usted decía que en ese momento se había logrado verificar que, en el caso de la administración de ese extracto proveniente de la marcela por la vía de la inyección a la media hora de producido un infarto cerebral, se reducían en un 56 por ciento o más las lesiones que iban a tener lugar.
FD - Así es. Y ahí empiezan a aparecer los límites, porque corrimos esa aplicación a las cuatro horas y el efecto es mucho menor. Es como en todo: la cuestión es actuar lo más temprano posible. Incluso estamos en el diseño del estudio clínico y el objetivo es poder aplicar esta molécula apenas el paciente ingrese a emergencia y se haga el diagnóstico. No vamos a empezar ahora: lograr la preparación para uso humano es difícil. Posiblemente en otros medios sea más fácil, pero es un gran desafío aquí: tenerlo pronto, seguro, que sea eficiente. En cada paso eso nos exige chequearlo, comprobarlo a nivel experimental.
EC - ¿Cuánto tiempo estiman que ese desarrollo podría demandarles?
FD - Con ustedes trato de ser optimista: digamos que un año y medio.
EC - Tenemos que esperar un año y medio todavía para ver los resultados concretos. ¿Paralelamente, el mismo desarrollo se está trabajando en otros países del mundo, en otros laboratorios a partir de la patente que ustedes registraron?
FD - No, no; estamos estableciendo colaboraciones para estudiar los mecanismos, pero a nivel clínico no. Todavía no hay nada, también sería el primero.
EC – Pero, mientras tanto, surgieron otros frentes de investigación.
FD - Claro, es eso que tiene la ciencia. Como uno se está preguntando continuamente, responde una pregunta y aparecen otras, no sabe bien dónde puede terminar. Apareció en el camino esta actividad; una de las razones por las cuales actúa en el cerebro es la capacidad antioxidante de esta molécula que además está en la marcela. Esta capacidad antioxidante podría tener otra utilidad.
EC - ¿Por ejemplo?
FD - Puede ser a nivel general, por ejemplo cuando usted toma el té; esa es una posibilidad. Pero también apareció la posibilidad de aplicarla en piel.
EC - En la piel.
FD - Comenzamos el estudio y en el camino aprendimos más sobre marcela, realmente aprendimos bastante. Descubrimos que la marcela tiene un perfil único, porque esta molécula quercetina es una de otras primas hermanas muy parecidas. De esas primas hermanas hay varias en muchas plantas, pero la marcela tiene un grupo de moléculas que son únicas, que además de ser antioxidantes protegen a las células.
EC - A su vez, creo que ustedes habían trabajado en base a una variedad de marcela, la más clarita.
FD – Esa es otra de las cosas que hemos aprendido en este tiempo: estábamos trabajando con una que tenía menor actividad. Como nos movimos más hacia la marcela mientras avanzamos en la quercetina, vimos que ese efecto en el cerebro también se lograba con marcela, pero con dosis altas. Entonces teníamos que buscar una marcela que fuera más rica en esas moléculas; esto es parte de la investigación. Descubrimos que farmacológicamente la amarilla es mucho más rica, más activa como antioxidante (incluso la gente nos lo decía) que la más blanca. Y hay una blanca-blanca que tiene muy poquito.
EC - De modo que la marcela más potente desde el punto de vista terapéutico es…
FD - La amarilla. La amarilla bien florecida, cuanto más amarilla mejor. Eso tiene que ver, el momento de la colecta tiene mucho que ver.
EC - Ah, estaba aquella tradición que decía que había que recolectarla en Semana Santa… ¿Cómo era?
FD - Sí, en Viernes Santo.
EC - No es casualidad.
FD - No, no es casualidad. La gente, con el tiempo, ha aprendido algo. Quizás este año no se dé porque Semana Santa está más retrasada y quizás ya tengamos una alta actividad desde ahora. O sea que antes de la floración hay un gran pico de actividad. Se da cuenta que hemos ido aprendiendo qué marcela usar y cómo usarla; hemos aprendido que no todo es igual. En aquella entrevista usted me decía “mire que la de acá o la de allá es más rica”; yo pensaba que no podía ser así, sin embargo lo comprobamos. Por ejemplo, la de Rocha es mucho más rica que la de Tacuarembó o la de Durazno. Eso indica lo que es la biodiversidad; uno puede ver esos cambios en un país como Brasil, que es enorme, pero en un país tan chiquito como Uruguay hay cambios químicos en las molécula que expresan las plantas en 300 quilómetros.
EC - En definitiva, con todas estas precisiones que usted ha ido formulando sobre cómo afinar la puntería, a qué tipo de marcela recurrir, ¿qué pudieron averiguar en el caso concreto del tratamiento de la piel?
FD - Ya pasamos al primer uso humano, un uso concreto en lo cotidiano de la gente. Lo primero era demostrar que no es tóxica, que no causaba mal. Se ve que esa es una característica propia de la marcela, no es tóxica para nada: la probamos en dosis muy altas durante largo tiempo, seis meses, y no vimos ningún efecto tóxico. Fue la primera cosa, que nos dio confianza para plantear la otra etapa.
Estamos sometidos a radiaciones ultravioletas permanentemente, sobre todo en verano; todavía andamos al sol, nos olvidamos y nos exponemos… Entonces la pregunta era: ¿la marcela ayuda a detener la producción de esos radicales libres que provoca la radiación ultravioleta? Y efectivamente es así; es el otro descubrimiento de este tiempo.
EC - Usted está hablando de antioxidantes, de radicales libres… términos un poco técnicos. Traduciéndolos sencillamente, ¿qué es lo que averiguaron, lo que confirmaron con la marcela? ¿Cuál es el efecto sobre la piel?
FD - La radiación ultravioleta del sol es una oxidación: activa moléculas de oxígeno, las deja activas y reaccionan con el núcleo de la célula y provocan lesión de las células de la piel. Esa paulatina muerte de células va dando una piel más seca e incluso arrugas, con el tiempo. Hay un proceso natural, además. La marcela contribuiría a detener o enlentecer ese proceso.
EC - Tanto el derivado de la exposición al sol, como el envejecimiento natural de la piel.
FD – Exactamente: ese es el descubrimiento nuevo.
EC - ¿Cómo se consolida después una crema en base a la marcela?
FD - Claro, porque a su vez hay que lograr una preparación. De vuelta, me gustaría mencionar el trabajo conjunto. La marcela que utilizamos es del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA), de la estación de Las Brujas. Ellos han plantado marcela, la tienen plantada y son quienes nos la proveen. Para todos estos estudios hemos utilizado la marcela de ellos.
Lo otro es que la Facultad de Química preparó la crema, porque eso implica hacer un extracto de marcela, un extracto muy particular. Hasta el olor de la marcela puede ser muy fuerte si usted se lo pone en la piel, entonces hay que crear un extracto que tenga poco olor. Uno podría pensar “la marcela es la misma, puede ir en un comprimido”, pero no: cada preparación tiene su particularidad. Para la piel tiene que ser una crema preparada de acuerdo a determinadas normas. Eso lo hicieron los colegas de Química y nosotros hicimos la parte farmacológica.
EC - ¿O sea?
FD - Testearla efectivamente. Teníamos unas lámparas que dan radiación ultravioleta, entonces probamos si ayudaba efectivamente. Lo bueno es que hasta el Hospital de Clínicas participó esta vez, porque había que hacer estudios de bioquímica y de patología, que hicieron ellos. O sea que realmente es un grupo de gente que al final terminó en esto, que es una crema que ahora va a comercializar un laboratorio que contribuyó en parte del proceso.
EC - El laboratorio Greenlab, que donó fondos para financiar parte de la investigación y, como contrapartida, recibe los derechos de comercialización.
FD - Sí. Ahora la comercializará. Los investigadores llegamos hasta acá; demostramos la seguridad, demostramos la eficiencia, es un producto seguro. Ahora corre por cuenta de la comercialización para que llegue a la gente. Los investigadores no podemos estar en una etapa tan directa, lo nuestro es anterior.
EC - Se me ocurren muchas preguntas que los oyentes también están acercando. ¿Cómo hay que administrar esa crema para que produzca efectos notorios y cuáles serían esos efectos sobre la piel?
FD - La forma es una aplicación diaria. No estamos indicando ninguna patología, ni inflamatoria, ni de descamación, ni nada, no lo sabemos; en eso los investigadores tratamos de ser muy precisos. Eso implicaría una etapa a empezar a partir de ahora, empezar a probar en aplicaciones clínicas. Pero en la piel normal, uno siente que envejece; una aplicación diaria puede ayudar a mantener la elasticidad, a mantener el tono de la piel. En eso es totalmente segura y eficiente.
EC - Segura y eficiente…
FD - Eficiente en el sentido de que controla efectivamente el estrés natural que se da en la piel.
EC - Le preguntaba por la eficiencia porque en esto de las cremas muchas veces –y nuestras oyentes mujeres supongo que estarán de acuerdo conmigo– hay mucho de ilusión: hay productos que más bien llenan el ojo o crean la sensación de estar produciendo tal o cual efecto y quizás eso no sea tan nítido, tan claro. Aquí, ya que estoy hablando con el investigador que llevó adelante estos trabajos, quiero chequear esto: ¿en qué medida quien utilice esta crema va a notar un resultado positivo?
FD - Por supuesto, la eficiencia no se nota en un día, no se nota enseguida; se ve en el transcurso del tiempo. Puedo asegurar que nosotros aplicamos la crema y utilizamos la forma experimental aceptada universalmente y medimos directamente la producción de radicales libres, y hay menos. Para nosotros es contundente. El efecto de una aplicación diaria se puede ver en el tiempo; somos optimistas en cuanto a que eso es así. El laboratorio ha hecho algunas aplicaciones para ver y la respuesta es muy satisfactoria.
EC - ¿Ya está disponible en el mercado ese producto?
FD - En un mes va a estar disponible, más o menos. Es lo que me han dicho en el laboratorio.
EC - ¿Qué recibe el Clemente Estable como beneficio de un acuerdo como ese y de un resultado como ese al que han llegado en esta etapa del trabajo con la marcela?
FD - Recibió un beneficio en el proceso del trabajo de investigación. Durante un año y medio hubo becas que se dieron en el Instituto y en la Facultad de Química para los jóvenes investigadores que hicieron esto. Ese es un beneficio.
Hay una patente sobre esta crema, que la procesa la Facultad de Química; de esa patente los institutos participantes –Química y Clemente Estable– tienen un 50 por ciento.
EC - De la patente; los derechos de comercialización son del laboratorio.
FD - Sí. La marcela es conocida en Brasil, en Argentina; si en el futuro entrara en esos mercados y un tercero la comercializara las instituciones recibirían parte de ese royalty. De la actual en Uruguay no recibimos nada, recibimos en el período anterior.
EC - ¿Y si otro país adquiere la patente?
FD - En ese caso habría un beneficio que se repartiría de acuerdo a la distribución que le mencionaba, 50 y 50.
EC - ¿Cómo continúa esta historia?
FD - La historia de la piel para nosotros en esta etapa está terminada: comprobamos un producto que va a estar en el mercado y estamos seguros de que es bueno. Cabría investigar sobre aplicaciones más concretas de esta misma crema, por ejemplo contra inflamaciones o algo por el estilo; no podemos decirlo en este momento, pero esa podría ser una investigación a comenzar, que por ahora no está planteada. Nosotros seguimos con las etapas previas, donde estábamos, tratando de lograr las moléculas y las formas para darlas a pacientes y empezar el estudio en pacientes.
EC - Ojalá dentro de un año, un año y medio, podamos estar de nuevo en diálogo con usted para tener las confirmaciones de este caso.
FD - Me encantaría. ¿Se da cuenta lo que es? Investigar una sola planta puede llevar la vida de un hombre. ¿Se da cuenta de todo el esfuerzo que hay que hacer y lo importante que es ver cosas nuevas que pueden tener valor incluso en el mercado? Yo se lo había dicho la vez anterior: la posibilidad de que eso dé recursos para la ciencia y sobre todo para los jóvenes.
EC - ¿Cuántos investigadores intervinieron en este proyecto?
FD – Seis entre la Facultad de Química y el Instituto Clemente Estable; todos jóvenes, algunos ni siquiera recibidos, estudiantes de bioquímica, de biología, de química.
EC - Ojalá las novedades sean incluso antes de un año y medio.
FD - Me encantaría.
EC - Si ocurren antes nos llama usted, nos avisa.
FD - Cuando tengamos el dato clínico, si es que lo podemos confirmar, va a ser una buena noticia para todos.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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