|
Posible caso de neumonía atípica en Uruguay
Doctor Eduardo Savio: Es una enfermedad que nunca existió en el mundo; un conjunto de síntomas que puede corresponder a distintas causas (se inicia muy bruscamente, con fiebre mayor a 38 grados centígrados, dolor de garganta, de cabeza, dolores musculares, y rápidamente aparecen la tos, falta de aire y a veces el dolor toráxico). Hasta ahora ha afectado a personas que viajaron al sudeste asiático, sus familiares y a los trabajadores de salud que los atendieron.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 02.04.03, 07.55.
ALFREDO DANTE:
Las autoridades sanitarias del Aeropuerto Internacional de Carrasco realizan el seguimiento a un ciudadano uruguayo que llegó la semana pasada desde Estados Unidos y registró los síntomas de la llamada fiebre de Hong-Kong, que ya se ha cobrado 66 vidas en diversos países.
EMILIANO COTELO:
Entonces podría haber un enfermo en Uruguay.
AD - Sí, aunque no hay una confirmación oficial de que se trate de la misma dolencia. De todas maneras, los expertos están en alerta y esperan la evolución de la persona.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) recomendó ayer expresamente posponer todo viaje que no sea esencial a las zonas donde se registraron los casos del síndrome respiratorio severo, que son Singapur, Hong-Kong, Taiwán, China y Canadá.
Una compañía aérea internacional comunicó la semana pasada los síntomas de un uruguayo que viajó desde Estados Unidos. El viajero fue internado en una mutualista privada y su estado de salud es controlado por las autoridades sanitarias.
El síndrome es una enfermedad infecciosa aguda, de causa no determinada, caracterizada por fiebre mayor a 38 grados, tos y dificultad respiratoria, dolores musculares, de cabeza y de garganta.
EC - Vamos a conversar con el doctor Eduardo Savio, especialista en enfermedades infecciosas. Savio es profesor, director de la cátedra de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina y adjunto a la Dirección General de Salud en el área de Infectología.
Recién trazábamos una rápida descripción de la enfermedad. Me gustaría que usted fuera un poco más a fondo, sobre todo para entender qué es lo particular que tiene.
EDUARDO SAVIO:
Lo primero que se debe destacar es que estamos en presencia de lo que se llama una enfermedad emergente, esto es, una nueva enfermedad que antes no existía en el mundo.
EC - Una nueva enfermedad.
ES - Una nueva enfermedad.
EC - Se la denomina…
ES - Neumonía atípica. La neumonía atípica es algo que ya existe, que todos conocemos, que se da en todo el mundo y puede ser causada por seis o siete agentes infecciosos diferentes, por micoplasmas, clamidias, por algunos virus. Pero no es ese el caso; el caso es que esta enfermedad se presenta radiológicamente como una neumonía atípica. Por eso se tomó por ese lado, pero en realidad hay que abordarla por otro.
Primero, es una enfermedad emergente; nunca existió en el mundo y ahora existe. Segundo, es un síndrome, esto quiere decir que es un conjunto de síntomas o signos que tiene el paciente y que puede corresponder a distintas causas. Este síndrome que afecta al aparato respiratorio predominantemente tiene su nombre por la sigla en inglés: síndrome agudo respiratorio severo (SARS). De eso estamos hablando.
Es una enfermedad que se inicia muy bruscamente, con fiebre mayor a 38 grados centígrados, con dolor de garganta, dolor de cabeza, dolores musculares y rápidamente aparecen los síntomas respiratorios, que son concretamente la tos, la falta de aire y a veces el dolor toráxico.
En ese contexto puede progresar a cierta gravedad, con hallazgos radiológicos muy característicos de neumonía atípica bilateral.
EC - Cuando dice “hallazgos radiológicos”, ¿a qué se refiere?
ES - Hablo de que estamos mirando una placa de tórax y que en ambos campos pulmonares aparecen imágenes “blanquecinas”, exudados blandos, bilaterales, que son pequeños foquitos de congestión que los médicos sabemos reconocer, y que corresponden a esa neumonía atípica.
EC - ¿Esas manchas son más fuertes que las de una neumonía habitual?
ES – No, Hasta donde se sabe, el aspecto radiológico de una neumonía atípica en el contexto del SARS es muy parecido al de cualquier otra neumonía atípica. Lo que importa es el contexto clínico, la radiología, algún otro dato de laboratorio y, sobre todo, la procedencia del paciente. Eso es lo principal.
EC - Eso iba a preguntarle; usted estaba enumerando síntomas que…
ES - ...que todos tenemos en estos días, que vienen del cambio de temperatura.
EC - ¿Cómo sabe alguien si puede llegar a estar afectado nada menos que por esta enfermedad?
ES - Es muy importante el sentido común y razonar desde un punto de vista epidemiológico. ¿Dónde está el foco de todo esto? En el sudeste asiático. Hay que diferenciar los casos autóctonos de los casos importados que ya hay en Europa, en Estados Unidos, etcétera, contagiados por viajeros o por personas que llegan al país del sudeste asiático y lo transmiten básicamente al trabajador de la salud o a la familia. Entonces, si usted tiene alguno de los síntomas que fuimos mencionando y en los últimos 10 días estuvo en una zona geográfica donde el SARS está presente y en las zonas de alto riesgo autóctono, como Vietnam, China, la región administrativa de Hong-Kong y algún otro país por allí, estamos autorizados a pensar en el SARS. Pero si usted no ha salido de Uruguay ni ha tenido contacto con nadie que esté regresando de esos lugares o algo parecido, es muy probable que tenga otra cosa.
Hay que tomar todos los pilares: el clínico, el epidemiológico, el antecedente de dónde proviene, etcétera, para tomar una decisión final sobre qué tiene esa persona.
EC - En caso de que exista efectivamente la posibilidad de que se trate de esa enfermedad hay que actuar muy enérgicamente, porque da la impresión de que se trata de una enfermedad muy agresiva.
ES – Sí; hasta donde sabemos hoy es una enfermedad muy agresiva, pero sobre todo que se expande muy rápidamente. Desde que esto se reconoció francamente, a mitad de febrero, hasta el día de ayer, había 1.622 casos acumulados en todo el mundo, con 58 muertes. No es tanto la mortalidad, que sin duda es importante, sino que lo que más gravita es la dispersión. Esto se dispersa muy rápidamente.
¿Quiénes son los que están en mayor riesgo de adquirir la enfermedad?: los familiares de ese caso índice y los que trabajamos con enfermos. Son los dos grupos más afectados, a un punto tal que ya murió el médico que descubrió el síndrome trabajando en Vietnam con sus enfermos. Por ejemplo, Canadá no tiene casos autóctonos; pero una familia asiática visitó a sus familiares en Hong-Kong, al regreso a Canadá enfermaron y los enfermos canadienses, en British Columbia y Ontario, son trabajadores de la salud que atendieron a esta familia. Para que vea el potencial de dispersión de la enfermedad, que es lo realmente preocupante.
EC - ¿Cómo protegerse? Usted mencionaba recién la situación de los médicos y enfermeros que atienden a este tipo de pacientes, víctimas potenciales del contagio. ¿No hay forma de evitarlo?
ES - Para poder defenderse, como en la vida real, hay que conocer al enemigo. En este momento no estamos seguros de cuál es el agente causante. Por descarte se avanzó bastante y hasta el día de hoy se piensa que es un paramixovirus el agente etiológico más altamente probable. En segundo lugar, lo más probable también es que la enfermedad se esté dispersando por vía respiratoria, por secreciones respiratorias, sin descontar otros mecanismos como secreciones corporales o fluidos. En consecuencia hay que tomar todas las medidas vinculados a lo respiratorio, usar máscaras, usar guantes cuando se está en contacto con sangre o fluidos corporales del paciente, hasta que se demuestre lo contrario. Pero lo más importante es lo respiratorio, las medidas de aislamiento de tipo respiratorio con tapabocas, con máscaras, desde el caso índice al entorno que lo rodea.
EC - En Uruguay en particular ya conocimos la advertencia del MSP que recomienda posponer todo viaje que no sea esencial a las zonas donde se registraron los casos del SARS. ¿Qué más? Tampoco se trata de crear una alarma infundada, de provocar nerviosismo, pero ¿qué otras cosas podemos señalar desde aquí?
ES - Hay dos aspectos. En primer lugar, la recomendación que surgió ayer del Ministerio, que fue muy ponderada por infectólogos, epidemiólogos, por el subdirector nacional de la Salud, se tomó en conjunto. Lo que el ministerio quiso emanar fue apenas una recomendación; no dice “No lo haga”. El Ministerio, como organismo rector de salud, recomienda que usted no viaje a las zonas donde hay casos autóctonos: Vietnam, Singapur, China, su región administrativa de Hong-Kong y Taiwán; se incluyó Canadá porque se estaba dispersando allí. Entonces, si usted puede evitar su viaje, hágalo; si no puede, por compromisos de negocios o lo que sea, vaya. A nadie se le prohibe; aún no hay restricciones de ese tipo en el mundo.
En segundo lugar, las personas, los viajeros, están siendo instruidos por las propias compañías aéreas o los servicios de migración (sobre todo de Estados Unidos, que es una zona de alto tránsito) sobre los síntomas más concretos de la enfermedad, y comunicando que si alguna de esas personas tiene esos síntomas en los 10 días después de su llegada a su aeropuerto de destino, de inmediato lo comunique a sus autoridades sanitarias para que ellos sepan qué medidas tomar. De hecho, si hoy llega un avión con personas que se sospecha que están padeciendo SARS, inmediatamente se les va a montar un aislamiento respiratorio en su casa o donde sea, pero tienen que estar aisladas porque se transmite por vía aérea y se comunica fácilmente.
EC - Me queda una pregunta que quizás dé para conversar toda una mañana, puede responder con una síntesis. Usted decía que estamos ante una nueva enfermedad, una enfermedad emergente. ¿Cómo nace una enfermedad emergente; cómo nace una enfermedad; cómo nace esta en particular? ¿Qué hipótesis hay?
ES - Una enfermedad emergente va a nacer cuando un nuevo patógeno o un patógeno que ya existía cambia su características y se vuelve agresivo para la persona. Todos los indicios de los 10 a 11 laboratorios en el mundo de primera línea que están trabajando para OMS están indicando a este paramixovirus como el causante de esta enfermedad respiratoria. No es un nuevo virus, el paramixo ha estado en la naturaleza durante años; algunos de sus subtipos determinan enfermedades de otro tipo, como infección respiratoria alta benigna, algunos han determinado infecciones en animales y no en personas, y esta variante –una variante es algo que ocurre naturalmente en el entorno de la virología– ha adquirido un rol patógeno para el aparato respiratorio en general que está dando esta nueva enfermedad.
EC - Pero, ¿por qué pasa eso?
ES - En un margen de hipótesis –no se lo puedo decir con seguridad cuando ni siquiera sabemos cuál es el agente– son las mutaciones espontáneas a las que están sometidos los virus, sus cambios genéticos, que surgen a raíz de numerosas multiplicaciones con errores en sus genes, que se producen de generación en generación, que lo van transformando. Esto es aplicable para muchas otras enfermedades. Incluso, si quiere llevarlo muy lejos, si nos remontamos al nacimiento del sida, mucho se había especulado con que era algo modificado en laboratorio, armado genéticamente, pero después se vio que en realidad el VIH había estado presente en la naturaleza desde la década de los 40 por lo menos, porque así se identificó en serotecas, y simplemente testando después con diagnósticos nuevos, retrospectivos, se vio que el virus había ido mutando y se había vuelto patógeno. Pienso que si esto es un paramixovirus puede ser esa la explicación.
--------------------------------
Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
recomendar
esta nota
|
|