17.06.2003






































Paro por empleo, recuperación salarial y derechos sindicales

Juan Castillo (Pit-Cnt): No basta con la actitud de diálogo de algunos ministros. Lo que interesa es dónde están las prioridades del gobierno, porque hay recursos para todos menos para quienes reciben un ingreso fijo. Los 200 mil desempleados no van a conseguir trabajo mientras no haya voluntad política de cambiar. A nosotros nos eligen para reclamar los derechos de los trabajadores y a ellos para gobernar, pero el gobierno nos reclama a nosotros que les digamos cómo.


EN PERSPECTIVA
Martes 17.06.03, 07.37.

EMILIANO COTELO:
Hoy se cumple el paro general de 24 horas dispuesto por la central sindical, Pit-Cnt en rechazo a la política económica y social del gobierno.

Estamos en comunicación con Juan Castillo, secretario de Organización de la central de trabajadores. ¿Cuáles son los principales puntos de la plataforma de este paro?

JUAN CASTILLO:
La plataforma sigue siendo la misma que hemos levantado en la tribuna del 1º de mayo, una larga plataforma que contiene propuestas concretas sobre cómo pensamos los trabajadores que se puede –con voluntad política y seguramente con mucho esfuerzo— se puede revertir la actual situación que está viviendo el país hace ya mucho tiempo, demasiado, y que a juicio de los trabajadores (que somos los que nos sentimos siempre los últimos, allá debajo de todo para que se atienda nuestras demandas) es hora de que se empiece a generar esos ámbitos.

EC – Se reclama, por ejemplo, políticas activas de empleo.

JC – Creo que, de los tres temas centrales que presiden esta jornada de lucha, uno de ellos sin duda es la instalación de ámbitos para discutir, concretar políticas activas de empleo, que salgan al cruce de tan alta desocupación que el gobierno no logra bajar, aunque objetivamente tampoco hace nada para lograrlo.

EC - ¿Qué entiende el Pit-Cnt por “políticas activas de empleo”?

JC – Una suma de factores, un conjunto de ideas y de aportes que hemos desarrollado a lo largo de todo este último año, hasta transformarlo –al comienzo de este— en un documento que hemos alcanzado a los ámbitos de gobierno que nos atienden, sea el Ministerio de Trabajo, el de Industria, el de Economía y Finanzas...

EC – Pero ¿algún ejemplo?


JC – Ejemplo concreto para nosotros es que hay que apostar a la reactivación productiva. El país debe tener una estrategia como nación, de la que carece, y a pesar de afirmarlo de la forma en que lo estamos haciendo, de admitirlo en los ámbitos ministeriales, sigue sin concretarse que el Uruguay como tal comience a decidir concretamente qué va a hacer con la producción, a dónde va a apostar para insertarnos en el mundo: si en el Mercosur, en la región, si con la Unión Europea... El gran problema es que no lo tiene decidido y estamos una semana para un lado, a la otra para el otro, y por lo tanto no se logra colocar la producción del país, y continúa siempre en aumento la demanda de productos importados que bastante daño han hecho a nuestra industria.

EC – Pero cuando se dice “políticas activas de empleo”, ¿se está pensando en medidas concretas que tome el gobierno para favorecer determinada actividad o la contratación de personal, por ejemplo?

JC – También hemos colocado allí, cuando entramos en el marco interno (insisto en que se trata de un documento de seis carillas: tampoco es un libro sino seis carillas condensadas de aportes, de ideas), cómo favorecer el consumo interno. Para eso hay un conjunto de medidas que tienen que ver con la mejor distribución del ingreso, del presupuesto nacional, y la inversión en obra pública que, para nosotros, sigue siendo el camino más dinámico para generar rápidamente algo que vaya generando puestos de trabajo y mejorando la economía.

EC - ¿Con qué dinero hacer obra pública en este momento? Porque en la caja del Estado no hay nada.

JC – Sí, seguramente van a tener que pedirlo a algunos socios del gobierno, que lo han vaciado. Cuando nosotros estábamos haciendo esta propuesta, todavía se seguía privilegiando a algunos bancos que se sabía, o ahora se dice que se sabía que estaban fundidos. O a algunas familias, muy pocas, que lo han sacado del país. Pero lo cierto es que plata hay; el problema son las prioridades. Si no hubiera plata...

EC – ¿Usted dice que hay plata?

JC – Hasta hace muy poquitito tiempo, el gobierno sigue privilegiando el pago de los servicios y los intereses de la deuda externa. El problema es que, aún en esta situación de crisis, nos contienen para adentro, pero para afuera el gobierno se batía solo para ni siquiera renegociar, rediscutir... no sé: había varios nombres para decir cómo se negociaba otra vez con el Fondo Monetario Internacional, pero el gobierno defiende, defendió y está cumpliendo con los organismos financieros internacionales (fundamentalmente con el Fondo Monetario) para pagar todos los servicios de la deuda externa. Quiere decir que el problema es de prioridades: se sigue pagando esa deuda pero no hay soluciones para adentro.

EC – Porque el gobierno acaba de lograr una reprogramación de la deuda con los tenedores de títulos emitidos por el Estado. Allí se obtuvo un alivio, mejor dicho la posibilidad de no caer en default. ¿Lo que usted dice es que habría que encontrar también refinanciaciones o reprogramaciones con los organismos internacionales para obtener dinero que se pueda aplicar a obras públicas?

JC – Para nosotros, sí. Es inmediato, además, porque una parte de lo que para nosotros hay que hacer está ubicado en las prioridades; pero hay una segunda parte: se viene diciendo desde días atrás (el propio ministro de Economía nos lo dijo a nosotros, pero hay otros voceros que lo están diciendo) que se ha comenzado a notar una reactivación de la economía.

EC – Por lo menos, que se tocó fondo y lentamente se empieza a notar una recuperación.

JC – Lo cierto es que a los hogares de los uruguayos eso todavía está bastante lejos de llegar. Y aquí hay demasiado tiempo con una desocupación muy alta que, insisto, más que hablar de porcentajes estamos hablando de que hay más de 200 mil hombres y mujeres que necesitan trabajar no sólo hoy sino todos los días del año, no lo han conseguido y si esto no cambia tampoco lo van a lograr en el correr del año.

EC – Ustedes piden también aumento de salarios, jubilaciones y pensiones.

JC – El segundo aspecto de la plataforma es la recuperación del poder adquisitivo de todos quienes vivimos de un ingreso fijo, seamos trabajadores, jubilados o pensionistas, porque en el último año (particularmente desde el 20 de junio del año pasado hasta el día de hoy, en 11 meses) hemos perdido más del 22% del poder adquisitivo. Seguramente este es un problema de la política económica, cuando se cambió el valor del dólar y se lo dejó flotar “libre”: los que vivimos de un ingreso fijo estamos padeciendo ese problema. Por la vía de los hechos se nos ha rebajado ese ingreso, mientras todos los días... hoy estamos en vísperas de un nuevo aumento de tarifas públicas, y ya se anunció otro aumento de combustibles. Se ha congelado los salarios y jubilaciones y siguen aumentando las tarifas públicas y todas las mercancías casi todos los meses.

EC - ¿De qué manera entiende el Pit-Cnt que habría que corregir ese desfase?

JC – No que nosotros estamos reclamando es un aumento. Integrantes del gobierno ya nos han dicho que, además de haber hecho estas dos propuestas (la de políticas activas de empleo y la de recuperación del salario), digamos de dónde sacar los recursos. A pesar de que los trabajadores nos eligen para defender los derechos sindicales, ya nos estamos acostumbrando a tener que estudiar todos los días a ser un poco parte del gobierno, a pesar de que a nosotros no nos eligen para eso sino que eligen a los que están en el gobierno: son ellos los que tienen que encontrar las soluciones.

De todas formas, decimos en este capítulo que hay que recuperar el salario que hemos perdido, y comenzar a tener líneas claras por parte del gobierno y no como han hecho hasta ahora, dando un 2 por ciento, un 1,3, un 2,2 por ciento a algunos trabajadores o a algunos jubilados, porque a la inmensa mayoría le ha tocado cero peso: a todos los trabajadores de la industria privada y los servicios ni siquiera se les otorgó aumento. Por tanto, en ese capítulo reclamamos la convocatoria a ámbitos de discusión y negociación, como por ejemplo en los consejos de salarios que funcionaban hace algún tiempo, hasta que en el gobierno del doctor Luis Alberto Lacalle los dejó en desuso por un decreto de 1992, y no se los está convocando más.

EC – En tercer lugar, reclaman respeto a las normas del derecho laboral.

JC – Es un capítulo muy importante para nosotros, y tiene que ver con la democracia. Entendemos a la democracia como un todo para todos quienes vivimos en esta nación. Aunque la Constitución de la República consagra derechos muy claros y concretos, aunque nuestro país ha ratificado todos los convenios de normas internacionales en la Organización Internacional del Trabajo, ahora están apareciendo como algo decorativo porque en la práctica la represión sindical, la falta de garantías, el no respeto a los derechos sindicales de los trabajadores, el carecer de ámbitos tripartitos para la negociación colectiva, son factores que inciden en la generación de casi el 75% de los conflictos laborales, según quienes miden esos temas.

EC – Decía usted que, sobre estos tres puntos de la plataforma del paro de hoy (políticas activas de gobierno, aumento real de salarios y pasividades y respeto a las normas laborales) están demandando diálogo con el gobierno. El ministro Santiago Pérez del Castillo ha establecido una vinculación que hasta ahora no era tan fluida con la central de trabajadores. ¿No se puede alcanzar el intercambio que ustedes están buscando?

JC – Es cierto: hubo un cambio de ministros, también lo hubo en Economía, y la característica de los dos ministros es que son políticamente más hábiles, por lo tanto conversan, se sientan a negociar. Lo cierto es que en una negociación el diálogo tiene que ser un intercambio, un aporte de cada una de las partes para buscar consensos y que sean llevadas a la práctica algunas de estas cuestiones. Eso no está sucediendo, así que no se trata solamente de una bonhomía en las declaraciones, en las intencionalidades, ni en concretar reuniones ni en sus horas de duración. Insistimos: lo que se requiere es voluntad política en todo el gobierno, no sólo en los ministros, para llevar a la práctica algunas ideas. Y lo que se está demorando demasiado tiempo es poner en práctica algunas cuestiones de las que estamos reclamando en esta jornada.

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón




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