20.06.2003




































CASTIGADO COMO UNA RAPIÑA A UN TAXI, PERO SON 40 MILLONES DE TAXIS

El fraude del Banco Comercial,
hasta ahora U$S 750 millones

Perito judicial Miguel Navajas. El problema empieza cuando se elige a quién vender un banco, y esto comenzó cuando lo compraron los Rohm. Los controles aflojaron encandilados por la imagen de los protagonistas. Cinco vertientes para el fraude: el faltante de valores; los créditos otorgados irregularmente al entorno del grupo; la operativa de valores a futuro con el corredor Ignacio Rospide; la operativa de banca privada a través del Commercial Investment, y las maniobras de la Compañía General de Negocios. “No cargo todas las tintas en el BCU, pero U$S 800: no desaparecen fácilmente”.

EN PERSPECTIVA
Viernes 20.06.03, 08.45.

EMILIANO COTELO:
Nunca había visto “una organización de delincuentes que haya hecho una estafa tan grande sin que nadie se diera cuenta”. Este comentario tan impactante –palabra más, palabra menos– se refiere al vaciamiento del viejo Banco Comercial y fue realizado este lunes en el Parlamento por uno de los peritos judiciales que asesoran al juez en lo Penal José Balcaldi.

Los técnicos también dijeron que los hermanos Rohm habían montado “una verdadera ingeniería del fraude”, “una organización delictiva muy, muy sofisticada”, a través de la cual, durante 12 años, cometieron todo tipo de maniobras y estafas, burlando los supuestos controles del Banco Central (BCU).

Este testimonio llamó mucho la atención esta semana; por eso invitamos a uno de estos profesionales, el contador Miguel Navajas, que es perito judicial desde 1980 y que tiene entre sus antecedentes haber colaborado también en la investigación del sonado “caso Banco Pan de Azúcar (BPA)”.

***

Una precisión antes de comenzar: ¿en qué consiste el trabajo de un perito contable que se desempeña en la Justicia Penal?

MIGUEL NAVAJAS:
Los hay de todas las ramas, por supuesto; en la parte contable, el perito se refiere a los libros, a la parte financiera, a todo que tiene que ver con la órbita contable, financiero - contable, económica. Es totalmente diferente un perito en la esfera civil de uno en la esfera penal.

Normalmente somos peritos en la esfera civil: se fija un objeto a estudiar, analizar y sobre el cual prestar informe, el caso viene dado por el juez. En la esfera penal es diferente: en cierta medida también viene planteado de acuerdo con el juez cuáles son los puntos a estudiar, en los cuales profundizar. En la esfera penal son todas presunciones sobre delitos; es algo dinámico, se van presentando nuevos temas sobre los que se conversa con el juez y éste da su opinión sobre si seguimos profundizando o no.

EC - En este caso hay tres peritos: los contadores Júpiter Pérez, Héctor Prieto y usted; y actúan como un equipo.

MN - Sí; el doctor Balcaldi siempre prefiere que actuemos en equipo. También es más fácil: como eran varios puntos cada uno se centró en uno, después cambiamos opiniones y lo manejamos con el juez. En grupo siempre es mejor.

EC - Yendo a la investigación del caso Banco Comercial, ¿durante cuánto tiempo se llevó adelante la tarea de ustedes estrictamente, de los peritos?

MN - Nosotros aceptamos el cargo un 11 de setiembre (una fecha especial, el 11 de setiembre de 2002) y presentamos el informe ahora, en mayo; o sea que prácticamente estuvimos ocho meses, de los cuales trabajamos intensamente en cinco o seis, los últimos con una intensidad plena: nos pasábamos el día entero analizando, sobre todo cuando Balcaldi nos pidió que aceleráramos porque quería tener una definición sobre esos días.

EC - ¿El trabajo está terminado?

MN - En principio sí; lo que nos pidió sí. Ahora queda una cantidad de procedimientos a seguir, a instrumentar, que se vienen instrumentando. No sé bien qué depararán; de repente al doctor Balcaldi se le ocurre una ampliación sobre algún punto.

EC - ¿Qué tipo de fuentes de información utilizaron para este peritaje?

MN - Era un peritaje sobre una serie de denuncias del BCU, que había hecho la investigación una vez denunciado el fraude. Nos basamos un poco en la documentación que teníamos en el Comercial, lo que existía en el expediente; también contamos con la colaboración del expediente que existe en la República Argentina, que está estudiando al Banco General de Negocios de Argentina, que fue parte del grupo; es una información bastante amplia; a veces información de otros juzgados, etcétera.

EC - Si entiendo bien, había una investigación primaria realizada por el propio BCU.

MN - Claro. El tema arranca así: se produce una investigación del BCU, a través de sus servicios, de todo el personal de la Superintendencia de Intermediación Financiera del BCU, que detecta una serie de irregularidades. Estas irregularidades conforman la denuncia presentada en febrero de 2002. Es alguien que denuncia; por más que sea el BCU es una denuncia que hay que corroborar, siguiendo la investigación de acuerdo a las pautas que señala el juez Balcaldi.

EC - En ese sentido, ¿hubo diferencias en el punto desde el cual arrancó la investigación si lo comparamos con el caso BPA?

MN – Sí; hay una diferencia muy grande. En el caso BPA había una denuncia presentada por la Cámara de Representantes con respecto al precio de venta, que se había fijado –si mal no recuerdo– en cinco millones de dólares, y el banco se había vendido cuando existía un patrimonio de más o menos 28 millones, según la auditoría. Luego derivó en diferentes actuaciones: no se sabía bien a quién se lo había vendido; hubo una cantidad de acciones posteriores bastante irregulares de los nuevos gerentes, y se determinó una pérdida muy grande.

EC - ¿Había diferencias en el trabajo para ustedes?

MN - Sí, sí. En el caso del Comercial venían dados los puntos que teníamos que investigar; el caso del Pan de Azúcar arrancó con una denuncia sobre su bajo precio de venta, y después derivó hacia otro tipo de cosas.

EC - Cuando arrancaron esta investigación, ¿ustedes tenían claro que deberían remontarse 12 años atrás?

MN – No. En realidad empezamos a profundizar sobre el hurto y empezamos a ver que había un enganche que se venía repitiendo en cuanto al faltante, sobre todo de valores públicos argentinos. La pregunta, también de acuerdo con el juez, era ¿cuándo arrancó toda esta maniobra? Fuimos cinco, seis años para atrás; después ya no se contaba con muchos datos, pero prácticamente se pudo establecer que esta operativa se inició desde el comienzo, máxime cuando existe una declaración de Carlos Rohm en Argentina, diciendo que la inició ni bien pisó el banco.

EC - Este es un detalle muy importante. No estamos ante maniobras que los ejecutivos o propietarios del banco se vieron obligados a realizar para estabilizar la situación de la empresa debido al temporal desatado en la región, particularmente debido a la crisis argentina. Aquí estamos hablando, como ustedes han expresado en algunas de las frases que yo citaba, de una verdadera ingeniería del fraude que venía operando desde hacía mucho tiempo, sin que tuviera nada que ver ninguna crisis financiera del otro lado del Río de la Plata.

MN - La crisis sólo precipitó la liquidación del banco. Eso llevó a que no se tuviera más remedio que ver que el banco estaba en quiebra. Si bien esta maniobra se hizo durante X tiempo, aparecía fraguada a través de los balances, se los maquillaba, se hacía operativas contables para poner a los valores públicos argentinos valores que no tenían nada que ver con el mercado, y una cantidad de préstamos que no existían. Todo eso se fue trasladando, se fue haciendo durante todo ese período. A partir de la declaración de Carlos Rohm no dudamos de que fue así; corroboramos hasta donde pudimos.

EC - En resumen el viejo Comercial era una institución financiera en la cual algunos de sus propietarios directamente delinquían, estafaban a la gente gente.

MN - Bueno… eh… Surge eso. Hay una opinión del contador Ricardo Pascale, quien dice que la clave del negocio bancario es a quién se le vende el banco; a partir de a quién se le vende el banco, de quién es el que lo gerencia, quiénes están detrás, cuál es el plan, etcétera, a partir de ahí el tema es muy difícil de controlar. Si se elige mal la opción, es casi seguro que habrá problemas.

EC - Implícitamente usted está diciendo que se vendió el banco a quien no se le debió haber vendido. ¿Había antecedentes que permitían augurar este tipo de comportamiento?

MN - A la luz de los hechos es obvio, pero remontándonos en el tiempo, nosotros vimos las actas de las interpelaciones tanto del senador Astori como del senador Millor, y dejaban serias dudas respecto a la actitud que iban a tener los hermanos Rohm.

EC - Usted se remonta a la interpelación que tuvo lugar en ocasión de la venta del Comercial a este tipo de banqueros.

MN – Claro. Pero hay que poner todas las cartas sobre la mesa: también estaban los bancos extranjeros, bancos de primera línea que daban un respaldo que en realidad encandilaba; creo que fue lo que encandiló.

***

EC - Ustedes señalaron este lunes ante la comisión investigadora que este fraude, este vaciamiento del Comercial tuvo, para simplificar, cinco vertientes. ¿Cuáles fueron?

MN - Las cinco vertientes eran: el faltante de valores públicos y privados; los créditos otorgados a personas físicas y jurídicas vinculadas al grupo y concedidos en forma irregular; toda la operativa de valores a futuro del Comercial con Konspira y con el corredor de bolsa Ignacio Rospide; la operativa de banca privada que se hacía a través del Commercial Investment, donde hubo un problema de 90 millones de dólares; finalmente, para cerrar el estudio se agregó todo lo relativo a la Compañía General de Negocios, que era una institución financiera externa.

EC - ¿Cuánto totaliza el fraude llevado adelante por estas distintas vías que usted acaba de mencionar?

MN - Todavía no hay una cifra definitiva, permanentemente se va analizando. Supongo que el BCU lo está haciendo, y se va viendo que hay créditos irregulares que se suman. En principio hay una estafa de alrededor de 750 millones de dólares.

***

EC - Usted hablaba de cinco vertientes. Vamos a repasar cada una de ellas. Para empezar, dicen que alrededor de 220 millones de dólares del fraude total corresponden a un faltante de bonos públicos argentinos en las arcas del viejo Comercial. ¿Cómo se procesó ese faltante?

MN - Antes que nada una precisión previa: todo lo que nosotros dijimos en la comisión se refiere al informe presentado en la esfera penal, que es de conocimiento público porque todos los expedientes, al dejar de ser presumarios, son públicos.

El faltante es de 220 millones de dólares de valores públicos y privados argentinos es el de mayor envergadura. ¿Qué sucedía? El Comercial enviaba plata para que el BGN en Argentina comprara valores argentinos; captaba depositantes acá al 4 por ciento, colocándolos en Argentina al 8 por ciento; era un buen negocio para el banco. Pero, en realidad, se mandaba la plata a Argentina y el BGN, que es del mismo grupo, se quedaba con el dinero; no compraba los valores argentinos. El BGN llevaba todo un archivo donde supongo que llevaría la contabilidad de todos esos faltantes de valores que no compraba e iban generando un agujero negro que en algún momento iba a saltar. ¿Cuándo saltó? Cuando tuvo que llevar al megacanje argentino todos esos valores que no existían. No hubo otro remedio que denunciarlo; por eso vino la denuncia de José Rohm y en definitiva saltó toda la maniobra fraudulenta con los demás temas.

EC - En este capítulo del vaciamiento se llegaban a utilizar documentos públicos falsos. ¿Cómo era esto?

MN – Sí. El BGN, para decirle al Comercial “tengo tantos valores tuyos”, mandaba comprar y dejaba en el mismo banco sin que nadie se percatara de eso, toda la correlación de las [empresas] vinculadas que fue un poco el porqué de la maniobra. Nadie le pedía rendir cuentas al BGN debido a que era del mismo grupo; esa fue una de las fallas serias que hubo en el control.

EC - Una de las fallas serias en el control por parte del BCU, aquí en nuestro país.

MN - Sí. Lo que pasa es que el tema no es tan directo. El BCU tiene sus formas de chequear a través de las auditorías externas; si la auditoría externa no denuncia esta situación de vinculada, el BCU no tiene elementos. Claro, llegado el momento se le puede ocurrir hacer un análisis o hacerle preguntas, pero…

EC - En este caso, ¿la empresa que hacía la auditoría externa no lo marcó, no marcó un problema?

MN - Lo que pasa… El tema es que los fraudes de la alta gerencia son muy difíciles de detectar. Si la alta gerencia no declara que es parte vinculada, a la auditoría (si no profundiza en el tema) se le pasa.

EC - ¿Pero no era bastante obvio que el Comercial y el BGN pertenecían prácticamente a los mismos propietarios?

MN - Sí, es obvio.

EC - ¿Es obvio?

MN - Son los mismos accionistas, es obvio.

EC - Para que se entienda, brevemente, ¿cuál era el problema de estar operando con una empresa vinculada como el BGN?

MN - Pongamos un ejemplo más simple. Yo le doy a tal persona para que me compre tal cantidad de bonos; esa persona no los compra pero me manda un papel donde dice “los tengo”. Si queda en eso y se gastó la plata, llegado el momento no hay forma de cobrársela. Esto fue lo que sucedió aquí. El tema es que el Comercial es un banco uruguayo y el BGN es un banco argentino: el problema es en Uruguay, no en Argentina, porque la plata fue para Argentina, el BGN se quedó con el dinero y se le generó un problema al Comercial al no existir esos bonos que se dijo que habían comprado.

Con respecto a lo que usted preguntaba sobre falsificación de documentos, en Argentina existe la Caja de Valores, que viene a ser como la Bolsa de Valores de Montevideo. Ahí hay un respaldo cuando quedan valores depositados en garantía. Eso es una cosa cierta, innegable. Pero ¿qué sucedía?: existían documentos en la Caja de Valores que decían que el Comercial poseía tal cantidad de bonos de tal serie, etcétera. ¿Qué había sucedido? No se sabe de qué forma el BGN había obtenido esos formularios en blanco y los había llenado; así fueron enviados a Montevideo.

EC - Esos documentos que atestiguaban la compra de esos valores, ¿eran a su vez falsos?

MN – Sí: eran falsos, eran respaldos inexistentes. El problema saltó cuando se vieron los verdaderos documentos que emitía la Caja de Valores. Lo que pasa es que la Caja de Valores, en vez de mandárselos directamente al Comercial, se los enviaba vía BGN; ahí el BGN se quedaba los documentos verdaderos y enviaba falsos.

***

EC - Había una segunda vertiente en la estafa, los préstamos a empresas vinculadas o sencillamente a amigos o personas cercanas al círculo de los Rohm. En este capítulo hay involucrado un monto mínimo de 80 millones de dólares. ¿En qué consistía?

MN - Quizás la forma más fácil de vaciar bancos sea prestar dinero a empresas fantasma, inexistentes, a amigos, etcétera. Ya sabemos que son incobrables, que llegado el momento, cuando se quiera cobrar esos préstamos, no se va a poder. Y eso fue lo que sucedió: se detectó préstamos a una cantidad de empresas, sobre todo argentinas, que tenían una fuerte vinculación con el grupo, personas vinculadas al grupo, incluso a gerentes del BGN, a empresas cuyos directivos eran Carlos Rohm o gente del grupo; esto también se pudo comprobar merced a la información que tuvimos del expediente en Argentina. Ahí existe toda una clasificación de incobrables por parte del Banco Central; el monto empezó siendo de 70 millones, ahora estamos arriba de los 80 y creo haber leído un informe de que quizás se pueda duplicar.

EC - ¿Este tipo de operaciones no viola las normas bancocentralistas?

MN - Las viola en el sentido de que todo crédito otorgado debe cumplir una norma legal, la carpeta legal, que debe tener una cantidad de información, por ejemplo sobre la capacidad de repago de la persona, si está vinculada o no. En la mayoría de los casos que yo personalmente revisé no existía esa información, y cuando meses antes la había revisado el BCU tampoco existía. Ahí hubo una falla seria. Además se les daba a todos la Categoría Uno automáticamente, porque eran todos préstamos que se ponían con vencimientos largos; como no vencían nunca siempre estaban vigentes o se renovaban automáticamente merced a una maniobra contable. En realidad eran todos créditos otorgados a través del gerente de Banca Mayorista, Llambías, o de Carlos Rohm; eran amigos de Carlos Rohm y el comité de crédito automáticamente autorizaba los préstamos, lo cual era bastante fuerte.

***

EC - Pasemos a la tercera vertiente de la estafa, los fondos colocados en Holanda. Esta variante tiene su antigüedad, ¿no?

MN - Sí. El tema es así: antes, cuando existía el ING Bank, éste tenía, para clientes que querían colocar dinero en el exterior, una cuenta en Amsterdam. Esa cuenta tenía cierto volumen de dinero, 100 y pico de millones de dólares. Cuando es cuenta se transfirió a Rohm, en principio no formó parte del Comercial.

EC - A ver, en primer lugar usted acaba de referirse a un negocio que operaba el ING Bank cuando existía como banco aquí en nuestro país. Recordemos que en determinado momento el Comercial adquiere la operación del ING Bank en Uruguay; ¿entonces?

MN - Después de cierto tiempo adopta esa operativa que venía hecha por ING Bank. En principio no formó parte, por eso seguían dentro de la órbita del ING Bank esos depósitos de ciertos clientes que querían tener riesgo Amsterdam. Se ve que existían grandes faltantes de liquidez en el Comercial, y entonces aceptó captar esos depositantes para que entraran en su órbita. Pero ¿qué sucedió? Todos estos clientes se movían dentro de una expectativa de riesgo prácticamente nulo porque depositaban en el exterior; con menos tasa pero con riesgo nulo. El Comercial empezó a utilizar esos dineros, en vez de tenerlos depositados en Amsterdam, comprando bonos, diciendo que compraba bonos, por ejemplo bonos del tesoro de Estados Unidos u otras colocaciones. En realidad lo único que sucedió fue que los depósitos que había en Amsterdam desaparecieron y luego hubo que pagarles, por intermedio del BCU, a todos esos depositantes que seguían engañados pensando que su dinero estaba depositado en Amsterdam.

EC - Este último detalle que acaba de incorporar es importante: esta plata que desapareció, que era… ¿de qué orden?

MN - Más o menos 90 millones de dólares.

EC - ¿Tuvimos que terminar pagándola todos nosotros?

MN - Sí, sí.

EC - ¿En qué momento?

MN - Ahora no recuerdo bien, pero en plena crisis el BCU permitió el pago a estos depositantes porque se vieron totalmente engañados. Lo afrontamos entre todos.

***

EC - Seguimos. Pasamos al cuarto capítulo, el vinculado con las maniobras de la CGN, una SAIFE, una off-shore propiedad de los Rohm aquí en Uruguay. ¿Qué fue lo que pasó con esta empresa?

MN - Una SAIFE capta dinero de no residentes y lo coloca en el exterior. Es todo dinero de argentinos que estaban convencidos de que su dinero estaba colocado, pero desapareció. Desapareció a través de la SAIFE y además el grupo CGN creó una sociedad anónima Islas Vírgenes, que todo el mundo desconocía que existía y cuyos documentos de depósito tenían el mismo formato, con pequeñas variantes. Los clientes eran engañados, pensaban que ponían el dinero en el exterior a través de CGN, cuando en realidad lo hacían a través de esta Islas Vírgenes que nadie conocía.

EC - ¿Cuánto dinero está involucrado en esta vertiente de la estafa?

MN - Nosotros estimamos en más o menos unos 350 millones de dólares este engaño, sobre todo a residentes argentinos.

EC - ¿Dónde fue a parar este dinero; cómo lo usaban los Rohm?

MN - Es toda una operativa que nosotros determinamos que iba a parar a Saint Louis Finantial, que tiene una composición accionaria muy parecida a la del Comercial. A su vez la CGN la tiene como único accionista, o sea que toda la plata de CGN iba automáticamente a Saint Louis Finantial. Como dije, tiene prácticamente los mismos accionistas que el Comercial.

EC - O sea, por un lado los hermanos Rohm; por otro JP Morgan Chase, Dresdner Bank Lateinamerika y Crédit Suisse First Boston.

MN - Sí, y algunos otros, pero de menor cuantía.

EC - Con estos 300 a 400 millones de dólares, ¿qué debió hacer el Estado uruguayo? ¿Aquí también tuvimos que pagar?

MN - No, aquí no; por ahora los perjudicados son los no residentes argentinos. En realidad no sé bien cómo es porque es una SAIFE uruguaya, no sé cómo se va a resolver este problema.

EC - Por ahora no se les ha pagado.

MN - Nosotros más que nada estudiamos a la CGN para ver cómo cerraba toda la operativa, que en definitiva era como dije recién: el dinero terminaba en Saint Louis Finantial.

***

EC - Finalmente hay una quinta maniobra, según describieron ustedes en la comisión investigadora esta semana. Esta vez no se realizaba con el objetivo de vaciar el banco sino para que pareciera que los números eran positivos. En buen romance: “maquillaje de balances”. ¿En qué consistía esta maniobra?

MN - Ya hablamos del faltante de valores; parte de esos valores que no existían también sufrió una baja ostensible de cotización. Entonces, para mantener un cierto patrimonio, el Comercial, en vez de valuarlos a valor de mercado, que había caído estrepitosamente, hacía un contrato de compra a futuro por medio de Konspira o de Ignacio Rospide.

EC - Perdón; ¿son dos empresas aquí?

MN – Sí... Bueno: Ignacio Rospide es el único accionista de Konspira; o sea que es lo mismo.

EC - O sea que Konspira e Ignacio Rospide son lo mismo, pero eran dos líneas de negocio distintas.

MN - Ahí está.

EC - ¿De qué manera se operaba?

MN - Un documento que tuviera el Comercial con un valor nominal de 100, pongamos que caía en el mercado y valía 50. Pero se hacía un contrato a futuro con Konspira o Rospide, por el cual éste se obligaba a comprarlo a 90. Entonces se lo valuaba a 90 cuando en realidad valía 50 en el mercado. Es un fraude contable.

EC - ¿Era un fraude? ¿No era una promesa de compra real?

MN - No, pudimos establecer que no, porque a su vez existía otra pata del negocio en donde Rospide se los vendía a Saint Louis Finantial. Rospide quedaba en el medio enganchando al Comercial con Saint Louis Finantial. En definitiva se contabilizaba nada más que el tema del Comercial con Rospide; la otra parte no se contabilizaba. Y además no había control sobre Saint Louis Finantial: el BCU no tiene control sobre éste, por eso se posibilitaba toda la operativa de salida de dinero en ese sentido.

***

EC - De estas cinco formas que usted ha tenido la amabilidad de explicar, y espero que los oyentes se hayan acercado tanto como nosotros a la comprensión de estos mecanismos (ustedes mismos han hablado de una ingeniería del delito muy sofisticada, de modo que entender todos los resortes de esto no es sencillo), quisimos hacer en esta charla una aproximación.

Como decíamos al comienzo, no se trata de un fraude puntual sino de varios fraudes sistemáticos que se venían cometiendo casi desde el mismo momento en que los hermanos Rohm asumieron el control del viejo Comercial. Así que hay una intencionalidad manifiesta que hace más grave el delito, ¿no es así?

MN - No; el delito es el que encuadra dentro del Código Penal. Por supuesto que no soy abogado pero, de conversarlo con jueces, sé que las penas son más o menos de cuatro años. Lo que puede llamar la atención a veces, lo he escuchado, es que un rapiñero asalta un taxi y de repente le toca una pena mayor, mientras en este caso serían cuatro años. O sea que en este caso, con una estafa de 800 millones de dólares, hay cuatro años, cuando por robar 20 dólares, 500 pesos son cinco años. Se imagina que la relación de 800 millones a 20 dólares es de 40, son 40 millones de taxis asaltados…

EC - Realmente queda planteada allí una pregunta muy pertinente a propósito de la gravedad de una pena y de la otra, de la diferencia en el tratamiento de una situación, de un comportamiento y del otro.

MN - 40 millones de taxis contra uno… Eso es lo que a mí también me choca como ciudadano, como persona que está viviendo en Uruguay.

***

EC - Por último, ¿cómo es posible que el BCU no haya podido detectar a tiempo este tipo de maniobras en el caso del Comercial? Cuando fueron a la comisión esta semana, ustedes dijeron que, si José Rohm no hubiese informado a sus socios de la existencia de un fraude en el BGN de Argentina, cosa que ocurrió en enero del año pasado, el Comercial hubiera seguido operando un rato más porque nunca existió una luz amarilla que alertara de esta situación. ¿Cómo se explica esto?

MN - Primero quiero aclarar un punto que aparece en un semanario que me parece que no es exactamente lo que nosotros dijimos respecto del Comercial. No hay que cargarle todas las tintas al BCU. El BCU establece dentro de su normativa que debe tener informes de auditoría externa, controles de auditoría interna; hay una sindicatura, un conjunto de controles que también son responsables. Por eso nosotros no le cargamos absolutamente todas las tintas al BCU, si bien, obviamente… porque la desaparición de 800 millones de dólares no se hace de la nada, no es fácil.

EC - Implícitamente usted está advirtiendo que hay otras responsabilidades en el medio.

MN - Sí. Nos consta que los servicios del BCU, todos los contadores que trabajan en la Superintendencia de Intermediación hacen buenos trabajos; los conocimos cuando el tema del BPA. Ellos también tienen limitaciones, tienen limitación, tienen jerarquía, un conjunto de temas que a veces… Vuelvo al principio: el fraude de alta gerencia se basa en el arranque, en a quién se le vende el banco: si se lo vende a una persona que no tiene buenas intenciones va a ser muy difícil controlarlo; eso es claro.

EC - Ustedes han dicho que el hecho de que en el paquete accionario del banco figuraran estos tres bancos del exterior –JP Morgan Chase, Dresdner Lateinamerika y Crédit Suisse– de alguna manera hacía que se lo observara, por parte del BCU, de una forma más “light”; ¿puede ser?

MN - Pienso que sí. Esas fueron expresiones de un compañero que sabe más que yo del tema. Pero evidentemente, con estos tres bancos importantísimos atrás se hace más fácil, máxime cuando también se daba que se tenía al Comercial por allá arriba, con grandes utilidades, como el banco modelo, dicho por casi todos. Esos bancos estaban atrás, pero ¿quién gerenciaba el banco?: había un contrato de gerenciamiento a favor de Carlos Rohm. Y Carlos Rohm en su momento había sido cuestionado en interpelaciones… Lo digo viendo cómo se desarrolló la historia y buscándole una explicación a esto.

EC - Supongo que también hay una cantidad de preguntas a propósito de la responsabilidad de esos tres bancos del exterior.

MN - Es un tema que … No sé.

***

EC - Entiendo que usted tenía limitaciones para expresarse. Usted no es el juez, no es el fiscal; además el juez y el fiscal todavía tienen trabajo por delante, o sea que tampoco ellos seguramente podrían avanzar en algunas respuestas que quizás yo estaba demandándole a usted. De todos modos creo que tenemos el panorama un poco más claro y eso se debe a que usted aceptó venir esta mañana a nuestro programa.

MN - No es fácil salir a la opinión pública. Yo soy de la idea de que los peritos, como los jueces, quedan muy expuestos al salir a la opinión pública; pero de todas maneras quería presentar ante la ciudadanía estos platos rotos. Como los vamos a tener que pagar entre todos en cierta medida tenía el deber de colaborar e informar a la ciudadanía. Gracias.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón



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