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Foro Batllista cuestiona “jornales solidarios” de la IMM
Diputado Ronald Pais (FB, PC): Si la Intendencia tiene fondos, que rebaje las tasas para que las empresas contraten personal. Hay bares que de pronto venden cuatro cafés, y pagan Tasa Bromatológica.
EN PERSPECTIVA
Jueves 26.06.03, 07.55.
EMILIANO COTELO:
Una de las noticias de esta semana fue la distribución, por parte de la Intendencia de Montevideo (IMM), de los llamados “jornales solidarios”. Más de 25.000 personas se inscribieron, interesadas en los 4.690 empleos temporales de baja remuneración –apenas un salario mínimo— que ofrecía el municipio capitalino.
“La IMM pretende asistir, por esa vía, a jefes de familia desocupados durante el período más crítico del año, el invierno”, sostienen las autoridades municipales; “es un programa de asistencia, no asistencialismo”.
Los participantes en el programa tienen derecho a la realización de hasta 12 jornales mensuales, de seis horas, durante tres meses consecutivos. Estarán inscriptos en el Banco de Previsión Social (BPS) y cada uno recibirá un total líquido de 1.108 pesos por cada 12 jornales trabajados, además de cursos de capacitación en derecho laboral y seguridad social.
Se beneficia a 4.690 personas y para este programa la Intendencia destina U$S 666 mil 700, según los números que confirmaba el martes Ana Olivera, directora del Departamento de Descentralización y responsable de la concreción de esta línea de trabajo.
Una iniciativa de estas características despertó reacciones de la bancada de Diputados del Foro Batllista (FB), que desafió a la IMM “a colaborar con el gobierno nacional en la generación de empleo genuino, reduciendo la carga tributaria sobre las pequeñas empresas en la próxima Rendición de Cuentas”.
Hubo una crítica severa a esta iniciativa municipal, sobre lo cual vamos a conversar con el diputado Ronald Pais. ¿Por qué los diputados del FB analizan un tema municipal de Montevideo?
RONALD PAIS:
Porque en realidad el empleo es un tema nacional. Demás está decir que en el Foro tenemos seis diputados de Montevideo, es decir que la tercera parte de los diputados con que cuenta nuestro sector es de la capital, y por lo tanto todos los temas del departamento nos interesan. A veces hay una especie de deformación que lleva a pensar que los diputados se ocupan de temas nacionales, cuando en realidad somos electos departamentalmente y deberíamos tener como prioridad los temas de cada departamento.
EC - Concretamente, sobre este plan de jornales solidarios de la IMM, ¿cuál es el análisis del Foro?
RP - Nosotros decimos que estas medidas son mucho más efectistas que reales. Nos extrañó sobremanera, nos sorprendió el desarrollo de este asunto, además con una cobertura mediática realmente llamativa, cuando la IMM sabía y sabe que el 1º de mayo el ministro de Trabajo y Seguridad Social anunció varias medidas tendentes a beneficiar o tratar de paliar la situación de desempleo que evidentemente tenemos en el país y que tenemos que enfrentar todos, que además se han puesto ya en vigencia en varias intendencias. El 5 de junio hubo un decreto del Poder Ejecutivo, llamado justamente “Creación de programas de empleo en actividades comunitarias”, que se viene realizando mediante convenio con distintas intendencias.
EC - Entonces ¿por qué discrepan con este plan de la IMM, si las otras intendencias del país están haciendo planes similares, incluso coordinados o vehiculizados desde el Poder Ejecutivo?
RP – Primero, porque el financiamiento es diferente. El financiamiento de estos programas nacionales es 70 por ciento a cargo del gobierno central y 30 por ciento a cargo de las intendencias. Entonces nos parecía que, si hay una disposición general en las menguadas finanzas de nuestro país impulsada por el gobierno central, lo primero es colaborar con eso y tratar de guardar los recursos de cada Intendencia para castigar menos a sus contribuyentes. El gobierno ha venido dirigiendo –incluso ha impulsado esto reclamado desde la oposición– una política de reducción de tributos al empleador como forma de incentivar que se tomen nuevos trabajadores. Esto se ha visto en las exoneraciones de variada gama no solamente para el sector agropecuario, sino también para la industria de la construcción y la industria manufacturera; todavía nos queda (lo admitía ayer el vicepresidente Hierro en su exposición en ADM) el sector servicios, el sector comercio, para el cual se ha podido hacer muy poco, pero que el gobierno seguramente también tratará de incentivar porque es un sector que emplea a mucha gente.
La IMM no sólo no ha hecho esto sino que continuamente ha generado una presión tributaria realmente escandalosa. Ya lo vemos en estos días: no hay cosa que no quiera gravar. Esa voracidad fiscal… Nosotros decimos: ¡caramba!, si hay algún ahorro en los gastos de funcionamiento –la Intendencia dice que hay unos 20 millones de pesos que se ahorraron en gastos de funcionamiento–, volquémoslo a bajar algunos tributos que están castigando a la pequeña empresa. Si me permite le pongo un ejemplo…
EC - ¿A ver…?
RP - La tasa bromatológica que paga cualquier bar de cualquier barrio de Montevideo que vende bebidas, que tiene una máquina de café y de repente vende cuatro cafés por día, es de 1,8 por ciento de todas las ventas, menos IVA y menos la venta de cigarrillos. Realmente es un peso enorme para quien tiene, en el caso de la microempresa –que es la mayoría–, hasta cuatro empleados.
Nosotros decimos: ¿la Intendencia tiene dinero disponible para esto? Entonces que baje impuestos departamentales y que trate de jugar en equipo, aunque sea por una vez; porque así se desarrolla en Montevideo una especie de gobierno nacional paralelo al gobierno nacional real, que no es lógico, no es razonable.
EC - Dos preguntas. La primera: con medidas como las que usted recién mencionaba, reducción de carga tributaria sobre pequeñas empresas, no es obvio que se produzca un efecto inmediato en el empleo. En cambio de esta manera –responde la Intendencia– no es algo de gran magnitud, algo de la forma que se desearía que ocurriera en materia de trabajo, pero resulta que durante tres meses hay 4.700 personas que reciben por lo menos un salario mínimo...
RP - Es verdad, es verdad lo que usted dice.
EC - ...y en el momento más crítico, el invierno…
RP - De acuerdo, de acuerdo. Pero entonces dígame una cosa: si usted tiene un programa que tiene un máximo de cinco meses pero va a rotar la gente, que en realidad va a estar tres, ¿por qué no acepta el del gobierno que es por cinco meses?
EC - ¿Usted dice que la IMM no aceptó el sistema del gobierno?
RP - Lo que digo es: ¿por qué desarrollar y primerear desde el punto de vista departamental un tema que se viene planteando a nivel nacional y tiene 16 jornales contra 12? Por ejemplo, digo, por decirle dos cosas. ¿Por qué no hacer las dos cosas, si es que se van a hacer?
Lo otro: tratemos de que estos trabajos sean reales, porque la máquina de inventar empresas tampoco es una cosa buena. Yo planteaba estos días como razonamiento por el absurdo –que nadie interprete que estoy planteando esto–, ¿qué pasaría si nosotros empezamos a hacer esto mismo a nivel nacional y autorizamos por ley a que lo hagan UTE, Antel, Ancap, OSE y todos empiezan con este tema que suena muy lindo y que puede resultar muy simpático a primera vista? Entonces pagamos la luz más cara, el teléfono más caro, para justificar una creación ficticia de empleos.
EC - ¿Para usted esto es creación ficticia de empleo?
RP - No hay duda. Incluso en la entrevista que usted realiza, le pregunta sobre este tema de los cursos obligatorios que realiza el PIT-CNT a través del Instituto Cuesta - Duarte y de los representantes de los trabajadores en el BPS, si esto también entra en el tema del empleo. No, esto es una concepción más general, acá se busca generar un banco de datos y tener una cantidad de cosas que... bueno: no atribuyamos intenciones.
En definitiva le digo que esto no es razonable, que cada Intendencia por su cuenta desarrolle su programa de empleo y no alivie la carga tributaria de sus contribuyentes no me parece razonable. Si multiplicamos esto por 19 podemos tener un caos que no se justifica cuando, justamente, el gobierno nacional ha anunciado medidas de ese tipo, ha puesto a disposición de las distintas intendencias que se realicen los convenios respectivos y sin embargo se opta por otro camino. Tenga en cuenta también que el gobierno nacional mandó un proyecto de ley, que está a consideración del Parlamento y que ojalá podamos aprobar pronto, tendiente justamente a la reducción de aportes patronales para aquellos casos en los que se tomen trabajadores que estén en el seguro de desempleo.
EC - A partir de esta visión crítica que usted estaba exponiendo con respecto a esta iniciativa de la IMM, ¿qué pasos prevén; este simplemente, la difusión del enfoque que ustedes tienen de estos temas?
RP – No. Les hemos encargado a nuestros ediles, les hemos pedido –porque ellos son dueños de sus decisiones– que hagan un planteamiento, y si no lo hace toda la bancada –estoy seguro de que lo va a hacer y ojalá que nos acompañe en esto el Partido Colorado– que le hagan un planteamiento al intendente porque la iniciativa de exoneraciones tributarias no puede partir de la Junta Departamental, tiene que partir del Ejecutivo. Entonces que le hagan la solicitud al señor intendente de que realice estos estudios y haga estas bajas que le mencionaba, lo de la tasa bromatológica; la escala o modos de cobrar el saneamiento para bares y restoranes, que es un tema que pesa mucho en los pequeños comercios… Que estudien todas esas cosas y si tienen una disponibilidad... A veces uno se pregunta cómo es posible que tenga esa disponibilidad de gastos de funcionamiento y vaya una persona (como me pasó el otro día, recibí la denuncia de una persona) a pedir una deuda de padrones y no tenían papel en la computadora para imprimirle los datos; si hay realmente un ahorro genuino, que el mismo se destine a la rebaja tributaria que buena falta está haciendo y en lo cual la IMM no sólo no ha dado ninguna señal –como sí lo ha hecho el gobierno nacional–, sino que aparte todos los días aparece con el anuncio de que va a aplicar un nuevo tributo.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón
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