Fin de la concesión a Uragua (2)

Intendente de Maldonado, Enrique Antía: OSE asegura el agua, que ya está. Pero ¿quién hace el saneamiento, que es lo que se necesita urgentemente? La Intendencia pagó para tener esta solución, ahora resuelven sin consultarla. Lo que para el resto del país puede no ser importante, para Maldonado es la vida.

EN PERSPECTIVA
Miércoles 30.07.03, 07.55.

EMILIANO COTELO:
“Estoy cansado de las decisiones que afectan a Maldonado y son tomadas en Florida, San José y Montevideo”, dijo ayer el intendente de Maldona, Enrique Antía. ¿A qué se refiere?

ENRIQUE ANTÍA:
Nadie le consulta nada cuando los temas afectan a Maldonado, y me parece que la gente de Maldonado tiene algún derecho a ser consultada.

EC – Usted alude a los departamentos a los que pertenecen los directores de OSE.

EA – Aludo en general a las decisiones que se toman si consultar... Yo escuchaba ahora al director Casas, a quien no tengo el gusto de conocer...

EC – Es un hombre de su partido.

EA – Es un hombre de mi partido pero no tengo el gusto de conocerlo; no he tenido la oportunidad de hablar con él en ningún momento, más que por teléfono una vez, cuando reclamé para Maldonado una comisión de contralor que no está marchando...

EC – Discúlpeme: es llamativo que teniendo a un hombre de su partido en el Directorio de OSE, usted no haya tenido un diálogo fluido cuando estaban en juego cuestiones tan importantes. No entiendo muy bien.

EA – A nosotros no nos llamaron nunca por este tema. Digo “nosotros”, y mire que he hablado de esto con el diputado de Maldonado por el Partido Nacional, y con matices opina prácticamente lo mismo que yo; con el diputado y con el senador por el Partido Colorado, quienes también tienen una coincidencia en un 90% con la posición del intendente. Vemos que hay un manejo de esta situación que afecta y va a afectar tremendamente a Maldonado, y no se pide opinión. Yo estoy sorprendido.

Cuando dije eso que usted citaba fue anoche, ante el llamado de un periodista, y lo dije molesto porque es una decisión que de pronto la gente de San José, Florida o Montevideo la ve como algo sin importancia, pero es trascendente para Maldonado: le va la vida a Maldonado en que se haga o no el saneamiento.

¿Sabe cuál era la decisión de OSE antes de que se resolviera la concesión? Año 2085. Ni los hijos de mis hijos podrían ver el saneamiento. Y eso afecta directamente al turismo, y afecta directamente las posibilidades de desarrollo de mi departamento y del país: nadie duda qué significan las costas de Maldonado para el país. La concesión preveía toda la inversión y resolverlo para siempre. De eso nadie habla; hablan de la provisión de agua: “El agua, el agua, nosotros proveemos bien de agua y la necesidad de abastecimiento de agua...” Claro, es básico, pero acá el abastecimiento del agua es un tema que está resuelto. Con matices, pero prácticamente resuelto.

EC – Usted dice que, el hecho de que OSE pueda tomar la concesión de un día para el otro y suministrar agua potable no está en duda, pero ese no es el tema que le preocupa.

EA – Si el abastecimiento de agua lo hace Uragua, “Queragua”, “Miragua” u OSE, a los efectos de Maldonado es lo mismo porque es un tema fácil de resolver. OSE lo hizo muchos años, con las dificultades del caso, con un sistema que tenía sus enormes falencias, pero a un par de años de concesión es un tema resuelto; la gente de Maldonado paga lo mismo que en Montevideo, no hay diferencia de tarifas...

EC – Usted se refiere a la tarifa de Uragua, porque el de Aguas de la Costa es otro tema.

EA – La tarifa que es cara es la que abarca a una zona de Manantiales y La Barra, que es otra concesión, hecha en otra época, y ahí sí creo que hay un problema de precios al que hay que buscar una solución porque esa agua es carísima. Pero en el resto el precio es el mismo, y en eso se fue prudente en la concesión porque se puso un tope y este concesionario del que se habla ahora, Uragua, en ningún momento pudo pasar el límite del precio de OSE en el resto del país, cosa que da garantías a la población.

Por otro lado, los servicios en Maldonado están mejor. La gente común, la gente de los barrios, de San Francisco, de Maldonado Nuevo, del centro, de San Carlos, de Piriápolis, tiene un servicio que se cumple correctamente y con una inversión mayor a la que se hizo siempre. El gran tema del que nadie habla en este momento, y sobre lo que yo quiero alertar, sobre lo que usted le preguntó recién al director Casas (vuelvo a decir que no tengo el gusto de conocerlo) y tampoco le contestó es quién hace el saneamiento después. Hay una inversión inmensa que hace al futuro de Maldonado, de desarrollo, de la posibilidad de que sigan viniendo inversiones, porque Maldonado no puede seguir creciendo si no desarrolla el saneamiento: se nos convertiría toda la costa en marchas de materia orgánica, como se vio técnicamente hace 10 a 12 años, cuando esto se inició.

EC – Se podría decir que es una suerte...

EA – Que no haya pasado nada.

EC - ...que en las últimas temporadas Punta del Este no se haya saturado de visitantes, porque Punta del Este mismo está al límite en cuestión de saneamiento.

EA – Exacto: el año pasado trabajamos a media máquina o a un tercio de máquina. El día que tengamos (como hay expectativas para el verano próximo, con la mejor relación de precios en la región) ocupación plena, vamos a tener problemas. Ya hay problemas en Maldonado desde hace 20 años con el saneamiento.

Yo creo que hay que llevar las cosas a su debido término y buscar soluciones, porque decir “Tranco y tranco, que se vaya Uragua”... No estoy defendiendo a la empresa ni la voy a defender, a pesar de que hay toda una campaña paralela y una intransigencia contra esta empresa; pero no la voy a defender: que se defienda sola. Al que tengo que defender es a Maldonado; primero que se lo respete, que se lo consulte: yo nunca hablé de este tema, nunca fuimos citados por el Directorio de OSE ni por ninguno de sus directores. Con quien había hablado de esto, estábamos de acuerdo en plantear una nueva realidad, era con el ingeniero Cat, un técnico que conoce, que tiene amplia experiencia, y estaba de acuerdo en buscar salidas porque venía que esto iba a dejar rengo a Maldonado.

EC - ¿Cuándo fue eso?

EA – Antes de que se fuera del Ministerio [de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente]. Cuando el Partido Nacional se retiró del gabinete se cortaron las comunicaciones con el Ministerio.

Ahora, tengo información de que la empresa no quiere irse: quiere buscar caminos para renegociar distintas cosas porque hay una situación que evidentemente está complicando.

EC – Usted se refiere al cuadro económico del país al haberse modificado las condiciones por ejemplo en el tipo de cambio, que afectaron a su negocio, y que se impone...

EA – ...sentarse a conversar y buscar salidas y soluciones, y eso es a lo que aspiro, el llamado de atención que estoy haciendo: señores, reúnanse el ministro de Economía, el de Vivienda, el principal de la empresa, el Directorio de OSE, para que no haya ‘teléfonos descompuestos’ como parece que hay, y busquen una solución.

Tengo información de que la empresa quiere reunirse con el ministro de Economía desde hace cuatro meses, y no ha podido reunirse nunca. Con el nuevo Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, no se ha podido reunir nunca más allá del subsecretario. Este es un tema demasiado trascendente como para no reunirse: le va el destino a la principal fuente de ingresos del país, que es el turismo. Si esto se cae, después caen las posibilidades de desarrollo turístico, y se lo digo consciente: OSE nunca pensó invertir en saneamiento en Maldonado porque no tiene plata. He escuchado a más de un dirigente decir que el país está quebrado, que no puede invertir en nada... ¿y quién nos va a hacer el saneamiento? ¿Cómo van a resolver eso que está firmado ahí?

Yo quiero hacer reflexionar también a la opinión pública. Hace no sé cuántos años que veo cerrado al Hotel Carrasco, en Montevideo, creo que le corresponde a la Intendencia. Empezaron una obra, pero como cambiaron las reglas de juego flexibilizaron las cosas para que la obra se pueda reflotar, porque de lo contrario eso sigue cerrado.

EC – Según ha trascendido, está en curso una negociación de la Intendencia de Montevideo con los concesionarios de la obra, que estaría dando a luz en estos días un nuevo contrato con condiciones más flexibles.

EA – Lo cual me parece muy bien. Yo le pongo un ejemplo de Maldonado, para no hablar de terceros: la terminal de ómnibus de Punta del Este. La empresa me paga en dólares y hace un año, cuando saltó este lío, se presentó a buscar un nuevo sistema porque con este valor del dólar se retiraron todas las empresas que operaban ahí; prácticamente no hay posibilidades de recuperación. Y si me devuelven la terminal y la tiene que gerenciar el municipio, y tengo que poner más funcionarios, me sale más caro. Tengo que tratar de encontrar una salida económica y legal del municipio para no perder plata, para no ponerme yo a cuidar los andenes y a limpiar los baños de la terminal, y volver a un estado ineficiente, a agarrar una carga imponente para el pueblo de Maldonado.

Entonces: hay que sentarse a buscar una solución que sirva al país, que no sea regalarle la cancha a Uragua, de ninguna manera, pero rever el plan de obras en la situación real, en las condiciones actuales, pero salvar para Maldonado la obra que el pueblo ya pagó: nosotros pagamos U$S 10 millones en consultoría. Hace 10 años el gobierno de [el intendente Domingo] Burgueño puso la plata que OSE no ponía; la pusieron a medias para comprometer una solución. Maldonado siempre pone, hace un esfuerzo para comprometer, pero cuando llega el momento de darle a Maldonado lo que Maldonado pone para el país, los recursos no aparecen. Esa es la preocupación que tengo como intendente de Maldonado, más allá de una defensa puntual, un tema en el que no quiero... Yo no estoy defendiendo a Uragua, pero me gustaría que le preguntaran a la gente en Maldonado qué pasa con la concesión. Porque no puede haber sido tan distinto, cuando el 95% de los mandos en Uragua eran los mismos ingenieros y capataces que tenía OSE, aunque hay algunas cosas que falta ajustar.

***

EC – El intendente Antía decía recién que el 95% de los ingenieros y capataces de Uragua eran los mismos que actuaron en OSE. Ese es otro de los tantos puntos increíbles que tiene esta situación: en su momento, el Estado uruguayo (todos nosotros) pagó U$S 8 millones de incentivo de retiro a los funcionarios de OSE que fueron absorbidos por la concesionaria, que son unos 70 de los 150 empleados de la compañía. Ahora que OSE se haría cargo del servicio, ¿qué hacemos con esos U$S 8 millones? Porque supongo que esos funcionarios van a volver a OSE.

Ministro de Economía, Alejandro Atchugarry: El concesionario comunicó por escrito que no puede cumplir el contrato. Lo lamentamos, pero ahora el servicio vuelve a OSE y se verá cómo encarar la inversión en saneamiento. La concesión sigue siendo un buen mecanismo, pero también hay que cuidarlo: la empresa debe cumplir lo pactado.

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón

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