05.08.2003




































“TODO HACE PENSAR QUE REABRIRÁ EL 25 DE AGOSTO DE 2004”

El Teatro Solís sigue creciendo

Directora de obra, arquitecta Eneida de León: Los trabajos debieron comenzar en junio del año pasado, justo cuando el país tembló, y se iniciaron en octubre. Al mismo tiempo que las obras de ingeniería se ha trabado en detalles como la restauración de las arañas, de los frentes de los palcos. La primera etapa está totalmente presupuestada y se está cumpliendo en tiempo. Las nuevas instalaciones permitirán desarrollar actividades que antes no eran posibles, y después de la inauguración se podrá continuar ampliando y mejorando el teatro.

En perspectiva

EN PERSPECTIVA
Viernes 01.08.03, 08.44.

EMILIANO COTELO:
“Mi trabajo es terminar con la mejor calidad lo que parecía que no se iba a terminar nunca”. Así define el desafío que tiene entre manos la arquitecta Eneida de León, quien desde hace un año y medio dirige la segunda etapa de la restauración del Teatro Solís.

Después de una intensa polémica sobre los costos de estos trabajos y con la recesión en pleno vigor, a la arquitecta De León le tocó tomar la posta cuando la Intendencia debía recortar el presupuesto y además se volvía obligatorio poner plazos concretos, perentorios.

¿En qué se basa para asegurar tranquilamente que la sala se reinaugurará el 25 de agosto de 2004? ¿Cuál es su método de trabajo? Vamos a conversarlo con la arquitecta Eneida de León, quien, entre otras cosas, ha dicho: “Acá yo cuido cada peso como si fuera mío”.

Nos acompaña también Rosario Castellanos, quien hoy, en vez de andar por las calles, se ha metido en estudios. Esta semana Rosario estuvo en el Solís e hizo un apretado resumen de lo más nuevo, lo que más le había llamado la atención de los trabajos ya terminados.

ROSARIO CASTELLANOS:
Sí; además tuve la clara sensación de que no había quedado nada en relación a lo que también tuve oportunidad de ver en materia de cosas que estaban propuestas y que ni siquiera me había imaginado en algunas anteriores. Realmente creo que valía la pena darle más tiempo a lo mucho que va a cambiar el Solís de acuerdo a este planteo.

EC - Comencemos conociendo a nuestra invitada. La arquitecta Eneida de León se recibió en 1977 en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República. Sus primeros trabajos fueron en Estudio 5, en Feder & Svirsky y en algunas empresas constructoras. Entre 1985 y 1989 dirigió varias obras del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, sobre todo en el interior del país. Después dirigió la obra del Estudio Auditorio del Sodre, en su primera etapa (1989-1991), y luego la ampliación del Hospital Pereira Rossell (1991). Paralelamente se desempeñó en la actividad privada, por ejemplo en Pintos Risso SA. Volvió a obras públicas en 1997, con la restauración del Parque Hotel y más tarde con la remodelación de la Sala Zitarrosa (1999). De nuevo en el sector privado, coordinó la obra de las Torres Náuticas, de la empresa Campiria, en el Buceo, al lado del Montevideo Shopping (1999-2001). Y en enero de 2002 fue nombrada por la Intendencia de Montevideo para dirigir la restauración del Teatro Solís, que está a cargo de la empresa Teyma SA.

O sea que le han tocado varias obras grandes, algunas de ellas empantanadas.

ENEIDA DE LEÓN:
Por lo menos complicadas.

EC - ¿Está acostumbrada a este tipo de desafíos?

E de L - Sí; los años de experiencia, el sistema de trabajo dan eso… Yo parto de la base de que hay un sistema fundamental de trabajo en cualquier profesión que es el trabajo en equipo; nadie puede hacer solo nada muy grande. Quizás algún gran creador, pero la gente común y corriente, como nosotros, tiene que trabajar en equipo y sacar lo mejor de cada uno.

EC - Claro, pero al oyente incluso puede llamarle la atención, todavía a esta altura del siglo XXI, que de semejante emprendimiento se encargue una mujer.

E de L - Llama la atención porque las mujeres estamos bastante desplazadas de cargos de ese tipo. Me han preguntado en otros momentos, pienso que quizás una tiene que hacer el doble del esfuerzo que tendría que hacer un hombre para lograr lo mismo.

EC - Estamos acostumbrados a mujeres arquitectas, pero arquitectas y directoras de obra se da mucho menos.

E de L - Se da menos, efectivamente.

EC - ¿En qué consiste la dirección de obra en este caso particular de la restauración del Solís?

E de L - En este caso particular yo soy la responsable, nombrada por la Intendencia, ante ésta y ante la empresa constructora, y coordino el equipo de trabajo, o sea asesores, arquitectos, ingenieros; hay todo un equipo de 14 personas directamente vinculadas a mí. Recibo un gran apoyo de la Intendencia y tengo un equipo fuera de serie, si no sería imposible hacer lo que estoy haciendo.

Es una tarea compleja en el sentido de que la obra de arquitectura es compleja; el Solís es una obra compleja, una obra que combina la restauración de un edificio que tiene 150 años y tratar de llevar la tecnología del siglo XXI en la parte de escenografía y escenario. La finalidad de este proyecto es recuperar un teatro con las características que todos los montevideanos quieren. Uno lo ve en la calle: la gente común, que quizás no vaya al Solís, dice que quiere verlo terminado. Por otro lado, el artista, el actor, el cantante, el bailarín, quieren tener una tecnología que no tenían; los actores comentan, por ejemplo, que desde el escenario se escuchaban los ruidos de las motos que pasaban por Reconquista.

EC - Se quedó corta, la empresa es más compleja todavía, porque además usted tiene un presupuesto que ha sido recortado y la obligación de sacar adelante la obra en plazos que tienen fechas muy concretas.

E de L - El control del cronograma, precisamente, que va a garantizar que la obra termine en fecha. Ese es el otro aspecto, también complejo y también hecho en equipo. Hay un ingeniero que viene todas las mañanas al Solís y revisa el cronograma de obra; y tratamos de que la empresa nos acompañe en este avance. La obra comenzó en octubre, por la crisis financiera del año pasado.

EC - O sea que a usted la nombraron en enero, pero la obra recién pudo arrancara en octubre.

E de L - En febrero se abrió la licitación; a fines de marzo, principios de abril, se elevó al Tribunal de Cuentas, llevó todo el trámite correspondiente y se adjudicó en mayo. La obra debió haber empezado en junio, pero como es de pública notoriedad en junio, julio y agosto el país tembló y en ese momento firmar un contrato por unos cuantos millones de dólares era difícil para todo el mundo.

EC - Recordemos que hay una primera etapa de trabajos en el Solís que fue desde que se decidió cerrar la sala por razones de seguridad, a fines de 1997…

E de L – 1998: se cerró en 1998, además porque hubo un principio de incendio. Ahí comenzó toda una etapa de estudio, de proyecto y hubo una gran inversión porque el que tenemos es un proyecto completo de toda la etapa, incluyendo la que se hizo, la que se está haciendo ahora y la que se podrá hacer en el futuro.

EC - En esa primera etapa también se trabajó, se "desarmó" el Solís.

E de L - Se desarmó el Solís, se investigó, se retiró lo que debía ser retirado porque estaba en muy mal estado –había peligro de derrumbe en algunas partes–, se apuntaló las partes que podían correr peligro y se hizo la parte rústica, lo que nosotros llamamos rústico de la estructura, de la parte vestíbulo; las excavaciones en el subsuelo... (Porque el área del teatro aumenta bastante, por ejemplo en el vestíbulo y en la parte de escena; en el vestíbulo ya está realizado, se hizo en la primera etapa). Después en el año 2002 también se invirtió en restaurar los frentes de palco, 110 frentes de palco con adornos metálicos de bronce; se restauraron las grandes arañas, la araña de sala y la del foyer. Tomamos esa decisión porque pensamos que cuando uno está llegando al final de la obra normalmente no hay dinero para ese tipo de cosas, para restaurar una araña, para el tapizado, etcétera.

EC - Estos últimos trabajos que está enumerando, ¿cuándo se hicieron?

E de L - En mayo, junio, julio del año pasado, antes de comenzar la obra en octubre. La obra empezó tres meses después de lo esperado.

RC - En la historia que venía contando la arquitecta hay dos aspectos en los que vale abundar. Hay una obra de modificación muy importante que se licitó con una empresa de albañilería y un trabajo de restauración de elementos, que tú decías que había comenzado antes de resolver la licitación, porque el Solís tiene esos dos aspectos.

EC - ¿Con qué limitaciones entró usted en esta tarea de dirección de obras? Por ejemplo en materia de presupuesto...

E de L - Voy a darle las cifras de febrero de 2002. El presupuesto se ajusta por paramétrica a lo largo del consumo de la obra. (...)

Son 103 millones de pesos y 1.300.000 dólares del presupuesto de la licitación de la empresa Teyma; eso es la inversión de la obra civil. Luego la Intendencia destinó unos 3.000.000 de dólares para todas las partes de restauración, de mecánica escénica, de butacas, telones, iluminación técnica. (Ahí hubo que fijar un tope) porque es muy difícil establecer hasta dónde se puede llegar con esos rubros. Le pongo un ejemplo: en mecánica escénica –estamos hablando de sistemas de motorización o contrapesado de todos los elementos que se manejan dentro de la escena– uno puede gastar desde 3 hasta 30.000.000 de dólares. Ahí es donde empezamos a recortar en función de los rubros que tenemos. Esas son las cifras, con eso el teatro se abre y se abre en condiciones de no cerrarlo más.

(...)

EC - Se inaugura el 25 de agosto de 2004 el cañón central; quedan para después lo que fue el restaurante El Águila y el museo, a la derecha.

E de L - Exacto. En el proyecto esas dos alas tienen alguna sala polivalente de trabajo y serían para la Filarmónica, la Comedia Nacional y demás.

EC - ¿Rosario?

RC - Me gustaría saber si la estimación anterior no estaba hecha sobre una obra a la que se pensaba dotar de más lujo de lo que finalmente se resolvió y por ahí vino la disminución del presupuesto.

EC - A eso apuntaba mi pregunta de por dónde se había logrado reducir la inversión. Por ejemplo, vi el dato de que estaba previsto incluir mármoles italianos en las terminaciones del Solís y finalmente se opta por granito nacional. Esa es una sola de las muestras de por dónde se está recortando, por lo visto con criterio.

E de L - Ese aspecto no viene del momento de la licitación o de los montos de que estamos hablando. Eso es ahora, del recurso de la obra y es un poco parte de mi función; dada la situación en que se encuentra el país y la inversión lógica, con la finalidad de abrir el Solís en condiciones absolutamente decorosas y de funcionamiento casi ideal a los efectos de la parte escénica, cuando miramos el proyecto efectivamente había granitos italianos y otros elementos que de pronto hace dos o tres años era muy lógico utilizar.

EC - No sé si era muy lógico; dejemos eso al criterio de los oyentes.

E de L - En ese aspecto respeto mucho a los colegas que trabajaron mucho y fuerte en esto, porque en definitiva fueron opciones; en cualquier profesión uno respeta al otro en ciertas decisiones, aunque no las comparta.

El equipo que está trabajando ahora está abocado a tratar de llevar el Solís a un nivel de inversión lo más bajo posible. Hay una realidad: si invertimos este monto globalmente, que la escena, la inversión en luminarias, en audio, en maquinaria escénica, nos gustaría llevar ese monto al máximo posible, o sea esa infraestructura de un teatro que va a modificar fundamentalmente la parte tecnológica. Arana lo definió muy bien, cuando vino y miró los planos y los detalles, dijo: “Me gustaría que el Solís no perdiera su austeridad republicana”. Esa austeridad es lo que estamos tratando de recuperar.

EC - Por eso el ejemplo del granito es bien interesante, porque nuestro país tiene granitos muy buenos. Es lógico que haya materiales nacionales en la terminación del Teatro Solís, y no el capricho de un mármol italiano, no va a cambiar grandemente la categoría del teatro y sin embargo se logra una obra interesante y jerarquización de la producción propia del país.

¿Hay otros ejemplos que se puedan mencionar de ese tipo de recortes?

E de L - Estamos tratando de no bajar el nivel de la obra, no queremos que la obra sea más barata. Lo fundamental es que la obra mantenga su calidad. Como técnicos sabemos que no es fácil obtener inversión en mantenimiento en la administración pública –tengo muchos años en la administración pública.

EC - Entonces hay que hacer inversiones que requieran poco mantenimiento.

E de L - Claro, hay que hacer cosas que duren 100 años sin tener que repintarlas, reacomodarlas, cambiarlas o modificarlas.

RC - Tú empezabas diciendo qué extraño es que se pusiera una mujer al frente de este tipo de decisiones, y yo creo que este tipo de argumento de sentido práctico es esencialmente femenino, así que no me extraña que cuando las papas queman esté al frente una mujer.

***

EC - Estamos hablando de la restauración y la modernización del Teatro Solís, ¿no?, porque van a pasar las dos cosas. Veamos en primer lugar qué conservará el teatro de su etapa anterior para ver después en qué mejorará.

E de L - El teatro va a conservar el vestíbulo, con sus ocho columnas de mármol de 1856, y se restaura la parte de acceso. La gran modificación del proyecto que me parece muy importante señalar y de la que no hemos hablado, es que a todas las localidades se accede por la calle Buenos Aires.

EC - Se modifica el ingreso.

E de L - Exacto, por dos grandes escalinatas. Antes se entraba también por Bartolomé Mitre y por Juncal.

EC - Así que ahora se va a entrar solamente por Buenos Aires.

E de L - Sólo por Buenos Aires; habrá accesos para discapacitados, ascensores... Toda una tecnología nueva en esa parte; se restauran las arañas patrimoniales. Luego se ingresa a la sala, que también aparece restaurada, obviamente con nuevas butacas, restauro de frentes de palco, apoyos de terciopelo, la boca de escena no se modifica, la parte de telones se va a hacer nueva… A los efectos del espectador el teatro va a ser remozado. Después va a haber un elemento fundamental dentro de la sala, que es el plafón de sala, que es una pintura de 1909, de Pio Collivadino y Carlos María Herrera, que se está restaurando en este momento.

EC - De eso hablaba Rosario el martes. Es una pintura sobre tela.

E de L - Sobre lienzo, es una pintura en temple; hay otra pintura en óleo sobre el escenario. Está trabajando un equipo muy importante de restauradores: el señor Barba, restaurador que trabajó en el taller de patrimonio; restauradores alemanes; una chica que vino de Alemania y otra que vive acá; y un equipo más grande de gente que incluye estudiantes de Bellas Artes, que también aprendieron un poco de eso y se incorporaron.

EC - ¿Rosario?

RC - Creo que también en el hall hay variantes, en cuanto a que se ganó un nivel más bajo que no aparecía, el piso de baldosas a cuadros.

E de L - Exacto; se hizo en la etapa anterior.

RC - O sea que el hall va a tener dos niveles.

E de L - Exacto; en el nivel inferior van a estar las boleterías, la ropería y los servicios higiénicos para el público.

RC - El piso de la sala es nuevo también.

E de L - Sí, totalmente nuevo; todo el escenario nuevo.

RC - Con loza.

E de L - Exacto. Resumiendo un poco la historia: el teatro pasa a estar mejor equipado, a ser más seguro –hay una inversión muy importante en la parte de seguridad e incendio–, es más confortable, tiene aire acondicionado, va a ser más accesible, porque el problema de las escaleras y demás se resuelve, y esperemos que sea mejor gestionado. La intendencia está trabajando sobre la gestión de este teatro, tratando de que en el futuro funcione de una forma especial.

EC - Todo esto venía a cuento del piso, que cambió.

E de L - Debajo de la platea hay una loza de hormigón que aísla. Toda la sala queda aislada del exterior desde el punto de vista acústico, aparece una gran loza de hormigón, de 16 centímetros, por encima del plafón de la sala, muy pesada.

EC – Antes, el techo de la sala, como recordaba Rosario el martes, era de madera.

E de L - Se sustituyó por una loza de hormigón que aísla la sala del exterior totalmente. En todos los niveles va a haber ambulatorios, o sea que por ahí también la sala va a estar aislada del exterior, y en el piso, debajo de la platea, hay una sala de máquinas y una enorme loza de hormigón que ya se realizó.

EC - ¿Qué pasa con el foso de la orquesta?

E de L - Se crea un foso de orquesta, que ya existía pero va a ser más grande y se va a elevar, por lo tanto va a poder ser incorporado ese sector a la platea, al escenario, o va a funcionar como foso de orquesta.

EC - Desde el punto de vista del espectador el escenario no cambia, la boca queda igual.

E de L - Queda igual, pero detrás la modificación es absolutamente total.

EC - ¿De qué se trata esa modificación, esa ampliación? Porque crece mucho hacia atrás y hacia arriba.

E de L – Y a los costados también.

EC - ¿Qué es lo que se hace?

E de L - Se hace lo que nosotros llamamos la caja escénica. Es un cubo muy grande donde va toda la mecánica escénica para el funcionamiento del teatro, a efectos de que ese volumen abrigue, pueda tener toda la escenografía, todo el movimiento hacia arriba y hacia abajo para admitir sucesivos espectáculos y cambios es más fácil. Se hacen accesos directos desde el exterior para escenografía y una serie de cosas. Además toda la inversión en mecánica escénica que resulta imprescindible para que sea un teatro del siglo XXI.

EC - Todo el volumen alrededor del escenario crece de manera importante.

E de L - Se va a ver de afuera, es una realidad.

EC - Usted daba alguna indicación de qué tipo de crecimiento tiene.

E de L - El total del escenario es de unos 20 metros, por encima de la azotea actual va a salir un volumen, un cubo de unos 10 metros por 25.

EC - Eso va a permitir una mayor comodidad para el manejo de escenografía, que a su vez se complementará con mecánica escénica de última generación, etcétera. ¿A qué se refiere el término de mecánica escénica?

E de L - Yo tampoco conocía todos esos detalles de lo que es un teatro. Nos pasa a los profesionales que cuando abordamos un nuevo programa aprendemos mucho y terminamos sabiendo mucho de un tema porque tratamos de investigar; es la única forma de llegar a conocer algo. La realidad es que el teatro, detrás del escenario, detrás de la boca de escena, es todo un mundo donde trabajan cientos de personas moviendo desde escenografía, luz, audio... La nueva tecnología conlleva una serie de sistemas, elementos, máquinas, etcétera, que llega a hacer muy difícil pensar hasta dónde se debe invertir en eso. Por eso es que para fijar las etapas de este sistema –toda la parte detrás de la boca de escena– hemos tenido que hacer muchas consultas para llegar a hacer una inversión lógica para esta etapa y dejar toda la infraestructura posible para que en el futuro se pueda seguir invirtiendo.

RC - Es importante señalar que, de acuerdo a su anterior proyecto, el Solís no tenía posibilidad alguna de elevar a telón abierto una escenografía rígida porque la escenografía no daba; tampoco se podía sacar por el costado, porque tampoco daban lo que ustedes llaman “los hombros”; había que partirla. O sea que todo ese ruidaje que se sentía a telón cerrado, desarmando, va a desaparecer, y se podrá hacer a telón abierto. Por eso digo que el cambio es impresionante, por eso desde la calle Reconquista hoy se ve que se quedó sin techo, por ahí va a salir un volumen importante por encima de lo que hasta ahora era un techo de chapa a dos aguas.

E de L - Se mantiene absolutamente sin tocar –obviamente, vamos a tratar de restaurarla lo más que se pueda– la fachada del Solís, pero adentro la modificación es total: se modifican los “hombros”, la infraestructura…

RC - Aclaremos que los “hombros” son los laterales del escenario.

E de L - Ahora yo también estoy con el léxico de los actores. Todo eso se amplía y además se excavó dos niveles hacia abajo para dar también toda la parte de servicios que el teatro no tenía; eso estaba tugurizado… No hay que olvidar cómo nació este teatro: nació con una inversión privada y luego en una segunda etapa se construyeron las salas laterales, pero allí había viviendas, comercios, etcétera; eso nunca fue para teatro. Ahí terminaron estando la Comedia y la Escuela Municipal de Arte Dramático, fue toda una serie de elementos que crecían. Realmente, creo que tugurización es la palabra para lo que encontraron los arquitectos o los ingenieros cuando empezaron a desmantelar y a mirar qué pasaba con la instalación eléctrica. Yo hablo de un teatro más seguro; esa es otra de las finalidades: tenemos que cuidar que tenga la mejor acústica posible, la mejor utilización escénica, pero que también que sea seguro. Es un teatro de madera.

EC - Usted hablaba de los servicios y de cómo se va a aprovechar el espacio que se ganó hacia abajo, en la medida en que se hizo una excavación. Recuerdo haber pasado alguna vez a la parte de atrás del escenario y haberme encontrado con camerinos que eran como casillitas de madera al mismo nivel del escenario, atrás. ¿Dónde van a estar ahora los camerinos?

E de L - A los costados del escenario se construyen como dos edificios de cinco pisos, que están dentro del teatro. En esta etapa se va a hacer un piso y medio, casi dos pisos completos; y después todo el rústico a los efectos de cerrar el edificio. Por lo tanto en el futuro se puede seguir invirtiendo para hacer diferentes camerinos, vestuarios, diferentes servicios que van creciendo.

***

EC - El 25 de agosto se va a reinaugurar lo que en la jerga se llama el cañón central.

RC - Es una “T” en planta, en realidad.

EC - ¿Cómo es esto de que se va a crear un escenario abierto que dará a la calle Reconquista?

E de L - Trabajando sobre el proyecto hay previstos dos elementos fuera del teatro porque no entran, que son lo que llamamos unidades exteriores. Las unidades exteriores llevan los tanques de agua, los elementos del aire acondicionado que deben estar fuera porque dentro del edificio es imposible. Una de esas unidades exteriores está en la plaza del mercado, y la otra está pegada sobre la fachada de Reconquista. A lo largo de este tiempo en que hemos seguido estudiando con todo el equipo de arquitectos, ingenieros y demás, empezamos a pensar en la posibilidad de dar algún uso a esos elementos en el exterior y que la fachada sobre la calle Reconquista no fuera la fachada trasera del Solís. Además la intervención en el escenario y la caja escénica, todo ese volumen que sale, es un elemento urbano muy importante. Con ese criterio se rediseñó, se hizo una intervención menor en la parte del proyecto a efectos de que esa unidad exterior, que tiene los tanques de agua y demás, pueda servir como un escenario al aire libre sobre la explanada de la calle Reconquista. Pensamos que eso le va a dar en un futuro vida a esa zona que hasta ahora no se ha incorporado a lo que ocurre en la parte delante del Solís, en Bacacay y Bartolomé Mitre.

EC - El teatro seguirá teniendo el tipo de actividades que tenía antes de su cierre.

E de L - Efectivamente.

EC - Habrá teatro, música, ópera; no se planea ninguna especialización del Teatro Solís.

E de L - No. En realidad el teatro de palabra hablada y el de música son contradictorios en cuanto a su volumen, sus terminaciones y demás. En este caso tenemos que lograr un teatro que sirva para todo; prácticamente va a ser el único teatro uruguayo con 1.200 localidades. Ojalá se pudiera terminar el Sodre también, ahí podríamos especializar un poco más toda la parte cultural de Montevideo y de Uruguay, pero el Solís va a tener la doble función. Indudablemente la finalidad es que pueda ingresar la ópera, que puedan ingresar óperas mayores, que hasta ahora no habían podido: funciones de ballet internacionales que hasta ahora tampoco podían ingresar, porque no se podía actuar en ese escenario.

EC - Usted dice muy convencida que llega al 25 de agosto de 2004. ¿Cómo está tan segura?

E de L - Yo confío primero en el equipo que tenemos, trabajamos muchas horas, estamos haciendo un gran esfuerzo; la empresa constructora también está haciendo un grane esfuerzo.

RC - ¿Sábados, domingos y feriados?

E de L - Sábados, domingos y feriados; turismo, Carnaval… Esa ha sido la historia de esto. Pienso que con eso quizás podamos llegar, no hay duda de que llegamos el año que viene en el segundo semestre; el 25 de agosto es un emblema que a todos nos gustaría cumplir. (...) La fecha de 25 de agosto de 2004 es porque el teatro se inauguró y se reinauguró un 25 de agosto (en otras épocas tuvo otros cierres y otros arreglos), entonces la idea es tratar de llegar a esa fecha emblemática.

EC - ¿Pero no puede llegar a ocurrir, por ejemplo, que surjan dificultades de tipo económico con el manejo del presupuesto?

E de L - En principio esta etapa de la obra está financiada. Hay algo muy importante de lo que no hemos hablado, la licitación de esta etapa está financiada y hasta ahora se ha venido cumpliendo correctamente, cuando ya llevamos nueve meses de obra. Además, la empresa va a hacer cinco años de mantenimiento, queda dentro del contrato trabajando en el mantenimiento del teatro. Esto es muy importante.

EC - ¿Por ejemplo?

E de L - Va a asegurar toda la parte técnica, de aire acondicionado, de instalación eléctrica, de seguridad, de incendios... todo eso va a tener un mantenimiento hecho por la propia empresa, que va a entrenar a los posibles equipos de futuro para poder manejarlo. Hay mucha inversión en tecnología que debe mantenerse. El dinero está, la voluntad política de la Intendencia para hacerlo está, la empresa está, estamos todos trabajando; en principio no tendría por qué haber nada que impida la apertura del teatro el año que viene.

EC - Usted ha apostado unos cuantos asados a que llega el 25 de agosto.

(Risas)

E de L - Sí, sí.

RC - Aunque más no sea con un baile, si no hay butacas.

E de L - Unos cuantos del equipo tocan diferentes instrumentos, así que posiblemente inauguremos con la “Solís’ Band” –como nos llamamos, incluyendo algunos de la empresa Teyma– el 24 de agosto.

***

EC - Cerramos con el mensaje de Álvaro, que la conoce y dice: “Sabemos que con poco sos capaz de hacer mucho. Descontamos el éxito de esta nueva función en tiempo y en costo”.

E de L - Muchas gracias.

RC - Tengo una sugerencia: que exhiban la maqueta para que la gente la vea, porque creo que no se tiene la dimensión de la obra hasta ver la maqueta. ¿Por qué no la exhiben, para que el público vaya tomando conciencia de que la obra es mucho más que una restauración?

E de L - La obra está abierta, las oficinas están abiertas para que la gente pueda ver y conversar; ha ido mucha gente. Creo que más que hablar es importante verla.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón

Fotografía en estudio: Lucila Carbajal
Obras en el Teatro Solís: Juan José Pérez Caridad

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