Bancos socios de los Röhm no negocian

Patrocinante de ahorristas, Miguel Loinaz. La estrategia del Crédit Suisse, el Dresdner Bank y el JP Morgan es la que yo aplicaría si fuera su abogado: apostar a que corran los plazos y prescriban los derechos de los que no se presentaron, con su dinero generar más dinero, negociar cuando el fallo sea inminente y pagar con pesos flacos.



EN PERSPECTIVA
Jueves 30.10.03, 07.32.

JOSÉ IRAZÁBAL:
Informaba ayer el diario El País que los bancos internacionales socios del viejo Banco Comercial habrían iniciado en Argentina un proceso de acuerdos individuales con varios ahorristas de las empresas de los Rohm y funcionarios del Banco General de Negocios, a quienes ofreció el pago de sus depósitos a cambio del compromiso de no iniciar acciones judiciales.

Según esa versión, esas negociaciones se habrían iniciado luego de que el presidente argentino, Néstor Kirchner, convocara al Dresdner Bank y al J.P. Morgan para participar de la sindicatura de bancos que se encargará de reestructurar la deuda argentina en default por el Ministerio de Economía.

Ante la amenaza de los empleados y ahorristas del Banco General de Negocios de llevar a los tres bancos a los estrados judiciales de Nueva York y Europa, el director ejecutivo del Crédit Suisse, Frank López habría iniciado tratativas con empleados y accionistas.

La versión agregaba que ahorristas uruguayos ya iniciaron acciones ante esos tribunales contra los bancos accionistas del Comercial, lo que abriría una puerta para negociar con las tres instituciones. El diario añadía que fuentes vinculadas a esas demandas afirmaron que, “en caso de que los bancos negocien con Argentina, no les conviene que se cree una mala imagen por los juicios iniciados por los uruguayos”.

Decía además que, en los convenios que el Crédit Suisse está llevando a cabo, se compromete a devolver a los ahorristas el dinero depositado. El acuerdo también comprendería a los empleados, a quienes se ofrecería el mismo porcentaje de sus depósitos retenidos en el Banco General de Negocios (BGN) que al cliente que más dinero recupere a través de una demanda.

ALFREDO DANTE:
Pero el banco basado en Suiza negó ayer que él, el Dresdner Bank ni el J. P. Morgan estén firmando acuerdos con los depositantes del Banco General de Negocios, la Compañía General de Negocios o el Banco Comercial.

El País, que recoge hoy el desmentido, insiste de todos modos en que los bancos están firmando contratos con los empleados del Banco General de Negocios, y que “accedió a un documento firmado por Frank López que firma como director ejecutivo del Crédit Suisse”.

JI – Estamos en contacto con el doctor Miguel Loinaz, abogado de ahorristas del Banco Comercial que preparan un juicio precisamente contra estos bancos accionistas, que presentarán en Estados Unidos. Usted consideraba ayer que, detrás de esta posible negociación, era evidente la intención de estos tres bancos de arreglar su situación ante la imposibilidad de integrar la sindicatura de bancos con una demanda pendiente en los estrados internacionales.

MIGUEL LOINAZ:
Salvo esa noticia que surgió en un medio de prensa argentino y fue reproducida luego en Uruguay, las empresas no han mostrado al día de hoy ninguna intención de negociar con los damnificados, salvo la declaración genérica de “nos atendremos a las resultancias de los juicios”.

Si fuera abogado de los tres bancos, creo que es razonable. Porque con el correr del tiempo se producirán todas las prescripciones, tanto de la Compañía General de Negocios como del Banco Comercial y de las euronotas, que tienen una naturaleza jurídica un poco diferente. Entonces esperarán a que lleguen las prescripciones, a que muchos ahorristas de estas instituciones no se hayan presentado, y quedará obviamente un activo con el cual tendrán que cumplir (porque a nadie cabe duda de que los resultados de los juicios los va a obligar como socios y responsables del Banco Comercial y de las otras entidades a cumplir con el pago de los mismos). Entonces van a haber disminuido [sus obligaciones], van a obtener el beneficio de tener el dinero colocado generando más dinero durante un plazo importante en el que corren los juicios; son todos beneficios. Luego, probablemente, procurarán una transacción antes de llegar al final del proceso. Esto les permitirá pagar con un dinero más flaco algo que si hubieran pagado ya les habría salido más caro.

Esa es obviamente la estrategia de los tres bancos y, si pudieran –creemos que remotamente— ganar algún juicio, habrá algunos damnificados a los que nos les van a pagar.

JI - ¿Queda descartada esta información que, como usted decía, surgió en la prensa argentina y fue reproducida aquí? La información partía de que el presidente Kirchner convocó al Dresdner Bank y al JP Morgan para participar de la sindicatura de bancos que se van a encargar de la reestructura de la deuda en Argentina en default por parte del Ministerio de Economía, y que esa convocatoria habría disparado esa negociación con los ahorristas.

ML – Argentina va a renegociar su deuda externa y las indicaciones de bancos no se hacen a instancias de los gobiernos, sino que las presentan los bancos. En Argentina hay una situación diferente a la de Uruguay: en Argentina se ha decretado la quiebra del Banco General de Negocios, y es el único país con una normativa específica en materia de quiebras de bancos: cuando quiebra una institución financiera la misma se puede hacer –por decisión judicial— extensiva a los socios propietarios del banco. Esto quiere decir que podría extenderse la quiebra a los patrimonios personales de las familias argentinas propietarias del banco, los Röhm, los Braun, los Alzaga, los Dodero y algunas familias más, y además a los tres bancos.

Eso significaría que, si estos bancos extranjeros ingresan en la sindicatura, su patrimonio en Argentina podría ser liquidado y agregado a la masa del patrimonio del BGN. Supongo que eso es realmente lo que preocupa a los abogados argentinos de estos tres bancos, y esto se genera obviamente por el endeudamiento que ha dejado el BGN esencialmente con sus empleados y con entidades financieras importantes, como por ejemplo la Corporación Financiera Internacional del Banco Mundial.

JI – ¿En qué estado se encuentra el juicio que ustedes estaban preparando para presentar en Estados Unidos?

ML – El proceso está casi pronto. Hubo que agregar algunos expedientes adicionales generados en Uruguay: el expediente que tuvo que ver con el ex ministro de Economía, contador Alberto Bensión (que luego fue archivado, pero que contiene elementos muy importantes) por el acuerdo secreto por el que comprometió U$S 100 millones, y además la ampliación que los jueces doctores Balcaldi y Colmenero hicieron en los últimos meses, que fue realmente de mucho más peso que la que se efectuó con anterioridad. A estos elementos hubo que estudiarlos, fotocopiarlos, traducirlos, legalizarlos, y no olvidemos que en Estados Unidos se va a aplicar la parte formal del derecho norteamericano, aunque en el tema de fondo las disposiciones a aplicar son las del derecho uruguayo; por lo tanto no es sencillo el armado con estos elementos que se han ido agregando.

Hay una continua generación de elementos jurídicos nuevos que afectan lo que se está redactando, porque van apareciendo hechos nuevos que permiten tener nuevos elementos que permiten demostrar la implicancia y responsabilidad de los tres bancos en el manejo de las instituciones en las que eran socios mayoritarios.

JI - ¿A cuántos ahorristas está representando ahora?

ML – De la Compañía General de Negocios son algo más de 100, unos 107 clientes. Los poseedores de eurobonos están muy dispersos y representamos a algo más de 70 personas. Entre los ahorristas del Banco Comercial a los que no se va dar cumplimiento por lo menos en esta etapa, porque tienen más de 100 mil dólares, representamos a unas 36 o 37 personas. Pero, obviamente, entre estos últimos siguen llegando permanentemente porque el hecho de que se les abonara ha sido muy reciente, y pensamos que también los eurobonistas va a pasar lo mismo, esperemos que se les pague el 20% antes de fin de año.

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JI – Loinaz aclaraba que no existió ningún contacto entre los bancos y los ahorristas. El País avanzaba ayer en los acuerdos con el personal.

“En un documento al que accedió El País, que el director ejecutivo del Crédit Suisse firmó con un empleado y su cónyuge, se señala que la persona ‘y sus herederos, albaceas y representantes absolverán, rechazarán y renunciarán a efectuar cualquier demanda, acusación, reclamo, juicio o proceso administrativo u otra acción en cualquier foro o jurisdicción en cualquier lugar del mundo. El acuerdo comprende a todas las empresas del grupo Röhm, incluidos el Banco Comercial y la Compañía General de Negocios’.

“El empleado tenía un depósito en el BGN de 1,8 millones de dólares y el banco le ofreció 2 millones de dólares, a cambio de que renuncie a iniciar acciones. El texto señala también que la absolución y renuncia ‘serán totalmente aplicables incluso luego de que su contrato con la empresa haya terminado sea cual fuere el motivo’. El acuerdo determina también que durante el tiempo en que trabajen para la firma no puede iniciar ninguna demanda, acusación o reclamo y no iniciar ningún juicio o proceso administrativo, u otra acción en cualquier foro o jurisdicción contra José y Carlos Röhm, el Banco General de Negocios, la Compañía General de Negocios y cualquier otra empresa del grupo”.

“La propuesta efectuada a los empleados afirma que ‘si uno o más depositantes recuperara y recibiera sumas en relación con convenio o una sentencia, para compensar parcial o totalmente las pérdidas, el empleado tendrá derecho a reclamar y la empresa acepta pagarle el porcentaje del depósito equivalente al porcentaje otorgado al depositante que haya recibido el mayor porcentaje de sus perdidas’.

“El documento agrega que ‘el acuerdo no deberá ser interpretado de tal modo que altere o afecte de cualquier forma los términos de su empleo en la empresa, y subsistirá a la consumación de su empleo’.

“Añade que el acuerdo será interpretado de acuerdo con las leyes del Estado de Nueva York y que el empleado renuncia a cualquier objeción que pudiera tener en cualquier momento, sobre la jurisdicción indicada”.

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En otro aspecto, recuerda el matutino que “Los bancos J.P. Morgan, Crédit Suisse y Dresdner Bank iniciaron un juicio al Estado uruguayo para cobrar los cien millones de dólares que pusieron para capitalizar el Banco Comercial. Pero si se probara la responsabilidad de los bancos, la situación podría revertirse y el Estado uruguayo podría iniciar un juicio civil reparatorio.

“Al responder a la demanda iniciada por los bancos el Estado argumentó que en el momento en que ocurrieron los hechos Uruguay no estaba en conocimiento de la situación y que los socios extranjeros de Röhm sí, lo que queda probado porque integraban el directorio.

“Los bancos Crédit Suisse, Dresdner Bank y Chemical Overseas Holding, ex accionistas del Banco Comercial, denunciaron al juez José Balcaldi 16 sociedades y una lista de 65 personas para ‘rastrear el destino de los cientos de millones de dólares defraudados a los largo de una década’, a los que responsabilizaron de cometer los delitos de asociación para delinquir, insolvencia societaria fraudulenta, estafa, violación a la ley Nº 2.230 y encubrimiento.

“El 26 de setiembre, más de 1.500 depositantes del ex Banco Comercial presentaron una ampliación de denuncia al juez penal José Balcaldi contra el Dresdner Bank, Crédit Suisse y J.P. Morgan, a raíz de la denuncia presentada por los bancos accionistas hace unos días en la que deslindaron responsabilidad de las maniobras llevadas adelante por los Röhm”.

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Antecedentes

El fraude del Banco Comercial, hasta ahora U$S 750 millones. Perito judicial Miguel Navajas. El problema empieza cuando se elige a quién vender un banco, y esto comenzó cuando lo compraron los Röhm. Cinco vertientes para el fraude: el faltante de valores; los créditos otorgados irregularmente al entorno del grupo; la operativa de valores a futuro con el corredor Ignacio Rospide; la operativa de banca privada a través del Commercial Investment, y las maniobras de la Compañía General de Negocios.

Carlos Röhm acusa a los bancos extranjeros. Ante el abogado de los ahorristas damnificados, doctor Miguel Loinaz, el ex directivo del Comercial destaca que el gobierno Sanguinetti le entregó el banco porque estaba asociado con el Crédit Suisse, el Dresdner Bank y el JP Morgan, responsables de su gestión, pero ahora sólo acusan al grupo argentino y “nadie dice nada” sobre los actos cometidos por sus socios. Entrega documentación que demuestra la responsabilidad de los bancos extranjeros antes y después de la quiebra. Sus directivos “cobraban el sueldo de Saint Louis Investments, y ahora no la conocen” (19.09.03)

Banco Comercial: próximas instancias judiciales en Uruguay. Doctor Miguel Loinaz: En Argentina, los bancos asociados pasaron de denunciantes a denunciados. Creemos que se van a tipificar los delitos denunciados, asociación para delinquir y fraude. A partir de allí surgirán los juicios civiles con la Compañía General de Negocios, y los bonos emitidos por el Comercial, las acciones en Londres. (20.12.02)

Siete procesados por vaciamiento bancario. El abogado patrocinante, Miguel Loinaz, estima la estafa en U$S 600 millones, y considera seguro que habrá más procesados (un delito de estos no se comete entre siete personas), y adelanta que los bancos internacionales JP Morgan, Crédit Suisse y Dresdner serán responsabilizados por la Justicia de EEUU: “todas las resoluciones fueron tomadas por unanimidad” (19.05.03)

Anuncian juicio al Central por ventas de los Röhm. Abogado de los ahorristas, Miguel Loinaz: Todos sabían que La Arcadia era suya, igual que otra estancia en Punta del Este, o la principal fábrica de alimentos en Argentina, también a la venta. Los responsables de proteger a los damnificados se dedican a cualquier cosa menos a eso, y los ahorristas van a reclamar por su omisión (25.07.03)

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Transcripción y edición: Jorge García Ramón

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