09.12.2003














Sudamtex mantuvo su integridad

Secretario del sindicato, Enzo Vallejo: Luego de dos años y medio en que el personal cesante cuidó de la planta, el retiro de uno de los aspirantes a comprar una de las máquinas principales permite retomar las negociaciones para la reapertura de la textil. Un grupo alemán tiene solvencia económica y un plan de negocios que ya está en manos de los trabajadores.


EN PERSPECTIVA
Martes 01.12.03, 07.58.


EMILIANO COTELO:
Ayer era un día importante para el departamento de Colonia y también para la industria textil uruguaya.

ALFREDO DANTE:
Se había gestionado una suspensión del remate de la fábrica Sudamtex, ante la posibilidad de que un inversor concretara la reapertura de la planta. Pero la hizo lugar a la solicitud de la Liga de Defensa Comercial (Lideco), y la subasta tuvo lugar como estaba previsto. Pero, finalmente, los trabajadores respiraron profundo.

EC – El resultado fue el que esperaban: Sudamtex sorteó el riesgo de quedar desmantelada.

AD – Ese era el principal factor de incertidumbre para los trabajadores, porque los predios eran varios, las maquinarias también, y se temía que algunos interesados compraran una parte de los bienes, con lo cual se frustraría el proyecto de reactivación de la empresa.

EC – Finalmente, el Banco República (Brou), en combinación con el Citibank, compraron la mayor parte de las instalaciones, en tanto el Sudameris se quedó con maquinaria importante tras pujar, en este caso, con textiles argentinas.

En el remate estuvo Gastón Bralich, del Servicio Informativo de El Espectador. Había un ambiente muy emotivo en la escena de ayer, ¿no?

GASTÓN BRALICH:
Sin duda un ambiente muy particular. Nos vamos acostumbrando poco a poco a participar en remates, algo que no es a lo que uno está habituado. Después del remate del cuadro de Blanes que integraba el patrimonio del viejo Banco Comercial, el remate de ayer de toda la estructura de lo que fue la textil Sudamtex en el departamento de Colonia fue realmente particular. En algún momento llegaron a trabajar 1.600 personas en Sudamtex; lo que da que unas 5.000 personas, en una ciudad de 24.000, dependían directamente de la empresa.

Ayer, acompañando a los trabajadores que festejaban de manera muy particular cada uno de los lotes que se iba rematando, estaba el diputado del Partido Colorado por Colonia, el suplente de Daniel Bianchi, Ruben Bertín, que es un comerciante del departamento, quien señalaba la importancia que tenían y habían tenido para él durante toda su historia las subas o bajas de la empresa: cuanto mejor le iba a la empresa, mejor le iba a toda la ciudad. Ante el cierre de la empresa en el año 2001 el impacto se sintió y mucho en el departamento de Colonia.

EC - ¿Cómo estaba ayer el local de remates de la empresa Vanoli - Braun?

GB - Estaba lleno de trabajadores pujando solamente algunos representantes del Brou y de la empresa Alcoyana, de la República Argentina. Recordemos que se subastaron cuatro padrones, de los cuales tres compró directamente el Brou, uno en 1,1 millón, otro en 150 mil y otro en 120 mil, y el cuarto padrón fue comprado por un particular, pero es una zona marginal de la empresa Sudamtex, que no tiene construcción alguna, destinada a estacionamiento.

EC - La puja se dio concretamente cuando llegó el momento de la maquinaria.

GB - Exacto. El grupo que había venido de Argentina, Alcoyana, tenía particular interés en una de las máquinas que se remataba, que es un poco el alma de la empresa; este grupo textil es un habitual comprador de máquinas. En el medio de la puja resolvió retirarse señalando que más allá de que la máquina valía mucho más y podría haber seguido pujando, consideraron que los trabajadores no merecían quedar sin la única oportunidad de reactivar Sudamtex.

EC - Se bajaron cuando la cifra estaba en los 350 mil dólares.

GB - 350 mil dólares, que pagó el representante del banco Sudameris, quien a partir de ahora deberá negociar junto con el Brou tanto con los trabajadores por un lado, como con los empresarios interesados en adquirir la planta; en particular un grupo alemán que habría manifestado interés en reactivar la empresa en cuestión de dos meses.

EC - Cuando la maquinaria quedó en manos del Sudameris estallaron los aplausos…

GB - Muchísimos: aplausos, abrazos… Un clima muy particular como yo no estaba acostumbrado a presenciar.

EC - Enzo Vallejo es secretario general de la Asociación del Personal de Sudamtex Uruguay, y está en comunicación.

ENZO VALLEJO:
Estaba escuchando atentamente lo que decía el periodista; realmente, fue un día muy especial para todos nosotros. Hay que tener en cuenta que hace dos años que venimos luchando por el mantenimiento de la planta, de la unidad productiva en su conjunto, y ayer se corría el serio riesgo de que esto desapareciera.

EC - Era un día dramático.

EV - Nosotros entendíamos que era el día D de toda esta historia; más aun sabiendo que hoy ya hay un inversor serio con un interés muy concreto. Hubiese sido diferente la situación si después de dos años no tuviésemos ningún interesado serio y concreto. Después de esperar tanto tiempo lo más lógico era que se hiciera el remate; yo decía ayer que estábamos perdiendo la única oportunidad que nos quedaba. Hoy se abre una nueva etapa, el inversor ya está enterado de la nueva situación.

EC - Eso iba a preguntarle, ¿qué viabilidad tiene el interés de ese inversor de origen alemán? Me imagino cuántas veces en estos dos años ustedes habrán tenido a la vista posibilidades que después no se concretaron; y cuántas veces lo hemos visto en otras fábricas que han cerrado: aparecen y desaparecen los que se espera que saquen sacar adelante esos emprendimientos. ¿En esta ocasión estamos ante algo concreto?

EV - Yo diría que sí y le explico por qué. En esta oportunidad se reúnen las dos condiciones que son fundamentales para esto; una de ellas muy importante, el factor económico. Recuerdo cuando estábamos muy entusiasmados con el tema Alcoyana, grupo que lamentablemente después demostró que económicamente no estaba en condiciones de afrontar esto.

En este caso la situación es diferente, personalmente acompañé el jueves a esta gente al Brou, donde hicieron una propuesta escrita, formal y concreta, económicamente muy importante. Eso da la pauta de que económicamente están en condiciones.

La otra condición es que esta gente está desde hace 45 días en la planta, ha venido con sus técnicos, con sus contadores, ha hecho un estudio muy concienzudo, muy detallado, muy minucioso, y ha presentado el proyecto que está en nuestro poder, en poder de los trabajadores.

EC - Que implica una inversión de 16 millones de dólares.

EV - Exactamente. Más allá de la compra de la planta, el proyecto implica una reestructura muy importante en el tema energético, que era la parte más cara de Sudamtex; están dispuestos a traer equipos de última tecnología para abaratar los costos. Eso es muy importante.

EC - ¿Cuántas personas trabajarían en esta nueva etapa de Sudamtex?

EV - No tenemos la cifra exacta, pero se recuperaría prácticamente toda la plantilla de trabajadores de Sudamtex. Una cosa muy importante, sobre la cual el gremio siempre hablaba con las autoridades anteriores de la empresa, era la posibilidad de confección de prendas, que le daba un valor agregado muy importante a la tela. En la estrategia comercial de este grupo está eso, hacer la producción de prendas para exportar a mercados europeos. Es algo muy importante, no podemos quedarnos sólo con el Mercosur; Sudamtex exportaba a Brasil y Argentina prácticamente el 80 por ciento, y cuando en esos dos países pasó lo que todos sabemos se vino el descalabro de la empresa y de muchas otras industrias en Uruguay. Esta gente está apuntando a mercados de alto nivel, para lo cual hay que tener una muy buena calidad; Sudamtex está preparada, la planta estaba preparada para eso, y se abre una excelente oportunidad.

EC - ¿Es correcto que fueron ustedes mismos quienes se ocuparon del mantenimiento de las instalaciones durante estos dos años y pico?

EV - Durante dos años y medio hemos hecho un esfuerzo casi sobrehumano. Tenga en cuenta que nos quedamos sin los salarios, los seguros de paro se terminaron, pero de todos modos seguimos apostando a esto, dedicándole horas, mucha gente haciendo changas, otros compañeros aún sin conseguir nada, pero nuestro objetivo principal siempre fue que la planta quedara en las condiciones que está hoy. Por eso la alegría desbordada que teníamos ayer, porque la planta podía haber quedado desmantelada, sabíamos que esta gente iba a venir al remate, que tenía interés en las máquinas –son máquinas muy importantes y que están en excelentes condiciones– y se corría un serio riesgo de que quedara desmantelada.

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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Jorge García Ramón

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