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“URUGUAY ES UN GRAN CEMENTERIO DE FÁBRICAS”
Cómo se parará el movimiento sindical en el año electoral
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El PIT-CNT prevé varias movilizaciones para 2004. Además de exigir la creación de empleo genuino y rechazar el ALCA, la central sindical proyecta una campaña para promover los derechos de los trabajadores. El dirigente Juan Castillo dijo que, además, se propone un diálogo con el gobierno, "un trabajo conjunto, como política de Estado, para que ninguna fábrica, ninguna industria de importancia para la economía de Uruguay cierre por la sola voluntad de sus empresarios capitalistas".
EN PERSPECTIVA
Martes 20.01.04 - Hora 9.02.
JOSÉ IRAZÁBAL:
¿Cuál será la estrategia política y programática del PIT-CNT de cara a este año electoral? Este fin de semana la cúpula de la dirigencia sindical estuvo trabajando intensamente en su etapa de discusión. La idea es generar un documento que luego sea discutido por todos los sindicatos en la Mesa Representativa. Resolvió situar como ejes centrales de su accionar los temas del empleo y del salario, reactivar políticas de alianza con otros sectores sociales y anunció que presentará una plataforma de propuestas a todos los candidatos a la Presidencia de la República después del 1º de mayo.
Vamos a dialogar con Juan Castillo, integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT y secretario general del Sindicato Único de la Administración Nacional de Puertos (SUANP).
Castillo, se trabajó sobre la base de más de 10 documentos que se habían elaborado de contenido programático y político.
JUAN CASTILLO:
Es cierto; además de dos informes de los asesores y técnicos y del Instituto Cuesta-Duarte que completaron la docena de informes en los que se centró la atención del Secretariado Ejecutivo en la jornada del sábado para dar comienzo al debate.
Quiero recalcar que esto es una experiencia nueva, es un paso adelante en el movimiento sindical uruguayo. No es solamente tratar de discutir los planes sino buscar una forma de armonizarlos, buscar una forma de cohesión entre ellos de manera que en un año tan particular para todos los uruguayos como 2004 la actividad del movimiento sindical tenga grandes líneas, grandes ejes de acción de modo de complementar las tareas a los efectos de ver lo que necesitamos, las conquistas a lograr para los trabajadores; por cierto las demandas son bastantes.
JI - ¿Cómo se traduce eso? Son muchos documentos sobre la mesa.
JC - Hay que ver que hay mucho más de una docena de áreas dentro del movimiento sindical. Las distintas propuestas tienen un eje en común: la resolución del VIII Congreso del PIT-CNT; a partir de esa resolución programática, de la elaboración de esa plataforma política del Congreso, nos quedaron nada más que dos o tres meses del año de trabajo casi exclusivamente dedicados a la tarea del referéndum por Ancap del 7 de diciembre y de la cumbre sindical del 15 al 18 de diciembre; por lo tanto vino bien este período de tiempo para que la central preparara estos planes.
Estos planes –propuestas, organigramas, formas de funcionamiento, grandes ejes de accionar– normalmente son presentados al comienzo de cada año, pero nunca salen de su área concreta. Por ejemplo, Formación Sindical, lo que tuviera planificado la Secretaría del Interior o la Secretaría de Propaganda, no pasaba nunca de ser discutido por cada uno de los integrantes y militantes de esas áreas. Esta vez se ha buscado una forma de discutirlo al presentarlo en forma común para que diera paso a lo que se hizo ayer: discutir políticamente cuál es la estrategia del movimiento sindical para el año 2004 y, en función de la estrategia resuelta, cuáles son los pasos tácticos, elementos que vamos a incorporar para coadyuvar en ese sentido.
JI - La idea es que los integrantes del Secretariado Ejecutivo, cada uno de los cuales se encarga de un área específica, tengan conocimiento de lo que está pasando con el dirigente que tiene sentado al lado.
JC - Esa es una; la otra es que en algunas de ellas debían tener cuidado de no entrar en contradicción. No contradicción en el accionar político, sino que a veces puede pasar que dos secretarías estén trabajando con el mismo sector social en dos direcciones distintas. Había que coordinar fechas, era importante que tuviéramos un calendario común. Seguramente mañana miércoles estarán organizadas por los coordinadores. Hay propuestas que coinciden desde varias secretarías, pero sin embargo todas tienen fechas propuestas distintas, unas piensan que habría que hacer tal cosa en abril, otros que habría que hacerla en mayo…
JI - Un plan de movilizaciones, por ejemplo.
JC - Por ejemplo movilizaciones y acciones políticas; movilizaciones contra el ALCA, cuestión esta acordada por unanimidad por todas las centrales sindicales del Mercosur; representantes de 25 millones de trabajadores nos oponemos al ALCA. Nuestro gobierno cada vez que aparece en ámbitos internacionales aparece a favor, empujando a favor del ALCA y dice hablar en nombre de Uruguay. Al menos en nombre de los trabajadores uruguayos, no.
Además acciones concretas en torno a la campaña por los derechos. Esto es un gran eje de acción aprobado en el Congreso. No hay antecedentes de lanzamientos de campañas de largo aliento del movimiento sindical y este año vamos a largar una que se va a llamar “Usted tiene derechos”, que objetivamente va a tener muchos elementos informativos y muchas partes agitativas, pero que va a encerrar el hecho de trasladar desde los trabajadores hacia toda la sociedad los derechos que tenemos consagrados. Se trata dell derecho al trabajo, el derecho a la vivienda, el derecho a la salud, todos los derechos que existen en la Constitución, en las leyes, en ámbitos internacionales. Hay que ponerlos en práctica, hay que poner a accionar la maquinaria.
JI - Ya nos metemos de lleno en los temas que se trataron en estos documentos que manejó el Secretariado Ejecutivo. Veamos esa campaña a la que usted está haciendo referencia; ¿cómo se encara una campaña de ese tipo? ¿Qué va a hacer el PIT-CNT concretamente este año?
JC - Hemos definido en esa área estratégica que Uruguay sigue, a pesar de los datos económicos y de la información del gobierno, en emergencia social desde el punto de vista laboral. Tomado esto como una emergencia social a nivel nacional hemos propuesto poner ejes estratégicos de pelear, de luchar, de hacer todo el accionar del movimiento sindical alrededor del tema del trabajo y el salario. Vamos a pugnar por que las demandas más postergadas durante todo este período de gobierno –incluso muchas veces se han profundizado los datos negativos– tengan este año un fuerte accionar del movimiento sindical que posibilite tener políticas activas de empleo en vez de discursos, de decir que se pueden crear tantos miles de puestos de trabajo por un lado, tantos por el otro. Reclamarle, exigirle al gobierno que concrete esas propuestas en las que va a tener iniciativa para generar puestos de trabajo, además de hacer nuestras propias propuestas.
JI - ¿Cómo se le exige al gobierno? ¿En qué se está pensando?
JC - Estamos pensando en un accionar conjunto primero con el Poder Ejecutivo a partir del Ministerio del Trabajo (MTSS) y seguramente del Ministerio de Economía (MEF), y luego un trabajo hacia el Parlamento. Hasta ahora el gobierno no ha sido capaz, nunca puso frente a nosotros una propuesta concreta para generar puestos de trabajo, para reactivar el aparato industrial, una reactivación productiva como la que estamos solicitando. Por el contrario el gobierno ha dicho que se ha terminado la recesión económica, ha previsto que para el año 2004 se generen 50.000 puestos de trabajo. ¿Cómo, cuándo, dónde? Tal vez esté pensando en que se vayan 50.000 uruguayos más del país, porque no ha colocado una sola propuesta, no dice en qué industria, en qué rama de la actividad, en qué servicios. Decir que solamente porque creció el turismo –algo que rompe los ojos, todos vemos que hay más turismo este año en nuestro país– se generan puestos de trabajo… Se generan algunos puestos de trabajo en alguna zona concreta del país, en este caso en el Este, ¿pero cuántos se pierden aquí en Montevideo porque cierran sus puertas? Solamente hay que salir a caminar para ver lo que los ojos están mostrando. No estamos hablando de ir a limpiar parabrisas, de ir a hacer una changuita, estamos hablando, reclamando, exigiendo puestos de trabajo genuinos, duraderos, que nos dejen como contrapartida un salario digno y decoroso para los trabajadores, no solamente propuestas de trabajos de emergencia o planes vereda que han servido como un parche en determinado momento político de la vida del país, muy crítico. Llega la hora de que de una vez por todas nos pongamos a pensar en el trabajo como una cuestión de dignidad para el conjunto de los uruguayos.
JI - Usted decía que uno de los ejes va a ser el diálogo directo con el gobierno a través del MTSS y del MEF. ¿Cómo ha sido la relación con el ministro de Trabajo?
JC - Hemos tenido una relación no fácil –como con cualquier otro integrante del gobierno–, pero esto pasa del plano personal, no se trata de si hay mayor o menor simpatía hacia un integrante del gobierno, cualquiera sea, ni de ellos hacia los integrantes del movimiento sindical. Estamos hablando un diálogo entre instituciones distintas, nosotros representando a los trabajadores organizados y ellos representando al gobierno y normalmente a pesar de mostrarse –como en el caso del ministro de Trabajo– queriendo entender lo que le planteamos, a veces compartiendo parte de las propuestas que realizamos, termina no aprobando ningún proyecto. Para nosotros esto es algo que tiene que cambiar, en tanto desde el punto de vista institucional no tenemos un buen diálogo con el MTSS, porque no se trata sólo de ir a hablar, de hacer torneos de discusión, se trata de que si vamos a reclamar, a proponer, a exigir, de alguna forma haya una solución, no decimos tal cual la planteamos, pero que la haya.
Muy pocas veces los grandes conflictos laborales, los grandes reclamos y demandas de los trabajadores son coronados con éxito. Hay impedimentos de todo tipo, por falta de decisiones legislativas –nos dicen–, porque no hay leyes concretas de negociación colectiva o que protejan la actividad sindical. Está bien, pero el gobierno son ellos y esa es la diferencia, nosotros somos los trabajadores que vamos a reclamar y a exigir, y ellos son el gobierno que en todo caso utiliza esto como una disculpa.
JI - Usted decía que uno de los caminos es buscar un diálogo más directo con el gobierno. ¿Se pedirá reuniones con el gobierno?
JC - En realidad vamos a seguir haciendo lo que hemos hecho durante todo este último período, al mismo tiempo que en virtud de la necesidad que tenemos los trabajadores, vamos a estar solicitando todas las entrevistas que entendamos convenientes. Pero no nos vamos a quedar de brazos cruzados, vamos a generar acciones.
JI - Claro, esa es la segunda parte de mi pregunta: ¿qué movilizaciones tiene previstas el PIT-CNT?
JC - Mucho se está hablando del tema del relacionamiento entre movimiento sindical y futuros gobiernos, pero muy pocos nos preguntan qué pasa con el relacionamiento entre el movimiento sindical actual y los gobiernos que tenemos en este momento. No ha sido fácil, no hemos tenido nunca un mecanismo… Insisto: tener una reunión no significa diálogo, a veces son monólogos porque la idea es que los problemas de los trabajadores sean atendidos y a veces no precisan reunirse con nosotros para atenderlos si realmente toman elementos que levanta la plataforma del movimiento sindical, reivindicaciones que hacemos, como por ejemplo esta: reclamar trabajo. Yo no sé si ha pasado mucho tiempo en la historia de nuestro país, pero hoy día la presión más fuerte, la movilización más fuerte del accionar sindical está siendo reclamar trabajo, nosotros estamos pidiendo trabajo para los trabajadores. El gobierno se va con esquemas de todo tipo, evade una propuesta concreta y le echa la culpa a todo lo que pasa alrededor en la región y en el mundo de por qué no existe empleo; en realidad ellos son los gobernantes de nuestro país y nosotros tenemos el deber y el derecho de exigirles que generen los puestos de trabajo. Si esto no ocurre a partir de negociaciones, de diálogos, de entrevistas, tenemos la responsabilidad de elaborar propuestas concretas, porque no solamente exigimos, ponemos cara mala porque no estamos de acuerdo, sino que tenemos la capacidad de elaborar propuestas.
JI - Como usted lo plantea parece muy sencillo, parece una cuestión de voluntad generar puestos de trabajo en el país.
JC - Para nosotros en el último período de tiempo ha faltado bastante voluntad política; voluntad política que ha habido para atender otras situaciones sociales del país. Siempre ha quedado postergado el trabajador.
JI - ¿Por ejemplo? ¿A qué se refiere?
JC - A los bancos fundidos que tanto nos han costado a todos los uruguayos, incluso a los que no tenemos un peso partido por la mitad metido en un banco y no los conocemos más que de afuera. Sin embargo reconocemos que es una parte importante el tema financiero en el país, el tema de tener una economía saneada. Está bien, pero se ha solucionado el problema de los ganaderos, el tema de los productores, los problemas de los carniceros, los problemas de los fleteros, los problemas de los banqueros, los problemas de los deudores, los problemas de los ahorristas, problemas, problemas… todos. El trabajador y el jubilado para el final, para el final, para el final…
JI - Pero muchos de ellos son trabajadores y muchos de ellos dan empleo también.
JC - Sí; no decimos que sea contradictorio, estamos diciendo que en algún momento tiene que llegar la hora del trabajador; será este año o el año que viene, nosotros queremos generar acciones políticas tendentes a que los problemas de los trabajadores estén resueltos para ayer, no para mañana.
JI - Aparece por allí un documento al que usted hacía referencia hoy cuando comenzamos a conversar, que fue presentado por el equipo del Instituto Cuesta-Duarte del PIT-CNT encabezado por el economista Daniel Olesker, que habla de la urgente necesidad de crear 250.000 empleos.
JC - Es parte del reclamo; si constatamos que hay 250 mil hombres y mujeres sin trabajo tenemos que plantear la necesidad urgente de que se creen esos puestos de trabajo. No es que tengamos solamente la propuesta, al elaborar todo este plan anual no estamos poniendo qué tareas tiene el movimiento sindical para el año. Ideas generales tenemos unas cuantas, queremos discutirlas; propuestas concretas además, nuestros compañeros responsables de representarnos en la Junta Nacional de Empleo (JUNAE) están cansados de hacer propuestas de políticas activas de empleo. Yo puedo hablar de políticas activas de empleo frente a un desocupado y el desocupado dirá: “¿Y éste de qué me está hablando? ¿De los marcianos?” Puede no entender directamente. Tiene que haber una reactivación productiva del país que dinamice el mercado interno, que lo agilite; eso puede parar en una industria más ligera, más ligada a las necesidades del mercado interno, de cada uno de los uruguayos; comenzar a generar allí puestos de trabajo directos.
Puede ser que esto sea de largo aliento, es cierto, pero hay propuestas alternativas. Propuestas alternativas puede ser la de cómo Uruguay en su conjunto, como política de Estado, comienza a dedicar especial atención a la recuperación de unidades productivas que hoy están paradas, porque hasta ahora el esfuerzo se está haciendo sólo por parte de los trabajadores, con muy poca voluntad política del gobierno.
Estamos hablando de casos –hay que recordar– como Cristalerías del Uruguay, que no era solamente una fábrica, era además la última industria del vidrio en nuestro país. Parecía que el vidrio había dejado de ser, no tenía que existir más; ahora nos vienen todos los refrescos envasados desde el exterior, de la región y todo el mundo los busca porque saben mejor. Cuando cerraron Cristalerías del Uruguay necesitábamos 1.000.000 de dólares para que 250 familias tuvieran trabajo, para que esa fábrica continuara abierta y esa industria siguiera trabajando en el país. No hubo 1.000.000 de dólares para Cristalerías del Uruguay. Insisto: hubo para otros que se llevaron la plata de nuestro país.
Dimac, una empresa en el área de la costura que daba empleo a más de 100 mujeres, casi todas jefas de familia, necesitaba 350.000 dólares para continuar trabajando y no parar. No los hubo, hubo todo un proyecto, un sacrificio, un trabajo enorme de más de un año y medio de duración para que hoy Dimac sea un proyecto incipiente donde estén nuestras compañeras trabajando.
Funsa es una industria que da trabajo a 500 trabajadores, a más de 500 familias. No está habiendo grandes apoyos del gobierno sino un esfuerzo tremendo por parte de los trabajadores tratando de volver. Todas, muchas más, porque Uruguay es un gran cementerio gris de fábricas paradas, de fábricas, frigoríficos…
JI - Ustedes están pidiendo que el gobierno se convierta en un respaldo de cooperativas que terminan salvando determinadas empresas que los empresarios no pudieron salvar por ellos mismos y se terminaron fundiendo.
JC - Estamos proponiendo un trabajo conjunto, como política de Estado, que los trabajadores pongan la sapiencia, la experiencia, nuestro esfuerzo, nuestra dedicación para que ninguna fábrica, ninguna industria de importancia para la economía de Uruguay cierre por la sola voluntad de sus empresarios capitalistas. Si estuviéramos pendientes sólo de eso, el país estaría sonado, si se hace lo que al capitalista se le antoja: no se me atoja más tener una fábrica, ahora voy a poner la plata a dormir en el banco que me da más intereses y se terminó… Así no camina ningún país. El Estado algo tiene que hacer, creemos que tiene que tener una política mucho más activa, mucho más presente. No estamos pidiendo que solamente ponga la plata, a veces que no ponga tantas trabas, que no nos ponga tantos palos en la rueda. Nosotros queremos trabajar, tenemos la voluntad política de poner iniciativas, estamos convencidos de que podemos recuperar algunas industrias. A la entrada del Cerro, en el parque tecnológico industrial hay no menos de siete u ocho experiencias de trabajadores, como la del plástico anteriormente, cuyas fábricas cerraron y se quedaron con una o dos maquinitas y toda su voluntad de trabajo y están haciendo proyectos que hacen primero al gran elemento: que haya menos trabajadores desocupados, que cada vez más familias que vivan de su trabajo dignamente.
Tal vez necesitemos muchas horas, mucho tiempo para explicar una cuestión: no hablar, no discutir estos temas hace que después el tema más importante, de tapa de todos los diarios, sea el tema de la violencia generada en nuestro país. Mientras sigan agitando las sábanas con el tema del efecto y no ataquen las causas vamos a seguir teniendo estos problemas, no solamente en el transporte sino en todas las áreas de nuestra sociedad va a seguir creciendo la violencia hasta que el país –primer responsable el gobierno– no genere políticas sociales. La primera de ellas: crear puestos de trabajo genuinos y salarios dignos para todos los trabajadores.
***
JI - Uno de los puntos que aparecen es que se van a golpear las puertas de los candidatos, no sé si a las internas o ya a los candidatos definitivos a la Presidencia, para presentarles un documento.
JC - La idea de la propuesta que llevamos a la Mesa Representativa, que aprobó el Secretariado, es hacer una ronda de entrevistas con todos los candidatos presidenciables antes de las elecciones internas. La intención es dar las mismas oportunidades políticas a los candidatos y vamos a exigir como garantía que se nos den las respuestas públicamente y se asuman los compromisos políticos.
Se trata de varias cosas, el movimiento sindical ha tenido una capacidad de elaboración muy importante en su VIII Congreso. A todas luces es un programa de gobierno, es una plataforma muy acabada del movimiento sindical, no en todas las áreas de la nación, pero por lo menos en las principales donde la población y los trabajadores están directamente involucrados. Puedo pasar por los vastos lugares de esa propuesta. Queremos entregársela a los candidatos junto con la plataforma que levantemos el 1º de Mayo, un 1º de Mayo muy especial para todos nosotros, porque tendrá la característica de ser un 1º de Mayo internacional, vamos a estar levantando y erigiendo la misma plataforma tanto en el acto central de Montevideo como en el que se celebre en Rivera, donde van a estar las direcciones sindicales de todas las centrales del Mercosur.
Queremos ir con eso después del 1º de Mayo y antes de las elecciones internas de manera de darles a todos el mismo tiempo, la misma posibilidad. Siempre nos están cuestionando que nosotros tenemos determinados favoritismos hacia tal o cual línea política, hacia tal o cual partido o hacia tal o cual candidato. Vamos a entregarles públicamente a todos las demandas del movimiento sindical y las propuestas y a todos les vamos a exigir que nos respondan cuál es su compromiso político; después que no le echen la culpa al movimiento sindical de adónde puede ir el favoritismo de tal o cual persona en nuestro país.
JI - Estaba leyendo que Juan Manuel Rodríguez planteaba en una entrevista que le hizo Búsqueda la semana pasada que seguramente este va a ser un año más tranquilo sindicalmente porque muchos de los dirigentes del PIT-CNT van a estar en listas del Frente Amplio (FA) y haciendo campaña política a su vez.
JC - No estoy de acuerdo con esa valoración, me parece que no tiene nada que ver, no es contradictorio. Que personalmente por su propia voluntad o por la decisión del partido político que sea el integrante del movimiento sindical vaya a integrar las listas no quiere decir que vaya a haber menos actividad sindical. Es como si fuera una contradicción para nosotros reclamar soluciones porque es un año de campaña electoral y decir “miren que vamos a bajar la guardia”. No lo entenderían en primer lugar los trabajadores, que se encargarían de ponernos en vereda de inmediato.
Lo que sí sucede –tal vez a eso lo relacione el economista– es que este año no hay rendición de cuentas; para la actividad pública, para los trabajadores estatales es mucho más difícil –no imposible– obtener alguna reivindicación desde el punto de vista presupuestal porque no hay esa discusión por ser año electoral, no hay nueva asignación de recursos. Eso hace que prioricemos más el tema de dar la pelea por todos los trabajadores de la industria privada y de los servicios que hace bastante tiempo que ni siquiera tienen ámbito para negociar.
JI - Con respecto a las reuniones con los candidatos presidenciables antes de las internas y su reconocimiento implícito de que muchos dirigentes del PIT-CNT van a estar integrando listas de la izquierda este año, ¿no es contradictorio que una delegación del PIT-CNT venga a entregarle un documento a un candidato y de repente esos dirigentes integran todos listas del FA? Le estoy hablando de cuando ese documento llegue a manos del presidenciable de los partidos tradicionales.
JC - En todo caso va a ser una nota simpática. Creo que no, tampoco lo genera toda la historia de nuestro país, a nadie le alarma que representantes de las cámaras empresariales sean integrantes directos o indirectos de los partidos tradicionales; esto tiene 173 años de historia y parece que nunca nadie se preocupó, es normal que algún integrante de la Cámara de Industrias, de la Unión de Exportadores o de la Asociación de Bancos del Uruguay sea, como en el caso de Bensión, presidente de la Asociación de Bancos y luego ministro de Economía a favor del Partido Colorado. Es una cosa normal porque pertenecen a las partes empresariales; se van a tener que acostumbrar porque va a ser normal que un trabajador, un militante sindical sea representante político de un partido de izquierda. Lo más notable va a ser el cambio de concepción, de raíz en el país, con una propuesta de distinto tipo, si es que lo consagra el soberano en las urnas, porque no hay que vender la piel del oso antes de cazarlo.
JI - No dijimos si ya hay fijada alguna movilización del PIT-CNT para este 2004 ya concretada en estas reuniones del Secretariado.
JC - Se vio la necesidad de tres o cuatro grandes movilizaciones a nivel nacional, que incluyen una posible jornada cívica con más sectores sociales para mediados de año, una vez que se trabaje toda esa materia de política de alianzas para elaborar una plataforma común. Se ha visto la necesidad de una movilización muy fuerte del movimiento sindical en torno al reclamo de los derechos –el derecho a la negociación colectiva, a la convocatoria de los consejos de salarios y a la libertad sindical–. Alrededor del 1º de Mayo está prevista una acción muy fuerte que todavía no se sabe si va a ser una marcha o en qué va a terminar, pero una acción de masas importante en torno a la postura a llevar al presidente de la República de nuestras manifestaciones contra el ALCA. Son por lo menos tres grandes acciones de movilización que van a estar recorriendo el año con propuestas de acción distintas, tal como la iniciativa de la campaña nacional de afiliación sindical que en muchos lugares va a tener connotaciones bastante importantes de movilización porque vamos a ir los propios dirigentes sindicales de la central y de los sindicatos a abordar a los trabajadores en los grandes centros de concentración donde hasta ahora no está permitido organizarse sindicalmente. Vamos a ir nosotros a las puertas de esas fábricas, de esos centros de concentración, de esos supermercados, a afiliarlos directamente a la central.
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Transcripción: María Lila Ltaif Curbelo
Edición: Mauricio Erramuspe
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