Entrevistas

Bordaberry: las elecciones serán para el PC "como ir a jugar contra Brasil a Maracaná"

Bordaberry: las elecciones serán para el PC "como ir a jugar contra Brasil a Maracaná"

El doctor Pedro Bordaberry, precandidato a la Presidencia por "Vamos Uruguay", consideró que su candidatura "encarna a todos" los colorados, los que se consideran batllistas y los que no. Consideró que su sector representa un "pragmatismo sensible" y exhortó a su Partido a renovarse en junio para exhibirle a Uruguay que "hay un nuevo PC". Criticó el acto realizado por el presidente Vázquez el sábado en Plaza Cagancha por entender que esos gestos "vuelven a aquel Uruguay de la confrontación y el odio". Aseguró que el tratamiento de la "minoridad delincuente es el más grave que hay en Uruguay" y por eso llamó a bajar la imputabilidad de los menores a 14 años, para los hechos de sangre.

(Emitido a las 9.01 horas)


EMILIANO COTELO:
En el Partido Colorado (PC) ya está claro que se comparecerá a las elecciones internas de junio con cuatro precandidatos a la Presidencia. Y también parece claro que, finalmente, quien conducirá al Partido a las elecciones de octubre será el doctor Pedro Bordaberry. Todas las encuestas indican una clara tendencia a favor del líder de Vamos Uruguay, que en algunos casos llega al 65% de las preferencias.

En este contexto, ¿qué planes tiene Bordaberry para el futuro de su Partido? ¿Está pensando más en octubre que en junio? ¿Cuáles serán los ejes de su campaña?

Estamos con el doctor Pedro Bordaberry.

***

EC - ¿Usted caceroleó el sábado mientras el presidente Tabaré Vázquez realizaba su discurso?

PEDRO BORDABERRY:
No, estaba frente a la televisión tomando apuntes de lo que decía, como corresponde a cualquier precandidato a la Presidencia, siguiendo con mucha atención el discurso del presidente de la República.

EC - Hubo dirigentes de su sector que impulsaron esa medida.

PB - Sí, y de otros sectores. Recibí muchos mails, incluso del Partido Nacional (PN), de gente que convocaba a cacerolear.

EC - Usted prefirió no hacerlo.

PB - No, me gusta más conversar, contraponer propuestas, decir nuestras verdades, sobre todo porque tengo oportunidades como esta que usted me está dando hoy acá en el micrófono, como me dieron los noticieros de televisión, de decir directamente las cosas en las que discrepo, pero también aquellas en las que coincido con este gobierno. Me parece que es la forma de hacerlo, pero el que quiere cacerolear está bien que lo haga, porque es un país libre para hacerlo. Vamos Uruguay como sector político no convocó, algunos dirigentes de Vamos Uruguay, que tienen sus propias agrupaciones, convocaron, ejerciendo la libertad de hacerlo.

EC - ¿Por qué no aceptó la invitación del presidente Vázquez para participar desde la platea en el acto?

PB - No me invitó.

EC - ¿No lo invitó? La información que circuló decía que habían sido invitados los dirigentes y los parlamentarios de la oposición.

PB - De repente perdió mi dirección, a mí no me invitó...

EC - ...Y si le hubiese llegado una invitación, ¿habría ido?

PB - No me gusta hablar de supuestos, pero habría que haber visto cómo era la invitación. Me parece que ese acto no le hizo bien a Uruguay; no habló el presidente de la República, habló Tabaré Vázquez, candidato del Frente Amplio (FA). El presidente de la República es el presidente de todos los orientales y tiene que hablarle al país entero, y más allá de esa controversia sobre si fue un acto partidario –que notoriamente lo fue–, el contenido del discurso no fue dirigido a todos los uruguayos. El presidente es el presidente de todos los uruguayos, entonces en eso quizá –lo digo con todo respeto– le erró.

Y lo digo porque Tabaré Vázquez es también mi presidente. Recuerdo que cuando Vázquez fue a Buenos Aires a la asunción de Cristina Kirchner, y había una claque en el palacio presidencial y Cristina Kirchner fue una grosera con el doctor Vázquez, le echó la culpa de la pelea con Uruguay y la gente aplaudía contra el presidente Vázquez, en ese momento me sentí dolido porque estaban atacando al presidente de Uruguay, a quien no voté, pero me dolió que la presidenta de los argentinos, junto con una cantidad de gente, menospreciara al presidente de los uruguayos. La investidura del presidente es algo que está por encima del tema partidario.

Y el otro día el presidente bajó a esa cancha a la que no tiene que bajar, incluso con cosas ridículas como la que hizo con el doctor Larrañaga, que le hacen daño a la Presidencia de la República, no ya al doctor Vázquez. Hay que cuidar eso.

EC - Le preguntaba si usted había recibido la invitación o no, si habría ido o no, porque ayer en la mesa de analistas aquí algunos de los integrantes de esa tertulia se preguntaban si el tono y las características del acto no habrían sido distintos si hubieran estado presentes allí, en primera fila, los dirigentes de la oposición; podríamos decir: si no se hubiese criticado de antemano tan frontalmente el acto apenas se lo anunció.

PB - No nos hagamos trampas al solitario en esto. El presidente hizo un acto en la calle en un año electoral, gastó mucho dinero, sabiendo que los que iban a ir iban a ser del FA, y le habló a la gente del FA. El presidente, claramente, tiene dos discursos, uno para los uruguayos todos y otro hacia la interna de su Partido. Cuando habla hacia la interna de su Partido no tiene que hacerlo con el dinero de los uruguayos o convocando a un acto como que no fuera lo que es. No deberíamos hacernos trampas al solitario, y además Uruguay tiene problemas mucho más grandes que enfrentar en el corto plazo: la crisis económica internacional, el problema de la pobreza que no baja, el problema de la educación que está muy mal, en los que tenemos que estar todos juntos, y más a partir del período de gobierno próximo.

Estas cosas vuelven a aquel Uruguay de la confrontación y el odio, de "yo soy el bueno y vos sos el malo"; "no, vos sos el malo y yo el bueno", vuelven a replantear esa cosa de la generación anterior a la mía, que se peleó 50 años y se sigue peleando. Yo los veo y digo: ¡Basta! ¡Basta, doctor Vázquez! Pero les digo a los de mi Partido y a los del PN: ¡Basta de pelearse por esas cosas que no solucionan los problemas del país! Eso es lo que vi el otro día ahí, eso es lo más grave, más allá de si se gastaron 150.000 dólares, como se gastaron, o no.

EC - Uno de los temas que usted ha privilegiado últimamente en sus actos, en sus notas en prensa, es el de la crisis económica internacional y cómo la enfrenta el gobierno, cómo prepara a Uruguay para enfrentarla. Concretamente, ¿qué le reclama al Poder Ejecutivo?

PB - En octubre manejamos información –que la tiene que manejar el gobierno, porque si la manejaba yo que estoy en la oposición, que no ejerzo ningún cargo, la tenía que tener el gobierno–, veíamos lo que estaba pasando en el mundo, veíamos lo que había hecho el gobierno en cuanto a gasto, en cuanto a aumento del gasto para este año, año electoral, etcétera, y veíamos que íbamos hacia una situación problemática. Entonces dijimos: Nueva Zelandia está devaluando, Brasil está devaluando, Europa va camino a recuperar el terreno que perdió frente al dólar por un tema de competitividad. Yo no digo que devaluemos, pero acompasemos de a poco nuestra moneda a esa nueva realidad, porque si no, vamos a perder trabajo de los uruguayos. Esa fue una medida concreta que propusimos en octubre. Si en aquel entonces, en vez de seguir llevando el dólar abajo, lo hubiéramos llevado a un valor más competitivo, hoy estaríamos a la par de Brasil, y no con los problemas que tenemos; no tendríamos que viajar a pedirle para hacer uso del fondo del Mercosur por las asimetrías, porque nos está ganando en competitividad. Habríamos tenido una mejor temporada turística.

EC - Le van a contestar que se habría alimentado la inflación, que es un riesgo y un problema muy serio. Es uno de los puntos de preocupación fuerte del gobierno.
    
PB - Me encanta lo que usted dice, porque la inflación no se arregla manejando el dólar y la competitividad. Esa fue la tesis que trajeron a Uruguay a principios de la década de los 90 el doctor Ignacio de Posadas, ministro de Economía del doctor Lacalle, y el doctor Lacalle; la misma que aplicó Collor de Mello en Brasil y Menem y Domingo Cavallo en Argentina. La inflación se controla bajando el gasto del Estado, no jugando con el dólar, porque ¿sabe qué pasa?, es una bomba de tiempo, yo la llamo la "economía de la pasta base", porque dicen que cuando se consume pasta base de entrada la persona se siente muy bien, pero después no puede dejar de recurrir a ella y la cabeza le termina explotando. Cuando juegan con el dólar para combatir la inflación de entrada se sienten bien, porque se importa más, la Aduana recauda más, la gente puede comprar más cosas y se fomenta el consumo interno, pero no nos damos cuenta de que estamos quemando la base productiva del país. No alcanza con bajar el dólar, porque los costos suben. Yo soy de otra generación, pero lo vi en el 83 con "la tablita", vi lo que empezó en el 93-95 con Ignacio de Posadas y Domingo Cavallo y explotó en 2000. No es el camino.

Otra cosa es 350 millones de dólares de aumento del gasto público para este año, gasto público que no es el social... Aguantalo y pasalo para el año que viene, porque lo vas a necesitar. Actuemos con responsabilidad.

Y fui más allá: en octubre fui a ver al doctor Larrañaga, le conté estas cosas, y él me dijo: "Vamos a ver al ministro de Economía y a ofrecerle nuestra colaboración –lo dijimos públicamente– para las medidas que tenga que tomar, e invitamos a todos los precandidatos". Ese es el camino que tendría que seguir el gobierno, no subirse a la tarima y decir que la culpa es de los que hablamos de la crisis económica. Una cosa increíble.

EC - Sobre una de las medidas que usted mencionaba recién, postergar el aumento del gasto de más de 350 millones de dólares que se introdujo para este 2009, ¿es tan fácil postergarlo, teniendo en cuenta a qué se destina ese dinero? Por ejemplo, en ese aumento se incluye reforzar el presupuesto de la Policía, reforzar el presupuesto de la educación, incluyendo sueldos de maestros y profesores. ¿Es tan fácil decidir que no se ejecutan esas medidas que se anunciaron?

PB - Supongamos que fueran 350 millones de dólares; el gobierno acaba de dar el primer paso para juntar 35 de los 350, de 10 juntó uno, porque dice que va a bajar los gastos en ese terreno...

EC - ...Se refiere al anuncio que hizo ayer el director de la OPP (Oficina de Planeamiento y Presupuesto) de que los entes autónomos van a ahorrar 35 millones de dólares.

PB - Y puede hacerlo el gobierno central, hay otras partidas. Yo no digo que haya que tocar el gasto de la Policía, el gasto de la educación, el gasto social, pero hay que empezar a hablar de esas cosas. Es una buena oportunidad para sacar el IRPF, o por lo menos para elevar el mínimo no imponible. Yo haría lo que hicieron países exitosos cuando enfrentaron estas situaciones, como España, Italia, la propia Irlanda. Nos gusta mucho la experiencia que hizo Irlanda, el social agreement, el pacto social: los aumentos de los salarios de los trabajadores que están gravados por IRPF se dan contra la quita del IRPF, y al empleador se le pide que asegure el empleo por un lapso de tiempo. El Estado pierde recaudación, pero se asegura no tener que pagar seguro de desempleo –que es mucha más plata–, dentro de seis, siete, ocho meses, un año. Va a tener que pagarlo, ya muchos sectores están mandando. En época de turbulencia se dan seguridades a largo plazo.

Hay que hablar del tema. En octubre, cuando hablamos, desde el Ministerio de Economía nos contestaron que estábamos haciendo terrorismo económico. Y no pedimos el default, como lo hizo un candidato a la Presidencia en estos mismos micrófonos en el año 2003...

EC - ...Alude al doctor Tabaré Vázquez...

PB - ...Acá, a usted se lo pidió. Nosotros queremos ayudar y vamos con propuestas.

EC - ¿No ha habido ningún otro ámbito, no hubo espacio para conversar de estas posibilidades, de generar un encuentro entre el gobierno y líderes de la oposición sobre estos temas?

PB - Tratamos de generarlo en ese momento. El miércoles el senador Astori dijo que éramos antipatriotas si hablábamos de la crisis. No es que hablemos para que haya crisis, hablamos de los problemas del país y cómo enfrentarlos. Esto no es nuevo y es muy peligroso. La ministra (del Interior) Tourné, cuando empezamos a hablar de las medidas contra la inseguridad, nos dijo que no había que hablar de la seguridad en la campaña electoral. Hay un dejo de autoritarismo muy grave, la ministra del Interior nos dice que en la campaña electoral no hay que hablar de un tema, el presidente de la República nos dice que en la campaña electoral no hay que hablar de otro tema. Nos lo dicen en un año electoral. Usted es un observador que está fuera del sistema y dice: "Che, acá el gobierno, entre ellos la señora que tiene el palo –porque es la que tiene la autoridad–, le dice a la oposición que en la campaña electoral no hable de estos temas", y si lo hacemos, somos antipatriotas, nos pone en la picota. Yo creo en el Estado de derecho, en la democracia, en mi libertad de opinar y de proponer. Pero además siempre he venido con propuestas.

EC - Teniendo en cuenta ese espíritu, ¿no hay un teléfono a mano? ¿No se puede tomar un teléfono, digitar y hablarse?

PB - Eso hizo delante de mí el doctor Larrañaga cuando lo fui a ver en octubre pasado al Parlamento, dijo: "Che, ¿qué te parece si llamamos al ministro de Economía, le pedimos una reunión e invitamos a todos los precandidatos?"; "Jorge, me parece bárbaro", le dije. Agarró el teléfono y lo llamó, le dijo: "Mirá, estoy acá con el doctor Bordaberry, estamos con esto, queremos dar una mano"; "Bueno, sí, te vamos a avisar", respondieron. Y después salió el subsecretario a decir que estábamos haciendo terrorismo económico. El teléfono está, pero alguien tiene que atenderlo del otro lado.

***

EC - El problema de la minoridad infractora es otro de los ejes de su discurso. Usted propone –era una de aquellas 50 propuestas que le entregó a la ministra del Interior– bajar la imputabilidad a 14 años. ¿Por qué a 14?, ¿qué se lograría con eso?

PB - Hay una simplificación en lo que usted dice; si lo presenta así, van a decir "este es un animal, va a meter presos a los niños de 14 años". Es un poco más amplio, habría que estudiar no el árbol, sino el bosque. Es para los hechos de sangre, cuando el menor mata, y en un centro de reclusión especial. Tiene un fundamento, los menores matan a entre 70 y 80 personas por año en Uruguay, y el menor que asesina, en promedio, está recluido nueve meses, cuando no se escapa antes...

EC - ...¿Cuál es la ventaja de imputar penalmente a ese menor de 14 años? ¿Cuál es la diferencia con la situación actual?

PB - Primero, hoy está nueve meses recluido; segundo, está recluido en centros del INAU de los que se escapa a cada rato; tercero, cuando un menor mata no hay agravamiento para las penas de los mayores que delinquen con ese menor –porque hay mayores que usan menores para delinquir, como aquel caso sonado de la contadora a quien el marido trató de matar, y la última vez lo intentó utilizando a un menor de edad–; y hoy a los menores, cuando llegan a los 18 años, por más que tengan dos o tres asesinatos, se les borran los antecedentes, quedan cero a cero, entonces vuelven a cometer un asesinato al cumplir 18 años y recién ahí pasan a ser imputables, ahí son primarios. Es una realidad espantosa de nuestra sociedad, pero la tenemos que encarar sí o sí, en especial para los casos de sangre...

EC - ...Si no se logra consenso para bajar la edad de imputabilidad a los 16, ¿cómo se podría llegar a los 14? ¿En qué ha quedado esta propuesta? ¿Qué tipo de diálogo, de intercambio hay en torno a esta iniciativa?

PB - En esa propuesta el teléfono sí funcionó: le hicimos sonar el teléfono al presidente de la República, el presidente nos recibió, y el diputado Cardoso y otros dirigentes le llevaron las medidas a la ministra Tourné. Creo que es algo inédito que la oposición, cuando el gobierno tiene problemas, le lleve 50 medidas estudiadas y fundamentadas. Recuerdo que el doctor Vázquez me dijo que él creía en esa forma de hacer oposición constructiva y que de las 50 medidas estaba de acuerdo en 35, y sobre ésta específicamente me dijo que no tenía posición formada todavía y que la iba a estudiar. De repente no es 14, es 16; de repente, como en otros países, hay que dejarlo librado a que el juez vea la capacidad de discernimiento del menor en el momento de tomar esa decisión, y el grado de peligrosidad, por más que eso va contra algo que a nosotros los abogados no nos gusta, que es que no esté bien determinado el tipo delictual en la norma; en algunos países –yo estoy en contra de eso– si a los ocho años el menor tiene capacidad para discernir, ya lo imputan responsablemente.

Sobre todo proponemos mirar la situación del menor al que hay que tratar de sacar de la situación en que se encuentra, pero también la del mayor a quien el menor mata, asesina, porque hoy el problema de la minoridad delincuente es el más grave que hay en Uruguay, porque a caballo de la inimputabilidad están matando gente honesta que trabaja, comerciantes, gente que anda por la calle. Entonces, no enfocar el problema es un error. También dentro de las medidas viene todo un programa especial con los padres, con sanciones para los padres que no atienden el problema de los menores a su cargo, e incluso un problema de base de educación y de política social que es necesaria. Va por ahí.

***

EC - Desde que decidió ser precandidato a la Presidencia ha estado liderando la interna del PC, en algunos momentos con mayor margen que en otros, pero siempre encabezando las preferencias, ahora incluso por encima del 60% en algunas encuestas. A esta altura es muy probable que usted gane la interna. Si eso ocurre, por un lado va a ser el candidato presidencial del PC, pero por otro lado habrá controlado la mayoría del Partido, un voto como ese en la interna de junio tiene efectos hacia dentro del Partido, porque se elige la convención, y esto influye en los órganos de dirección. ¿Aspira a ser el secretario general del PC?

PB - Estamos en un proceso que el PC necesita. Seguro no hay nada, primero tenemos que ir a la interna de junio y ganarla. No podemos perder la humildad que hemos tenido hasta ahora, no podemos decir "las encuestas nos dan 65, 57, 60%, entonces ya ganamos", porque seguro no hay nada en la vida, salvo la muerte...

EC - ...Pero usted quiere ganar.

PB - Yo quiero ganar...

EC - ...Y si gana, ¿qué implica eso para el PC?

PB - Creo que es algo que el partido necesita, la gente se lo viene diciendo desde hace rato. El PC ha sido un formidable instrumento para el país, de avanzada, las principales leyes sociales del país han sido del PC. El otro día el presidente de la República mencionaba como la gran cosa las asignaciones familiares. Las asignaciones familiares están desde hace muchísimos años en Uruguay...

EC - ...Pero esa es una obra del Batllismo del PC. Usted no representa al Batllismo, al Batllismo lo reivindican hoy José Amorín Batlle, Luis Hierro, Daniel Lamas. Usted es otra cosa en el PC.

PB - No me gusta enmendarle la plana, Emiliano, pero lo sigo, y hace un tiempito hizo una entrevista con el doctor Lamas y le dijo: "Pero usted como batllista ¿cómo va a votar a Bordaberry después de junio?", de antemano llega a una conclusión que no sé de dónde saca...

EC - ...Me baso en el debate que cada tanto se insinúa entre los propios precandidatos colorados...

PB - ...Pero no de nuestro lado.

EC - De acuerdo.

PB - Se lo digo con todo respeto, porque nuestro programa, el que estamos elaborando, es el que más encarna los ideales y objetivos de justicia social que siempre fueron el objetivo del PC, siempre, de todo el PC. Porque había un PC batllista con una gran raigambre en la zona urbana, pero también había un PC del interior que fue el autor del primer estatuto del trabajador rural en el año 43. Yo creo que encarno a todos, a aquel partido más urbano y aquel partido más rural, pero creo además que la discusión entre Batllismo y no Batllismo ya no existe más, pero no solo en el PC, en el sistema político uruguayo. El FA, cuando quiere decir algo con sustancia, dice "somos batllistas", y la propuesta del PN tiene mucha propuesta del Batllismo. El gran error que cometen los otros partidos, en especial el FA, es pensar que recreando lo que el PC y el Batllismo hacían hace 50 o 60 años van a cumplir los objetivos del PC y del Batllismo de hace 60 años hoy en el año 2009.

EC - Vuelvo a mi pregunta: ¿qué se propone hacer con el PC, si es mayoría?

PB – Yo, sobre todo, propongo renovar ese formidable instrumento que es el PC, ponerle gente joven que lo aggiorne a la realidad del mundo de hoy. Compartimos los objetivos de justicia social del PC y del Batllismo, y no solo de principios del siglo pasado, de siempre, pero los instrumentos para lograrlos cambiaron, porque el mundo cambió. Nadie puede pensar hoy que tenemos que volver al monopolio del Banco de Seguros del Estado, o que tenemos que sacarle la flota naviera al señor López Mena, como se la sacaron al señor Lussich, se la expropiaron. El mundo cambió, ni siquiera el más batllista de los batllistas que se diga batllista puede pensar que hay que volver a estatizar el Puerto de Montevideo. El mundo cambió, es otra la realidad. Lo que está vigente son los objetivos de justicia social que perseguía, persigue y perseguirá el PC y el Batllismo, porque ya ganamos, porque esos objetivos los persiguen todos, incluso los del PN. Tenemos que discutir cómo lograrlos. Y además no se es justo con mucha gente que está en Vamos Uruguay, como el profesor Fau, de la Lista 99, que adhirió el otro día, como el doctor Ope Pasquet, como el doctor Alberto Brause Beretta, y tantos más. ¿Quién tiene el batllistómetro? ¿Quién mide "este es más batllista, este es menos batllista"? De nuevo es esa discusión de una generación confrontativa, que no es la mía.

EC - Por lo tanto, usted rechaza el calificativo de "derecha".

PB - No existe más, no está más ideologizado. Obama ¿es de derecha o de izquierda, el presidente de la nación más capitalista? Y Bush, cuando nacionalizó los bancos hace poco, ¿era de derecha o de izquierda? Y Vázquez, cuando recibe a Bush en Anchorena y le dice "Mister president", ¿qué es?, ¿de derecha o de izquierda? Son discusiones ideologizadas que no existen más, nosotros nos llamamos de un pragmatismo sensible, la mejor solución sensible a los problemas de la gente.

EC - Las mismas encuestas que a usted lo dan muy consolidado en la interna del PC muestran, por otro lado, que la intención de voto del Partido como tal sigue complicada, no llega al 10%, en algunas hasta ha caído y se ubica en el 7%. ¿Qué significa esa parte de la historia para ustedes?

PB - Lo mismo que le dije cuando hablábamos del 65% en la interna: no hay nada ganado ni nada perdido...

EC - ...Pero pasan los meses y eso no cambia.

PB - Gracias por el aliento que me da. Estuve en estos mismos micrófonos con usted en marzo de 2005 y creo recordar –podemos ir a los archivos– que usted me dijo lo mismo cuando yo empezaba mi campaña hacia la elección municipal. Era en marzo, cuando empecé la campaña, y la elección era en mayo, no en octubre. En ese momento teníamos el cinco; yo me habría ido para mi casa, mi señora me lo decía: "Estás loco"; y ¿sabe qué?, a los dos meses votamos el 27; lo único que no se puede es lo que no se intenta. Además, creo –eso es muy importante– que después de junio las cosas van a cambiar y se nos va a abrir una segunda oportunidad.

EC - ¿Qué papel va a jugar el PC en la elección nacional de octubre?

PB - Después de octubre, el que votó a Larrañaga, si ganó el doctor Lacalle, va a pensar si lo vota a él o nos vota a nosotros; el que votó al doctor Lacalle, si ganó el doctor Larrañaga, va a pensar si lo vota a él o a nosotros; el que votó a Astori, si ganó Mujica, va a pensar si vota a Mujica, a nosotros o al PN. Después de junio se recogen las cartas y se vuelve a repartir. Tenemos que estar prontos para ese momento, tener una propuesta moderna, y sobre todo exhibirle al Uruguay entero que el PC se renovó, que hay un nuevo PC. Nuestros eslóganes lo dicen, somos el nuevo PC, distinto, ni mejor ni peor que el otro, distinto, aggiornado al mundo, y con una gran propuesta para pedirle a la gente que nos acompañe.

EC - Pero para que los acompañe ¿a qué efectos?

PB - De ganar la elección.

EC - ¿De ganar la elección? ¿O de sumar con el PN para evitar que el FA quede en el gobierno y haya una segunda vuelta? ¿Cómo se conciben a sí mismos?

PB - Este partido es como ir a jugar contra Brasil a Maracaná, y encima creo que el juez es brasileño –después de lo que vimos el sábado pasado– y los líneas y algo más, y la tribuna está llena. Es un partido muy difícil, no me voy a hacer trampas al solitario. Los analistas, sus amigos de 13 a 0, el profe Piñeyrúa dirían: "Vamos a perder, si perdemos 2 a 0, cerramos". Es complicado, pero hemos ganado, tenemos la posibilidad de ganar, tenemos que jugar muy bien, el gordo Ronaldo se tiene que ir la noche anterior de farra con mujeres, ellos entrar medio dormidos, tienen que equivocarse. Pero ¿sabe qué? Se están equivocando. Y pelearse los rivales, discutir el back derecho con el back izquierdo, y nosotros estar concentraditos todos juntos. Y yo siento que hoy el PC, sin hablarnos, fieles a nuestra tradición y a nuestra historia, estamos todos trabajando por nuestro andarivel, hablándonos, sin pelearnos, marcando nuestras diferencias, pero en el camino correcto. Y los rivales están discutiendo entre ellos, peleándose. Por eso creo que después de junio este nuevo PC va a ser una buena opción. Es difícil, pero si apretamos, vamos todos con ella, si se la tiramos larga a Forlán y Forlán la manda a guardar en la única que tiene en el partido, ¿quién le dice que no podemos ganar?

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Transcripción: María Lila Ltaif