(emitido a las 7.42 hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
El juez penal Federico Álvarez Petraglia procesó con prisión a cinco personas que integraban una red de contrabando hacia Brasil utilizando los beneficios fiscales de un importante free shop de la ciudad de Chuy en Rocha.

La Policía llamó "Pegasos" al operativo, del que se prevé habrá nuevas derivaciones. De hecho, hoy se maneja que la investigación apunta ahora a una casa de cambio en Montevideo.

Lo cierto es que cinco de los siete procesamientos dictados fueron con prisión: Víctor Hugo Mesa Redes, Walter Guillermo Martínez Alíbar, Santiago Moneta Steneri, Sebastián Laso Silveira y Ahmad Alí Safía, son los nombres que recogen El Observador y El País en sus ediciones del fin de semana. A ellos se les imputaron los delitos de asociación para delinquir y contrabando.


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JAE – Todo esto se dispara con una investigación que nace en el Departamento de Investigaciones de la Policía y en la Dirección Nacional de Aduanas. Estamos con Ricardo Prato, director de Aduanas. Empecemos por lo que es el procesamiento habitual. Tengo aquí un registro de un whisky que se importó de Reino Unido, que llegó al Puerto de Montevideo, se trasladó a zona franca, hasta allí sin pagar impuestos ¿verdad?

RICARDO PRATO:
Sí, exactamente, hasta ese momento es un tránsito, no una importación.

JAE – Después de ahí pasa a Garden S.A. que es el operador del Depósito Fiscal Único que opera en el Chuy, donde va toda la mercadería que se vende en los free shop.

RP – Sí, exacto. La mercadería a disposición de los comercios de la zona fronteriza se traslada desde zona franca hacia lo que se llama Depósito Fiscal Único, que abastece a todos los comercios de determinada zona.

JAE – O sea que cada zona, cada ciudad que tiene free shop tiene un Depósito Fiscal Único que maneja toda la mercadería que se vende después sin impuestos en los free shops.

RP – Exacto.

JAE – En el caso de Chuy el operador es Garden S.A., una empresa privada que maneja toda la mercadería. ¿A partir de qué momento paga impuestos de importación?

RP – Paga impuestos de importación desde que sale de zona franca porque ahí es importado hacia el Depósito Fiscal Único, que son privados en todo el país. Es una operación de depósito igual a las que tenemos en el puerto o fuera del puerto, manejada por privados.

JAE – Y después de que sale del Depósito Fiscal Único lo que hace el Estado es devolverle el impuesto que pagó a quien vende en el free shop.

RP – Exacto.

JAE – Eso es lo que debería suceder normalmente.

RP – Esa es la operativa normal. Ese tipo de operativa se explica porque hay que mantener stocks cercanos a los puntos de venta y los particulares no tienen necesidad de importar más allá de las cantidades que calculan que van a vender. Uruguay tiene el régimen de zona franca y el de puerto libre que permiten tener mercadería depositada sin plazo, sin pagar impuestos, hasta el momento en que deciden nacionalizarla, ya sea para revenderla a un free shop o para el consumo en Uruguay.

JAE – Sí, tengo aquí la normativa vigente que dice que en el caso del Chuy –pero es para todos– "existe un único depósito del que ingresan necesariamente los bienes, cuyo destino no podrá ser otro que no sea el de su venta a turistas extranjeros en los comercios habilitados".

RP – Exactamente.

JAE – Y en el caso de esta banda de contrabandistas hacia Brasil que ha caído, ¿se puede afirmar que todo el whisky y el perfume pasaron por este procedimiento, por el Depósito Fiscal Único?

RP – No, por eso creo que no es tan correcto decir que hay contrabando de exportación sino que puede haber también contrabando dentro del país, ya que aparentemente algunas partidas no habrían pasado por el Depósito Fiscal Único.

JAE – O sea, usted dice que pudo haberse dado el caso de salida de zona franca y...

RP - ...no pasada por el Depósito Fiscal Único.

JAE – ...Pero pasando por free shop o de repente "cayéndosele al camión" como se dice en la jerga...

RP - ...quizás cuando leamos el auto de procesamiento, que a veces determina exactamente la forma de la maniobra, recién ahí tengamos claro qué es lo que determinó el juez. Creemos que por la falta de marcas que tienen algunos productos –el sticker que le colocan en el Depósito Fiscal Único– aparentemente hay mercadería que no pasó por ahí, si bien ingresó al país proveniente supuestamente de zona franca, aunque eso todavía no lo tenemos determinado. Existen dos situaciones diferentes: mercadería que pasó por el Depósito Fiscal Único y mercadería que no habría pasado por el Depósito Fiscal Único.

JAE – ¿Y en ese segundo caso es mercadería que quedó en el país?

RP – La encontramos en el país, por lo tanto está en contrabando. El juez dispuso que esa mercadería se decomise y se traslade a un lugar seguro. De la misma manera sabemos que la Policía Federal brasileña encontró mercadería aparentemente de ambos tipos en un local cercano a la frontera pero no al lado.

JAE – ¿Cuánto falta para terminar esta investigación?

RP – Es difícil saberlo porque con las órdenes que nos ha dado el juez de separar claramente cuál es la mercadería que está en infracción de la mercadería que no está en infracción nos va a llevar unos días el hacer el inventario. La orden original habría sido "decomisen todo", eso se modificó durante el fin de semana y hay gente de Aduanas y de la Dirección Nacional de Investigación de Información e Inteligencia que está separando "el ganado" de un lado y del otro para poner en algún lugar seguro la mercadería que está claramente en infracción y seguir investigando con la documentación sobre el resto de la mercadería del free shop.

EMILIANO COTELO:
¿Durante cuánto tiempo se investigó este caso? Porque tengo acá una versión que llega desde la audiencia que dice que "el origen de esta investigación está en la Policía Federal brasileña en San Pablo, que rastreó la mercadería y llegó a Chuy. Hace cinco meses avisó a las autoridades uruguayas".

RP – Nosotros tenemos conocimiento del tema desde hace más o menos seis meses o un poco más. Esto es producto del trabajo conjunto de las agencias uruguayas de Inteligencia con la colaboración de la Policía Federal brasileña; se está trabajando con la Dirección Nacional de Información e Inteligencia, Aduanas, DGI. Seguramente ustedes han dado la noticia de la existencia de un cambio –que muchas veces también se usa para hacer los pagos legalmente– por lo que quizá tenga que intervenir la Secretaría Antilavado, lo que está generando una situación que quizá termine en el juzgado de Crimen Organizado.

JAE – ¿Pero por qué se desató a partir de hechos externos? Se lo pregunto porque por ejemplo datos de la propia Aduana muestran que el tráfico de whisky que se comercializa en free shops y que pasó por el depósito fiscal aumentó 33% en los primeros 11 meses de este año con respecto al año pasado y que la operativa en los últimos cinco años se triplicó en dólares. Llama la atención el crecimiento de la mercadería que pasó por el depósito fiscal, ¿eso no llamó la atención en las autoridades de Aduana?

RP – Hay una cosa que está llamando la atención: en una época había excursiones uruguayas al Chuy que eran para abastecerse de un todo un poco, entre los cuales pasaba mercadería de contrabando hacia el Uruguay; ahora tenemos la situación exactamente a la inversa, excursiones brasileñas que vienen al Chuy a abastecerse y no necesariamente a hacer contrabando. Lo cierto es que compran muchos productos que van rumbo a Brasil, y es una preocupación no solamente de la Policía Federal sino también de la Receita Federal el hecho de que existan abundancia de compras, lo que les produce a ellos una situación muy parecida a la que tenía Uruguay cuando convenía ir a buscar a Brasil desde ropa hasta electrodomésticos.

EC – El origen está en la diferencia cambiaria ¿no?

RP – Exactamente, cada vez que hay diferencia cambiaria con un país se producen trasiegos como tenemos con Argentina con ropa y teníamos con Brasil con alimentos. Ahora la cosa cambió, es más negocio llevarse cosas de Uruguay y esto viene sucediendo y acentuándose en estos últimos años.

JAE – El asunto es que es tan atractivo para un minorista como para un mayorista.

RP – Claro.

JAE – El negocio es lucrativo para todos.

RP – Claro, la diferencia del precio de venta final de un producto está entre 15 y 45 dólares, francamente eso atrae a cualquiera a hacerse el negocio. Los controles se hacen, muchas veces se tienen datos, indicios, el tener pistas firmas es lo que nos lleva a que el tema se lo arrimemos a los jueces, pero cuesta armarlo. Después hay que esperar a que los jueces nos den instrucciones y las instrucciones por lo general son las de investigar con paciencia, utilizando los medios disponibles, y todo ese tipo de investigación para poder dar resultados requiere tiempo, esperas.

JAE - Por ejemplo el tema de las escuchas telefónicas, de las filmaciones, que han trascendido sobre el fin de semana, ¿cuánto han ayudado para armar el expediente?

RP – Son parte fundamental porque ahí es donde se registran conversaciones que luego llevan a que los involucrados ante el juez no puedan decir que no sabían lo que estaba pasando porque están registradas sus conversaciones, las que deben ser no solamente llevadas grabadas sino además transcriptas para que se integren el expediente.

EC – Hay toda una polémica a propósito del uso de esas nuevas tecnologías de investigación: escuchas telefónicas, intercepción de intercambio de correo electrónico, mensajes de texto, filmaciones realizadas de manera...

RP - ... me parece que esa polémica se instala en forma incorrecta ya que todo eso se hace dentro del marco de la ley, hay una ley que estableció estas posibilidades. Los jueces no dan alegremente permisos para escuchar, hay que fundamentar muy bien por qué queremos escuchar y después que los jueces dan la autorización por supuesto van a recibir lo que se grabe, lo que se transcriba, con esa importancia ya que ellos mismos son los que lo dispusieron.

EC – Pero mi pregunta apuntaba a consultarle a usted si con estas tecnologías de investigación se puede llegar a resultados que con los métodos tradicionales no, si hay un salto cualitativo desde el punto de vista de la Aduana por ejemplo a partir del uso de estas tecnologías.

RP – Por supuesto, porque a veces las conversaciones entre los delincuentes o las personas presuntamente implicadas en las maniobras son las que dan información sobre cómo se hace la maniobra, quiénes participan o eventualmente cuándo va a suceder algo que permite la intervención en el lugar y el momento adecuados para impedir que la maniobra continúe. Porque a veces simplemente sabemos que la maniobra ya empezó, el tema es saber cómo se está haciendo y cuándo sigue, que es lo que permite la escucha telefónica.

JAE – ¿En este caso también se está investigando la introducción de computadoras hacia el Uruguay en forma ilegal?

RP – No tengo conocimiento, eso es un tema que la prensa está manejando, no sabemos dónde sacaron esa información. Lo único que puedo decirles es que esta investigación está en su etapa no digo inicial, porque inicial fue cuando le pedimos permiso al juez para escuchar, pero falta mucho por delante.

JAE – ¿Esto implica también centrarse en otros lugares como Rivera?

RP – No le podría decir si se hace en otros lugares pero lo cierto es que todavía estamos en la etapa primaria. Habremos trabajado un 10 o un 15% de lo que se sospecha que puede trabajarse.

EC – Pero por ejemplo en este caso el free shop que está involucrado es el Natural, del Chuy. ¿Hay otros free shops que están siendo investigados?

RP – Creemos que la maniobra abarcaría a más de un comercio de ese tipo.


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