(emitido a las 07.21 Hs.)

JUAN ANDRÉS ELHORDOY (JAE):
Culmina la visita de algunos integrantes del gobierno a Brasil, el lunes el centro de atención fue la reunión entre los presidentes de Brasil y Uruguay, esto ocurrió en Brasilia, ya dimos cuenta de algunas informaciones que surgieron allí. También hubo otros encuentros porque estuvo el ministro de Industria, el ministro de Ganadería y el canciller con quines estamos en contacto, doctor Luis Almagro.

¿Está usted en escala, está en San Pablo?

LUIS ALMAGRO (LA):
Estoy en San Pablo.

JAE - ¿Qué destacaría usted del encuentro y de esta visita del gobierno del presidente Mujica a Brasilia?

LA – Fue absolutamente positivo. Hemos logrado impulsar una serie de proyectos que creo que son muy importantes para el futuro del país y hemos conformado una institucionalidad nueva a los efectos de monitorear aspectos de planeamiento y desarrollo de infraestructura, así como integrarlo al tema de la Comisión de Monitoreo de los temas comerciales.

JAE – ¿Qué quiere decir "institucionalidad nueva"?

LA – Eso se ha creado a través del comunicado conjunto de los presidentes, una comisión bilateral de planeamiento estratégico que tiene como objetivo abordar los temas de infraestructura que se pueden desarrollar entre los dos países, sea la interconexión ferroviaria, el puerto de aguas profundas, continuar los trabajos de la interconexión eléctrica y otros aspectos como el segundo puente del Río Yaguarón y las reformas de la actual planta en Mauá.

JAE – También ha trascendido que hay acuerdo para que empiece Brasil a colocar carne de pollo aquí en nuestro país, se habla de una cuota de 1.440 toneladas anuales lo que representa un 4% de la producción nacional, ¿es así?

LA – Se estaría dando la habilitación sanitaria correspondiente, que no empezaría a operar ahora sino en tres meses y sería una cuota de unas 120 toneladas mensuales lo cual es aproximadamente el 4% del mercado. Pero además, esto corresponde que lo diga el Ministerio de Ganadería. Se están tomando otras medidas tendientes a dar mayor fuerza al sector avícola y que no se vea ni siquiera afectado en ese 4% que eventualmente podría ingresar al mercado de pollos brasileños.

JAE – Hemos informado que hay una reunión ya prevista, pactada para la semana que viene. Incluso, existe un plan que se está gestando para hacer más integrada la cadena de producción avícola con agricultores, con productores, apuntando a la necesidad de ser más competitivos. Ahora, hay preocupación porque el sector avícola ha planteado en un comunicado su preocupación por esto, porque se sabía que estaba arriba de la mesa. Este paso que dio Uruguay, esta aceptación, ¿a cambio de qué es?

LA – No necesariamente tiene que ser a cambio de algo, no se negocia así. Simplemente es un tema que Uruguay tenía hace mucho tiempo pendiente, yo estuve en Ganadería durante dos años –del 2005 al 2007- y verdaderamente no existía ya ningún obstáculo técnico del punto de vista sanitario para frenar el ingreso de pollo brasileño. No obstante, eso se mantuvo durante cinco años, después las gestiones las seguía retomando Mario Piacenza, director de la Unidad de Asuntos Internacionales del MGAP. Sí había una condicionante fuerte en cuanto a las trabas comerciales que Uruguay estaba recibiendo al presente para la carne bovina y ovina, para los lácteos, para el pescado, entonces esos eran temas que tenían que ser resueltos y fue uno de los logros de la visita el resolver todos los temas pendientes de licencia de exportación.

JAE –  ¿Qué compromiso obtiene Uruguay de Brasil?

LA – Brasil se comprometió a resolver los temas de licencias de importación pendientes y para el futuro aplicando los procedimientos que existían previos a las nuevas medidas que habían adoptado.

JAE – ¿Pero el mecanismo de licencia previa va a seguir existiendo o se elimina?

LA – No, pasa el mecanismo a ser el mismo que antes. Uruguay había caído en un estado de excepción y vuelve a los mecanismos de siempre, que no se centralizaba en Brasilia la concesión de licencias sino que se daban oportunamente en donde fueran solicitadas.

JAE – Otro de los temas que no aparece hoy, pero sí se ha estado manejando y es de mucha preocupación para el Uruguay, tiene que ver con el doble cobro del arancel externo común, por ejemplo el sector logístico mira este punto con mucha atención. ¿Hay alguna novedad al respecto?

LA – Nosotros tenemos firme eso. Fue uno de los temas que habíamos hablado con el canciller Celso Amorín en mi visita previa a Río de Janeiro. Existe la voluntad política de Brasil de resolver este tema, eventualmente Argentina estaría dispuesta también a resolver este problema, resta el apoyo de Paraguay al respecto. Pero está la posibilidad de un acuerdo bilateral con este fin entre Brasil y Uruguay, un acuerdo trilateral con Argentina también aunque esperemos tener los argumentos suficientes como para convencer a Paraguay que se sume. Esto va avanzando bastante bien esta vez.

JAE – Comentarios como el que acaba de hacer ya se han escuchado en otras oportunidades, es un elemento de preocupación que está arriba de la mesa hace muchos años, entonces por qué ahora sí.

LA – No, no es exactamente así. Yo estuve a comienzo de 2005 hasta el 2007 –como le dije- con este tema y no hubo ninguna instancia en que verdaderamente notáramos la voluntad política de Argentina y de Brasil en resolver este asunto y que lo expresaran abiertamente. Esta es la primera instancia que yo tengo en que esto así sucede y que logramos disecar un poco el problema e identificar dónde están las posibilidades y dónde no están. Creo que está encaminado, son temas técnicos que para su solución requieren soluciones muy específicas que hacen al presupuesto de los Estados. Los temas aduaneros son fundamentalmente de recaudación, entonces tenemos que ver un montón de aspectos técnicos donde va esa recaudación y qué es lo que pasa si un bien entra por un país y va hacia otro quién es el que recibe el dinero del arancel externo común. Pero todos esos temas técnicos hay que resolverlos técnicamente, pero la voluntad política es un paso muy importante en este punto.

JAE – ¿En materia de televisión digital Uruguay toma una posición con respecto a la norma europea y la norma japonesa?

LA – Uruguay reafirmó acá su voluntad de cumplir sus compromisos en la medida en que su contraparte cumpla sus compromisos también. Uruguay tiene adoptada la norma europea y eso es la situación actual. Hemos recibido planteos de la delegación brasileña pero falta desagregar elementos para ver en qué específicamente consisten las posibilidades que se ofrecen. De todas maneras a la situación actual Uruguay tiene un compromiso con la Unión Europea y la Unión Europea en función de ese compromiso que adoptó Uruguay tiene una serie de compromisos por delante que esperemos puedan ser llenados en el próximo tiempo. De lo contrario tendremos que ver y seguir analizando en qué medida la Unión Europea mantiene su interés en Uruguay.

JAE – Claro porque el escenario realmente cambió, de hecho Uruguay hoy se ha transformado prácticamente en una isla, cuando tomó la decisión todavía la región estaba definiéndose. ¿Hay espacio para pensar que a Europa ya de pronto Uruguay no le interesa como para dejar libre el camino?

LA – Pero tenemos que ver. Hay una serie de compromisos europeos como laboratorios o temas industriales para la producción de material relacionado con la adopción de la norma europea que todavía no se han llenado, entonces nosotros es algo que tenemos que asumir las conversaciones en las próximas semanas para ver si la Unión Europea mantiene el interés en llenar todas estas propuestas que había hecho en su momento. Esa es la situación. Nosotros tenemos que hablar con ellos francamente y ver en qué manera. Ellos van a seguir trabajando el tema Uruguay con su norma digital, ahí está la clave de este asunto. En Uruguay, creo que en este momento se ponderaron temas específicamente técnicos y no algunas variables de política exterior que a veces es bueno considerar cuando se toman algunas decisiones de este tipo.