(emitido a las 10.23 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Uno de los triunfadores de esta elección departamental y municipal de ayer es el sector Alianza Nacional (AN), del Partido Nacional (PN), al frente del cual se encuentra el senador Jorge Larrañaga.

El PN tiene a esta altura del escrutinio 11 departamentos confirmados, y está peleando el de Florida con el Frente Amplio (FA), que buscaba la reelección.

Pero de esas 11 intendencias que tiene el PN ya confirmadas, ocho corresponden a AN: Paysandú para Bertil Bentos, Soriano para Guillermo Besozzi, Río Negro para Omar Lafluf, Tacuarembó para Wilson Ezquerra, Lavalleja para Adriana Peña, Cerro Largo para Sergio Botana, Treinta y Tres para Dardo Sánchez y Colonia para Walter Zimmer. Por otro lado hay dos intendencias de Unidad Nacional (UNA), San José para José Luis Falero y Durazno para Benjamín Irazábal, según los últimos números disponibles, aunque queda confirmarlo con los votos observados. Y finalmente uno independiente, neutral dentro del PN, Armando Castaingdebat, reelecto como intendente de Flores.

Estamos con el senador Jorge Larrañaga.

Supongo que usted hace rato que sacó estas cuentas esta madrugada.

JORGE LARRAÑAGA:
Sí, por supuesto. No me acosté todavía, estuve esperando los resultados de todos los departamentos hasta lo último, y además esperé el cierre de Paysandú de la Corte Electoral hasta las cinco y media, y después me agarraron algunos medios. Más allá de las cuentas, creo que el PN tiene una notable presencia, con 11 o quizás 12 gobiernos departamentales.

Quiero corregir a un contertulio que dijo que algunos dirigentes expresaban que no querían que fueran dirigentes nacionales. Yo estuve en la inmensa mayoría de los departamentos, en Cerro Largo estuve recorriendo calles e hice actos con Botana, otro tanto hice en Paysandú, ni hablar, por supuesto fui el único dirigente nacional que estuvo en Paysandú, mientras que el FA llevó hasta al vicepresidente; estuve en Flores, en San José apoyando al intendente Falero con nuestro compañero Carlos Daniel Camy.

En fin, la lectura es de una enorme satisfacción por el enorme esfuerzo que hicieron muchos compañeros. No me quiero apropiar del esfuerzo ni etiquetar a nadie porque el triunfo les pertenece en función del trabajo que llevaron adelante. Ya había sucedido algo parecido en el año 99, luego de tener un mal resultado en octubre tuvimos una enorme recuperación en las intendencias municipales en mayo de 2000.

EC - Pero acá estamos hablando de la lectura en la interna del PN, supongo que para su sector estos resultados de ayer son un suspiro de alivio. El año pasado, en ocasión de la interna a nivel nacional a usted le tocó perder frente al doctor Luis Alberto Lacalle y su movimiento, UNA. Ahora resulta que cuando la votación es a nivel departamental AN se hace fuerte, y por lo visto con un margen importante sobre el sector que orienta Lacalle.

JL - Por supuesto. Además recuperamos departamentos en los que habíamos caído de manera muy fuerte en la elección de octubre. En Paysandú perdimos por 15.000 votos, en Río Negro la diferencia fue abultada, en Soriano la que se expresó en la Tertulia, y sin embargo esos departamentos por suerte se recuperaron. Recuperamos también Treinta y Tres, donde se había perdido.

En fin, desde el punto de vista sectorial no puedo ocultarle, sería una hipocresía de mi parte, nuestra satisfacción por el resultado que tenemos en función de la pertenencia de los intendentes municipales. Tenemos más intendentes municipales que todo el FA junto, al tener ocho o quizás nueve compañeros y compañeras, porque tenemos el caso de Adriana Peña en Lavalleja. Pero también me satisface como nacionalista, y eso es lo más importante, se lo digo de verdad y honesta y sinceramente, como nacionalista me entusiasma mucho que tengamos 12 [según el primer escrutinio de la Corte Electoral fueron 11] gobiernos departamentales, que siempre han sido trascendentes para que el partido después se repotencie para las próximas instancias electorales.

EC - Dentro de ese esquema que venimos comentando, en el que AN resulta tan holgadamente mayoritaria en el PN, con ocho intendencias por lo menos, hay una nota aparte a formular a propósito de Montevideo. En Montevideo ocurrió todo lo contrario, el candidato de AN, Javier de Haedo, perdió de manera contundente frente a Ana Lía Piñeyrúa, de UNA. Y Graziano Pascale me acota que otro tanto sucedió en Canelones, también en Canelones hubo una fuerte primacía de UNA por sobre AN en la elección departamental.

JL - Perfecto, pero más allá de eso que acota Graziano Pascale, nos sentimos responsables, por haber sacado una segunda candidatura, de que el partido haya obtenido el segundo lugar en la elección municipal, hasta donde yo conozco, tanto en Montevideo como en Canelones, y en el caso de Javier una persona que hacía sus primeras armas en la actividad política. Yo me siento igual satisfecho por esa realidad.

EC - ¿AN no es un movimiento del área metropolitana, entonces?

JL - Cómo no va a ser, si en la elección interna de 2004 ganamos con holgura también la interna, tanto en Montevideo como en Canelones. Se dio la circunstancia de la elección municipal en estos términos, pero eso no significa que no tengamos una fuerte presencia en el área metropolitana. Digo que porque nuestra postura fue tener una segunda candidatura tanto en Montevideo como en Canelones fue que se desató un trabajo en que la dirigencia trabajó. Recuérdese que en las elecciones anteriores tuvimos dos grandes candidatos, compañeros como Javier García y Ruperto Long, que fueron candidatos únicos del partido, y como no había ninguna lucha interna, ningún trabajo interno, tuvimos una muy baja votación. Eso marca que tenemos dificultad, más allá de los resultados, también en Montevideo. Ahora me parece bueno subrayar que hemos repechado de manera importante en la capital del país, y eso fue merced al esfuerzo de Ana Lía y de Javier, porque por encima de la disparidad de aportes en la sinergia de los dos se obtuvo el resultado.

EC - ¿Javier de Haedo va a seguir trabajando como referente en los temas departamentales de Montevideo?

JL - Todo está para hablarse. Javier a mi juicio fue una estupenda elección, fue un gran candidato, hizo un gran aporte. Quizás con desconocimiento, con baja visibilidad en la población de Montevideo, pero nadie puede negar que hizo un papel de una enorme dignidad.

EC - Mi pregunta apuntaba al futuro, porque por lo visto tiene planes de seguir trabajando en los temas de la Intendencia.

JL - Me parece tremendamente positivo, en buena hora que alguien piense en futuro y seguir trabajando. Contará con apoyos varios. Pero eso está para analizarse en la interna del partido y del sector.

EC - ¿Viene ahora el análisis del PN a propósito de sus resultados electorales, ese análisis que quedó pendiente después de la derrota en la elección nacional?

JL - Eso es lo acordado y seguramente se cumplirá a la brevedad.

EC - ¿Existe margen, para usted, para pensar con vistas al futuro en alianzas electorales con el Partido Colorado (PC)?

JL - Yo he dicho claramente que creo que cada partido tiene que tener su propia individualidad.

EC - Pero quienes impulsan esos acuerdos dicen que esas coaliciones no necesariamente implican perder la identidad.

JL - Correcto, ese es el pensamiento de quienes impulsan ese tipo de entendimiento, no es el mío.

EC - Usted mantiene la posición contraria, en principio, a ese tipo de acuerdos.

JL - En principio mantengo la posición de la individualidad de cada uno de los partidos. Me parece que si jugamos a la ley del 50% lo único que logramos es terminar siendo el 50% menor. Hay que jugar a la ley de los tercios y procurar agrandar nuestras colectividades políticas, tanto el PN como el PC. Eso terminará seguramente en un resultado de que se pueda predominar sobre el FA. Ese es mi posicionamiento, esa es mi reflexión, por supuesto estoy abierto a una discusión en lo interno sobre otro tipo de soluciones, pero en principio soy perteneciente a esa corriente de pensamiento. Nunca he sido afín a las –valga la redundancia– afinidades ideológicas.

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Transcripción: María Lila Ltaif