Como consecuencia de la sarna que afectó a los montes, cerca del 20% de la producción se perdió para la exportación y hoy se está procurando un aumento de la molienda para sidra y jugos por parte de la industria local.

El presidente de la gremial, Alberto Iglesias, dijo que, a diferencia de lo que pasa en el resto del mundo, en Uruguay no hay desarrollada una cadena industrial capaz de absorber la producción de manzanas.

"A través del tiempo se ha ido perdiendo una cadena industrial muy interesante que había en Uruguay. Hubieron fábricas importantes que procesaban fruta, que elaboraban dulces y otros productos que derivaban de las frutas que nuestra granja producía. Y hoy por hoy no tenemos, y las que tenemos están penando con grandísimas dificultades tratando de trabajar. Salvo alguna industria notoria muy grande, que ya está exportando, por suerte, son lo único que tenemos a la vista", indicó Iglesias.