Importar semillas forrajeras, una necesidad
Importar semillas forrajeras aparece como una necesidad, ya que la producción nacional será muy escasa y, posiblemente, no alcance para abastecer al mercado interno.
Si bien hay aspectos formativos que resolver para poder ingresar variedades del exterior, la posibilidad de que el producto escasee y que su precio suba significativamente, hacen que el tema deba ser resuelto a la brevedad por parte del Instituto Nacional de Semillas.
Daniel Baise, secretario de la Cámara Uruguaya de Semillas, aseguró que los tiempos se acortan porque paan los periodos de siembra y repasó la situación actual a nivel local.
"Pensando en las avenas sativas, la inmensa mayoría de ellas son especies protegidas. Entonces, hay temas de derechos de propiedad que hay que respetar del exterior, que algunas puede inhabilitarlas a venir. Hay variedades públicas que sí pueden entrar fácil. La madeja puede ser mucho más enredada de lo que parece. Y también pensar que empresas locales, en vista de cómo venia la cosa, hicieron sus planes de producción en el exterior y encaminaron negocios de importaciones de otros países de fuera de la región. Las importaciones van a inhabilitar el tema precios también", señaló.