Para el presidente de la Asociación Rural, Manuel Lussich, el gobierno no consideró las consecuencias futuras que tendrá las sequía padecida para el sector ganadero.

Lussich aseguró que la falta de terneros que habrá nunca fue considerada y agregó que las consecuencias se verán cuando falten novillos para faenar: "La situación de los terneros, sin ninguna duda, es de las más graves porque va a afectar dentro de dos o tres años, que eso es lo que a veces es difícil de transmitir, el tiempo en el cual se ven los resultados y los daños de la sequía. En algunos rubros, como la lechería y la agricultura se ven bastante rápido los resultados, en la ganadería demora bastante más, pero no por eso se pueden desconocer".

"El gobierno no cuantificó pérdidas, pero por la información que conseguimos lo que hizo fue sacar la cuenta de cuánto se comercializó. Para estimar la pérdida de la sequía hay que tener en cuenta todos lo dicho previamente, más la mortandad de ganado que hubo en estos meses de verano y las que tenemos que tener los ojos bien abiertos que vengan en el próximo invierno".

Lussich aseguró además que la caída del precio del ganado hoy no tiene una explicación clara, ya que el mercado internacional se está recuperando y la oferta del ganado tampoco es excesiva: "Hay una caída en el precio que no tiene una explicación muy clara porque el mercado internacional si bien cayó mucho con respecto al año pasado, hace tiempo que está firme y con cierta tímida tendencia a la suba, lo que por ese lado no estaría justificando una caída del precio. Por otro lado, nosotros no vemos que haya una oferta de ganado abundante como para justificar una caída en el precio. Lo que claramente no hay es demanda y por ese lado es que se está provocando el ajuste y esta baja a los precios. Realmente nos preocupa que lo hemos manifestado en otras oportunidades y es una visión de corto plazo de la industria porque la cadena traslada esta incertidumbre de los precios y recaen en el criador".