El nuevo laboratorio está equipado con modernos insumos. Cuenta con una superficie de 180 metros cuadrados, realizará los diagnósticos de rabia y brucelosis entre otros.

Francisco Muzio, director de los Servicios Ganaderos del Ministerio de Ganadería, señaló que las obras se enmarcan dentro de un convenio con el INIA, y dentro del Plan Nacional de Investigación en Salud Animal.

"Es algo para nosotros altamente significativo y es la concreción de un proyecto de bastante tiempo atrás. Yo diría que hace prácticamente tres años que veníamos bregando por tener un nuevo laboratorio, porque lo que había en Tacuarembó era bastante precario en instalaciones. Es una zona que tiene gran importancia para la ganadería y, además, la alta significación, aparte de un laboratorio nuevo bien equipado (como se va a tener), que sea en un predio del INIA abre un camino muy interesante que es el futuro de la investigación en salud animal, que ya está empezando a esbozarse en el Plan ISA o Plan Nacional de Investigación de Salud Animal".

Con relación a los laboratorios oficiales, Muzio destacó también la concreción del laboratorio emergencial para fiebre aftosa.