Dinámica Rural

Condición corporal de ganado retrocede por falta de pastura

Basándose en mapas climáticos chequeados por la Universidad de Columbia, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) advirtió que para el trimestre diciembre-febrero en el litoral oeste y norte del país se prevén lluvias por debajo de lo normal y temperaturas altas, lo que agrava la situación que se dio en los tres meses previos, en los que al norte del Río Negro el déficit de lluvias fue superior al 40%.

Se espera que el fenómeno de La Niña llegue a su punto máximo entre este mes y enero y que se mantenga hasta el otoño de 2011. Algunos pronósticos estiman que incluso podría persistir hasta el invierno.

Con este pronóstico sobre la mesa, y luego de haberse reunido con el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, para intercambiar visiones sobre las medidas que está estudiando el Poder Ejecutivo, ayer las Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) reclamaron que oficialmente se declare la emergencia agropecuaria.

¿Cuál sería la ventaja? Esta declaratoria le otorgaría al Gobierno la facultad de tomar acciones concretas como por ejemplo adelantar el suministro de raciones o forrajes para el ganado antes de que se pierda el poco pasto que va quedando en los suelos del basalto profundo en el norte del país.

"El déficit hídrico en los suelos se viene ya planteando desde hace varios meses, desde julio-agosto prácticamente se viene planteando una situación de menores lluvias de lo normal y con el pronóstico de INIA evidentemente que se plantea una situación de suma preocupación", afirmó en el programa En Perspectiva el ingeniero agrónomo Danilo Bartaburu, director de la regional litoral norte del Plan Agropecuario que abarca Artigas, Salto y Paysandú.

"En el basalto profundo todavía en la región queda disponibilidad de pastura, esta es una pastura que en general se generó en el otoño pasado y es pasto que todavía no ha sido comido; pero en el basalto superficial la disponibilidad ya es muy limitante", señaló Bartaburu.

"El basalto profundo tiene profundidad como para acumular agua y para crecimiento radicular de las plantas, crecimiento de la raíz, por lo tanto el pasto crece más. Y en el basalto superficial estamos hablando de suelos que no tienen más de 10% de suelo y por lo tanto la acumulación de agua no va mucho más allá de 20-30 milímetros, o sea que son suelos que frente a una lluvia se saturan de agua rápidamente pero frente a una escasez de agua se secan en pocos días y por lo tanto quedan bien amarillos y el crecimiento del pasto se retrasa drásticamente", explicó.

Bartaburu informó que las aguadas son las que se están viendo primero afectadas en la cantidad de pasto. "Las aguadas falsas ya están todas secas desde hace por lo menos un mes; las aguadas permanentes también; y las aguadas tipo tajamares vienen en retroceso, o sea porque al no haber recarga de agua es lo que toma el ganado o sea la salida es lo que toma el ganado entonces vienen en retroceso".

"Y finalmente la otra variable que nosotros nos gusta mirar: la condición corporal del ganado. En lo que se refiere a como está hoy en general el ganado en la región todavía está en una condición corporal satisfactoria, podríamos hablar de 3,5-4.0 de condición corporal para los que manejan estos valores.

"Pero cuando la miramos en términos dinámicos es decir como viene evolucionando esa condición corporal en general vemos que ya empezó a retroceder lo cual es síntoma de que la pastura que empieza a haber disponible no es suficiente para mantener la condición corporal de ese ganado".

Bartaburu advirtió que esa condición no es lo habitual en el verano. "Al contrario, en esta época en general la condición corporal del ganado hasta el invierno que viene en general va en aumento".

"Desde la salida del invierno, de octubre para adelante hasta abril en general la condición corporal de los ganados va en aumento, estamos hablando de condiciones de manejo en campo natural que es el recurso mayoritario en la región que nosotros trabajamos".

"Hoy se empieza a dar la situación un poco inversa de que en los ganados se empiezan a ver los primeros rodeos el retroceso de condición corporal y eso es resultado sin duda de la oferta de pasto".