El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, señaló en conferencia de prensa, junto al presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi), José Less, y la presidente de la Junta Nacional de la Granja (Junagra), Zulma Gabard, que la razón de atender la emergencia tiene que ver con un aspecto clave que es la seguridad alimentaria.

En una primera instancia se realizará un relevamiento de información a nivel de campo para determinar el daño. A partir de allí el 30% del costo de producción será recompuesto con fondos del Fondo Agropecuario de Emergencia y el restante 70% con créditos del BROU y República Microfinanzas, cubriendo la tasa de interés el fondo de la granja. En el caso de los pequeños productores, de menos de tres hectáreas, tendrán un fondo no retornable a definirse aún para atender esta emergencia.

Aguerre explicó que los objetivos con esta acción son "atender la emergencia con una lógica contracíclica, tratando de generar instrumentos que nos permitan sortear la crisis y a la vez mejorar la posición futura; construir la política pública con los administrados y no para los administradores, a través de sus representantes gremiales y en este caso a través de las instituciones que representan a los productores: la Junagra y el Inavi; y por último atender a una política que nos permita en el futuro tener instrumentos que frente a nuevos eventos no requieran de operativos de este tipo, sino que existan instrumentos de transferencia de riesgo: como son los seguros" . Aguerre recordó que en el último año, luego de un fuerte granizo que llevó a asistir a la horticultura y fruticultura, se pasó de tener un 21% de la superficie asegurada a 86%.

A su vez, el ministro enfatizó que se debe trabajar para mejorar un seguro de exceso hídrico. "Debemos trabajar para construir y para mejorar un seguro de exceso hídrico y esto es simplemente contribuir a fortalecer un instrumento ya creado. En noviembre lanzamos en forma novedosa el seguro, pero por esa razón muy pocos productores adoptaron el seguro", indicó.

Respecto a la producción vitivinícola, se vio afectada no solo en cantidad, con cerca de 17 millones de kilos de uva perdidos de 115 millones, sino además en calidad. Por este motivo, y debido a la pérdida de grado alcohólico por el exceso hídrico, se decidió crear un Banco de Alcohol Vínico que destinará cerca de 20 millones de kilos de uva de baja calidad para la destilación, transformándolo en 1.250.000 litros de alcohol vínico para corregir la calidad del vino de este año.

El presidente del Inavi, José Less, señaló que dada la situación complicada del sector, en una primera instancia se ayudará a los productores que no tienen donde moler la uva para que puedan colocar este producto. A su vez, se ayuda a la industria para que cuente con un insumo, a costos razonables a partir del fondo de emergencia agraria.

Por su parte, la directora de la Junta Nacional de la Granja informó que los 1.460 productores hortícolas a campo que hay hoy en el sur del país están afectados.