Análisis de la evolución salarial en el sector rural
La semana anterior se publicó el decreto que establece los incrementos salariales para los trabajadores rurales, que rigen desde el mes de julio. Junto al contador Darío Andrioli, director de Carle & Andrioli Contadores Públicos, analizaremos la tendencia de los salarios agropecuarios y su incidencia para el productor.
¿Qué aumento determina el decreto?
La semana pasada se publicó el decreto para los trabajadores del Grupo del Consejo de Salarios de ganadería y agricultura (N° 22). Los salarios fueron fijados nuevamente por el Poder Ejecutivo en virtud de que no avanzó la negociación colectiva tripartida. Ahora la diferencia es que son ajustes anuales y por el período de un año (antes semestral y dos años).
Los porcentajes de ajuste anual de los salarios a partir de julio son diferentes según el subsector.
Los trabajadores de tambos y arroz (subsectores con mayores problemas) incrementan sus salarios 6.5%. Por su parte los otros sectores (ganadería y agricultura de secano) ajustan 7.5% como los sectores medios.
Establece además un correctivo final (junio 2019), para mantener el salario real prevé un ajuste adicional si este aumento es menor a la inflación observada.
¿Cómo podemos analizar la evolución de los salarios del agro?
Estos aumentos de remuneraciones se suman al incremento que correspondió aplicar por el último ajuste del convenio anterior (2% y 2,5%). Por lo tanto los salarios se incrementan en el orden de 9%/9.5% para esta zafra.
Estos aumentos son algo menores que el incremento de la variación de la cotización del dólar del último año (13%). De todos modos los productores consideran que no permite reducir los altos costos de producción.
Si lo analizamos más en el largo plazo hay un estudio de OPYPA que muestra que en la última década los salarios mínimos rurales han aumentado más que el salario medio de la economía, duplicándose en términos reales en el período 2007/2017 (crecimiento real anual de 6%).
Esto sumado a la trayectoria del tipo de cambio determinó que el costo de la mano de obra pese más en la estructura de los costos de producción.
¿Qué incidencia tienen los salarios en los costos agropecuarios?
La incidencia de los salarios en la ecuación de costos agropecuarios depende del subsector, de la escala de producción y de la modalidad operativa de servicios contratados o propios.
En tambos por ejemplo, de acuerdo a estudios de INALE,en promedio es de 13% más 6% de un estimado ficto de mano de obra familiar. En ganadería según algunos estudios es del orden del 25%.
Por su parte en el cultivo del arroz es del 25% (hace 15 años era de 12%).
En general los salarios agropecuarios son un componente importante en los costos (junto con insumos, energía y arrendamiento).
La trayectoria creciente de salarios con menores niveles de precios de los productos agropecuarios, se traduce en mayor cantidad de producción necesaria para pagar remuneraciones, por ej mayores litros leche, bolsas arroz y kilos carne.
¿Y qué podemos decir del empleo en el agro?
En general la cadena agroindustrial genera un número importante de empleos, llegó a generar 245.000 puestos en la fase primaria, industrial, logística y demás servicios relacionados (14% del empleo total).
En particular el personal ocupado en la fase agropecuaria fue alto en el quinquenio 2010/14, con un promedio de 150.000 personas.
Hoy trabajan 120.000 personas, por lo que se observa una tendencia descendente del empleo del agro, Por ej caída de 10.000 puestos respecto al año anterior y de 30.000 en relación a los niveles de empleo máximo.
Han incidido en este comportamiento del empleo rural la incorporación de tecnología, mayor automatización y la pérdida de rentabilidad agrícola y lechera que ha determinado baja de establecimientos y área explotada.