La Audiencia Opina

Sobre los incidentes del viernes 2 en Dancotex

POBRE MI PAÍS !!!

He dejado pasar unas cuantas horas antes de escribir esto, porque quise reflexionar antes de expresar mi tristeza, mi dolor, mi desaliento ante una nueva constatación de la ineficacia de los poderes públicos (Poder Judicial y Poder Ejecutivo) para defender lo que todos los uruguayos y uruguayas más proclamamos querer: nuestro estado de derecho.

El 2 de junio, un grupo de dirigentes sindicales y "obreros", con la fuerza de la patota y la inoperancia ordenada a nuestra policía, impidió el cumplimiento de una decisión judicial. Una jueza (de alguna manera hay que llamarla) orde-nó algo; un grupo decidió que lo que el Poder Judicial (oh! sagrado Poder Judicial!!!) había ordenado no debía acatarse Y NADA PASÓ. Ni la jueza ordenó la intervención de la fuerza pública, ni el Poder Ejecutivo respaldó la orden judicial. Y lo UNICO QUE LA JUEZA HIZO FUE APARENTEMENTE,  DENUNCIAR PENALMENTE A LOS DIRIGENTES DEL PIT-CNT, POR EL DELITO DE DESACATO. La jueza no pidió al Ministerio del Interior, como era su deber, que ordenara a la policía a proceder para poder cumplir su resolución.

Hoy leo que otra jueza, del ámbito penal, ha decidido proceder de oficio: eso sí, ningún fiscal –tan atentos ellos a las injurias de Z a un juez por lo menos indolente- ha tenido la menor intención de intervenir. Ni siquiera la –espero que no- futura Fiscal de Corte, Dra. Mirtha Guianze.

Y además, el Ministerio de Trabajo ha dicho que no es un problema en el que deba intervenir, aunque sí intervino autorizando al BPS a pagar un seguro de paro a un grupo de obreros en huelga (cosa totalmente ilegal), que disfraza-ron su actitud con la figura de la "guardia gremial" y, lo que es peor, que lo dieron a conocer así a todo el mundo.

Y hoy leo que los dirigentes sindicales, con su desprecio y odio al régimen que los uruguayos nos hemos dado, insisten en que irán orgullosos a la cárcel por defender la constitución y el derecho al trabajo. ¡Qué bien! Defienden la constitución impidiendo por la fuerza que la justicia actúe; defienden el derecho al trabajo de los montevideanos a costa del derecho al trabajo de los colonienses y pretenden que el empresario asuma las pérdidas.

 

¿ Cuánto tiempo demorará la justicia penal ? Mientras tanto, ¿ nadie hará nada para que las máquinas sean enviadas a Colonia ? Estamos en el reino del revés: los dirigentes sindicales con la fuerza de su patota –la misma patota o parecida a la que cortó el puente Fray Bentos/Puerto Unzué- se ríen de las leyes, de la justicia y nadie interviene. El Ministerio del Interior se lava las manos; el Ministerio de Trabajo dice que no es un problema de su incum-bencia. Y el Poder Judicial, que tan cuidadosamente defiende su indepen-dencia, se deja avasallar, no por otro poder del estado, sino por una patota.

Y con esto vamos a dar trabajo a los 180.000 uruguayos desocupados. Van a ser bastante más los que en el futuro vean desaparecer sus empleos o no verán aparecer nuevos. Sí, ciertamente habrá muchos empresarios que in- vertirán en China y no en este país copado por estos individuos.

En el Uruguay "progresista" la ley sirve para extraditar presuntos delin- cuentes a Chile y, tal vez, a Argentina. Para esto, la Justicia toda y el Mi-nisterio del Interior son diligentes. Pero la ley no sirve para defender uno de los derechos fundamentales consagrados en nuestra constitución: el de-recho de propiedad. Claro, a los "sesentistas" y sus cómplices – por acción u omisión-, el derecho de propiedad es subalterno.

Lo del título, POBRE MI PAÍS !!!!!


Julio A. Esposto Molinari