Si bien antes de acceder al gobierno la izquierda se había pronunciado en contra de la tenencia de tierras por parte de sociedades anónimas, desde el Ejecutivo se decidió mantener la situación. En febrero, al sesionar el Consejo de Ministros en Santa Teresa, el presidente Vázquez anunció que no se limitaría la compra de tierras por parte de extranjeros.

La Asociación Rural del Uruguay (ARU) no está de acuerdo con el proyecto del ministro Mujica, porque entienden que es altamente discriminatorio con el sector agropecuario.

El presidente de la ARU, Fernando Mattos, afirmó a Índice 810 que no se entiende cuál es el fundamento, ya que lo importante es si la tierra produce.

"Como figura jurídica legítima, dentro de lo que dispone la legislación ¿por qué la tierra no puede recibir la inversión a través de una sociedad anónima, donde el inversor pretende mantener su anonimato y mientras otras actividades de la economía si lo aceptan? La tierra es un bien ubicable, que nadie se puede llevar para otro lado. Y evidentemente no entendemos cuáles son los motivos de querer conocer exactamente quiénes son los propietarios de la tierra", dijo.

La Federación Rural está abordando el tema y a nivel de las Federadas se consulta la posición a través de Internet, para que en 15 o 20 días la gremial revea su posición en una asamblea de presidentes. Antes se apoyó las sociedades anónimas, pero hoy hay grupos que están en la misma línea y otros que están con Mujica. A la gremial también le preocupa que se regule la utilización del suelo y busca datos actuales. Hay una comisión que trabaja en el tema y que se reunirá con las autoridades del Instituto Nacional de Colonización y del Ministerio de Ganadería. La percepción de los dirigentes es que hay muchos extranjeros.

En el Partido Colorado, el proyecto de Mujica es considerado como una nueva propuesta que no le hace bien al clima de inversión porque genera incertidumbre en forma negativa. Así lo consideró el ex ministro de Ganadería Martín Aguirrezabala. En su opinión, esto es "pan para hoy, hambre para mañana".

"Las medidas que se anuncian son contrarias al país productivo. Tienen una base emocional que pueden ser atendibles:`yo no quiero que la tierra esté en manos de extranjeros, prefiero que esté en manos de orientales´. Yo también prefiero, pero sucede que para que eso pase, lo mejor que le puede pasar al Uruguay, cuando la tierra es algo que nadie se puede llevar, es que la tierra produzca lo más que pueda", sostuvo.

El presidente del Directorio del Partido Nacional, Jorge Larrañaga, contestó hoy a la consulta de los periodistas sobre el tema: "No me pidan que me pronuncie sobre algo que no sé...que es de los tantos títulos que genera el gobierno a través de los medios de prensa y que no tienen una exacta composición y un estudio acabado. Me voy a pronunciar y nuestro partido también lo hará cuando tengamos un texto definitivo, de esos que se dice aplicar o intentar aplicar con el tema de la tenencia de la tierra".

Los últimos datos oficiales corresponden al censo general del año 2000. Desde esa fecha han existido cambios, porque ha habido compras importantes por parte de brasileños, entre otros.

Sobre 16:420.000 hectáreas, el 90,4% era propiedad de productores uruguayos, el 1,4% era de argentinos, 4,3% de brasileños, 2,9% de otras nacionalidades y el 1% corresponde a explotaciones que son propiedad de entes o del Ejército.