Lea la conferencia de Vázquez y Bush
Declaraciones del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, en sesión conjunta con la prensa
Parque Anchorena, Uruguay
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Señor Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, señora secretaria de Estado, señores integrantes de la delegación que nos visita, señor ministro de Estado, señor embajador de los Estados Unidos de Norteamérica en Uruguay, señor embajador de Uruguay en los Estados Unidos de Norteamérica, señoras y señores periodistas.
Señor Presidente, quiero presentar a usted nuestro saludo de bienvenida, junto a la prestigiosa delegación que lo acompaña. Usted representa, señor Presidente, a un pueblo que es amigo del pueblo uruguayo. Históricas relaciones amistosas unen a estos dos países, a estos dos pueblos; relaciones firmes, respetuosas y solidarias.
Y al respecto quisiera ejemplificar con dos elementos que me parece que son altamente significativos. El primero de ellos, señor Presidente: Miles de ciudadanos uruguayos viven en los Estados Unidos de Norteamérica y han encontrado en ese país condiciones de vida que no tenían en el nuestro y que los obligaron a emigrar. Pudieron establecerse, formar sus familias, tener trabajo, estudiar, darle educación a sus hijos, salud. Por lo tanto, creo que éste es un elemento claro de lo que el pueblo norteamericano ha tendido como mano al pueblo uruguayo.
Seguramente hay muchos uruguayos que estarán en situación de aún legalizar su situación en aquél país, pero estamos seguros que esa solidaridad abrirá caminos posibles para que nuestros conciudadanos puedan legalmente habitar este país.
Y el segundo ejemplo que quiero dar es ni más ni menos que, y los uruguayos lo recordamos muy bien, cuando nuestro país vive la crisis económica más brutal de su historia, cuando Uruguay estaba viviendo una situación económica y social realmente conmocionante y grave para nuestro país, fue precisamente vuestro país, y en particular, usted, señor Presidente, quien tendió la mano para lograr, para ayudar a que Uruguay saliera de ese pozo del que se encontraba y comenzar un camino de recuperación que hoy estamos tratando de consolidar.
Hace dieciséis años y monedas, visitaba el país otro Presidente de los Estados Unidos. Fue un 5 de diciembre de 1990, y ese Presidente era su señor padre. Yo era en aquél momento intendente municipal de Montevideo, y me tocó entregarles las llaves de la ciudad de Montevideo. Tuvimos un breve intercambio con el señor Presidente Bush, padre, y en aquel momento recuerdo una de sus frases cuando dijo: "Dejemos de lado nuestras diferencias, que las tenemos, y transitemos por el camino de las concordancias y del encuentro y de las coincidencias, que también las tenemos". La defensa de la democracia como organización y funcionamiento de nuestras sociedades, pero más que ello, como estilo de vida; la defensa de las libertades y de luchar permanentemente para mejorar las condiciones de vida de nuestra gente, dándole trabajo, educación y salud, son elementos comunes que nos permiten augurar que podemos trabajar juntos más allá de nuestras diferencias, señor Presidente.
Así que con estas palabras, quiero explicitar que el camino que hemos seguido y que hoy hemos dialogado con el señor Presidente de los Estados Unidos ha sido precisamente ése: de buscar incrementar nuestro intercambio comercial, la posibilidad de aumentar la colocación de nuestro trabajo en los Estados Unidos de Norteamérica, buscar aumentar el intercambio científico, tecnológico, cultural con el país hermano, y ver la forma de juntos lograr una mejor calidad de vida para nuestra gente.
Señor Presidente, señores integrantes de su delegación, les deseo que aquí se encuentren como en su propia casa. Bienvenidos.
PRESIDENTE BUSH: Gracias, Señor Presidente. Me siento muy en casa aquí. ¿Saben? Es. En mi estado de Texas, cuando uno invita a alguien a su estancia, es una señal de respeto. Y muchísimas gracias por el cálido gesto de hospitalidad. Al fin y al cabo, es usted tejano. (Risas.)
Hemos tenido. éste es nuestro segundo diálogo significativo. Recuerdo muy bien su visita a la Oficina Oval. Fue muy elocuente sobre su deseo de mejorar la vida de la gente en su país. Me impresionó entonces su compasión y su preocupación.
Esperaba ver un país hermoso cuando vine aquí, y eso es precisamente lo que he visto. Su capital es espléndida. La arquitectura es realmente bella. Y luego, por supuesto, venimos a este bello lugar que es tan pacífico y me recuerda los fabulosos recursos naturales que tiene su país.
Hablamos sobre muchos temas. En primer lugar, señor Presidente, estoy completamente de acuerdo con el espíritu de nuestras conversaciones, que encontraremos terreno común y promoveremos ese terreno común para beneficio de nuestros pueblos respectivos.
Un campo que tenemos en común es el respeto de los derechos humanos y la dignidad humana, el respeto por el imperio de la ley; apreciamos la existencia de una prensa libre. la mayoría del tiempo. (Risas.) No, todo el tiempo. Respetamos las elecciones. Y Uruguay es un buen ejemplo de la estabilidad que puede surgir de la democracia. Pero también reconocen lo que yo reconozco, que no se debe dar por descontada a la democracia, que la gente debe ver beneficios tangibles.
Y, entonces, en mi viaje a Sudamérica y Centroamérica, deseo recordarle a la gente que Estados Unidos y su pueblo compasivo se interesan profundamente en asuntos como la educación y salud, asuntos que a ustedes les interesan. Dedicamos mucho tiempo a hablar sobre la educación, y supongo que la mayoría de los estadounidenses no saben que participamos activamente en ayudar al Presidente a instituir un programa para que los niños aprendan a leer y escribir mejor, particularmente en inglés. Queremos continuar ayudando.
Dedicamos un tiempo a hablar sobre maneras en que podemos intercambiar estudiantes en una. de mejor manera. Hablamos sobre el intercambio de ideas, que nuestros expertos se sienten ante la misma mesa para tratar asuntos como los combustibles alternativos. En mi viaje a Brasil ayer dedicamos tiempo a hablar acerca de combustibles alternativos y la necesidad de que Estados Unidos y Brasil trabajen juntos. Es la misma conversación que tuvimos en Uruguay.
Hablamos sobre el hecho que. o por lo menos yo hablé sobre el hecho. el Presidente es un hombre modesto, pero yo hablé sobre el hecho que la economía uruguaya está creciendo. aproximadamente 7 por ciento. Y lo felicito, señor, por crear las condiciones para que la gente se sienta cómoda haciendo inversiones que causan que las economías crezcan, y que queremos trabajar juntos para continuar el progreso que hemos alcanzado en el comercio e inversión a un paso con el que nuestros pueblos se sientan cómodos.
Deseo agradecerle muchísimo por su compromiso con la democracia y paz en nuestra región. Lo felicito a usted y al pueblo del Uruguay por proporcionar a Haití y Congo personal para las operaciones de mantenimiento de la paz. Es señal de la fortaleza de una nación hacer un esfuerzo por ayudar a los demás a obtener los beneficios de una sociedad libre. Y usted envió un mensaje enérgico y poderoso.
Finalmente, quiero decir algo acerca de la inmigración en Estados Unidos. El Presidente me ha hablado elocuentemente sobre la necesidad de que exista una política de inmigración que respete los valores de Estados Unidos. Le expliqué que estoy interesado en que el Congreso de los Estados Unidos apruebe una ley integral de inmigración lo antes posible. Estoy deseoso de trabajar tanto con republicanos como demócratas, señor Presidente, para hacer lo que se debe para respetar las leyes de Estados Unidos, pero a la vez, reconocer, que por un lado, no podemos otorgar la ciudadanía automática, y por el otro lado, no podemos echar a la gente. Y, entonces, por lo tanto, es necesario que haya un camino racional por delante.
Y le prometo a usted, un hombre que se interesa por la gente de su país que pueda estar viviendo en Estados Unidos, que trabajaré lo más arduamente posible para lograr una ley de inmigración compasiva y racional que respete las leyes, pero que también respete las grandes tradiciones de Estados Unidos, la tradición de una sociedad acogedora; una tradición que dice que recibimos con beneplácito nuestra diversidad porque creemos que en nuestra diversidad podemos encontrar la fortaleza de nuestra nación.
Y, entonces, he estado. realmente he estado deseoso de hacer este viaje. Tengo especiales ganas de probar el asado. Agradezco la. Agradezco su voluntad de cocinar carne uruguaya. Siempre me ha dicho lo buena que es, y después de contestar unas cuantas preguntas, nos daremos cuenta de ello.
Entonces, señor Presidente, gracias por su hospitalidad.
P La pregunta va dirigida al Presidente George Bush. Teniendo en cuenta el contexto regional, que nos encontramos gobernados por mandatarios como Vázquez. Chávez. ¿qué diferencias y similitudes encuentra usted entre ellos y qué opinión tiene usted respecto al Presidente Vázquez y Uruguay?
PRESIDENTE BUSH: La tentación es tratar de hacer que la gente hable sobre sus diferencias. Quiero hablar sobre nuestras coincidencias. Compartimos un respeto mutuo. Respetamos nuestros países, respetamos nuestra historia y tradiciones y compartimos un gran respeto por un gobierno que. donde el pueblo decide quién está a cargo.
Lo interesante es que ambos nos libramos de poderes coloniales en nuestro pasado y es. Considero que es ese patrimonio el que hace de Uruguay y Estados Unidos aliados tan naturales. Hablamos sobre la necesidad de invertir y hacer que las economías crezcan por medio de la inversión. Ése es terreno común que resulta en una relación positiva.
Ambos reconocemos que la educación es vital para el éxito de nuestros respectivos países. Cuando descubrimos analfabetismo en Estados Unidos, a menudo es allí donde encontramos pobreza. Y, por lo tanto, la política de educación se concentra en mejorar la vida de todos al dotar a la gente de los conocimientos necesarios para competir en el siglo XXI.
Creo que mucha gente en mi país no sabe que Uruguay es el principal exportador de software en Sudamérica. Significa que uno de los grandes puntos positivos de su país es la capacidad intelectual del país. A menudo cuando uno piensa en un país como Uruguay, piensa en los recursos naturales -granjas fantásticas, muchas vacas y ovejas, y moras azules- que, por cierto, fueron mencionadas en nuestra conversación de hoy. Pero creo que es alentador que nuestros países sepan que un amigo es un exportador importante de algo que requiere de la creatividad y capacidad intelectual de sus ciudadanos. Y, entonces, encontramos terreno común allí sobre cómo trabajar juntos.
Ésta es una. Diría que esta reunión es muy constructiva y muy prometedora y muy positiva. Y se debe a que tenemos tanto en común. Es mucho más lo que nos une que lo que nos divide, señor Presidente, y agradezco la oportunidad de conversar con usted.
Tony.
P Presidente Bush.
PRESIDENTE BUSH: Bret Baier. El hombre.Tengo 60 años y cree que no oigo. (Risas.)
P Lo siento. Señor Presidente, la FBI reconoció que algunos agentes usaron facultades posteriores al 11 de septiembre para exigir información personal sobre estadounidenses. ¿Qué le dice a la gente que se preocupa por el uso de estas cartas de seguridad nacional? Y considerando la manera en que se usaron esas cartas, aún confía en el fiscal general Gonzáles y el director de la FBI Mueller?
PRESIDENTE BUSH: El fiscal general y el director de la FBI me presentaron un informe sobre este tema la semana pasada. Le dedicamos mucho tiempo a hablar sobre el informe del inspector general (IG). En primer lugar, deseo felicitar al IG por una buena y necesaria labor. Me informaron de las conclusiones de su meticuloso trabajo. Mi pregunta es, ¿qué van a hacer para resolver el problema y cuán pronto pueden resolverlo?
Y me complació la respuesta del director Mueller, que ya había comenzado a hacerles frente a algunos de los problemas, pero que queda más trabajo por hacer. Pienso que su testimonio del otro día fue muy bueno; asumió la responsabilidad, como debe ser. Y tengo confianza en el director Mueller, como también en el fiscal general.
Deseo recordarle, Bret, y a otros, que el informe del IG objetó diligentemente las deficiencias de la FBI; también dejó en claro que estas cartas eran importantes para la seguridad de Estados Unidos. Y, entonces, abordaremos los problemas en el informe, y se lidiará con estos problemas lo antes posible.
P Buenas tardes. La primera pregunta va para el Presidente Bush. Usted reconoció las trabas proteccionistas que existen en su gobierno. ¿Qué tan flexible puede ser su gobierno a la hora de avanzar en algún acuerdo comercial con Uruguay y a qué acuerdos concretos se llegaron en el día de hoy?
Y la segunda pregunta que es para ambos mandatarios, Presidente Vázquez, usted solicitó al Presidente Bush interceder en las diferencias que actualmente mantiene Uruguay con Argentina.?
PRESIDENTE BUSH: Le dedicamos mucho tiempo a abordar las inquietudes de Uruguay sobre el acceso al mercado de ciertos productos. El Presidente habló sobre una variedad de asuntos con respecto al comercio. Consideraba que las cuotas en ciertos artículos, como vacas y ovejas, no eran justas, y le dije que de todos modos consideraríamos las solicitudes que hizo.
Pensaron que estaba haciendo una broma sobre moras azules, pero no fue así. Resulta que Uruguay produce moras azules fabulosas. Y la pregunta fundamental es, ¿esa mora azul. el cultivador de moras azules podrá vender el producto en Estados Unidos?
Así que hablamos sobre una variedad de cosechas. Y le dije al Presidente, dije, no es posible resolver los problemas a no ser que se pongan los problemas sobre la mesa, y que si podíamos ayudar, ayudaríamos, y cuando no pudiéramos, les ofrecería una explicación de por qué no se pudo.
Ahora, usted mencionó las tendencias proteccionistas, y me preocupan las tendencias proteccionistas, no sólo con nuestro propio país, sino alrededor del mundo. Creo que un mundo que comercia libre y equitativamente es un mundo que tiene mayores posibilidades de hacerle frente la pobreza. Y por lo tanto, soy un firme partidario de completar la Rueda de Doha con la OMC.
Compartí con el Presidente nuestras estrategias para hacer que la Rueda de Doha avance. Pasé mucho tiempo con el Presidente Lula conversando de esto. estuvo muy interesado en nuestras conversaciones, y compartí lo que conversamos. No divulgué ningún secreto, por supuesto, pero le dije que necesitamos hacer que la Rueda de Doha avance. Estados Unidos está plenamente preparado a reducir los subsidios agrícolas, como le expliqué al Presidente. Simplemente queremos asegurarnos de que haya acceso al mercado para nuestros productos. Y eso es lo que le dije al Presidente Lula, eso es lo que les dije a los europeos y eso es lo que compartí con el Presidente.
Me siento optimista de que podemos lograr mucho. Es más, nuestra ministra de comercio está. Susan Schwab se quedó en São Paulo para hablar con su colega brasileño, todo con el propósito de continuar progresando hacia lo que es un acuerdo complicado, pero necesario.
Gracias.
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Como respuesta a su primera pregunta, por cierto coincido totalmente con lo expresado por el señor Presidente de los Estados Unidos. Quiero decir que hemos creado un espacio a partir de esta reunión, donde nuestros técnicos, nuestros ministros podrán conversar y avanzar en distintos temas vinculados al relacionamiento bilateral.
En lo que respecta a la situación general multilateral, Uruguay ha planteado su posición en cuanto a defender el libre comercio y buscar la caída de los aranceles y subsidios, que dificultan muchas veces la colocación de sobre todo nuestros productos agropecuarios. Pero hemos podido analizar la posibilidad de avanzar por el sistema nacional de preferencias en algunos temas que seguramente van a ser estudiados en las próximas semanas.
En cuanto a la segunda parte de su pregunta, no he planteado el tema del diferendo que tenemos con la república de Argentina al señor Presidente de los Estados Unidos, entre otras cosas, porque dentro de pocos días, en algunas semanas, por la gestión de Su Majestad, el Rey de España, se acercarán a dialogar -no a negociar, porque no vamos a negociar mientras los puentes estén cortados, pero sí a dialogar entre los dos gobiernos- para buscar una forma amistosa, por el camino del entendimiento, del razonamiento, para solucionar este triste diferendo que tenemos con nuestros hermanos argentinos.
P Gracias, señor Presidente y señor Presidente. Para el Presidente Bush, Hugo Chávez sugirió que usted teme mencionar su nombre. Entonces, ¿teme hacerlo? Y ¿en qué grado es él una amenaza para los intereses de Estados Unidos en el hemisferio?
Y, Presidente Vázquez, ¿puede usted hablar sobre su postura entre tratar de ampliar los vínculos con Estados Unidos en términos del comercio, sino también indicarles a sus otros vecinos que usted. permanece integrado en el comercio sudamericano?
PRESIDENTE BUSH: He venido a Sudamérica y Centroamérica para promover una diplomacia positiva, constructiva que está llevando a cabo mi gobierno en nombre del pueblo estadounidense.
Mi mensaje a la gente de nuestra región es que nos preocupa la condición humana y que creemos que es posible mejorar la condición humana de una variedad de maneras. primero, la inversión. Y, entonces, el asunto es, ¿cómo podemos sostener un diálogo constructivo con nuestros vecinos sobre cómo propagar los beneficios de la inversión?
También le estoy recordando a la gente que el contribuyente estadounidense es muy generoso cuando se trata de ayuda bilateral. Desde que soy Presidente, hemos doblado la cantidad de ayuda bilateral anual a América Latina de $800 millones al año a $1,600 millones al año. Y la mayoría del dinero está dirigido a programas de justicia social, programas como educación y atención de salud.
También tengo muy presente que -y lo vi yo mismo en São Paulo- que muchas organizaciones no gubernamentales y grupos basados en la fe y personas estadounidenses expresan su preocupación sobre la situación apremiante de los pobres por medio de programas y actividades dirigidas a darle a la gente una oportunidad. Ayer en São Paulo fuimos a un vecindario bastante acaudalado, pero estaba rodeado por una favela. Y allí encontramos en medio de la desesperanza, que había un pequeño centro de amor. Y parte del dinero del programa había sido recaudado como resultado de conciertos en Estados Unidos, donde ciudadanos, ciudadanos comunes y corrientes, contribuyen para asegurarse de que este programa siga siendo viable.
Y, entonces, el viaje es una declaración del deseo de trabajar juntos con la gente de nuestra región. He estado en Centroamérica y Sudamérica muchas veces durante mi presidencia, porque comprendo plenamente que a Estados Unidos de Norteamérica le conviene una región próspera y pacífica.
Describiría nuestra diplomacia como una diplomacia silenciosa y eficaz. diplomacia dirigida a ayudar a la gente, dirigida a mejorar la condición humana, dirigida a expresar la gran compasión del pueblo estadounidense.
Y, señor Presidente, le agradezco que me haya dado la oportunidad de venir a hablar con usted, de sostener un diálogo sobre las maneras en que podemos promover nuestros intereses y los intereses de nuestra región.
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Bien, con respecto a su pregunta, la estrategia para la inserción internacional de Uruguay, que está bien definida y creo que bien clara. Es decir, apostamos a un proceso de integración abierta, es decir, apostamos fuertemente al proceso de integración regional.
Uruguay está donde está y no se puede ir. Además no nos queremos ir de acá, y por cierto el comercio que mantenemos y las relaciones culturales históricas que mantenemos con nuestros hermanos países de la región son muy sólidas y son muy fuertes. Pero no queremos un proceso de integración cerrado sino un proceso de integración abierto, que este MERCOSUR se pueda integrar con otros bloques, o con otros países del mundo, pero también que cada uno de los integrantes de este proceso, por ejemplo Uruguay, pueda ejercer su derecho soberano de desarrollar relaciones bilaterales con otros procesos de integración u otros países. En ese sentido, estamos trabajando, y en ese sentido se inscribe entonces esta reunión que tuviéramos el honor de tener con el señor Presidente de los Estados Unidos.
Gracias, señor presidente.
Fuente: sitio de la Casa Blanca