Copa América

Ecuador y Bolivia sumidos en críticas por la eliminación

Ecuador y Bolivia sumidos en críticas por la eliminación

Los seleccionados son punto de críticas de parte de la prensa local por lo que consideran campañas muy por debajo de lo esperado en su paso por la Copa América de Argentina.


Ecuador deja la Copa América de Argentina con un sabor de boca amargo, pocas certezas y mil rumores con vistas a las eliminatorias suramericanas que definirán las selecciones que disputarán el Mundial de Brasil en 2014.

Pocos confían en la continuidad de su técnico, el colombiano Reinaldo Rueda, quien tras ser eliminado del torneo este miércoles ante Brasil en Córdoba dijo que tendrá que "sentarse" con la Federación Ecuatoriana de Fútbol para evaluar los pasos a seguir.

Rueda admitió que el balance del torneo fue "negativo", a juzgar por las expectativas que tenía su equipo al llegar a Argentina, pero comentó que la Copa América era una "competición intermedia" para llegar al objetivo final, que es la Copa del Mundo.

Tres veces fue consultado el técnico por su continuidad en la rueda de prensa posterior al 2-4 ante la selección brasileña y tres veces ratificó su postura: "Hay que analizar con los directivos y ver si el ambiente y las condiciones están como para seguir", subrayó.

"Experiencias como éstas enseñan, pero es cuestión de que pasen las horas para sacar conclusiones más objetivas. Los análisis en caliente no suelen ser buenos", explicó.

Rueda consideró que tras un buen empate ante Paraguay en el debut en la competición, la "clave" de la eliminación estuvo en el mal partido ante Venezuela.

"Ante Brasil el equipo jugó mejor que en otros encuentros, pero no fue suficiente porque nos encontramos con un conjunto que fue muy eficaz y contundente. No obstante, los cuatro goles que nos marcaron fueron un duro castigo", comentó antes de concluir que la selección tricolor "no pasó esta evaluación" de la Copa América.

Si bien evitó poner excusas, Reinaldo Rueda admitió que su equipo sintió el impacto de no contar con figuras que le hubieran aportado otro peso ofensivo, como Luis Antonio Valencia, que sólo jugó el primer tiempo ante Paraguay, Luis Fernando Saritama y Jaime Ayoví, desafectados por lesión antes de viajar a Argentina.

La crisis estalló luego de la sorpresiva derrota ante Venezuela en Salta, cuando Luis Chiriboga, presidente de Ecuafútbol, no ahorró críticas hacia el proceso de Rueda.

"Dijimos que se iba a hacer un recambio. Se ha hecho de una manera muy parcial. Hay que hacer mucho más. Si no se hace a tiempo, la vamos a pasar muy mal", apuntó el dirigente.

"La actuación en la Copa es un fracaso para el fútbol ecuatoriano. Un llamado de atención para analizar a fondo a la selección. Hay jugadores que ya no están para vestir esta camiseta", completó.

A partir de allí comenzaron los trascendidos sobre los posibles sustitutos de Rueda. No faltaron los apellidos del uruguayo Jorge Fosatti y de los argentinos Edgardo Bauza y Ricardo La Volpe, actual seleccionador de Costa Rica.

"He escuchado esos rumores", admitió este miércoles Rueda, con cara casi de resignación.

El delantero ecuatoriano Felipe Caicedo, autor de los dos únicos goles que su equipo marcó en la Copa América, se salvó de la decepción ocasionada por su selección.

El delantero, que ha jugado la última campaña en el Levante, de la Primera División española, ha sido una de las pocas buenas noticias en el entorno de la selección que dirige Reinaldo Rueda, quien ha cerrado la Copa América con el debate sobre su continuidad completamente abierto.

Tras un empate a cero con Paraguay y una derrota por 1-0 ante Venezuela, Caicedo, que ha disputado íntegros los tres partidos de su selección, marcó los dos únicos goles con los que Ecuador se ha despedido del torneo, aunque no pudo evitar la derrota por 4-2 ante Brasil.

Peleó muy sólo en el ataque, pero no se arredró ante centrales de la entidad de Lucio y Thiago Silva a los que creó todo tipo de problemas.

Además, fue capaz de haber puesto en evidencia al portero brasileño Julio César con dos disparos rasos que supusieron el empate a uno, primero, y a dos a continuación, aunque finalmente estos goles no fueron suficientes.

Satisfecho con su actuación personal, Caicedo se mostró dolido con el papel que Ecuador había completado en la Copa. "Nos vamos un poco doloridos, porque queríamos clasificarnos para los cuartos de final", dijo el jugador al final del partido.

"Ecuador podría haber alcanzado algo más. Nos vamos con un sabor amargo", insistió el goleador ecuatoriano, que está en negociaciones para ser traspasado por el Levante al Lokomotiv de Moscú y a la espera de que se cierren los últimos detalles tras el acuerdo alcanzado entre las dos entidades.

Las críticas al fútbol boliviano no cesan tras la Copa. Hay desde voces que ya no esperan nada en el futuro y otras que piden un recambio de jugadores que, sin embargo, no se avizora a mediano plazo.

La eliminación del certamen, tras empatar ante Argentina (1-1) y perder frente a Costa Rica (2-0) y Colombia (2-0), ha reflotado la preocupación sobre la situación del fútbol boliviano que no logra salir de su pobreza hace casi una década y media.

El columnista y escritor deportivo Tito de la Viña dijo hoy a EFE que "la actuación de Bolivia en la Copa América ha sido mala, pero no ha sido sorpresiva porque responde plenamente al nivel que tiene en este momento el fútbol boliviano, que es bajo".

El fracaso no sorprende porque Bolivia no había ganado ningún partido preparatorio antes de la Copa América, ocupa puestos bajos en el ránking de la FIFA (93, en junio) y "tenía rivales muy superiores" en el torneo jugado en Argentina, agregó De la Viña.

De hecho, Bolivia no ha ganado un partido de Copa América desde el torneo jugado en Paraguay de 1999, es decir hace doce años, pese a que en 1997 había logrado como anfitriona el subcampeonato del certamen, tras perder con Brasil en la final disputada en La Paz.

La última victoria boliviana en Copa América ocurrió en La Paz, en las semifinales del torneo de 1997 ante México (3-1), mientras que en canchas extranjeras su triunfo más cercano es de 1995 cuando venció (1-0) a Estados Unidos en el certamen disputado en Uruguay.

En una columna escrita esta semana, el expresidente del país y periodista Carlos Mesa (2003-2005) señaló que Bolivia es "una selección que repite hasta la saciedad el libreto del desconcierto, del mal fútbol".

Mesa también dijo que "hace infinidad de tiempo que no ganamos en la Copa América" y "no logramos otra cosa que frustración".

"No alcanza si decimos que el de Bolivia es el peor fútbol de América del Sur, está entre los peores de las Américas y bajando", sostuvo Mesa, para luego agregar que "nada hay que nos haga suponer que ese escenario vaya a cambiar" a futuro.

De la Viña, de su parte, también ve posibilidades "negativas" para la selección boliviana en las eliminatorias para el Mundial de Brasil porque no hay una renovación de valores en el fútbol como han mostrado otras selecciones en la Copa América.

El presidente del club Bolívar, Guido Loayza, señaló a Efe que solo cabe esperar una recuperación para el debut de Bolivia en las eliminatorias del próximo mundial, que se producirá ante Uruguay en la ciudad de Montevideo, en octubre próximo.

Loayza, uno de los dirigentes artífices de las clasificación de Bolivia al Mundial de Estados Unidos 1994, dijo que la causa de los fracasos es la falta de trabajo en las divisiones menores que tienen torneos "poco serios", lo que impide un recambio de jugadores.

Apuntó que el trabajo ideal es el realizado por Venezuela, selección revelación de la Copa América, que cada año ha demostrado un crecimiento continúo, "mientras que Bolivia está en una involución" desde la década de los 90.

El entrenador boliviano Sergio Apaza enfatizó que la recuperación tomará de diez a quince años y enfatizó la necesidad de trabajar con niños desde los ochos años y con adolescentes, abandonando la idea de buscar éxitos en el fútbol solo a la vuelta de la esquina.


Fuente e imágenes: EFE