(Emitido a las 7.48)

EMILIANO COTELO:
Ayer Rosario nos contaba cómo se vive el Carnaval en la ciudad de Rosario, en Colonia. Hoy les proponemos volver a hablar de Carnaval y de Colonia, pero no del departamento de Colonia, aquí en Uruguay, sino de la ciudad de Colonia en la República Federal de Alemania.

Porque el Carnaval de Colonia es uno de los más famosos y concurridos del mundo. Allí, las fiestas de estos días compiten en movimiento, en dinamismo, en creatividad, en diversión y en desenfreno con el mismísimo Carnaval de Río de Janeiro. Claro, hay algunas diferencias entre uno y otro. Para empezar, el clima. En Alemania, en estos días el invierno pega con toda su crudeza.

¿Cómo hace el Carnaval para convivir con el frío? ¿Qué tiene de particular el Carnaval alemán?

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EC - Estamos con Nicolas Nordt, que fue mi acompañante y traductor cuando estuve en Colonia en noviembre, durante la visita que hice a Alemania, invitado por el gobierno de ese país.

Cuéntanos cómo está el tiempo ahora, casi en el mediodía alemán.

NICOLAS NORDT:
Está un poco nublado, bastante gris, hay 5 o 6 grados, un poco soso.

EC - Colonia está ubicada al Oeste de Alemania, cerca de la frontera con Holanda y Bélgica, y tiene una población de un millón de habitantes. Está a orillas del Rhin, en una zona de Alemania con una impronta católica muy fuerte, visible por todos lados, entre otras cosas por la cantidad de iglesias. Es una de las ciudades más antiguas de Alemania. Fue fundada en el año 50 después de Cristo, durante la dominación del Imperio Romano. Varias de esas características hacen que en esa zona de Alemania el Carnaval se viva a pleno.

ND - Es cierto. El área del Rhin es famosa por la celebración de un Carnaval bastante intenso.

EC - ¿Es un carnaval descontrolado?

ND - Sí, el Carnaval es descontrolado, pero los alemanes le ponemos un poco de estructura. Nos gusta hacer un Carnaval organizado. Existen diferentes asociaciones que celebran con diferentes uniformes y hacen desfiles en estos días.

EC - En realidad, la temporada de Carnaval se lanza muy temprano, se lanza el día 11 del mes 11 a la hora 11, 11 minutos, 11 segundos, etcétera.

ND – Exacto. Ahí arranca la pretemporada que culmina esta semana. Empezó el jueves pasado, el Día de las Mujeres, cuando las mujeres toman el mando y cortan las corbatas a los hombres para simbolizar que son las chicas las que mandan.

EC - Eso ocurre el jueves, previo a estos días de Carnaval, ahí empieza el nudo de la fiesta. El lanzamiento fue en noviembre. Hay algunas actividades preparatorias, pero el grueso de la movida ocurre en estos días.

ND - Hay sesiones esos días. Las asociaciones de Carnaval invitan a artistas cómicos, a músicos, que hacen una fiesta particular de Colonia con chistes y música de Carnaval. A partir del jueves el Carnaval sale a la calle, con el Día de las Mujeres.
 
EC - Las fiestas empiezan el jueves previo a estos días y se extienden a lo largo de viernes, sábado, domingo, lunes y martes... Seis días.

ND - Sí, seis días. Hoy es el último día de desfile y a medianoche se quema una figura simbólica. Con eso se queman todos los pecados y pecadillos que se cometieron durante esos días de locura.

EC - ¿Son seis días de locura realmente?

ND – Sí. Parece que la ciudad ha vuelto a la Edad Media. La gente está por todas partes. Hay gente bastante descontrolada por el consumo de sustancias alcohólicas. Se celebra fuerte. Con el frío hay que tomar mucho, vestirse bien, entonces la gente se anima mucho y es una locura. Es una suerte que me tengan en el teléfono, porque normalmente hoy nadie contesta.

EC - ¿Son días feriados? ¿Cómo se desarrolla toda esta actividad de entretenimiento, de diversión? ¿Qué pasa en los lugares de trabajo?

ND - Oficialmente no es un festivo. Pero las empresas más pequeñas, de familias de Colonia, hacen feriado. No trabaja nadie. En las grandes empresas sí. Hay unos pobres que no tienen disculpas, para ellos es muy duro porque todo el mundo está celebrando.

EC - En las dependencias del Estado o del municipio, ¿se trabaja?

ND - Sí, en la municipalidad sí. Pero todo el mundo sabe que mejor no ir, porque la gente está con mala leche y no va a estar muy al tanto. Hay que admitirlo.

EC - Son seis días de celebraciones. La ciudad cambia totalmente, pasa a vivir ese ambiente de desenfreno. Eso lleva a que una parte de la población se vaya y venga otra.

ND - Es que no todo el mundo es aficionado al Carnaval. Hay mucho ruido, hay mucha música, mucha desorganización. A alguna gente no le gusta y hay gente que vive en Colonia pero no es de Colonia y no lo ve tan lindo como lo vemos lo de Colonia. Esa gente, que es más o menos la tercera parte de los habitantes, huye, se va de vacaciones, a visitar parientes, lo que sea. Y entra mucha gente de las ciudades cercanas, de Berlín, de Hamburgo, de Francia, de Holanda, incluso de Inglaterra, para ver a los alemanes cuando se ponen locos.

EC - ¿Cuánta gente llega? ¿Cuántos son los turistas en Colonia durante estas fiestas del Carnaval?

ND - Entre medio millón y un millón.

EC - Esos números son uno de los campos de competencia con el Carnaval de Río de Janeiro. En Río, según nos decía nuestro corresponsal más temprano, se estima que este año hay unos 750.000 turistas. Por lo visto, en Colonia las cifras son similares.

ND - No tengo cifras claras, pero es más o menos igual.

EC - ¿Y cómo es esto de las agrupaciones de Carnaval? Cuéntanos de qué se trata, qué tipo de conjuntos son, qué música y qué letras hay en las actuaciones de estos días.

ND - Las letras son casi todas sobre la belleza de Colonia, su situación, su iglesia, la famosa catedral, la historia, y que los chicos y las chicas de Colonia son los más lindos y saben besar como nadie. Es una tradición muy larga. El carnaval es una celebración de antes de los cristianos. Las tribus celtas querían despedirse del invierno, de los fantasmas malos del invierno con esa celebración. Después hubo otros temas. La gente de Colonia siempre ha sido un poco rebelde, no le gustaba ser gobernada, ni siquiera por sus propios principales o clérigos. Y menos por los de Berlín, los prusianos que estaban aquí, por Napoleón cuando pasó por aquí con el ejército francés... Durante el Carnaval, la población de Colonia solía ponerse unos uniformes parecidos a los de los opresores para burlarse de esa forma de sus rivales, de esa clase de gente. Así ha acogido más y más momentos y se hizo más y más popular.

EC - ¿De qué hablan las letras de las canciones hoy?

ND - Sobre todo de lo bonita que es la catedral de Colonia, que tiene que estar aquí en Colonia, que no hay ninguna parecida en ninguna parte del mundo, viva Colonia, un himno al amor, también al amor físico, y que los chicos de Colonia besan mejor que los de otras partes de Alemania y las chicas de Colonia son las más lindas.

EC - ¿Hay también crítica social, crítica política, como en otros lugares en Carnaval, como en Río, como en Uruguay?

ND - No tanto en las canciones, más bien en los desfiles. Las asociaciones carnavaleras montan unos camiones y con mucho amor al detalle les ponen un disfraz y los dedican a temas políticos o sociales. Pueden ser bastante críticos. Eso es una característica del Carnaval, pero las canciones son más bien para pasarla bien.

EC - Hay un desfile por día, ¿tienen características distintas según el día?

ND - Sí, se refieren a la política o al tema del día.

EC - Pero ¿qué diferencia el desfile del jueves pasado del desfile del sábado o el lunes?

ND - No hay muchas diferencias. Hay diferentes formas de desfiles. El más grande se celebra el lunes y varios más pequeños en los barrios se celebran domingo y martes. Hay un desfile alternativo, el de los fantasmas, el sábado. Pero los temas no varían. Para eso no da el tiempo, son cosas que se preparan, es el tema del año. El club de fútbol de Colonia, que va muy mal, puede ser motivo de un desfile o de una crítica. Cambia año a año, pero no cada día.

EC - ¿Cómo hacen para desarrollar buena parte de estas actividades al aire libre, con esas temperaturas, en pleno invierno alemán?

ND - Hay que buscarse un disfraz. Hay gente que va como oso, lo que le da oportunidad para vestirse bien y abrigarse bien. Pero también hay cantidad de gente que va bastante ligera, entonces hay que beber hasta sentir calor. Y hay que bailar mucho.

EC - Las claves son bailar y tomar cerveza.

ND - Sí, cerveza y lo que sea.

EC - ¿Mañana vuelve todo a la normalidad? ¿Cómo es el panorama el miércoles después de Carnaval?

ND - El miércoles figura como el último día, pero ya no se celebra nada. Se le llama "miércoles de cenizas". La gente es absuelta de los pecados que cometió, y come mucho pescado. Porque después del consumo de alcohol hay que comer algo bueno. Básicamente es el fin de la sesión de Carnaval. La gente desesperadamente espera la llegada del 11 de noviembre del año para volver a la locura.

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Edición: María Eugenia Martínez