La Falta y su historia
Hugo "Piruja" Brocos es uno de los dueños de Falta y Resto y compinche de siempre de Raúl Castro. Juntos iniciaron el camino de la "de las cuatro estaciones", y pese a que Hugo ya no sube a los escenarios, juntos se mantienen ahora, que la Falta no concursa pero arrastra multitudes en Argentina. Hace poco, Piruja publicó "La Murga Rebelde" donde repasa la historia de este conjunto. Fernando Tetes dialogó con él.
- ¿Este libro es como la continuación de otro que ya tenías publicado?
- Es la continuación de lo que habíamos hecho hasta el 91 que era lo que llamamos "A marcha camión" y después fui escribiendo año por año hasta llegar a 2005. Ahí dije basta porque si no, no lo iba a sacar nunca. Se puede decir que sí que es la continuación mucho más ampliada, más documentada, con muchas fotos. Está mejor que marcha camión.
- El libro tiene lo que querés saber de la Falta pero además el contexto histórico que se vivía. ¿Te metiste en la biblioteca nacional?
- Si, tuve que escribir bastante y me sirvió para conocer muchas cosas. Detallé la historia que ocurría año tras año para que se entendieran los textos. Porque vos sabés cualquier cosa que pasó hace años por los textos de la murga. Por la crítica, los cuplés, en fin.
- ¿Cómo llegaste a la Falta?
- Creo que la Falta llegó a mi. Estábamos en el año 80 en la Asociación Cristiana de Jóvenes trabajando de forma rentada y en la División Juvenil había una lucha contra la dictadura a través de la cultura. Había grupos de teatro, de café concerts, distintos artistas. Estaban Carlos y Liliana Viana, Carlos Cabral, Horacio Rubino y la murga La Mezcolanza. Nosotros teníamos una murga y vino Raúl Castro, por intermedio de Carlos Viana y dijimos de sacar una murga para cantar en contra de la dictadura. El motivo real de la formación de la Falta y Resto fue ese. Interlineado por supuesto. A nosotros nos prohibieron la palabra verano porque dijeron que en verano era la vuelta del partido comunista. En aquella época podías ser blanco, colorado, socialdemócrata o mismo comunista, que para ellos todos eran comunistas. Cantamos con los interlineados de amanecer, los pájaros volarán libremente, y fundamentalmente con canciones de canto popular uruguayo y latinoamericano las tonadas que la gente entendía.
- Vos seguís siendo director de la murga, ¿cuando decidiste que no salías más?
- Yo en el 91 vi que había que dejar paso a los jóvenes. No era viejo en esa época pero decidí que tenía que cumplir una función desde otro lado.
- ¿Qué te recuerda o qué te significa a vos Raul Castro?
- Un hermano, un hermano del alma. Son 27 años juntos no son dos días. Con Raúl lloramos juntos de alegría y de tristeza.
- ¿De qué alegrías lloraron juntos?
- Cuando salió la murga, en los primeros tiempos, lloramos cuando estuvimos en Europa, en Inglaterra cuando nadie entendía nada de lo que cantábamos y todo el mundo aplaudía. Lloramos muchas veces, y de tristeza lamentablemente también, con pérdidas que tuvimos cercanas.
- ¿Cómo la ves a la Falta hoy después de haber escrito el libro?
- La veo en un momento impecable. Es impresionante la murga en Argentina, no solamente la Falta. Están yendo la Catalina, A contramano, los Curtidores, Los Diablos, pero en particular La Falta mata. Decís murga uruguaya y asocian automáticamente a Falta y Resto.