Piratas en Agadu
Este sábado se estrena "Piratas y el Tesoro de la Sirenita", la nueva obra para niños del Grupo Aventura que intenta reincidir en el éxito alcanzado el año pasado con "Spencer P".
Si bien esta historia trata de piratas, no vayan a imaginarse a malvados personajes extraídos de la historia como Jeireddín Barbarroja o el protegido de la corona británica Francis Drake. Ni siquiera piensen en un estereotipo de la ficción, un tanto más amistoso aunque muy temido por los niños, como el Capitán Garfio. Aquí, los piratas "juegan a ser malos" porque es lo lúdico, lo único que debe ser imitado. "Lo que nosotros tenemos como intención es despertar en los chiquilines las ganas de jugar a los piratas, o sea que no hacemos una trama en serio donde las peleas son a muerte ni nada por el estilo. Antes se jugaba a los cowboys, a los indios y a los piratas. Queremos revivir el gusto por lo lúdico", contó a Espectador.com el director de la obra, Álvaro Loureiro. "La estética de la obra recrea por supuesto los trajes de los piratas, la atmósfera del barco, también hay como un aire de broma, de historieta. Cosa de que si los niños nos quieren imitar, lo puedan hacer. Que puedan decir, bueno aquí ponemos un timón y hacemos un barco", agregó.
Personajes pintorescos y una anécdota ágil son algunas de sus promesas para quienes se acerquen a ver "Piratas y el Tesoro de la Sirenita", la nueva apuesta para vacaciones de julio del Grupo Aventura, que obtuvo tres premios Florencio en su pasada edición por la obra, también para niños, Spencer P. Esta vez, el colectivo decidió reincidir en la dramaturgia de Daniel Salomone para poner en escena un texto apropiado y enriquecedor para los más chiquitos. "Pese a que es muy joven entiende mucho a los niños y las cosas que hay que decirles. Sabe transmitir valores, pero lo hace de una manera que no es ni agresiva ni como en una clase de escuela que se vuelve demasiado didáctica. Se trasmiten a través de la trama, de conclusiones que los propios chicos sacan", contó Loureiro.
En este sentido, el director nos adelantó que la historia envuelve al capitán de un barco, a su contramaestre y a una sirena que, "como dice la tradición de los cuentos de hadas", no quiere estar en el mar, solitaria, sino que pretende pasar al mundo de los humanos. Es así como este disconformista personaje, que encuentra su antecedente en la literatura de Hans Christian Andersen, se suma a los dos primeros en el intento de lograr su cometido. Como no podía ser de otra manera, también hay un tesoro. "En realidad se descubre que la amistad es un tesoro, el amor es un tesoro; no así el dinero, ni las joyas, ni nada de eso" adelantó Loureiro.
Esto también tiene que ver con que los piratas resulten más o menos amistosos. En este sentido, y como ya habíamos anticipado, el director contó que "los piratas se hacen los malos. Se nombran a otros piratas que no aparecen que quizás sean malos. Está en clave de juego porque se nota que todo es como una gran broma. Nunca se van a atacar de verdad. Hacen como que luchan y nosotros queremos recrear eso sanamente. Hay enfrentamientos y duelos pero son como que en broma, de gente que lo hace como si fuera un deporte".
Para esto, el trabajo con las espadas demandó una investigación previa y ensayos con Christian Zagia quien los asesoró especialmente en la materia. "Todo eso hay que hacerlo bien porque vas a hacer funciones todos los días y si un día te lastimas al otro día no lo vas a poder hacer", comentó el director, a la vez que explicó que los niños son espectadores atentos que perciben claramente cuando las representaciones no son buenas. "Una cosa que hay que tener muy en cuenta es nunca menospreciar al espectador infantil pensando que porque es muy chiquito no va a entender si las cosas no están demasiado bien. No hay distinción entre el teatro para adultos y el teatro para niños. Se dan cuenta de todo y si no les gusta se quieren ir, se aburren y lo manifiestan".
El público al cual está dirigido el espectáculo es lo suficientemente amplio como para incluir a toda la familia. Los padres pueden animarse a llevar a sus niños desde los dos años y medio en adelante. Eso sí, deben ir dispuestos a entretenerse ellos también. "Pensamos que los papás también deberían divertirse, si no disfrutan hay algo que no está bien. A todos nos gustan los dibujos animados y las películas de Chaplin. Está pensado para niños, pero como somos todos niños hasta el final, no debería haber límites.", concluyó.
Ficha técnica de la obra
Estreno: 27 de junio.
Lugar: Sala Teatro de AGADU Canelones 1122 esq. Paraguay.
Funciones: sábados, domingos y vacaciones de julio a las 14 horas.
Elenco: Fabián "Chicho" Silva, Geraldine Montaño y Román Indart.
Localidades: 100 pesos.