Los abogados de Polanski anunciaron después de la audiencia que apelarían esta decisión.

La defensa del director de El Pianista había urgido este mes al juez Peter Espinoza que dirima el caso sin que el director de cine tenga que viajar a Estados Unidos, un pedido que contó con el respaldo de Samantha Geimer, la mujer que mantuvo relaciones sexuales con el director en su adolescencia, y que también está en contra de su eventual extradición.

"El necesita comparecer (en la corte) ... Su pedido está rechazado", dijo el juez Peter Espinoza en la audiencia de este viernes en la Corte Superior de Los Angeles, donde sucedieron los hechos hace casi 33 años.

"Prefiero insistir en la defensa de la integridad del sistema judicial. Él tiene que comparecer. Dejé claro que él tiene que rendirse", recalcó el juez.

Polanski, de 76 años, está bajo arresto domiciario en Suiza, tras su detención en septiembre a pedido de la justicia estadounidense.

La fiscalía se opuso a que el cineasta fuera condenado en ausencia tras afirmar que se establecería un peligroso precedente en el sistema de justicia estadounidense.

"El acusado es un fugitivo", dijo el fiscal de distrito David Walgren en un documento entregado al juez la semana pasada.

"El acusado no debería, mejor dicho no tiene que permitírsele dictar a esta corte o cualquier otra corte, bajo qué términos debe procederse en este juicio. El señor Polanski se tiene que rendir", apuntó el fiscal.

En marzo de 1977, Polanski, que tenía entonces 43 años y era ya un cineasta de fama mundial, mantuvo relaciones sexuales con una menor de 13 años, al margen de una sesión de fotografía en casa del actor Jack Nicholson.

Demandado por los padres de la adolescente, el cineasta reconoció los hechos pero huyó de Estados Unidos antes de que se dictara sentencia.

No volvió nunca a Estados Unidos, ni siquiera para recibir el Oscar a mejor director que le fue concedido en 2003 por El Pianista.