De acuerdo al informe que fue publicado por el diario El País de Madrid, el artista recibe US$ 350,055 de adelanto; el presupuesto de grabación cuesta unos US$ 229,300, mientras que el lanzamiento de tres videoclips de mediana factura alcanza los US$ 189.973. Finalmente se necesita US$ 124,866 para respaldar los conciertos y US$ 160.155 para la partida de promoción.
 
El informe pone el ejemplo de Amy Winehouse, artista que ha vendido más de 10 millones de copias del álbum Back is black y que fue descubierta por  Nick Gatfield, antiguo integrante de Dexy's Midnight Runners, a través de la web. "Internet no es una herramienta práctica para descubrir artistas al azar, pero en el caso de Amy nos percatamos de los rumores y comentarios que corrían sobre ella en la red", explicó Gatfield quien la fichó para el sello Island.
 
Pero si el artista ya es un personaje consolidado, cada lanzamiento cuesta unos US$ 4.615.022.
 
Las cifras están en el estudio llamado Invirtiendo en música, desarrollado por la Federación Internacional de la Industria Discográfica con el fin de demostrar que la industria q "sigue apostando fuerte por desarrollar nueva oferta musical" pese al desplome en las ventas.
 
El sector ha caído un 10% en 2009 y un 30% entre 2004 y 2009. A pesar de ello el año pasado se invirtieron US$ 5,000 millones (un 30% de los ingresos de las discográficas) en 4.000 artistas.