El director de cine -actualmente bajo arresto domiciliario en Suiza, a la espera de su eventual extradición- fue acusado por la actriz Charlotte Lewis en una conferencia de prensa en las oficinas de la abogada Gloria Allred, conocida por representar a famosos de Hollywood.

Lewis, de 42 años, indicó que decidió relatar lo ocurrido para rechazar las sugerencias del equipo legal de Polanski de que el caso por el cual es juzgado fue un incidente aislado.

"Yo también soy una víctima de Roman Polanski. Abusó sexualmente de mí de la peor manera posible cuando yo tenía solo 16 años, cuatro años después de que él escapara de Estados Unidos para evitar ser sentenciado por sus crímenes", indicó Lewis en una declaración preparada previamente.

Allred indicó que Lewis hizo sus declaraciones ante la Policía y fiscales de Los Angeles que confía en que sea tomado en consideración si Polanski es extraditado de Suiza a Estados Unidos.

"Es muy importante que el fiscal y las autoridades suizas tengan esta información cuando decidan la suerte de Polanski", indicó Lewis, que tuvo un papel menor en su película "Pirates", de 1986.

Desde entonces ha actuado en una treintena de largometrajes y series de televisión.

"Polanski sabía que yo tenía solo 16 años cuando me conoció y me forzó en su apartamento de París. Se aprovechó de mí y he vivido con los efectos de su comportamiento desde que ocurrió", indicó Lewis. "Todo lo que quiero es justicia", añadió.

No se revelaron las circunstancias del incidente y Lewis no quiso responder preguntas.

Aunque Polanski fue acusado de "forzar" a la actriz, ella evitó deliberadamente referirse a una "violación".

"Las palabras que usamos son las palabras que usamos", respondió Allred a preguntas sobre las afirmaciones de la actriz.

Consultada sobre por qué Lewis habló después de tanto tiempo, la abogada indicó que "nunca es fácil hablar (de una agresión), sobre todo en un caso muy mediatizado".

"No solamente no es demasiado tarde, todavía hay tiempo si otras víctimas quieren hablar", estimó.

En un comunicado, los abogados estadounidenses de Polanski indicaron que no tienen "ninguna información sobre las declaraciones realizadas en la conferencia de prensa de Gloria Allred".

"Lo que sabemos, en cambio, es que la oficina del fiscal sigue negándose a brindar al gobierno suizo las informaciones exactas, completas y pertinentes en el caso de extradición" de Polanski.

Los abogados del cineasta afirman que el pedido de extradición no es "honesto" ya que omite testimonios que podrían ser beneficiosos para su cliente.

En marzo de 1977, Polanski, que tenía entonces 43 años y era ya un cineasta de fama mundial, mantuvo relaciones sexuales con Samantha Geimer, una menor de 13 años, tras darle alcohol y drogas durante una sesión de fotos en la mansión del actor Jack Nicholson.

Detenido tras la demanda de los padres de Samantha, el cineasta se declaró culpable de mantener "relaciones sexuales ilegales" y pasó un mes y medio en la cárcel. A fines de 1978 y con la amenaza de volver tras las rejas, Polanski se fugó a Francia.