Cultura

Película uruguaya causa sensación en Cannes

La película uruguaya La casa muda acaparó la atención en la Quincena de Realizadores del Festival de Cannes con la terrorífica historia filmada en un plano secuencia único de 78 minutos.


La casa muda sigue a la joven y su padre en su última noche en esa casa aislada que se disponen a arreglar para venderla cuando se oyen unos ruidos inquietantes y el padre sube al desván y no vuelve a bajar.

Gustavo Hernández, realizador de cortos, se propuso trabajar "la idea del miedo real en tiempo real", aprovechando que el productor Gustavo Rojo, gran consumidor de películas fantásticas y de terror, le proponía una incursión en este tipo de cine, que es "con el que más se puede experimentar".

El primer largometraje de este director nacido en Montevideo hace 37 años, se apoya mucho en recursos sonoros y sorpresas repentinas para provocar sobresaltos y tener en vilo al espectador.

"La película es muy modesta, desde su concepción hasta lo que queremos transmitir a la gente", reconoce Rojo. "Minúscula y muy honesta", agrega Hernández en conversación con la AFP.

Juega con "lo que sientes en tu propia casa cuando estás durmiendo solo y de repente escuchas un ruido, aguzas los sentidos, tu cuerpo se paraliza, intentas identificarlo", explica.

Esta inspirada en un suceso real, que pasó a las afueras de Montevideo, un crimen cometido en los años 40'. Como no se resolvió, "investigamos en bibliotecas, buscamos información que nos sirviera de inspiración", dicen.

Para articular la historia decidieron contar los últimos 78 minutos de vida de los cadáveres descubiertos e imaginaron lo que pudo haber pasado en ese tiempo a los tres protagonistas, una mujer y dos hombres. "Obviamente, es ficción, no sabemos si se asemeja a la realidad", comentan.

Para los tres únicos personajes de La casa muda querían "caras limpias" y los tres vienen del teatro, carecen de experiencia audiovisual.

La omnipresente Florencia Colucci, estudiante de teatro, realizó una primera prueba convincente y cinco que no funcionaban por demasiado contenidas, pero respetaron el "instinto" de Hernández.

"Las sensaciones que ella provoca las vivió realmente durante el rodaje", destacan.

Formato digital, cámara fotográfica especial prestada para la filmación, locación real en una casa, pensaron en todo para abaratar costos. Resultado, seis mil dólares de presupuesto.

El cine de género no tiene tradición en un país como Uruguay, más allá de películas amateur filmadas en video con cámaras de baja calidad par el mercado interno.

"Para hacer cine de género es muy difícil encontrar apoyo oficial o privado. Nosotros ni siquiera pedimos ayuda, casi nos daba vergüenza porque la película no habla nada de Uruguay, pero luego el gobierno se ha portado muy bien para que podamos estar el equipo en Cannes", dicen.
También reconocen que el éxito de películas como la española REC les ha beneficiado.

"Subimos el trailer a internet y la gente empezó a compararlo con REC, con El proyecto Blair Witch', explica Hernández. "Desde la selección en Cannes, los fanáticos del género que tienen blogs hablan de la película como si fuera suya, sin verla", completa Rojo con entusiasmo.

Por falta de tiempo, La casa muda se proyectó en Cannes en versión digital. Para octubre está previsto el estreno en Uruguay.

Fuente: AFP