Argentina se conmueve ante la muerte de Romina Yan
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La actriz argentina de 36 años murió en la tarde de este martes en el Hospital Central de San Isidro. Se descompuso luego de realizar su rutina diaria en el gimnasio. Al enterarse de la noticia, Marcelo Tinelli, decidió no salir al aire con ShowMatch.
La hija de los productores Cris Morena y Gustavo Yankelevich fue traslada de urgencia al Hospital Central de San Isidro, donde llegó a las 16:30 horas ya sin signos vitales, según informó el portal argentino Infobae. Los médicos del hospital intentaron reanimarla durante 50 minutos pero fue imposible lograr ese objetivo.
El portal La Nación señaló que Yan llegó a la institución con síntomas de paro cardíaco.
La joven, quien tenía tres hijos, se descompuso luego de realizar su rutina diaria en el gimnasio y un amigo la trasladó de urgencia. "Estaba tomando algo cuando se descompensó y rápidamente la llevaron al hospital", afirmaron fuentes policiales a Infobae.
Al Hospital llegaron su marido Giordano, luego su padre Gustavo, su hermano Tomás, director de TV, a las 18.39 arribó su madre Cris Morena y a las 20 Susana Giménez, amiga de los padres de la actriz. A los pocos minutos de ingresar al segundo piso del Hospital donde estaba su hija, Cris sufrió una descompensación y debió ser atendida, hasta que se recuperó.
La primera aparición de Romina Yan en la televisión fue durante 1991, como una bailarina del programa de su madre Jugate Conmigo. Dos años después, en 1994, hizo su debut como actriz interpretando a Lorena Picabea en Mi cuñado. Ese mismo año, se la vio como Sol Iturbe en Quereme.
Pero su momento cumbre llegó en 1995, cuando su madre, Cris Morena, lanzó al aire una de las telenovelas infantojuveniles más exitosas de todos los tiempos: Chiquititas donde encarnó a Belén Fraga, la directora del orfanato.
En los últimos años, la actriz se alejó de la televisión para dedicarse más a su familia. Entre 2007 y 2010 sólo se la vio en un período de Casi ángeles, para volver en este último año al bajo perfil, siempre característico de su persona.
En 2008 reconoció a la revista Para ti que había problemas con la anorexia, aunque decía ya estaban superados. "Es un tema con el cual tenés que vivir toda tu vida. Yo me reconcilié con mi cuerpo, pero la anorexia sigue latente. Todos los días aprendo a comer y no me siento relajada con la comida. Hay veces en que me vuelvo obsesiva, me veo gorda y dejo de comer. Es que una vez que se te distorsiona la imagen, es muy difícil que vuelvas a verte en el espejo tal como sos: vivo encontrándome defectos", señaló en aquel reportaje.
"El peor momento fue en la época de Jugate conmigo: tenía 15 años, iba a un colegio de doble escolaridad, trabajaba hasta las 3 de la mañana y me levantaba a las 7. Era demasiado y descargué mis angustias en mi cuerpo. Todo ese año la pasé mal y comencé a sufrir de anorexia. No comía nada porque estaba obsesionada con que tenía que ser perfecta. Durante toda mi vida descargué mis miedos, inseguridades y angustias con la comida. Esa fue mi forma de boicotearme", confesó.
Su padre, Gustavo Yanquelevich, en una entrevista con Clarín, la definía así: "Romina no termina de convencerse de cuánto la quiero. Para mí tiene una familia divina, encontró un marido maravilloso mejor no podía haber elegido tengo unos nietos divinos. Más orgullo que eso no hay. Si encima actúa bien o le va mejor con un tono, eso es extra. Y como ella es súper exigente, le cuesta entenderlo".