Miles despidieron a "El Sabalero" en el Velódromo
En la noche de este lunes miles de personas se reunieron para despedir al cantautor, en una velada atípica para el Velódromo Municipal.
"Porque tengo el cuerpo llenito de madrugadas, busco una muerte viva, jamás una muerte mansa", expresó Carbajal en una de sus canciones y así fue.
Tal cual estaba previsto no hubo ni palabras de homenaje ni artistas invitados. La cita, pactada para las 21.00 horas, prometía un último encuentro popular entre "El Sabalero" y su público para poder recordarlo sobre el escenario.
Hasta allí se acercó gente de todas las edades y se repitió la presencia del presidente de la República, José Mujica, quien ya había formado parte del homenaje realizado en Juan Lacaze el día anterior, cuando parte de las cenizas de Carbajal fueron esparcidas por Playa Verde.
Las luces se apagaron a las 21.20 horas y en la pantalla gigante de "Efecto Cine" apareció la imagen del músico para interpretar uno de sus clásicos, Villa Pancha. A partir de allí, la noche adquirió las características de un concierto. El "set list" preparado para la ocasión y conformado por registros audiovisuales de varias de sus presentaciones incluyó 14 canciones y duró más de una hora.
El público pudo escuchar parte fundamental de su repertorio, primero en un respetuoso silencio y ya sobre el final haciendo palmas y cantando a coro con el artista.
La noche de este lunes tuvo momentos emotivos como cuando en la pantalla gigante apareció Carbajal recitando o contando alguna anécdota de sus canciones, o cuando el público irrumpió en un aplauso a mitad de un tema.
Sobre las 10.30, después de haber escuchado "Ya cumenza", "Borracho pero con flores", "A mi gente", "La Muerte" y "Chiquillada", que fueron los temas escogidos para cerrar esta despedida, se encendieron las luces del velódromo y el público emprendió la retirada.
Cabe recordar que el Sabalero falleció el 21 de octubre a sus 66 años en Villa Argentina. No se realizó velatorio público por decisión de su familia. Sus restos fueron cremados y sus cenizas fueron esparcidas en Villa Argentina y en Juan Lacaze.
Foto: Tomer Urwicz