A su vez, también sostuvo que Murray retiró pruebas de la residencia del artista antes de llamar a la asistencia médica.

"Hubo un número de acciones realizadas por el doctor Murray que mostraron una desviación extrema de los cuidados médicos estándar", dijo Walgren, cuya intención es probar que lo ocurrido con Jackson se debió al efecto de las sustancias que se le facilitaron al artista durante la noche del 24 y la mañana del 25 de junio de 2009, bajo la supervisión del doctor.

Según recordó BBC Mundo, el informe de autopsia señaló que el Rey del Pop  falleció de una intoxicación aguda con el compuesto químico Propofol, utilizado en conjunción con otros sedantes.

Si bien Murray reconoció haber administrado al cantante las inyecciones de este compuesto para ayudarlo a dormir, la defensa del médico sostiene que la dosis administrada por Murray no podía haber sido fatal y que Jackson se habría autoadministrado una dosis mayor y letal.

Foto: Flickr/Jay Jay Styles