Entrevistas

"Reus": un retrato de la sociedad sin mensaje moral

"Reus": un retrato de la sociedad sin mensaje moral

"Un barrio, dos familias, tres códigos". Así se presenta una nueva película uruguaya que ya ha vendido más de 20.000 entradas desde su estreno hace tres semanas. Se trata de "Reus", un policial que se sitúa precisamente en ese barrio de Montevideo. Eduardo Piñero, autor de la idea original en la que se basa este filme, además de coguionista y codirector, conversó con Emiliano Cotelo, Martín Reyes y los integrantes de La Tertulia de los Miércoles Marcelo Cazzolli, y Juan Ángel Urruzola. "La película es un retrato de lo que está pasando en varios barrios de Montevideo [...] La inseguridad, la incursión de la pasta base en nuestra sociedad, la pérdida de códigos de convivencia en el barrio y sobre todo los valores de los códigos de familia. Tocamos todos esos temas con mucho respeto y con una investigación muy profunda para que a la hora de mostrarlos en la pantalla fueran reales y no dejaran un mensaje moral en absoluto", indicó el cineasta.


(emitido a las 9.42 Hs.)

EMILIANO COTELO:
Dos bandas de delincuentes roban y se enfrentan en un barrio de la ciudad. La policía, en algunos casos corrupta, poco puede (o quiere) hacer para brindar más seguridad. Algunos comerciantes se unen para solucionar por mano propia sus problemas. En medio de esa situación, asaltos, tiros, persecuciones, droga, muerte...

Estos son todos condimentos ideales para armar una película policial en cualquier lugar del mundo. Y también aquí, en Uruguay.

Esos elementos están presentes en "Reus", una película nacional que va en su cuarta semana de exhibición con un importante éxito de taquilla. Hasta ahora, más de 20.000 personas ya la han visto.

Esta mañana, en La Tertulia, les proponemos volver a sentarnos cómodamente en la butaca de su cine preferido. La lluvia de hoy, el cielo negro, son el ambiente ideal para una "distracción" como esta.

Juan Ángel Urruzola, Marcelo Cazzolli y yo ya vimos "Reus". También la vio Martín Reyes, que nos acompaña por teléfono. Y recibimos como invitado a Eduardo Piñero, autor de la idea original de la película y uno de sus tres directores, junto con Pablo Fernández y Alejandro Pi. Con ellos también compartió la elaboración del guión de "Reus".

Empecemos con algunas preguntas básicas para después entrar en la discusión, en la charla más abierta. Ustedes han definido a esta película como un "policial de barrio". ¿Qué quieren decir con eso? ¿Es un género ya establecido?

EDUARDO PIÑERO:
Es una película de género, sin lugar a dudas. El policial de barrio es la definición que nosotros le dimos porque entendemos que "Reus" es eso, trata el conflicto de un barrio tocado por varias puntas, la inseguridad, la incursión de la pasta base en nuestra sociedad, con todo lo que eso acarrea, y la pérdida de códigos de convivencia en el barrio y sobre todo los valores de los códigos de familia que se tratan en la película.

EC - ¿Entonces? ¿En qué películas se inspiraron? ¿Cuáles son los referentes para ustedes?

EP - Tuvimos referentes como [Martin] Scorsese, [Francis Ford] Coppola; en lo local un gran referente y nuestro padrino, Adrián Caetano.

EC - ¿Qué quiere decir que fue padrino?

EP - Adrián Caetano fue el que nos impulsó, el que nos premió, era presidente del jurado en el FONA 2006, que fue el primer premio que ganamos. Adrián confió en el guion, dice que premió por lo ambicioso del proyecto, y sin lugar a dudas era y es un proyecto superambicioso. Adrián Caetano confió en nosotros, como presidente del jurado nos dio el premio del FONA 2006, pero más allá de eso él ya venía siendo un referente en lo artístico, por lo que había hecho en "Un oso rojo", en "Pizza, birra y faso" o "Bolivia", y tomamos ciertos aspectos estéticos de los directores que mencionamos.

EC - ¿De qué manera figuró "Ciudad de Dios" en los antecedentes, que es otra película que aparece inmediatamente cuando uno ve "Reus"?

EP - "Ciudad de Dios" fue el referente en el trabajo con actores, en el departamento de actores, ya en el trabajo de casting, durante todo el proceso de selección y luego durante el proceso de trabajo con los actores, que demandó cuatro meses y que desembocó directamente en el rodaje. Todo ese proceso fue con un gran referente que fue el trabajo de Fátima Toledo en "Ciudad de Dios". Hicimos una gran investigación por diferentes medios, llegamos a obtener material, con ese material diseñamos un trabajo adaptado para "Reus" y para la idiosincrasia uruguaya, para lograr aspectos que se habían logrado en esa película, que es una de las mejores que he visto.

EC - Ya lo mencionaste al pasar, pero la película habla de un barrio tugurizado, con fuerte presencia de dos bandas de delincuentes enfrentadas entre sí; habla de inseguridad latente, ladrones, arrebatadores, traficantes; habla de jóvenes que no trabajan ni estudian, y consumen alcohol, marihuana, pasta base; habla de policía ineficiente y aparentemente corrompida; habla de comerciantes robados una y otra vez pero que al mismo tiempo han tenido relaciones oscuras con algunos de los ladrones; habla de la condición de judíos de esos comerciantes, nacidos en ese barrio pero que ahora residen en plena rambla de Pocitos. Entonces, ¿pretende ser un retrato del barrio Reus hoy o en un pasado muy reciente? ¿Buscaron eso?

EP - Es una muy buena pregunta. En primer lugar, queremos aclarar que "Reus" no está basada en ningún hecho real, es cien por ciento ficción. Hoy en día, desde hace unos cinco años, el barrio Reus está hermoso, el barrio de los judíos ha tenido un crecimiento enorme en el plano comercial.

EC - Ustedes filmaron a fines de 2009.

EP - A fines de 2009 y principios de 2010. Filmamos todos los exteriores en el barrio. Está buena la pregunta porque mucha gente, los vecinos, los comerciantes, nos pregunta ¿cómo tomaron esto de ver un barrio tan revuelto? Lo tomaron bárbaro porque hace seis años que estamos trabajando en este proyecto. Y en este recorrido de seis años una de las estrategias que quisimos utilizar fue involucrar al barrio en el proyecto. Tan es así que hicimos toda la etapa de casting en el salón Krueger, un salón comunal que está en La Comercial, en pleno barrio Reus, donde se juntan La Comercial y Goes. Tuvimos entrevistas y notas con referentes comerciantes judíos de hace muchísimos años, incluso con uno de los primeros comerciantes que instaló comercio en la zona. Ellos entendieron perfectamente que esto era una ficción y colaboraron muchísimo con nosotros. El barrio está seguro, siempre decimos con Pablo [Fernández] en varias notas que el barrio es un ejemplo a seguir a nivel colectivo, del colectivo barrial. Transformaron una zona roja, el Mercado Agrícola, que era un nido, un panal de pasta base, en un centro cultural. Una zona que comercialmente tenía cuatro cuadras se ha extendido y va hasta General Flores, hasta Amézaga por Justicia, y avanza y avanza. Sin lugar a dudas eso marca que el barrio está absolutamente seguro.

EC - Entonces la película no es un retrato de Reus; ¿qué es?

EP - La película es un retrato de lo que está pasando en varios barrios de Montevideo.

EC - La cámara aérea que aparece al comienzo y al final de la película, más allá de que por lo visto es además una guiñada a otros clásicos, a otras películas del género, ¿qué quiere decir en ese sentido?

EP - Quiere decir que el espectador va a entrar a vivir una historia en un barrio con sus personajes, los vamos a ver preparándose para un cumpleaños, almorzando antes de ir a un estadio, en charlas cotidianas, jugando al básquetbol, teniendo charlas lúdicas entre ellos. El actor va a ver a estos actores como si estuviera dentro de su casa. Esa fue la idea que tuvimos desde el inicio, mostrar la realidad sin el ojo moral, sino con el ojo realista. "Reus" toca un tema muy real, todos los temas que toca, la inseguridad, el conflicto que hoy estamos viviendo en el tema de defensa propia, la lucha entre los comerciantes y los delincuentes, el ingreso de la pasta base a nuestra sociedad. Tocamos todos esos temas con mucho respeto y con una investigación muy profunda para que a la hora de mostrarlos en la pantalla fueran reales y no dejaran un mensaje moral en absoluto.

EC - Dalila de Punta Carretas dice: "Es durísima pero realista y necesaria hoy en día. La recomiendo".

Otro oyente dice: "Durísima y buenísima".

Amalia de La Blanqueada dice que trabajó muchos años en el barrio de los judíos, que conocía a los Tumanes, "la película me gustó, me parece realista".

¿Qué dicen ustedes? Todos la vieron.

MARCELO CAZZOLLI:
Me quiero conectar con lo que decía al final, esta idea de no tener una mirada moral sobre esta realidad. Es muy difícil esa asepsia, es inevitable. Entonces voy a plantear lo que para mí es el eje central de la película: el destino.

EC - Explicate.

MC - Y el destino lo personifica Mycol. No quiero –porque sería una trampa para la película– hablar de la película y contar detalles.

EC - Sí, más temprano un oyente, cuando anunciamos que íbamos a hablar de "Reus", pedía que por favor no contáramos el argumento.

MC - Simplemente el final demuestra algo que a mí me pasó con la película. Yo salí con el impulso de ir a buscar "La crítica" de Sartre, un libro de los sesenta, en la que Sartre dice que el hombre está condicionado por su entorno, es una evolución que Sartre hace en la crítica materialista.

JUAN ÁNGEL URRUZOLA:
El hombre es un ser social, ya lo decía Marx.

MC - Pero Sartre durante mucho tiempo, en "El ser y la nada" y en "El existencialismo como humanismo", presentaba la idea del hombre libre que estaba dispuesto, a partir de su voluntad, a cambiar su destino. Hay una evolución en Sartre, dice que el hombre está condicionado por su entorno, y en definitiva su destino depende de una serie de variables. La película habla del destino, del destino individual de cada uno y del destino colectivo. Esa es la idea de tragedia griega que tiene esta película, porque es una tragedia griega, y en la tragedia griega el tema del destino es central.

MARTÍN REYES:
Comparto en muchísimos sentidos lo que dice Marcelo, y, salvando las distancias, me viene aquella famosa expresión de [Jorge] Abbondanza con respecto a "El otro señor Klein", que nadie es ajeno a un destino colectivo, en aquella maravillosa escena final cuando Alain Delon no tiene más remedio que seguir en el tren a pesar de tener la libertad en la mano. En ese sentido comparto lo de Marcelo. La película para mí va en tres niveles muy interesantes. Primero son los comerciantes judíos afincados en ese lugar, con sus estructuras sociales que ya los llevaban a trabajar de una determinada manera, a afincarse en un país extraño, con esa maravillosa sinagoga, que yo no sabía que fue la primera que hubo en el Uruguay. Personalmente conozco mucho el barrio, porque mi padre trabajó años en la fábrica Alpargatas y después como profesional mi primer cliente fue un judío de la calle Arenal Grande. Así que lo vi evolucionar de una manera muy peculiar.

EC - Ese es un nivel.

MR - El segundo nivel es el de los muchachos que todavía seguían manteniendo una estructura –en un lenguaje marxista–, con determinados valores, con determinados códigos, y dentro de sus exabruptos y sus excesos todavía mantenían un determinado sentido de la vida, un sentido de respeto, de palabra y de cierta confianza entre ellos.

EC - Estás hablando de los bandos de delincuentes, el Tano.

MR - Exactamente, pero el tercero, que es para mí lo más delicado y lo que está sucediendo, es cuando esas estructuras quedan totalmente desvirtuadas. Tú comentabas hoy, Emiliano, en el informativo, sobre un muchacho que acaba de escapar del INAU, cuyo otro hermano también estaba preso y el padre estaba en el Comcar y la madre en la cárcel de la calle Cabildo. Esa tercera estructura social no tiene argumentos estructurales para mantenerse dentro de una sociedad, y ese destino que dice Marcelo es muy caótico y muy delicado, porque ya no mantienen ese eje que tenían los otros. El padre del muchacho, los hermanos, el tercero ya se desbarranca totalmente y entra en una desidia, en un mundo sin el más mínimo rigor, sin el más mínimo respeto. Lo único que quieren es fumar un porrito más, un pastazo más, algo más, pero no saben para dónde van a ir. En ese sentido la película es excelente, porque nos refleja una realidad muy preocupante.

EC - Juan Ángel, tú que también estás muy vinculado al audiovisual, ¿qué impresión sacaste en primer lugar en general?

JAU - Primera cosa, que es una gran película. Yo trabajé en películas policiales con presupuestos mucho más grandes y que no lograron llegar ni a la mitad de lo que llega esta, porque esta tiene una fuerza en la historia, entonces más allá de lo que vengas, con lo que te puedan haber dicho, la historia te agarra. Cuando una película es buena es cuando la historia te agarra y te mete adentro, entonces empezás a interrelacionarte con la historia que va pasando. Porque la fuerza de esta historia es como un manual de época de lo que nos está pasando como sociedad. Está todo planteado ahí, es una buena película para debatir el tema de sociedad y de la inseguridad, de lo que le está pasando al Uruguay. No plantea soluciones, plantea un montón de problemas, pero los plantea honestamente y bien. En definitiva, ahí tenemos a esos dos personajes que son los preocupados, el Tano y don Elías, los dos están comprometidos desde su mundo con ese barrio, y es superinteresante eso, porque lo vemos al Tano confrontándose con esos otros de su grupo, de su sector social que se han ido perdiendo.

EC - El Tano es el cabecilla de una de las bandas, que se ve desafiado por la otra que se llama "la de los pibes".

MR - Esa es la tercera dimensión, la tercera franja que yo veía. Eran personas que se peleaban entre ellas porque los códigos de esas terceras personas ya se habían perdido, no sabían para dónde iban.

MC - Igual tengo la idea de que estamos frente a una dicotomía.

JAU - No son tres, son dos.

EP - Son dos mundos, se desmenuza todo y se desarma todo, porque a don Elías también se le desarma. Su señora con las pretensiones de Punta del Este y de hacer la fiesta del nene en una sinagoga que no huela a humedad es también un mundo que se está desarmando, y don Elías, que se queda en el barrio y que dice "este barrio me vio nacer" y cuando van a la sinagoga y el pibe dice "pero mirá, mamá, acá está el nombre del abuelo". En definitiva está todo eso. Entonces es aquello de cuenta tu barrio y en realidad contarás el mundo, están los ingredientes de esta sociedad que es el Uruguay, que se nos vino abajo, entonces cuando lo vemos con banda de sonido debajo de cumbia, muchos dirán "pero ese no es mi mundo". Ese es nuestro mundo también.

MC - Yo mencionaba la palabra "destino" porque lo que trasmite esta película, lo que nos da de frente, es esta idea crítica y trágica de la estratificación social, que es el peor mal del Uruguay, esta idea de un nosotros y un ellos compitiendo por el territorio, identificándonos a partir del barrio, y a partir de eso haciéndonos referencias en función del otro. [Émile] Durkheim decía que los grupos sociales en general se autodefinen no solo por una cuestión de territorio, sino en función de que me siento diferente del otro. Y el Tano se siente dueño del barrio y se siente diferente de Elías. ¿Qué sucede con la otra parte, eso que Martín menciona como la tercera dimensión? Simplemente está compitiendo en el mismo estrato con el Tano, con lógicas distintas pero con el mismo lenguaje; se entienden, se hablan de las mismas cosas. Cuando el Tano va a apretar a uno del otro grupo para decirle "salite del barrio", utiliza el lenguaje que el otro entendía. Cuando habla con Elías hablan códigos distintos, hay una dicotomía.

EC - Volvamos a Eduardo, que ha quedado escuchando y en más de un momento tentado por meterse en la conversación. Tuviste una serie de repercusiones, de Marcelo, de Juan Ángel, de Martín. ¿Cómo reaccionas tú?

EP - Los he escuchado atentamente, y no era que quería intervenir, porque lo que están diciendo es maravilloso, porque están haciendo una lectura. Vos cuando trabajás seis años en un proyecto, entregás tanta energía, tantas horas hombre de trabajo, tanta fuerza como la que hemos entregado con Pablo... Quiero hacer un impasse respecto a lo que tú decías en cuanto a que has trabajado en otras producciones con mucho mayor presupuesto.

EC - ¿Cuál fue el presupuesto de esta?

EP - El presupuesto de esta ha sido de 300.000 dólares. Quiero destacar el trabajo de Pablo Fernández, que realmente ha hecho un trabajo maravilloso del lado de la producción. Nosotros somos tres, si bien escribimos los tres el guion, a la hora de llegar al rodaje nos separamos y nos encargamos cada uno de un área, yo de la parte de actores, Alejandro Pi de la parte de dirección de cámara y Pablo de la parte de producción, y realmente ha hecho un trabajo maravilloso. No es fácil producir una película, y no solamente producir, sino una cosa muy importante: estar al día: con 25 actores, con un equipo técnico de gran número. Quería destacar esto porque es muy importante, porque a mí me emociona, por momentos me sentí muy emocionado por los comentarios de cuatro personas que más allá  de si son críticos o no tienen un gusto especial por el cine, y cómo han leído los diferentes puntos que tiene "Reus", que son varias puntas. "Reus" no solamente trata el tema del conflicto entre el Tano y don Elías, entre un delincuente con viejos códigos y un comerciante también con sus códigos. Porque don Elías tiene sus códigos, quiere ir a hacer la Bat Mitzvá de su hijo al barrio por más que ya no viva ahí, tiene sus raíces ahí.

JAU - Yo llevé a mis dos hijos ayer, debo reconocer que tuve que insistir, pelear y empujarlos prácticamente, y a uno lo llevé de prepo porque el club estaba cerrado.

EC - ¿Qué edades tienen?

JAU - Tienen 14 y 19. Julia de 19 ya se había ofrecido porque había sentido algo. Y salieron impactados, Julia dijo "está zarpada esta película". Y es que para ellos está zarpada. Y después seguimos hablando de esas cosas, y una gran película ofrece lecturas superpuestas y muchas para que cada uno se agarre de lo que puede. Ese es el arte de una gran película, tú entrás por diferentes puntas.

EP - Está "zarpada", y está "la propia", y está "rica", es lo que dicen los adolescentes de la película, que a nosotros nos enorgullece muchísimo porque fue hecha para el público.

***

EC - Han llegado varios mensajes de los oyentes. Elijo este de Martín: "La película falla porque el espectador no se encariña con nadie".

***

EC - Eduardo, tú eres el autor de la idea original. Al principio esto iba a ser un libro, ¿no?

EP - Sí, yo estaba viviendo en Brasil, la idea era escribir un libro sobre algunas cosas que yo había vivido en mi infancia en el barrio que creía que merecían que escribiera un libro. El libro iba por el lado de la ficción también, no era un retrato de algún hecho real. Cuando estaba en Brasil, Pablo, que es un amigo de mucho tiempo, me visita, estábamos charlando y le comento la idea, él ya estaba estudiando cine, es un cinéfilo de alma, y me comenta inmediatamente: "Eso está bueno para mostrarlo, más que para leerlo". Y ahí nos embarcamos.

EC - Subrayo una frase que dijiste al pasar: ibas a escribir ese libro a propósito de tu experiencia, de tu infancia en ese barrio. Tú venís de ahí, del barrio Reus.

EP - Sí, me crié ahí, en Domingo Aramburu y Guaviyú, frente a la vieja cigarrería Martín, que unos cuantos oyentes deben de recordar.

EC - Esa precisión es importante, porque embarcarse en principio en una película situada en el barrio Reus implicaba correr una serie de riesgos, desde equivocarse en el lenguaje, las historias, las tradiciones, y claro, todo eso en principio queda cubierto porque el punto de partida es que el punto de vista es el de alguien que lo conoce muy de dentro.

EP - Pero no solamente eso, ya hace cinco o seis años que estoy viviendo en Palermo, pero cuando obtuvimos el último fondo con la primera ley de fomento al cine, que definitivamente pudimos tener los recursos para largarnos a filmar la película, volví al barrio, estuve casi dos años.

EC - Te instalaste de nuevo.

EP - Me instalé de nuevo, porque quería ver detalles, cómo se vestían... Cuando empezamos a escribir no se acostumbraba jugar al fútbol en la calle o estar charlando en la calle tomando una cerveza o simplemente charlando una banda de amigos con el celular con la cumbia al mango, como dicen los gurises. Esos pequeños detalles, si se tiñen el pelo, el corte de pelo, cómo se visten, qué léxico tienen, indudablemente nos ayudaron a enriquecer a la hora de filmar ese guion que ya estaba maravilloso.

EC - ¿Qué le respondés al oyente que decía que "la película falla porque el espectador no se encariña con nadie"? Yo podría agregar: ninguno de los personajes sale bien parado: los delincuentes no salen bien parados, ni el Tano y su banda, ni la banda de los pibes, no salen bien parados los comerciantes, y tampoco sale bien parada la policía. ¿Entonces?

EP - Justamente, si salgo del traje de realizador y me voy a espectador, el único personaje con el que podríamos llegar a encariñarnos, por su inocencia y porque no tiene mucha chance de poder cambiar la historia, es Mykol. Pero es difícil que cualquier persona de bien, cualquier trabajador, cualquier comerciante de bien, cualquier policía de bien se encariñe con los personajes de "Reus", porque ninguno de ellos es trigo limpio.

EC - Javier del Buceo discute al que mandó el mensaje, dice: "Encariñarse con un personaje es una lectura demasiado hollywoodiana".

EP - Javier, te adelantaste a lo que iba a decir. Es difícil encariñarse con uno de esos personajes, pero igualmente tenemos espectadores que se han encariñado con el Tano, y por qué mataste al Tano, y odian a Elías. Es tan amplio, por suerte, el espectro de opinión que ha generado "Reus"... Nosotros estamos trabajando en la calle.

EC - Siguen trabajando en la calle ahora.

EP - Ayer estuvimos en el Prado, esta noche vamos a estar en el partido de Nacional, antes del estreno entregábamos unos flyers, unas postales de regalo; ahora por suerte estamos entregando folletos en los que dice que la película es el éxito del momento con más de 20.000 espectadores, "sumate a la movida".

EC - Trabajan en las calles promocionando la película.

EP - Pablo y yo. Es increíble cómo la gente nos reconoce y nos pide fotos. Estamos en la cuarta semana y estamos muy cansados, pero esa retroalimentación que tenemos del público, que la vi, está zarpada, está riquísima, está la propia, está buenísima, la gente mayor en el estadio se da vuelta y nos da para adelante, en el Reus móvil que tenemos todo afichado nos tocan bocina. Es realmente indescriptible.

Quiero hacer un parate en este punto para agradecerle al público y agradecerles también a ustedes, a los medios, la difusión que nos han dado. Pero al público por el cariño que le ha tomado a la película, porque más allá del gusto cinematográfico de cada uno, todos coinciden en que esta película tiene un gran respeto y un gran trabajo atrás. Y cuando el uruguayo ve que hay alguien que se esforzó, que se rompió el c... y que metió mucho h... durante todo este tiempo para lograr este producto, gracias a Dios lo reconoce. Entonces quiero agradecerles a todos los que han ido, a todos los que nos dicen que van a ir, porque "Reus", más allá de los gustos cinematográficos, está en la calle, hay que verla.

EC - Inspirándonos en ese aviso de televisión que tantos comentarios ha recogido, agrego yo: cortemos con tanta dulzura. Vamos a ponerle unos puntos suspensivos a tanto elogio y tanto caramelo. Para eso me apoyo en una oyente, Alicia, que manda este mensaje: "No vi la película porque me pareció muy mala la promoción que hicieron pintando toda la ciudad, aun los monumentos públicos. Rosario Castellanos lo hizo notar hace un tiempo".

¿Cómo fue eso? Porque, efectivamente, esa fue una nota aquí hace unas semanas, el fastidio de Rosario –compartido por nosotros– por el hecho de que en esa promoción no tradicional que se estaba haciendo de la película se llegara a los grafiti en monumentos públicos. ¿No se arrepienten de eso? ¿Van a limpiar los momentos?

EP - Te cuento lo que pasó. Parte de la campaña era hacer unos esténciles, uno que dice "Reus, un barrio, dos familias, tres códigos", que básicamente estamos aplicando en muros, en lugares donde ya existían pintadas. El tema fue que en la película hubo un montón de gente involucrada, y mucha gente agarró, como hincha de la película, y en vez de pedirnos el esténcil y consultarnos salió por sus propios medios en diferentes barrios a grafitear "Reus, la película". Pedimos disculpas, no fue nuestra intención. Ojo, no nos estamos lavando las manos; te digo más, estamos recorriendo los puntos donde estos chicos se zarparon con los grafiti y los vamos a limpiar. No era la idea grafitear, mucho menos monumentos públicos, para nada, pero fue como una bola de nieve, una expectativa tan grande, de tantos años... Toda esta gente que involucramos cuando vio que la película estaba por salir se dejó llevar por la emoción. A la señora le pedimos disculpas y lo vamos a corregir.

EC - "¿Cuándo sale la película en el interior?", preguntan los oyentes.

***

EC - Hay varias preguntas y comentarios.

MC - Primero, destacar un elemento de la película que me parece interesante, un detalle que seguramente Martín, que es muy observador de estas cosas, ha apreciado. Tiene que ver con el sillón, ese sillón que aparece en la puerta de la casa de Esmeralda y el Tano, donde se produce una serie de diálogos y situaciones.

EC - Un sillón en la vereda.

MC - Un sillón en la vereda, que en todo caso no es ningún mobiliario urbano, ellos lo instalan ahí como mobiliario urbano en esta idea de apoderarse del territorio, que está muy presente en la película permanentemente. Tiene que ver con cómo el espacio público para determinados sectores de la sociedad se transformó en su hábitat. Y lo otro es la idea de inframundo. Hay una idea permanente de inframundo, por eso yo manejaba la idea de la tragedia griega, porque si ustedes notan dónde se meten estos señores para escaparse, en laberintos, en una cosa por allá abajo.

EC - Es espeluznante esa red de laberintos en esas casas abandonados, semidestruidas. ¿Esos laberintos son reales o los armaron para la película?

EP - Son reales.

MC - Y está el inframundo arriba, que tiene un rol central en la figura del Tano, porque el Tano mira de arriba su realidad. Esto tiene que ver con la estratificación en la interna, por eso puede haber una confusión de la tercera dimensión. Cuando ellos van al boliche a bailar entran sin pasar por la cola, y sus amigos también. Ahí se empieza a notar el concepto de estratificación en la interna de un grupo.

EC - Además se instalan en una especie de vip.

MC - Se instalan en una parte de vip. Y el sillón para mí escenifica la invasión del espacio público por estos sectores.

EP - Totalmente de acuerdo, y no solamente se da en el sillón. Lo mismo que tú mencionás del sillón en la banda del Tano se da al inicio de la película cuando vemos a los personajes en la plaza estación Goes, los ves sentados en la calle y parece que estuvieran en el comedor de su casa. Viene uno y tira la remera como quien llega y tira la campera arriba de la cama, él la deja arriba del cantero. Es muy cierto eso.

EC - Martín, ¿te sentiste tocado por lo que planteaba recién Marcelo, o vas por otro lado?

EP - Complementando eso, lo que me sorprendió, y lo hago extensivo a todo el cine uruguayo actual, es que uno antes iba a ver una película uruguaya e iba con cierto temor, por problemas de sonido, por problemas de edición, por problemas de la reconstrucción de lo que se estaba siguiendo, por las actuaciones que eran demasiado teatrales. Y lo que acaba de decir acá el amigo, el estudio que hizo sobre el barrio, esto complementa esta nueva manera de hacer cine del Uruguay, estudió el barrio, que era su barrio, pero lo estudiaste, lo viviste. Todo ese extramuros como decía recién Marcelo, existe, esas casas abandonadas, esa plaza que queda allá arriba en Arenal Grande, ese Mercado Modelo [N de R: debió decir Mercado Agrícola] donde tantos asados comí en mi vida y uno lo ve con dolor abandonado, esa enorme estructura de la fábrica de Alpargatas donde trabajaban 1.000 obreros y había una sociedad horizontal. No me tomes demasiado en serio lo de la tercera dimensión, pero hay algo de eso, esa segunda dimensión que yo digo tenía códigos y autoridad para entrar a los lugares, e iba al salón vip. Dentro de ellos mismos se crea una verticalidad cuando antes era una sociedad completamente horizontal.

MC - Es cierto eso.

MR - Por eso más que con Elías, el Tano tiene más dolor con lo que le está pasando dentro de su propia familia. El otro en cierto sentido era un amigo, pero él ve el deterioro dentro de su lugar, y por eso la mujer lo trata con el desprecio con que lo trata en muchos sentidos, y por eso el Tano tiene vergüenza de ir a ver a su mujer, que es una forma de evitar también al hijo. Todo eso lamentablemente lo estamos viendo en ese comentario que yo hice hoy al azar sobre el muchacho del INAU, qué destino puede tener ese muchacho si los dos padres están presos, el otro hermano, qué destino, qué tragedia griega.

MC - Dejame conectarme con eso, Martín. Yo le decía hoy a Eduardo que esta película tiene una lectura muy secular de la realidad, porque no apela a cosas a las que podría haber apelado muy fácilmente, por ejemplo la providencia. En algún momento al final pudo haber rezado cuando lo estaban buscando, y no rezó en ningún momento. Ellos no se sienten predeterminados, en esto recurro mucho a Calvino, que creía que el destino estaba predeterminado.

MR - Yo creo que no, sigo siendo un católico, apostólico, romano, y esta es mi Semana Santa, creo en la libertad del hombre todavía.

EC - ¿Quién dijo al pasar Mercado Modelo?

MR - Yo.

EC - No es, es el Mercado Agrícola, desde la audiencia te corrigen.

MR - Es correcto, ese divino inmueble que hay.

EC - Otro oyente aporta, a propósito de lo que decía Marcelo: "En mi barrio, en el Cordón, hay un sillón en la calle, concretamente en Arenal Grande".

Otro dice: "Orgulloso de haber trabajado en ‘Reus’. Abrazo a Edu y a todos". Firma Walter Etchandy, uno de los actores profesionales de la película.

MR - También está el doctor Jorovic por ahí, lo vi.

EP - Está el doctor Roberto Jorovic.

EC - Lo sacaste de un casting.

EP - Lo saqué de un casting. Roberto cayó en el casting, es un señor de 80 años que justo había perdido a su esposa hacía muy poco tiempo y dice que "Reus" le devolvió la vida. Y la verdad es que más allá de todo lo que podemos decir, cuando tenés ese tipo de casos, como actores vas a la casa y se compraron semejante heladera y semejante lavarropa con "Reus", también es un plus, es una gratificación enorme. Un saludo muy caluroso y apretado al querido Walter.

EC - El otro actor que mencionabas recién, en este caso improvisado, el doctor Jorovic, terminó siendo un asesor importante también para ustedes.

EP - Por supuesto, fue elegido además por eso, más allá de su physique du rol, que iba de la mano de ese relojero afincado en el barrio desde sus raíces que era don Jaime. Nos sirvió muchísimo para empapar a muchos de sus colegas, a los que iban a hacer de comerciantes, de cómo era el barrio, de cómo son los comerciantes de la colectividad, un montón de cosas.

MC - Estamos demasiado concentrados en el bando del Tano, y hoy Juan Ángel decía algo que me parece bien importante, ponía el foco en la familia en Pocitos. Para mí la clave del destino nacional del Uruguay como país está en que esa sociedad que está sobre la costa mire a esa otra, mire, integre, asuma el rol de integrar. Yo acabo de escribir un artículo para la revista Contraviento en el que hablo de esto, la democracia es una experiencia de vida, más allá de un régimen de representación. Y esa experiencia de vida tiene que implicar que los hombres sean libres, y la experiencia democrática los hace libres, pero los hace libres en la medida en que logremos emanciparlos espiritualmente. El Tano es un hombre atado por su destino.

JAU - Seguramente hay gente que rechaza esta película, porque recrea un mundo que muchos en el Uruguay tal vez no quieran ver. Y es saludable que nos pongamos a verlo como sociedad, porque es un retrato de ese otro Uruguay, y el Uruguay no se salva si no rompemos esa separación, esa ruptura, y si no vemos cómo hablan, cómo escuchan música, cómo viven.

EC - Yo la vi el sábado de noche en el Casablanca, 21 de Setiembre y Ellauri, y era muy interesante el contraste entre el público –incluyéndome a mí, por supuesto, la platea estaba prácticamente llena de público de Pocitos, Punta Carretas– y lo que estaban mostrando en la pantalla, que era otro Montevideo con el cual lo separa un abismo, pero que está muy cerca por otro lado; ¿a cuántos kilómetros de esa sala?

MC - A cuántas cuadras, te diría yo.

EC - Cinco minutos en auto.

JAU - Socialmente ellos están ahí, están acomodando coches, están pidiéndote una moneda a la salida del cine, está todo ese mundo. Ese es uno de los grandes problemas. Capaz que por eso los jóvenes están más abiertos y más interesados, porque los jóvenes se cruzan mucho, todo el tema de las confrontaciones, los robos en la calle. Ellos quieren saber qué pasa, por qué esos otros jóvenes que son más o menos de la misma edad los roban, los asaltan. Ese es uno de los problemas graves de nuestro país, y esta película aporta en eso, aporta mucho más al debate sobre la delincuencia y sobre la inseguridad porque nos pone a reflexionar. Tampoco hay que idealizar sobre la importancia de una película, porque cuando Handler hizo "Aparte" pensé que iba a mover mucho más a reflexión de lo que terminó haciendo, fue una película muy vista, que generaba situaciones como la que contaba Emiliano en el cine, porque era ese mundo también, en una lectura documental, pero veíamos eso.

EP - Tuvo mucho público también.

MC - Emiliano acaba de hacerle una entrevista a Mario Vargas Llosa, y Vargas Llosa hablaba un poco de esa desilusión con respecto al papel del arte y la literatura. También del cine, durante mucho tiempo creímos que el cine era un elemento discursivo que construía un relato que podía a partir de eso mejorar la sociedad. Ciertamente, en una sociedad del espectáculo, donde el cine forma parte de la oferta muy variada y la televisión juega un rol importante, evidentemente ha disminuido su nivel de influencia. Pero igual creo que es importante generar espacios de reflexión a partir del arte en los que todos como sociedad podamos empezar a reconocernos, reconocer que esta es nuestra realidad, que nuestra realidad no es lo que vivimos cotidianamente, que hay un más allá de nuestra vida diario que viven otros. Eso es lo importante, hay otros seres humanos.

JAU - En ese aspecto creo que lo importante es la televisión, ahí podría cumplir un rol. Él mencionó a Caetano, Caetano hizo producciones superinteresantes en las que trasladaba eso. Y tenemos ahora la situación en Brasil, donde hay una comedia que se mete con la época de la dictadura, con el tema de los desaparecidos, y los clubes de retirados de las Fuerzas Armadas ya pidieron la censura de esa comedia, no quieren que salga al aire, y es una de las comedias que tienen mayor audiencia. Yo creo que le hace bien, creo en ese rol del arte, sigo creyendo. Es verdad que está en retirada, pero es importante porque nos aporta como sociedad.

EP - Es cierto que en nuestra sociedad todavía hay un colectivo importante que no quiere ver, que prefiere seguir viendo hacia el mar y no ver lo que pasa a espaldas de la ciudad. Y no me refiero concretamente a esa franja enorme de personas que viven en la costa. "Reus" toca temas de nuestra sociedad que están pasando en la gran mayoría de los barrios.

EC - Marcelo, tú querías hablar de la música.

MC - No es una música que consumo, pero la banda de sonido es excelente. Porque una banda de sonido lo primero que tiene que tener es el tempo de la película, el tempo del ritmo de la película. Y lo tiene, lo maneja, y además refleja el consumo cultural que ellos tienen, que yo valoro mucho desde el punto de vista artístico; no lo consumo, simplemente no hago ningún juicio de valor sobre la cumbia, que creo que es muy buena en algunos casos.

EP - Hay cumbia y está también La Teja Pride, hay de todo.

MC - Y lo otro es que uno puede reconocer ese sonido, ese sonido no nos es ajeno, tampoco nos resulta ajeno.

EP - Está bueno lo que decís con respecto a la música, porque más allá de que te guste o no la cumbia, acá vamos al casamiento, al cumpleaños de 15 de Carrasco, de Pocitos, de Punta Gorda, y está. Y acá quiero hacer un parate muy importante: la cumbia en este país –no lo digo yo, lo dice la Cámara del Disco– vende en discos legales un 70 % del mercado, y no este año, desde hace más de 10 años. Y ha sido relegada, al punto tal de que hoy la música popular uruguaya no incluye a toda esta banda de artistas, porque son artistas, que hace años que la están peleando. El problema es que viven en el Marconi, muchos de ellos viven en asentamientos, en el Cerro, y los tenemos discriminados. Hay que cortarla con eso.

EC - Varios oyentes preguntan si se va a exhibir en el interior.

EP - Por supuesto, es una estrategia que usamos. Desde el inicio, desde su raíz, fue pensada para el público, no tenemos ningún reparo, ningún miedo en decir que es una película comercial; no es una película de autor, es una película de producción. Sí vamos a ir al interior, con muchísimo gusto, pero no le queremos faltar el respeto a la gente del interior. Acá en Montevideo hemos hecho una campaña en la calle Pablo y yo, y queremos hacer lo mismo en el interior, no queremos mandar un DVD, porque ahora está funcionando bien y viene Semana de Turismo, y va mucha gente para Paysandú, mucha gente para Salto, entonces mandar un DVD y que se exhiba la película. Es nuestro hijo, lo cuidamos, y vamos a ir al interior con nuestro hijo debajo del brazo a darle al público del interior el mismo respeto, el mismo trato y la misma energía que le hemos dado al público de acá.

***

Transcripción: María Lila Ltaif