La leyenda del jazz estadounidense y la reina británica del soul grabaron en marzo una versión del clásico "Body and Soul" en los legendarios estudios de Abbey Road en Londres.

Es una de las últimas grabaciones de Winehouse, que apareció muerta en su apartamento londinense el pasado 23 de julio a los 27 años.

La canción debía figurar en principio en el próximo álbum de Tony Bennet, "Dúos II", pero será vendida en forma de "single" a partir del 20 de setiembre.

"Lo que vamos a hacer es sacarla (la canción "Body and Soul") del álbum", declaró Bennet al canal de televisión MTV, precisando que los derechos de la misma serán entregados a la fundación que el padre de Amy, Mitch Winehouse, va a crear para ayudar a las personas dependientes del alcohol y de las drogas.

En un comunicado, Mitch Winehouse confesó este jueves que no podía sentirse "más feliz". "Amy estaba entusiasmada por haber trabajado con Tony Bennett y estaba impaciente por que sus fans escuchasen esa nueva grabación", agregó.

"El hecho de que la voz de Amy sea más bella que nunca y el hecho de que cantase con el gran Tony Bennett parecen el homenaje más apropiado en este periodo tan difícil", según el padre de la artista fallecida.