Cambios en gestión del Auditorio Nacional Adela Reta buscan convertirlo en "un lugar de desarrollo" para artistas y ciudadanos
El Auditorio Nacional Adela Reta del Sodre entró en noviembre en una nueva etapa cuando se designó a Gerardo Grieco como su director general. La sala de espectáculos, encaminada a un modelo gestión profesional e integral, hizo en los últimos días una serie de anuncios para su temporada 2013, como el retorno al sistema de abonos y la implementación de charlas previas a las funciones de determinados espectáculos. Entrevistado por En Perspectiva, Grieco explicó que la búsqueda de un "modelo económico sostenible" tiene que mantenerse en equilibrio con la calidad de los contenidos, la excelencia de los servicios y la atención a las relaciones humanas. "Deseamos encontrar un punto de equilibrio tal que los próximos gobiernos, sean del color que sean, vivan este gasto como una inversión", dijo, y destacó la necesidad de generar una organización que le de al auditorio "una economía más sana para los tiempos que corren" por medio de un modelo "con una fuerte relación público-privado".
(emitido a las 8.57 Hs.)
EMILIANO COTELO:
Gerardo Grieco, el nuevo director general del Auditorio Nacional Adela Reta, se ha planteado un objetivo ambicioso. Aludiendo a lo que durante décadas significó, en esa misma esquina de Mercedes y Andes, el viejo Estudio Auditorio del Sodre, Grieco dijo que se propone "crear una nueva edad dorada", aunque "no como nostalgia del pasado, sino como símbolo del futuro".
En los tres años de vida que tiene ya este complejo de salas, quedó claro el salto cultural impresionante que implica. Ahora, por lo visto, llega el momento de implementar un sistema de gestión profesional e integral. Para eso se creó el cargo de director general, y en noviembre del año pasado se designó a Grieco, quien venía de dirigir el Teatro Solís y antes había sido el responsable de la puesta en marcha de la Sala Zitarrosa.
Las primeras pistas del nuevo rumbo se han ido confirmando en los últimos días con una serie de anuncios que tienen que ver con la temporada 2013. Sobre eso vamos a profundizar en entrevista con Gerardo Grieco, director general del Auditorio Nacional Adela Reta del Sodre.
Usted dirigió, y con éxito, el lanzamiento de dos salas pertenecientes a la Intendencia de Montevideo: en el año 2000 la Sala Zitarrosa, totalmente nueva, y a partir de 2004, el Teatro Solís, cuando se reinauguró después de la reforma. Ahora se pone al frente del nuevo Auditorio Nacional Adela Reta, que pertenece al Sodre, al Gobierno nacional, y que está casi empezando. Concretamente, ¿cuál es el modelo de gestión que se piensa implementar?
GERARDO GRIECO:
Gracias por la presentación. Tiene un fundamento para mí en cuatro aspectos centrales, que hemos ido conversando a lo largo del año pasado con el consejo directivo del Sodre y con el Gobierno, que son cuatro patas de una mesa: contenidos de calidad, servicios excelentes, un modelo económico sostenible para el país y para los futuros gobiernos, sean del color que sean, y las relaciones humanas. Una organización se trata de relaciones humanas, y especialmente cuando hablamos de un centro cultural y de un teatro de ópera, de ballet, de conciertos, estamos hablando de personas. El alma de todo teatro grande, chico, el que sea, la imprimen las personas que allí habitan y trabajan. A veces, acá sobre todo, les damos demasiada trascendencia a los ladrillos, al espacio físico, a la cosa más muerta, y en realidad eso no tiene sentido si no hay una organización de personas que le dan contenido y sentido.
EC - Es cierto, pero también es verdad que esta estructura en particular faltaba en el Uruguay, era un agujero demasiado grande, y agujero en términos literales, teniendo en cuenta lo que fue el incendio del auditorio, etcétera.
GG - Exacto, viene de esa época. Esto es un proceso, hay que verlo en esa perspectiva, el Estudio Auditorio se incendió una mañana fría de setiembre del 71, los uruguayos siempre demoramos un poquito de más en reaccionar ante algunas cosas, y hemos pasado demasiadas décadas manteniendo el Sodre con su organización, con sus elencos, pero sin la infraestructura básica para poder desarrollar el sentido de esos elencos y del servicio que tienen que prestar.
EC - De todos modos, conviene puntualizar que el Auditorio Nacional Adela Reta, con sus dos salas, la grande, la Fabini, y la otra, la Balzo, es la base de operaciones de los elencos estables del Sodre, pero es mucho más también, recibe y piensa recibir, otro tipo de espectáculos. Por eso me interesa especialmente uno de los cuatro pilares que mencionó, el modelo económico. Usted decía un modelo económico sustentable; ¿qué quiere decir eso?
GG - Todos los teatros de ópera, ballet, concierto y de gran porte como este en el mundo son deficitarios, son estructuras que los países y las sociedades se dan para su bienestar. El cometido de una orquesta sinfónica o de un coro y un ballet es puramente cultural, y las sociedades se dan diferentes sistemas para sostenerlos económicamente. Una orquesta sinfónica en cualquier parte del mundo son siempre 96 u 80 y pico de músicos a los que obviamente la venta de entradas no les paga los salarios.
EC - Es buena esa puntualización: eso ocurre con todos los teatros de este tipo en el mundo.
GG - Aquí, en China y en Manhattan, cada sociedad tiene un sistema diferente.
EC - La pregunta a continuación es: si un auditorio como este va a ser en principio deficitario, ¿quién paga? Porque nadie discute la importancia de lo que deja desde el punto de vista cultural al país, y lo que deja incluso desde el punto de vista económico, porque el Adela Reta mueve la zona cercana, restaurantes, bares, hoteles. El asunto es quién pone la plata que se necesita para terminar de cerrar las cuentas. ¿La pone el Estado?, ¿la pone el Estado en combinación con privados? ¿Cuál es el modelo que se piensa seguir en ese sentido?
GG - Venimos de una tradición del siglo XX en la que el dinero siempre lo ponía el Estado, y lo ponía a fondo perdido, no se miraban casi nunca los ingresos, era casi una mala palabra, era como decir "ah, ¿cómo la cultura se va a meter con la plata y con los propios ingresos?". Desde finales de los 90, principios de este siglo, venimos mestizando el modelo económico, por decirlo propiamente. Por varios motivos. Uno de ellos es que el espectáculo y las artes escénicas son cada vez más caros, exponencialmente más caros, es la única área en que la tecnología no hace que sea más barato, es al revés, cada vez tenemos más exigencias tecnológicas, nos acostumbramos a estándares de calidad en todos los servicios del espectáculo, en iluminación, en sonido, en lo que sea, y eso hace que también vaya mutando el modelo. Hasta fines del siglo XX en toda América Latina era muy a fondo perdido, pedirles más dinero a los ministros de Economía, y con ese dinero contratar a los artistas que la dirección artística opinaba.
EC - Está claro que no va a ser ese el sistema en este caso.
GG - No. Deseamos encontrar un punto de equilibrio tal que el sistema político y los próximos gobiernos repito, del color que sean vivan este gasto o esta parte presupuestal del auditorio o del Sodre como una inversión, con alegría, por el valor añadido que les da. Y a su vez generar una organización con metas de ingresos y búsquedas de relación con empresas y con ingresos genuinos de venta de entradas o de productos propios del auditorio que le den una economía más sana para los tiempos que corren y que nos permita desarrollarnos con el tamaño que tenemos de país y de manera inteligente. Ese es el gran desafío. Esto tiene que ir en equilibrio con los otros tres aspectos, porque si se pone por delante lo económico y se olvida a las personas o se olvidan los servicios que hay que prestar o los contenidos de calidad que hay que poner dentro, es un pecado igual de grave que la omisión.
EC - ¿Cómo va a ser el refuerzo del presupuesto original del Estado? ¿De qué manera?, ¿en qué fórmula se está pensando? Usted decía que todos los teatros de este tipo en el mundo requieren subsidio, y buena parte de ellos reciben subsidio privado. Tengo acá, por ejemplo, el programa de la Ópera de la Bastilla de París de la semana pasada, cuando fui a ver un espectáculo allí, la ópera Falstaff de Verdi, y el programa detalla con mucho cuidado quiénes son los sponsors y los mecenas. Hay toda una serie de categorías para definir a las instituciones, empresas y personas que ponen el dinero que termina haciendo viable cada uno de esos espectáculos.
GG - Es verdad. Es un ejemplo fantástico, porque fijate que el modelo francés era el que más subsidiaba con el presupuesto público.
EC - Sí, la Ópera de la Bastilla fue impulsada por el Gobierno francés con François Mitterrand al frente; recordemos que es la ópera cuyo proyecto terminó siendo el del arquitecto uruguayo Carlos Ott. Sin embargo, el presupuesto en buena medida viene de fuera del Estado.
GG - Sí; no conozco exactamente cuánto en la Bastilla, pero es verdad, y es el modelo que vamos a impulsar en el Auditorio Nacional Adela Reta, con una relación público-privado fuerte, en el que el aporte de personas y de empresas se vaya equilibrando con las necesidades del auditorio. Por suerte en Uruguay ahora están los Fondos de Incentivo, que han ido lentamente acostumbrándonos a una relación público-privado en el sector de cultura que me parece además muy simbólica y muy importante para el país propiamente. Lo que tiene que ver con cultura es una responsabilidad de todos, en el amplio sentido y también en el sentido artístico de espectáculos.
EC - Para empezar, ¿con qué base se arranca? ¿Cuál es el presupuesto propio del Auditorio Nacional Adela Reta en el organigrama del Sodre?
GG - Este gobierno ha tenido un apoyo decidido al Sodre, el Sodre fue inaugurado hace apenas tres años, en el gobierno anterior. Tabaré Vázquez decidió impulsar la reinauguración del auditorio y también del Palacio de Justicia, dos símbolos importantes para el país. Yo nací con el Palacio de Justicia como símbolo de la obra pública inconclusa en Uruguay, que no se terminaba nunca nada, y el Sodre fue el gran constructor, el instituto cultural del Uruguay del siglo XX, en los años 40, 50, 60. Veníamos de unas largas discusiones, te acordarás, acá mismo en estos micrófonos decían "no hace falta hacer el Sodre".
EC - Hay quienes tienen esa opinión.
GG - Decían que no hacía falta, ¿para qué vamos a hacer el Sodre, si ya está el Solís? Hoy queda demostrada la valía de nuestro sistema cultural y lo importante que es para un país pequeño como el nuestro, para la posición incluso que vamos a ocupar en la región. Este gobierno recibió el Auditorio Adela Reta, este consejo directivo vacío, y lo primero que hizo fue incorporar a Julio Bocca al frente del ballet, llevó a los elencos, a la orquesta, al coro, al conjunto de cámara, y empezó a buscarle sentido y contenidos al auditorio. Y ahora estamos con el apoyo del gobierno, estamos en esta etapa de poner en marcha este modelo de gestión sobre la base de visualizar ese proceso, sobre la base del presupuesto existente.
EC - ¿De cuánto es?
GG - No lo me lo acuerdo, pero seguro está en la web.
EC - ¿Qué implica el desafío de ir en busca del apoyo privado también? ¿Duplicar ese presupuesto, triplicarlo?
GG - No quiero dar una cifra, porque estamos en esa construcción. Entiendo y pido disculpas, pero me parece que sería irresponsable de mi parte decir duplicar o triplicar, cuando en realidad estamos buscando el equilibrio entre esos cuatro aspectos que para mí son centrales. Tenemos una cierta urgencia en encontrar ese equilibrio, tiene que ser en este año, tenemos que terminar el año con una organización y un equipo bien definidos y estabilizados.
EC - Ya que mencionó al pasar esa objeción, esa crítica, ¿efectivamente Montevideo y Uruguay tienen espacio para dos teatros, el Solís y el complejo del Sodre, donde por ejemplo hay orquestas sinfónicas y donde se llegan a desarrollar óperas, dos teatros en los que haya espectáculos de ópera?
GG - Creo que hay espacio para los dos teatros y mucho más. A veces no visualizamos el acervo cultural y lo que significa para el país, somos un país musical, podríamos ser exportadores de cultura con un número importante en la economía del Uruguay. Somos un país que tiene una densidad de músicos, de artes escénicas, de escritores que le dan un valor y una posición como país que hace a los números, a los sueldos, a la economía y a cómo vivimos. Hay lugar para los dos teatros de sobra, tenemos que encontrar cómo nos organizamos.
Omitiste el sector privado del espectáculo y el entretenimiento, que tiene que desarrollarse a la par. Seguramente no es un país para hacer dos teatros de ópera y dos organizaciones que producen ópera o dos ballets, pero sí hay lugar para un ballet importante, grande, de destaque internacional, que ocupe los primeros lugares en América Latina o el primero, y hay lugar para otras expresiones de danza, de danza contemporánea y de escuela y demás. Hay densidad para eso, y eso tiene un valor añadido para el país que se puede medir económicamente, no hay estudios todavía, pero seguramente los vamos a tener. Sobre todo nos ponen en una posición de país destacado.
EC - Hablando de la posición en la que nos pongan como país, ¿está previsto en ese modelo de gestión la captación de turismo cultural?
GG - Sí.
EC - ¿Es decir, que una parte del movimiento de estas salas provenga de visitantes de otros países, por ejemplo aficionados a la ópera, que es todo un tipo de público, o aficionados al ballet, de Argentina, de Chile y de más lejos incluso?
GG - Sí; incluso ya sucede hoy, y tiene una potencialidad muy grande.
EC - No dudo de que sucede, pero en buena parte del mundo, en los centros importantes a los que todos aludimos cuando hablamos de este tipo de salas, el turismo cultural los nutre de buena parte de sus ingresos. Pasa en París, en Nueva York, en Buenos Aires, sin ir más lejos. ¿Está pensado trabajar esto de manera especial y fuerte?
GG - Sí. De hecho, ya estamos conversando con algunas empresas, agencias, con el propio Ministerio de Turismo para con algunas acciones organizar más y potenciar más el turismo cultural, que para mí es muy importante y que hace una diferencia grande con el de sol y playas o el de estación, porque es todo el año. De hecho, hay una lógica; para el desplazamiento de turismo interno y de turismo regional e internacional este tipo de infraestructuras son determinantes. Uno no iría a determinadas ciudades si no existieran allí museos emblemáticos y teatros emblemáticos, que son la excusa o el ancla que hace que uno se desplace hasta allí. Montevideo y Uruguay tienen la obligación de desarrollar políticas de turismo en su infraestructura cultural, y en esto el Solís y el Sodre son dos de las infraestructuras más emblemáticas, aunque no las únicas. Todo esto también es un sistema de políticas que tiene que ir poniéndose a la altura.
EC - Son conceptos todavía poco transitados en Uruguay, a los que cuesta acostumbrarse. Pensar que un chileno interesado en la ópera venga al Auditorio Nacional Adela Reta y de esa manera no solamente contribuya a financiar el presupuesto del Adela Reta, sino que además pague hotel, vaya a restaurantes, haga paseos, es decir que una ópera representada en Montevideo genere ese otro tipo de facturación para el país, en muchas cabezas de uruguayos todavía no existe.
GG - No, y es un dato importante, estoy seguro de que va a empezar a existir. Porque no es solamente la ópera, también el Carnaval, las Llamadas, la música, el teatro, la danza, la literatura. Esa densidad nos da una oportunidad bien importante para desarrollar unas políticas de posición cultural que nos pongan entre los primeros puntos atractivos del continente para el turismo mundial.
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EC - El Auditorio Nacional Adela Reta entró en noviembre en una nueva etapa cuando se designó a Gerardo Grieco como su director general. ¿Qué implica? ¿Cuál es el modelo de gestión? ¿Qué medidas concretas ya entran en vigor ahora, en esta temporada 2013? De eso estamos hablando con Grieco en estos minutos.
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EC - Yo decía que se han anunciado algunas medidas prácticas, y otras están por anunciarse. Una de ellas es el retorno al sistema de abonos.
GG - Sí, el abono del Sodre fue un emblema en Uruguay. Jorge Abbondanza, en una de estas entrevistas que tuve con él pidiendo "contame cómo era el Sodre, qué era lo que importaba, ¿qué te acordás?", me dijo: "Yo ahí vi a Fulano, a Mengano", y me mencionó dos o tres espectáculos de esos inolvidables. Eso es otro valor, te decía en la pausa que uno se lleva a la tumba, entre algunas cosas, algún espectáculo y alguna conversación, no el auto. Algún espectáculo me mencionó Jorge, pero me dijo: "¿Sabés qué?, mis amigos los hice en la cola del abono del Sodre, ahí pasaba todo". Ese concepto es el que me gusta rescatar.
EC - Desapareció el abono, ¿cuánto hace que no existe como opción permanente?
GG - Creo que los últimos fueron antes del incendio en el Sodre.
EC - ¿En qué consiste?
GG - El abono consiste, en especial el que lanzamos en el Sodre, que es muy uruguayo, en que uno pueda elegir una "canasta de espectáculos". En el caso nuestro lanzamos el miércoles el del auditorio, y está a la venta el de música de cámara, y uno puede elegir su canasta de espectáculos, es una membresía.
EC - Uno paga por adelantado una cantidad de funciones.
GG - Exacto, con unos descuentos determinados de acuerdo a la cantidad de funciones. Es parte del sistema de apoyos del auditorio, porque se establece una relación y una comunicación, que es lo que más me importa, porque pasa a ser una persona con nombre, con apellido, con teléfono, a quien podemos llamar y decirle: "Hola, ¿cómo estás? Tenemos esto o esto". El abono es importante, habla de relaciones humanas, de apoyos, y también de modelo económico.
EC - Es una de las formas mediante las cuales el sector privado va a "financiar" las actividades del Auditorio Nacional Adela Reta.
GG - Es así.
EC - Otra de las medidas, otro de los anuncios: habrá charlas previas a las funciones de determinados espectáculos. De nuevo, ustedes no están inventando nada, esto existe en el mundo, pero acá hace años que no se hacía.
GG - Vamos jalonando una serie de medidas. Este miércoles el consejo directivo aprueba los llamados a licitación de cafetería, de restaurante, de tienda, vamos a instalar escaleras mecánicas en la primera planta.
EC - Esa era una de las preguntas de los oyentes más temprano.
GG - Vamos a generar una serie de actividades. A partir de mayo vamos a tener 14 actividades semanales a mediodía y de tardecita siempre, actividades culturales en los halls, intervenciones artísticas, espectáculos itinerantes, charlas, conciertos, ensayos, tango, baile, etcétera.
EC - Eso está muy bueno, porque el complejo es enorme, no solamente son las salas, están todos esos espacios abiertos comunes de circulación que también admiten la realización de distintas actividades.
GG - Vamos a transformar esos grandes halls en una especie de plaza pública techada donde siempre haya muchas actividades que faciliten las relaciones humanas y nos enriquezcan.
EC - En ese contexto se ubican las charlas.
GG - Siempre una hora y media antes de las funciones de todos los elencos, de la orquesta, del coro, del ballet, del conjunto de cámara, vamos a tener charlas con expertos o con los mismos protagonistas comentando, conversando, facilitando la comprensión de lo que vamos a ver, del contexto en el que fue creado, de qué se trata, cómo se interpreta tal o cual movimiento, qué versiones se han hecho, qué interpretaciones se le dieron a la obra, para formar nuevos públicos, ayudar a desarrollar esas políticas. Vamos a hacerlo también con liceos, con bachilleratos artísticos, vamos a promover políticas en ese sentido, y para el público en general es muy lindo llegar antes, es muy lindo tomar un café y comentar y conversar sobre qué vamos a ver.
EC - Es interesante ese plan, porque en definitiva implica que se le va a dar mucha vida, mucha actividad, mucho movimiento a un espacio que en estos primeros años ha lucido un poco desnudo, un poco frío.
GG - Soñamos con transformar esos grandes espacios que hoy son como muy mausoleo en espacios habitados por ciudadanos, por jóvenes, por viejos, por la gente. La gente se tiene que apropiar de los centros democráticos. De eso se trata, esa es la misión de un centro cultural, que sea útil, que esté habitado por gente.
EC - Una pregunta de la audiencia a propósito de asuntos prácticos: ¿y el estacionamiento?
GG - Acabamos de hacer un convenio con el estacionamiento de la esquina, en Florida y Mercedes, un estacionamiento bien grande en el que entran todos los autos de un espectáculo, si se quiere. El convenio consiste en un precio muy, muy favorable, 120 pesos por cinco horas de estacionamiento. En cinco horas podés ver el espectáculo, la charla, cenar, pasear un rato, participar en una actividad y el auto va a estar bien preservado. Tratamos de facilitar también la movilidad y el desarrollo. El auditorio también tiene externalidades, todo lo que vamos haciendo va a ir en esa dirección, el Adela Reta tiene que ser una gran atracción para la población y un lugar de desarrollo de nuestro talento, de artistas y también de ciudadanos.
EC - Y seguirá contribuyendo a cambiar la zona, una zona que necesita revivir, que está reviviendo de a poco.
GG - Sí, ya está reviviendo, enfrente se inauguró un hotel, lentamente la zona se va transformando. Y eso es una gran alegría, ver el impacto que tiene desde el punto de vista urbano.
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GG - Permitime hacer dos invitaciones especiales. El miércoles lanzamos el abono, pero también tenemos la venta para Forever Tango, es la primera vez que viene un musical de Broadway que hace 16 años que está teniendo éxito en Broadway, en Europa, con más de siete millones de entradas vendidas, y se presenta ahora en abril. Y en mayo viene "La verità", de Daniel Finzi Pasca, director de coreo del Cirque du Soleil, de Rain y de Cirque Eloize, ahora con un telón de Salvador Dalí original, de 18 metros por 8, que hace el centro del espectáculo. Tenemos la oportunidad de tener en Uruguay un gran espectáculo de teatro acrobático, circo y coreografía que viene solo a Montevideo, de Montevideo se va a Brasil y después tiene una gira prevista por los cinco continentes. Fue recién estrenado en Montreal y me parece que va a ser una eclosión en mayo. Es parte del abono y habla claramente de esas búsquedas del lugar que ocupamos en el mundo. El Sodre tiene que ayudar a que Montevideo y Uruguay sean un lugar destacado en el mundo, y en ese sueño de hacer de este país el mejor lugar del mundo para vivir estas cosas importan.
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Transcripción: María Lila Ltaif
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