La revista Time reseña que más de 4.000 videos haciendo la alocada coreografía se subieron a YouTube cada día en el momento más intenso de la nueva fiebre.

"Mientras los videos son simple diversión para las miles de personas que han participado en Harlem Shakes, se han convertido en una forma fácil de hacer dinero para su creador y para YouTube", dice Time.

En lugar de disputarse en los tribunales los derechos de autor y de bloquear videos, muchos creadores de contenidos están trabajando con la página de videos más visitada del mundo para monetizar las violaciones de copyright en lugar de eliminarlas.

De esta manera el servicio Content ID de YouTube marca automáticamente en los servidores cuando un contenido registrado se sube al sitio. Una vez notificados los autores pueden no hacer nada, pedir el bloqueo o permitir publicidad en ellos.

 Time señala que gracias al Content ID, Baauer estaba bien posicionado cuando el Harlem Shake se convirtió en un fenómeno en febrero. Cada vez que alguien sube un nuevo Harlem Shake, Baauer comparte los ingresos de los avisos con YouTube.

El estadounidense de 23 años dio su paso a la fama en un estudio de Brooklyn en donde escribió la ppular canción.
Todo ocurrió en 2012, cuando el músico combinó elementos de hip-hop con música dance, además de riffs de música house alemana, una muestra de rap y sonidos de animales. Para luego subirlo a red.

"Lo puse en Internet, sólo para mostrarlo a la gente", explicó Baauer.

El paso decisivo para convertirse en viral se dio en en febrero del 2013, cuando el bloguero estadounidense Filthy Frank subió a YouTube una coreografía basada en su canción, grabación que fue vista en más de 103 millones de sitios web y gracias a ello Baauer ganó ingresos por un convenio con agencia INDmusic.